Mayo, 2027

Dedicado a una de las personas más increíbles que conozco, una de las personas que más me apoyan y una de las personas que tanto me hacen reír. Este es tu regalo de cumpleaños. ¡Espero que te guste, mi pequeña tubérculo! PatataDashner

Se alerta a los lectores y a las lectoras de esta novela que este capítulo contiene alto contenido sexual, diversas palabras obscenas y explícitas.

Leer bajo responsabilidad propia.

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Al llegar a casa escucho a Thomas por la cocina y sonrío. Si no se escuchan más ruidos es que está solo.

Abro la puerta en silencio y voy hasta abrazarlo por la espalda. Este da un salto y gira la cara asustado para ver quién es.

-¿Cómo está mi Tommy?- pregunto besando su cuello.

Thomas trata de deshacerse de mi agarre.

-¿No están los niños, verdad?- pregunto con la mano en su cadera acariciándola.

-No- lo noto sonreír y borrar la sonrisa rápidamente- pero vendrán en unas horas. Estoy haciendo un pastel. Simon dijo antes que le apetecía mucho uno de chocolate. Ahora mismo deben de estar con Kaya.

-Mmm...- murmuro en su cuello- pues tenemos un par de horas, ¿no?

Thomas me deja espacio para besarlo con cuidado mientras acaricia mis manos.

-No, Dylan. No me líes- protesta Thomas apartándose- bastante me das de noche como para seguir también de día.

Yo sonrío acercándome a él, que ya ha metido las manos en la harina.

-Pero no podemos gritar a gusto- digo con calma poniéndome detrás- echo de menos escucharte gritar, Tommy- susurro besando su hombro.

-Dyl...- gime Thomas encogiéndose y tratando de apartarse- he dicho que no. Que después...

-Vienen los niños. Ya- contesto metiendo mis manos debajo de su camiseta- pero sigo diciendo que tenemos más tiempo.

Lo agarro por la cadera dándole la vuelta, subo mis manos a su cintura para ponerlo encima y Thomas suelta un jadeo.

-Joder... No. Dylan- suspira cuando mis labios vuelven a su cuello.

-Está bien- sonrío- tendré que ayudarte con ese pastel.

Me separo de él y de la encimera para lavarme las manos.

Mi marido alza una ceja y se baja de la encimera.

-No sé a que viene ese auto control de hormonas, pero de acuerdo. Coge el chocolate en polvo y la levadura de la alacena.

Sonrío y obedezco a mi rubio. Me acerco a él con ambas cosas y me coloco a su lado.

-Echa la levadura en la harina, después yo la mezclo.

Mi turno de echar la levadura encima. Me pongo detrás de él después de echarla y meto mis manos en la harina y la levadura para ayudarlo a mezclarla.

Noto cómo traga saliva y sonrío apretando sus manos. Me pego a él haciendo que se junte más con la encimera y Thomas carraspea.

-Pásame un pellizco de sal y la mantequilla- pide con la garganta seca.

Yo trato de no reírme mientras cojo lo que Thomas me ha pedido. Al volver, echo el pellizco de sal y un trozo de la mantequilla.

-¿Sirve esto?- pregunta enseñándole el cuchillo.

-Échalo y coge un poco más- dice yendo a la cocina a por los demás ingredientes.

Trae un bol con todo ya mezclado y yo me pongo con la mantequilla mientras que Thomas deja el bol a un lado y echa el chocolate encima de mi mezcla.

Al terminar, lo echa todo junto y se coloca delante dispuesto a revolver.

-Echa más chocolate- pide Thomas mirándome de reojo.

-Todo sea por Simon- suspiro melodramático.

Echo más chocolate para después ponerme detrás de Thomas de nuevo.

-La verdad es que me gusta mucho- digo metiendo el dedo en la mezcla para probarla.

Thomas gime en bajo y sigue revolviendo.

-Te odio tanto...

Sin decir nada más, mojo de nuevo mi dedo en la mezcla de chocolate y lo paso por su cuello hasta su barbilla y después a su boca. Thomas se permite suspirar mientras chupa mi dedo.

No puedo evitar que me encienda verlo y sonrío para protestar.

-¿Me dejas probar?- pregunto dándole la vuelta.

Thomas da un gemido cuando nuestros cuerpos se juntan y asiente repetidas veces para juntar nuestras bocas con el resto de chocolate de por medio.

Lamo su labio superior y meto mi lengua en su boca apretándolo contra mí.

-No deberíamos jugar con la comida, ¿sabes?- dice Thomas con la voz ronca.

-Es una celebración por mi estatuilla del Oscar en el salón. Es una celebración por tenerte, por tener una familia, por no estar los niños...

Dejo de hablar lamiendo el chocolate de su cuello.

-Entonces...- Thomas se mueve ligeramente, pero no atiendo a nada más que dejarle un chupón en el lateral del cuello.

Hasta que siento harina chocando con mi pelo. Me separo dando un grito y miro mi cuerpo. La harina está cayendo de mi cuello y pelo a los pies.

-Eso es lo que te pasa por jugar con la comida.

Sonríe Thomas apartándose lentamente.

-Yyy... gracias por la ayuda- enciende el horno sin sacarme la vista de encima.

-Un placer, Tommy- sonríe poniéndome recto.

Más harina cae al suelo haciendo reír a Thomas. Trato de no sonreír al escuchar su risa.

Me acerco a él cogiendo un puñado de harina.

-Dyl... No. Dyl, mi amor. Te amo mucho, ¿sabías? Y amas mi pelo, ¿verdad? No querrás estropear...- no le dejo de acabar y corro hacia él.

Esta grita y escapa corriendo por toda la cocina.

-Era una simple broma, Dyl. Oye, basta- protesta viendo cómo me acerco a él- llevamos 8 años casados. Ya... ya sabes...

Lo cojo de la cintura tirándole el puñado de harina en la coronilla.

Abre la boca escupiendo harina.

-Que asco, Dylan- se lava la boca y coge un paño para limpiarse.

-Eso te pasa por abrir la boca cuando no debes- digo con segundas intenciones.

Le guiño un ojo y él abre la boca indignado.

-No recuerdo que te quejaras nunca antes de cuando abría la boca- me devuelve.

-Eso es verdad- sonrío cogiendo un poco de mantequilla.

La paso por su mejilla rápidamente y me voy corriendo, pero Thomas es más rápido y coge el chocolate para irse hasta la puerta y taparme la entrada.

-Odio que me conozcas tanto.

Thomas sonríe encogiéndose de hombros acercándose a mí con una sonrisa y cogiendo el saquito entero, me lo tira todo encima. Yo grito apartándome tarde.

-¿¡CÓMO SE TE OCURRE TIRARLO TODO!? ¿¡ACASO QUIERES HACER EL PASTEL EN MÍ!?

Mi marido sonríe y quita un poco de la mantequilla de su mejilla para pasarla por mi cuello.

-Creo poder confirmar que eres más rico que el pastel- sonríe agarrando mi camiseta- eso te pasa por jugar con la comida.

-Eres incorregible- sonríe abrazándolo por la cintura.

-No. Soy tu marido- se inclina para besarme y ladeo la cabeza para devolverle el beso.

Se junta conmigo y noto su erección. Sonrío a mitad del beso y lo pego más a mí para juntar ambas erecciones.

-Y llegamos a mi parte favorita- ronroneo besando detrás de su oreja.

Bajo las manos hasta sus muslos para pegarlo a mí y subirlo a mi cadera. Lo escucho suspirar en lo que se separa de mis labios para restregarse más contra mí y atacar de vuelta a estos.

Me acerco hasta el horno para apagarlo y me vuelvo hacia la puerta para subir a nuestra habitación.

-Estoy deseando comerte con todo eso encima- gime Thomas contra mis labios.

-Y yo que lo hagas, pero tengo que decirte que mucho se va a ir con la ropa. Que... hablando de...- sonrío poniéndolo contra la pared.

Arranco su camiseta para tirarla al suelo y Thomas suspira.

-En el cuarto, Dyl. Que si vienen los niños...

-Ya, ya, ya- la recojo con el pie y apuro a ir hasta nuestro cuarto.

Cierro la puerta con pestillo detrás de nosotros y bajo a Thomas después de tirar su camiseta al suelo.

Thomas me agarra para tirar de mí hacia él. Se sienta en la cama dejándome a mí en sus piernas. Quito mi camiseta y Thomas sonríe para lamer mi cuello dejándolo limpio de mantequilla y chocolate.

-Definitivamente me gusta la combinación- sonríe contra mis labios.

Abre mi boca para besarme y me dejo hacer agarrándolo por los hombros. Después de varios minutos rozándonos, llevo mis manos a su vaquero para desabrochar el botón y bajar la cremallera.

Thomas hace igual con las manos temblándole un poco por la anticipación. Sonrío y me levanto ligeramente para que me baje el pantalón.

Queda por las rodillas así que me saco de encima de Thomas y este baja su pantalón para quitárselo mientras yo quito el mío. Se acuesta y yo me pongo encima de él.

-No tienes ni idea de lo hermoso que eres- susurra besando su pecho.

-Créeme- dice acariciando mi pelo- me lo llevas diciendo más años de los que llevamos juntos.

-¿Sí?- susurro contra su cuello- ¿acaso antes de que saliéramos también te lo decía?

-Un poquito- sonríe para buscar mis labios y besarme.

-Te amo- susurro al separarme- y necesito hacerte el amor.

Thomas solo sonríe de esa manera que consigue que quiera derretirme en ella y separa su pelo de sus ojos sin dejar de mirar.

Me roba el aliento notar como mira a través de mí.

-Yo ta amo más. Y necesito más que lo hagas- dice bajando mi bóxer.

Niega con la cabeza sin creerme que todavía esté a mi lado después de tantos años. Alcanzo el lubricante de la mesilla para echarlo por mis dedos y los llevo a la entrada de Thomas para jugar un poco con él.

Sonríe al verlo levantar la espalda del placer. Con la otra mano le quito parte de la harina de la cara.

-Tú por lo menos puedes comer chocolate. Yo solo harina- pongo un puchero.

-Eso se arregla fácil- sonríe cogiendo de mi pelo unos polvos de chocolate y lo mete en la boca para después besarme.

Gimo contra sus labios probando el chocolate de su lengua.

-Pues sí que está bien, sí- suspiro metiendo los dedos más en su interior.

-Dyl...- gime mi marido.

-Dime- susurro besando su cuello.

-¿No puedo gemir, ahora?- pregunta Thomas sonriendo.

Yo trato de no reírme y en venganza meto otro dedo.

-¡Ah! Joder, Dyl...- grita Thomas.

-A esto me refería cuando decía lo de gritar- suspiro moviendo mis dedos en su interior.

Dylan se mueve encima de Thomas frotando ambos miembros.

-Ya era hora de hacer esto. No te voy a mentir- dice mi marido entre gemidos.

-¿Y no te lo dije?- sonrío besando sus labios.

-Lo hiciste sí. Menos mal que sigues siendo el mismo cabezota que conocí hace años.

Alcanzo el lubricante de la mesilla y lo echo por mis dedos y en su entrada.

Meto uno y doy pequeñas estocadas. Thomas ahoga un grito y sonrío.

Meto un segundo abriéndolo lentamente y Thomas se junta más con mi miembro.

-¿Necesitado, Tommy?- pregunto besando su cuello.

-Nooo, para nada. Mucho menos si estás jugando conmigo antes de meterla- gime arañando mi espalda.

Gimo en voz alta y saco mis dedos.

-Bueno... Como tú quieras- responde con la voz ronca.

Meto mi miembro de golpe y Thomas suelta un grito.

-Vale, esto es increíble- gime Thomas.

Noto como tengo que controlarme para no enterrarme en Thomas porque resbalo justo para entrar y salir con bastante facilidad.

-Lo es- digo buscando sus labios.

-Mmm... ¿Sabes qué sería más increíble, Dyl?- pregunta Thomas agarrando mi espalda.

Lo mira con una sonrisa.

-¿Qué?

-Que te movieras- pide en un gemido mientras me acerca más a él.

-Como ordene su majestad- respondo para empezar con las estocadas.

Noto los dedos de Thomas contra mi espalda mientras entro y salgo de su interior. Eleva un poco su cuerpo y lo agarro con mis manos. Enreda sus piernas en mi cintura y sigo penetrándolo rápido.

-Oh, dios... ¡Dyl!- grita mi marido.

Paso de aguantar los gemidos y golpeo más fuerte su entrada. Con mi mano, agarro su miembro para masturbarlo. Thomas grita más alto y yo sonrío para después besarlo. Lo siento ronronear contra mis labios mientras se mueve al compás contra mí.

Quita sus piernas de mi cintura relajando su cuerpo y me confundo parando ya que no se ha corrido. Entonces, aprovecha para darnos la vuelta y montarme. Se sienta encima de mi miembro metiéndolo de nuevo en su interior. No puedo evitar el grito de placer que sale de mis labios.

Thomas empieza a saltar encima de mi miembro.

-¡Tommy!- gimo agarrándolo por la cadera.

Vuelvo a su miembro para seguir masturbándolo y minutos después noto a Thomas deshacerse sobre mí para correrse a voz de grito en mi estómago. La sola imagen hace que me corra en su interior.

Cae sobre mí y lo abrazo fuerte.

Después de varios minutos tranquilizando nuestros cuerpos. Nos coloco bien y nos arropo.

-Deberíamos ducharnos y terminar el pastel de Simon. Kaya ha de estar aquí en nada con todos.

Protesto en bajo y suspiro.

-Dúchate y vístete. Iré a poner el horno y después subiré yo- me levanto poniéndome un bata por encima.

Thomas se levanta y se acerca a mí desnudo para darme un beso. Ronroneo mientras lo acerco más a mí.

-Te amo- contesta separándose.

-Yo te amo más- sonrío.

Hago la cama de nuevo y bajo para pre-calentar el horno. Unos cinco minutos después, pongo el pastel dentro y Thomas baja ya duchado, seco y vestido.

Se acerca a mí y acaricia su pelo mirándolo embobado. Paro segundos después para no engrasárselo y Thomas sonríe.

-Ve a vestirte, Dyl.

-Voy- sonrío también y después de darle otro beso subo a ducharme.

Al bajar ya listo, el pastel está siendo decorado por Thomas y timbran a casa.

-Justo a tiempo- sonríe mi rubio.

Voy a abrir y aparecen solo los niños. Miro alrededor extrañado y veo a Kaya despidiéndose de todos desde su coche con su hijo.

-¿Por qué la tía Kaya no ha pasado, enanos?- pregunto después de besar a los cinco.

-Nos dio este pendrive- dice Lucy- y dijo que nos divirtiésemos en familia. Que eran cosas vuestras.

Alzo una ceja y cojo el pendrive para ponerlo en la tele.

-¡PAPI HA HECHO PASTEL!- grita Simon desde la cocina.

Yo sonrío cuando todos gritan y van junto Thomas para saludarlos.

-A ver, cada uno que coja su plato. Vamos al salón con papá- grita Thomas por encima de las voces de nuestros hijos.

Los seis entran cada uno con un plato y un tenedor y Thomas con su plato y el pastel.

La pequeña Alice viene a darme el mío y un tenedor.

-Gracias, princesa- sonrío poniéndola en mis piernas- ¿y todas mis demás princesas?- pregunta mirando para su familia.

-Aquí- sonríe Alex sentándose a mi lado.

Simon se sienta a su lado y al lado de este Lucy con Lily en sus piernas. Thomas coge el mando y se sienta a mi lado.

-¿Por qué está puesto un pendrive en la tele, mi amor?

-Porque Kaya se lo dio a los niños con cosas nuestras para que "lo viésemos en familia"- respondo mirándolo.

-Oh... Vale- dice Thomas desconfiado.

Admito que yo también reaccioné así al ver que era algo nuestro que venía de Kaya, pero no dejaría vídeos x nuestros para ver con nuestros hijos.

-Tengo miedo de lo que tía Kaya pudo meter en ese pen- suelta Lucy comiendo de su pastel.

-Eh- protesta yo cogiendo el mando- ¿dijo para ver en familia, no? Eso tiene que ser por algo.

Al abrir el pendrive, vemos como hay una carpeta de fotos y otra de vídeos.

-Vale... ¿Vemos las fotos primero?- pregunto a mi familia.

-Siiiiii. Fotos- dice la pequeña Lily.

-Okay...

-Owwww- suelta Lucy- mirad cómo miraba papá Dylan a papá Thomas.

Noto como me sonrojo y Thomas posa su mano en mi pierna.

-Pues ahí no estábamos saliendo todavía- sonríe Thomas en grande.

-¿Ah, no?- pregunta Alex.

-No- intervengo yo- eso es... Puf, de la primera película. Me acuerdo de que en esa entrevista estaba Will.

-Will y Kaya, sí- confirma Thomas.

Simon me coge el mando y pasa a la siguiente.

-Papás, estáis contentos- dice Lily saltando en el sofá ya que Lucy la puso a su lado para estar más cómodas.

-Y no solo sonríen con la sonrisa- interviene Lucy.

-Papá se ve muy bebé- sonríe Alice.

-¿A que sí, princesa?- sonríe abrazándola- yo siempre lo he dicho.

-Thomas me da un empujón y sonríe robándole un pequeño beso.

-¡Os estáis dando la mano!- grita Simon sonriendo.

-Sí, bebé- se ríe Thomas- es un intento de. Había cámaras y ahí todavía no habíamos salido a la luz.

-¿Luz?- pregunta Alice confundida.

-No sabían que papá y yo estábamos juntos- le explico a la pequeña.

-¿De qué año es esto?- pregunta Alex.

-Del año en el que salió la última película- decimos nostálgicos Thomas y yo a la vez.

-Oh dios- me río al recordar la entrevista- esta es de la segunda película.

-¿Dónde a tío Ki le cae un rayo?- pregunta Simon.

-Efectivamente- se ríe Thomas a carcajadas.

-Guay- mira Simon de nuevo la tele sin dejar de comer.

-¿Por qué te reíste al verla, papá?- pregunta Lucy.

-Porque en esta entrevista estábamos dándole vuelta a una ruleta y en lugar de levantarme, mi cerebro estuvo de acuerdo en cargarme sobre tu padre para poder abrazarnos- sonríe suspirando.

-Nunca fuiste muy disimulado- se ríe Thomas.

-Y aún así tuve que declararme para qué supieses que te quería.

Thomas se sonroja y yo sonrío.

-Owww- sueltan todos nuestros hijos a la vez.

Thomas y yo nos sonrojamos.

-Os dije que eso lo hacían antes de tenernos.

-¿El qué?- pregunta Thomas mirándolos curioso a todos.

-Cuando te ríes fuerte y tu cara se arruga, papá Dylan sonríe muy muy feliz. Como ahí- dice Alex apuntando a la tele.

-No puedo negar la verdad, Trombone- sonríe y me inclino para besarlo.

Thomas sonríe en el beso y se separa pronto.

-¡Estáis riendo otra vez!- aplaude Lily.

-Era raro no vernos riendo juntos- respondo comiendo más pastel de chocolate.

-Tía Kaya nos dijo hoy lo mismo cuando se encontró una foto en Instagram- asiente Alex convencido.

-Tío Tyler siempre nos lo dice. Nos ha contado lo felices que erais muchas veces.

-Oh, ese día fue maravilloso- sonríe Thomas.

Yo asiento de acuerdo. La Comi-Con de San Diego.

-¿Por qué?- pregunta Simon.

-Nos pasamos todo el día jugando y hablando. Fueron de los mejores días de mi vida. Después de adoptaros a todos y casarnos vuestro padre y yo.

-Fue muy muy divertido- sonrío recordando todo- y al llegar al hotel. Estábamos todo cansados, hablando en los sillones de la entrada. Todo el mundo se terminó yendo menos vuestro padre y yo, que nos quedamos hablando toda la noche.

-Al día siguiente ni siquiera sentíamos el cansancio- se ríe Thomas.

Lucy nos mira sonriendo con orgullo.

Eh... Papá, ¿qué le estás haciendo a papá Thomas?- pregunta Alex.

-Desabrochándole la chaqueta- responde Lucy rápidamente- ¿en público? ¿En serio?

-Oye!- protesta mientras le doy a Thomas en la pierna por reírse- fue solo la chaqueta y para la foto.

-Sí, pero yo sí he visto este vídeo. Tanto tía Kaya como tío Wes se quedaron sin habla- sonríe Lucy.

-Pequeña adolescente inteligente- entrecierro los ojos- ¡Tommy! ¡Deja de reírte!

-Perdón, es que me reacción fue bastante parecida a la de tía Kaya y tío Wes- sonríe mordiéndose el labio inferior.

-Sí... ¿sabes qué recuerdo también? Esa noche.

Thomas enrojece y Simon pasa a la siguiente foto.

-Ahí...- comienza Lucy.

-Bueno- tartamudea Thomas- basta ya de fotos. ¿Por qué no pasamos a los vídeos?

-¿Crees que van a ser mejores que las fotos?- lo miro alzando una ceja.

-Depende de lo que haya metido en esa carpeta.- suspira Thomas cogiendo el mando para ir a la carpeta de vídeos.

-Host...- me callo antes de seguir- ¡cuántos hay!

-Solo veremos un par. Qué mañana hay clase- mira a todos nuestros hijos y todos resoplan.

Yo sonrío quitándole el mando y poniendo el primero.

https://youtu.be/TaiWyhR1gVA

Al acabar el vídeo me rasco la nuca y me sonrojo.

-Wow...- suelta Lucy.

-No te recordaba tan directo y sarcástico- sonríe Thomas.

Me pasé bastante en esa entrevista...

-Ya, yo tampoco- me excuso riendo.

-¿Cómo es posible que hayas dicho en toda la entrevista exactamente lo contrario de lo que pensabas de papá?- pregunta Alex.

-¿Ahí ya estabais casados? Actuáis como casados. ¿Por que te movías tanto alrededor de papá Dylan?- nos acribilla Lucy a preguntas.

-Wow, wow, wow. Primero, Alex, con mucho sarcasmo. Segundo, Lucy, no. En ese momento no. Y sí, Trombone, ¿cómo es que te movías tanto cuando estabas conmigo?

Thomas enrojece y yo solo quiero besarlo por la ternura que da.

-Porque me ponía nervioso que cualquiera pudiese ver lo que pasaba entre nosotros.

-Papá Thomas se río mucho- sonríe Simon- siempre ríe mucho con papi Dylan.

Lucy le da para atrás al vídeo quitándome el mando.

-Mueves el cuerpo como si te ofrecieras a papá- se ríe la adolescente.

-BUENO, SIGUIENTE VÍDEO- grita Tommy.

Yo me río y Thomas le quita el mando a Lucy.

https://youtu.be/PHIG87ZxeCE

-¿Por qué papá Dylan y tío Ki está ligando?- pregunta Alex.

Lo miro riendo.

-No estábamos...

-En realidad, sí- resopla Thomas.

-Oh, vamos, Tommy- sonríe abrazándolo por la cintura.

Beso su cuello y Lucy nos interrumpe.

-¿Y por qué suena ese sonido de alarma cuando dices que solo comes, papá?- me mira.

Toso varias veces y la mira.

-Eh... Porque a tu padre se le da muy bien hacer de comer y solo... comía. De lo que me daba él- toso varias veces tratando de que no suene tan mal como en mi mente.

-Papá Dylan dice que quiere el culo de papi Thomas y él no se lo quiere dar, ¿por qué sigues pidiéndoselo, papi?- pregunta Alice mirándome fijamente.

Yo me sonrojo y aparto la mirado.

-No sé, cariño... Pongamos otro vídeo mejor.

Cojo el mando y pongo el siguiente.

https://youtu.be/4DG6pk_Rcx0

-¡Ha bromeado con la enfermedad de Newt!- grita Lucy indignada.

-Hiciste bien en hablarle mal, papá- se cruza Alex de brazos.

Yo sonrío tierno al ver a todos mis hijos tan indignados con tratar a Newt de esa manera.

-Lo bueno fue cuando papi abrazó a papá- sonríe Alice refiriéndose a cuando pongo mi brazo alrededor de la silla de Thomas.

Como siempre trataba de hacer...

-Y cuando papá le habló a papi del señor malo- apunta Simon.

-Y cuando tío Wes entiende por qué no les gustó anda que hablasen así de Newt. Amo a tío Wes- comenta Lucy.

Lily se levanta y va a darle en la pierna a Thomas.

-Papá, no se empuja- pone morritos y Thomas sonríe cogiéndola en el colo.

-Vale, no vuelvo a empujar a papi, ¿sí, monito?- le pregunta Trombone.

La pequeña asiente y coge el mando dándole a la tecla.

https://youtu.be/wUXmjx1S_-w

-¡Esta es en la que papá se tira contra papi Thomas!- salta Lucy riendo.

-IUUUUUGH, TÍO KI SE COMIÓ UN GRILLO!- grita Alex con asco.

-¿A tío Wes le gustan los chicos?- pregunta Simon.

Nosotros nos reímos a carcajadas al ver todas sus reacciones.

-Papá se río mucho- sonríe Lily- con la voz de papi- se ríe tapándose- la boca y Thomas le besa la cabeza.

-Es que a vuestro papá le sale muy bien- sonríe mirándole embobado- sigue siendo el mejor.

-Papá- llama Lucy a Thomas- ¿siempre haces lo que papá Dylan te dice?

Yo lo miro divertido acordándome de antes y alzo una ceja.

-Casi siempre- admite Thomas con una sonrisa.

https://youtu.be/tfy_lWVZlM4

-Os estáis riendo de las preguntas en lugar de contestar- se ríe Alex a carcajadas.

-¡PAPÁ! ¡ACABAMOS DE VER MUCHAS COSAS DE VUESTRA INTIMIDAD QUE NO QUERÍAMOS SABER!- se levanta Lucy indignada- oh dios, lo del culo de tío Ki, lo de vuestro shipp y las imágenes de vosotros, de hacerlo juntos- finge un escalofrío y se levanta- ya no quiero ver más.

Thoams y yo nso reímos.

-Venga, ya está. No seas dramática, Lucy. Solo estábamos bromeando.

-Pero ya estabais juntos y sois nuestros padres y... Iugh.

-Y ahora estamos casados. Ojalá poder haberlo dicho de aquella.

-¿Para qué decirlo? Papá Dylan ya dijo que podía imaginarse la escena perfectamente.

Cambia al siguiente y yo sonrío.

https://youtu.be/saMRvditUJo

-Oh. Dios. Mío. Papá- sonríe Lucy.

Yo me sonrojo y Thomas tiene esa sonrisa grande tan bonita en su cara.

-¿Qué?- pregunto casi tartamudeando.

-Te embobaste con el cuerpo de papá- se ríe Lucy tapándose la cara avergonzada- pero mucho mucho.

-Bueno, cielo, mira a tu padre. Para no perderse en él solo con observarlo de reojo- me encojo de hombros sonriendo y Thomas me da un pequeño empujoncito.

Coge el mando y pone el siguiente. Yo gimo lastimeramente nada más ver la primera imagen.

https://youtu.be/pNUZ1Eph4es

-OUCH, PAPÁ- grita Lucy indignada- ¿cómo te apartas y te ríes así?

-¿¡Tenía miedo, vale!?- resoplo enfadado- todos me han juzgado desde 2014. No es justo. Ahora se lo he compensado con creces.

Miro a Thomas que solo sonríe.

-¿Verdad, Trombone?- pregunto para que lo confirme.

-Verdad- me roba un beso y se levanta- y la otra verdad es que ya es hora de que todos os vayáis a hacer deberes y a la cama.

Todos protestan menos la pequeña Lily que se ha quedado dormida en las piernas de Thomas.

Este la sube a su cama y yo acompaño a los demás a cada cuarto. La última es Lucy.

-Estudia y a la cama- le digo besándole la frente.

-¿Sabes que estamos orgullosos de vosotros, no, papá?- me mira fijamente- sois los mejores padres del mundo, con una de las historias más bonitas que he visto y que seguís tan enamorados como el primer día.

Yo sonrío casi emocionándome.

-Muchas gracias, princesa- la abrazo fuerte y susurro- yo también estoy orgulloso de nosotros. Y de vosotros- la miro y beso su frente- vosotros también sois los mejores. Somos una familia increíbles.

Thomas nos mira desde la pared de en frente y Lucy le da un beso para después entrar en su cuarto y cerrar la puerta.

Yo me acerco a Thomas y lo agarro de las manos, mirándolo a los ojos.

-Gracias por darme, ayudarme y estar en todos mis sueños- le digo con una gran sonrisa.

-Gracias por hacer lo mismo conmigo- responde de vuelta- te amo, Dyl. Y te habría elegido mil veces más.

-Yo también te amo, baby Trombone- sonrío besándolo lentamente para meterlo en la habitación cerrando la puerta detrás de nosotros.

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Recordad que Dylmas es real y siempre será real<3

Espero que te haya gustado, Patata, a ti y a todas u.u en unos días serán corregidas las faltas!!

Nadia💜