Narra Thomas

-Te voy a echar de menos, Kaya- digo sonriéndole y dándole un abrazo.

-No seas sentimental, Tom. O me pongo yo. Vuelvo pronto, ya lo sabes- me da un beso en la mejilla. Pasa a darle un abrazo a Rosa y a los chicos, parándose en Dylan y en Ki para darles un beso en la mejilla.

-Caramba, Kaya. Dale más besos al chino, se ha puesto rojo- se ríe Dylan de él.

-Es que estoy más acostumbrado a pelearme con Kaya que a tratarnos a besos, garlopo- se ríe Ki dándole un golpe a Dylan.

-El día que no os molestéis entre vosotros se acabará el mundo- rueda los ojos Kaya.

-La vida no sería tan divertida sin molestar al chino y que él nos las devuelva, Kay- voy junto Ki y Dylan y los abrazo a los dos poniéndome en medio. Dylan me agarra por la cintura y me da un beso en la mejilla.

-Oh dios, Kaya. Sálvame, llévame contigo o algo no sé. ¡SE VAN A BESAR CONMIGO EN MEDIO!- grita Ki.

-Oye, chinito, que en el medio está mi novio- dice Dylan divertido.

-Vaya trío hacéis- nos mira Kaya riendo apoyándose en su maleta.

Esta vez nos separamos los tres riendo, pero en seguida Dylan nos vuelve a juntar.

-Somos el mejor trío amoroso de esta saga- proclama Dyl. Yo me pongo a reír viendo Ki.

-Ah no, amigo, la homosexualidad es solo vuestra. Yo tengo mujer. Estoy casadito y atado- ríe feliz.

-Hablando de eso- dice Kaya dando un respingo- mándale saludos a Hayo de mi parte.

-Y de la nuestra- dice Dyl pegándose por detrás a mi cuerpo y mirando a Ki y a Kaya con su cabeza apoyada en mi hombro.

-Se los daré- sonríe sincero- le gustará saber de vosotros.

-Ya nos dirás que tal con el gran Johnny Depp- dice Dylan con curiosidad.

-Fue bastante genial mientras grabamos, seguro que bien- sonríe Kaya. Yo le guiño el ojo y oímos un pitido fuera. Debe ser el taxi.

-Llámame cuándo llegues. Dale saludos a Ben y al pequeñito- le digo dándole un abrazo de nuevo- no te olvides- la reprendo.

-¡OH DIOS SÍ! Tu hijo es precioso- sonríe Dylan y al ver la sonrisa boba que tiene solo puedo poner yo otra medio babeando imaginándome a Dyl con el bebé de Kaya.

-Que síii, mamá- me guiña un ojo Kaya- no le deis muchos dolores de cabeza a Ki. Y lo verás Dylan, está ya muy grande, es precioso.

Sonríe sincera y el taxi vuelve a pitar.

-Me voy. Os quiero, chicos. Nos vemos en nada. ¡No os metáis en problemas!- dice sonriendo y yéndose.

-Y... ahí se va la única persona que me aguanta sin hacerme bullying- suspira Ki.

-¿Sabe con quién está hablando? Por lo de los problemas digo- dice Dylan riendo apartándose de mí.

-Tss. Tú, niño. No te apartes- refunfuño cogiendo sus manos y poniéndolas de nuevo en mi cintura.

Dylan da una carcajada.

-¿De verdad ya no estás adolorido? Solo han pasado dos días y lo hicimos ambos días.

-Sí, cállate. Y no hables de esas cosas delante de Ki.

Ahora nos reímos los dos y Ki solo rueda los ojos.

-Vayámonos al parque ya, por favor- dice poniéndose la chaqueta. Los demás se fueron nada más se despidieron de Kaya y Will tuvo que hacerlo antes por unas escenas de Gally que tenía atrasadas.

-¿Quieres que te empujemos en los columpios como si fuéramos tus padres?- pregunto burlándome de él.

-Pobre de mí si fuerais mis padres, quedaría traumado viviendo con vosotros- ríe y resopla un poco- es más, ¡pobres de vuestros hijos!

Nosotros nos encojemos de hombros y salimos con él para ir a un parque cerca de aquí.

-Bien, sabéis que todo lo que os digo es para molestaros, ¿no? Que en verdad os quiero y que me alegra muchísimo de que esteis juntos en todos los sentidos y felices.

Dylan y yo nos miramos sorprendidos volviendo a mirar para Ki. ¿A que viene eso de repente?

-No me miréis así, solo quería dejároslo claro, garlopos. Siempre estoy de broma con vosotros, pero en verdad soy feliz de que os comportéis así. Me hace gracia y me da ternura. Pero me gusta fastidiaros diciéndoos que sois súper empalagosos y siempre estáis hormonados.

-Claro que lo sabemos, Ki. Nunca nos tomamos en serio tus bromas, ni tus comentarios, ni tus chistes malos, ni... Bueno, el caso es que eres nuestro chino. Llevamos muchos años juntos y sabemos que todos nos queremos mucho y nos tenemos mucho cariño. La saga nos ha unido mucho, somos una pequeña familia- le responde Dylan.

Ki solo sonríe asintiendo.

-¿Tarde de tres, entonces?- pregunto sonriendo.

-Tarde de tres si no fuera por... ¡OH MIERDA!- abre los ojos sorprendido y se gira mirando a todos lados de la calle y sacando el móvil.

-¿Qué? ¿Qué pasa?- pregunta Dylan extrañado por su reacción. Nos soltamos de la mano mirando a Ki. Me acabo de dar cuenta que estamos en la calle y seguíamos de la mano.

-Yo, eso pasa- dice una voz a nuestras espaldas.

Aparece Will dándole una colleja a Ki.

-Dime que no te olvidaste de mí, chino miertero- resopla Will- te dije que después de que se fuera Kaya me juntaría con vosotros.

Yo me río junto a Dylan viendo a Ki darle un abrazo a Will. Pone morritos para darle besos y este solo se aparta escondiéndose detrás de mí.

Entonces empiezan a correr por la calle hacia el parque.

-Son como niños pequeños- se ríe Dylan poniéndose a mi lado.

-Son nuestros niños pequeños. ¿Los adoptamos?- la mano me cosquillea por querer agarrar la suya.

-¿Cómo vas a adoptar a alguien que está tan enamorado de ti como tu novio? Eso es extraño. Tu hijo enamorado de ti- me río y le doy un beso rápido en la mejilla.

Miro para Will que está corriendo detrás de Ki.

-No creo que siga enamorado de mí.

-Ya, ¿y el beso que te dio hace unas semanas cuándo pensaba que habíamos roto?

Touché.

-¿Semanas ya? ¿Pero cuánto llevamos aquí?

-Dos meses y medio mi amor- se ríe de mi sorpresa.

-¿Llevamos dos meses y medio saliendo?- sonrío y me acerco a su oreja para susurrarle- tendré que pensar alguna celebración para los tres meses.

-Suele ser por el año, pero celebramos lo que quieras cuándo quieras. Como por ejemplo...- coge una flor del suelo y me la da- te acabo de dar una flor, ¿celebramos detrás de los arbustos?

Me río a carcajada limpia para después darle un pequeño empujón.

-Eres un pervertido- me muerdo el labio mientras me voy con Will y Ki pasando mis brazos por sus hombros respectivamente- hey, chicos. Dyl y yo hemos decidido no adoptaros. Lo sentimos, nos gusta más Dexter como hijo. Es más tranquilito. Pero seguro que Kaya y Ben os aceptan.

Me aparto de ellos riendo porque querían darme dos collejas. Pero Dylan viene a mi salvación y agarrándome por la cintura me tira para atrás y se pone delante.

-Eres un mártir- le muerdo la oreja y me río suavemente.

Los cuatro decidimos seguir paseando hasta llegar a Camps Bay. Pasamos allí la tarde hablando y pasándolo bien.

-¿Os hace un bañito?- pregunta Dylan ya de noche adentrándose en la playa y quitándose la camiseta.

-¿Con este frío, Dylan?

-Oh, vamos, Will. Se está bien- dice Ki siguiendo a Dylan para quitarse la camiseta y los pantalones.

Suspiro sonriendo y paso a la arena hasta ellos para quedarnos los tres en ropa interior.

-Vamos, Will. Hasta Thomas se ha apuntado, ¡no seas gallina!

-Siempre me haces hacer tonterías, Dylan. No sé cómo lo consigues- sonrío. Dylan también sonríe mirando directamente a mis ojos haciendo que me sienta cohibido.

-Venga, daros un beso u os obligaré a juntar vuestras bocas. Solo estamos nosotros cuatro y lleváis todo el día calentándoos mutuamente, evitando que os descubran. Id al agua y yo me ocupo de Will- dice Ki.

-Gracias, chino- sonrío agarrando la mano de Dyl.

-Te adoro, chinito chinlú- sonríe divertido Dylan tirando de mí al agua.

-No hagas que me arrepienta, O'Brien- nos da un vistazo rápido y es cuándo echamos a correr hasta la orilla.

-VAMOS, POULTER, ¿O ERES UN GALLINA?- le escuchamos gritar a Ki inmediatamente.

-Dios, Dyl. Te odio, está fría- me alejo del agua después de que me mojara los pies.

-Iba a estar calentita solo para ti- se ríe Dylan mientras rueda los ojos.

-Por supuesto, ven aquí y dale un beso a tu novio- protesto con los brazos cruzados- por burlarte de mí.

-Como diga, princesa- me coge en brazos y junta sus labios con los míos. Me agarro a su cuello devolviéndole el beso.

Nos alejamos de la orilla y acabamos en la arena por tirar yo del cuello de Dyl para abajo. Seguimos besándonos con cuidado hasta que me separo con brusquedad de Dylan mirando por encima a la izquierda de nuestras cabezas.

Es dónde ha acabado la ropa de Will y Ki, quienes están ya en el agua salpicándose entre ellos. Veo también las nuestras mezcladas con las suyas.

-Lo dicho, son como bebés- suspira Dylan para volver a mirarme a los ojos. Y sonreír. Sonreír con esa sonrisa que tanto adoro y que correspondo al segundo sin poder evitarlo. Quito mis manos de su espalda y las apoyo en la arena.

-Hacen muy buena pareja- comento divertido mirando como Ki se sube a los hombros de Will e intenta hundirlo.

-Iugh, no. Por favor, Tommy. No pegan nada- se ríe y pone mis manos en su espalda de nuevo. Se queda algo embobado mirándome a los ojos y le paso una mano por delante para que reaccione. Sacude la cabeza y le sonrío.

-Hey, príncipe, ¿en que pensabas?- sonríe.

-En nada.

-De acuerdo pueees... te diré que sí, que tienes razón. Will está mejor con conmigo.

Me gano una mala mirada y me río.

-No, miento. Conmigo está mejor Dexter. ¿Te dije que me acosté con él también en la primera peli?

-Sí, ¿y yo te conté sobre lo que tuve con Rosa?- me pellizca la barriga y me muerdo el labio para no gritar. Me ha dolido.

-No, pero yo te lo digo en serio- me pongo con la cara más seria que me deja mi parte de actor para que me creyese.

-Oye, Tommy. Ni lo intentes, no te creo. Después de todo por lo que pasamos con Will si hubieses tenido a alguien más en tu vida me lo habrías dicho entonces para no cagarla más.

Mierda.

-Vale, es verdad. No estuve con nadie más que con Will y lo terminamos al acabar de grabar la primera película- sonrío inocente- ¿no voy a ser capaz de ocultarte nada nunca más? Porque si es así ni intento esconder tus regalos de navidad.

-Me puedo hacer el tonto si quieres.

-Ya eres tonto, Dyl- me río ligeramente y le acaricio la mejilla despacio.

Da una carcajada y se acerca peligrosamente a mis labios.

-Y tú un poco garlopo- nos damos un pequeño beso hasta que siento las manos de Dylan en mi pecho bajando hasta la cadera. Es entonces cuándo aumento la intensidad del beso y mi agarro a su cuerpo.

Enrollo mis piernas en su cadera y lo pongo debajo de mí sin dejar de besarnos. Solo aumentando la velocidad.

-EH, PAREJITA. ¿OS RECUERDO QUE FUE VUESTRA IDEA METERNOS EN EL AGUA?- grita Ki antes de que Will lo intente ahogar.

Cortamos el beso lentamente y sonreímos.

-FUE IDEA DE DYLAN- me río echándole toda la culpa, me levanto rápido y voy hacia el agua.

-¡Deja de entretenerlo y meteros, mierteros!- grita Will.

Sonrío y de repente me encuentro en al agua mojado de arriba a abajo y a Dylan detrás de mí riendo.

-No me lo puedo creer, apuñalado por la espalda por mi propio novio- pongo una mano en el pecho exagerando y empezamos los dos una guerra de salpicaduras.

-Qué más te dará si suele meterte otras cosas por la espalda- dice Ki riendo.

-Bueno, Ki. No exactamente por la espalda- se ríe Will con él.

Ruedo los ojos ignorándolos y me tiro encima de Dylan tumbándolo en el agua.

-Tenía que tomarme la venganza, cariño- me levanto rápidamente escondiéndome detrás de la espalda de Will- ¡recuerda que te amo!

Veo a Dylan rodar los ojos y nada hacia nosotros.

-Will, amigo. Mejor apártate. Tengo que tener una pequeña charla con mi querido novio.

Will primero niega la cabeza y respiro aliviado hasta que de repente se aparta dejándome solo con Dylan. Ki y él se apartan lo suficiente.

-Maldito, traidor... Tengo que buscarme amigos mejores.

Es cuándo los otros tres ríen y Dylan me hunde en el agua a pesar de mi resistencia.

-Dios, odio ser el menos fuerte- resoplo medio enfadado por la dura traición de Will.

-Hey, cariño. Recuerda que te amo- dice Dylan burlándose y sacando la lengua.

Es cuándo Ki se pone a mi lado salpicando a los otros dos.

-Alguien tenía que venir a por tu rescate, pues- se ríe Ki iniciando otra guerra de agua.

-Por lo menos tu no me traicionas del todo, chino- le sonrío y sigo salpicando a los otros dos.

-¡Claro que no! ¿No ves que estos dos hicieron caso de Cruel alguna vez?

Después de estar un par de horas jugando los cuatro en el agua Ki y Will se sientan en la arena intentando sacudirse un poco el agua. Dylan se acerca a mí nadando lentamente. Sonrío flotando hasta que me agarra de la cintura pegándome a él.

-¿Me perdonas?- me quedo embobado viendo como las gotas de agua caen por sus labios.

-Claro que sí y más cuándo tengo una imagen tan erótica delante de mí- sonrío y beso sus labios suavemente.

Nos separamos segundos después sonriendo como bobos.

-¿Sabes?- pone mis piernas en su cadera y haciéndome reír- siempre quise follar en el agua. Pero no en la ducha o bañera sino en el mar o en una piscina.

-Está bien saberlo, señor O'Brien. Se lo diré a su novio para que disfrute de ello todo lo que usted quiera- le guiño un ojo.

-No. En serio, Tommy. ¿Cumplimos una de mis fantasías?- sonríe inocente.

-No sé, Dyl- me muevo hacia atrás para nadar un poco, pero no me deja y me mece lentamente moviéndose conmigo- están Will y Ki en la arena. Si se dan cuenta de que estamos follando a unos metros de ellos en el agua no sé si nos lo perdonarían.

Se ríe un poco y me acaricia la espalda de arriba a abajo haciendo que empiece a entrar en calor.

-Dyl...

-Anda, Tommy, por favor. Por fa, por fa, por fa- me mira con la cara que sabe que no puedo decirle que no.

-Dios , Dyl... no me pongas esa cara. Piensa que si fuéramos Kaya y Ben y nosotros los de fuera no nos haría gracia saber lo que están haciendo dentro del agua.

-Estaría tocándote en la arena. Venga, Tommy, por faaaaa.

Dios, no puede estar haciéndome esto...

-Vale, en eso tienes razón pero...

-Por fa.

-No, Dyl.

-Por fa, Tommy. Por fa, por fa. No se enterarán- me da un pequeño pico y baja un poco mi bóxer.

-Dyl. No. Lo van a saber.

Pero no detengo sus manos que ya están bajando el bóxer hasta las rodillas.

-Te prometo que no se van a enterar de nada. Llevamos así un rato, por estar otro pequeño rato no van a notar nada. Uno cortito, rápido. Uno rapidísimo.

Ruedo los ojos hasta que noto su mano sobre mi miembro. Entonces abro mis ojos sorprendido, pero dejándome hacer.

-Mierda, reitero lo de antes. Eres un maldito pervertido, Dylan O'Brien. Y me haces hacer cosas pervertidas que podríamos hacer solos.

-Tú me vuelves pervertido y querer llevarte a la cama con solo mirarte.

Simplemente me besa con hambre y decido olvidarme de nuestros compañeros que siguen acostados en la arena hablando entre ellos.

Respondo al beso con las mismas ganas y me pego más a él comprobando que tiene ya una erección enorme.