Shinsou Hitoshi tenía el novio más extraño de este mundo. Tal vez el extraño era él por juntarse con Midoriya Izuku.

¿En qué momento decidió estar con ese chico? ¿En qué instante se enamoró? ¿Cuando fue que besarse se volvió un hábito? No lo sabía, de pronto fue tan común en su día a día que olvidó cómo era cuando no lo hacía. ¿Cual era su rutina antes de conocerlo? Ni idea.

Es irónico, ese chico no le caía del todo bien. No lo odiaba, pero tampoco le agradaba su presencia. Después del festival deportivo le empezó a generar fastidio. ¿Cómo terminaron así? Agarrados de la mano bajo un árbol dándose pequeños mimos mientras charlaban.

Si tuviera que describir a su novio en una palabra no lo pensaría mucho. Él es completamente extraño.

Le gustaba, pero no lo comprendía. Luego de enfrentarse se acercó con la excusa de querer conocer su Kosei porque le llamaba la atención. Verdaderamente, él único que llamaba la atención con esas libretas de héroes, su actitud tan positiva y junto a ese resplandor que daba su presencia era él. Que horror.

Insistía en saber más de su habilidad, todo en realidad. Lo anotaba en un cuaderno cuando vagamente le explicaba. Era extraño, nunca nadie se interesó de esa forma por él, mucho menos en su habilidad; todos lo llamaban villano, monstruo, peligroso. Cuando hablaba y murmuraba emocionado, un día solo preguntó: "¿Por qué?". Siendo sincero, se escapó de sus labios, no se arrepentía, su respuesta le conmovió.

"¡Porque tu habilidad es increíble Shinsou-Kun. Nunca había visto un quirk de control mental así, es realmente fuerte. Estoy seguro de que llegaras a ser un gran héroe". Sonreía, demasiado. Aquella sonrisa que le parecía tan fastidiosa se volvió...Tolerable.

Desde ese día crearon un vínculo. Eran algo así como amigos...Sí, esa palabra le agradaba. Pasaban juntos algunos de sus descansos y hablaban, pasaban el rato, caminaban. Izuku siempre llevó esa libreta consigo para preguntar más sobre su don, incluso si ya sabía todo.

Y de pronto pasó, sin un cuándo o porqué. Un día estaban hablando como amigos y al siguiente se sentía extraño al verlo. Tenía sentimientos encontrados que no supo afrontar porque Izuku era su único amigo. Si bien luego de estar con juntos se relacionó un poco más con la clase A, no llegaron aún a crear ese vínculo que tenía con él. De verse a los ojos y pensar que son tan predecibles porque saben en lo que piensa el otro, ser transparente ante sus ojos.

Hitoshi era todo lo contrario a Izuku.

Izuku era todo lo contrario a Hitoshi.

¿Que los unía?

Su amor empezó de forma lenta, sincera. Con un pequeño desagrado de su parte y un gran optimismo por parte del contrario. No fue amor a primera vista, fue algo mucho mejor. Hitoshi excavó profundo antes de enamorarse por completo, su personalidad, su voz, su sentido del humor, su forma de ver, su fuerza, su pasado, básicamente lo que era él. Poco a poco se le aclaró la mente. Izuku Midoriya era todo lo que Hitoshi Shinsou no buscaba, pero si lo que quería ahora.

Sus pecas, su cabello, sus labios; no quería solo mirarlos, quería sentirlos. Quería todo el paquete completo. Quería a Izuku Midoriya, incluso si era solo un chico extraño. Lo quería a él.

Pero no fue capaz de afrontar sus propios sentimientos y se alejó. Fue tan lento que ni siquiera notó que lo hacía. Él no era tonto, observaba las miradas de desagrado que tenía sobre su hombro de la clase A, especialmente aquel chico explosivo que lo amenazaba.

Por supuesto que no todos eran así y tardó mucho en darse cuenta. Estaba el pequeño grupo de amigos del peli verde: El chico robot, el bicolor callado, la ranita y su favorita; la chica con manos de gato.

Cuando quiso arreglar el desastre que hizo al alejarse de su amigo y enfrentar lo que sentía fue demasiado tarde. Ya el daño lo había hecho y ahora no quería hablar con él. Seguro lo hirió, lo hizo pensar muchas cosas erróneas, lo lastimó. Quizá no era tan sorprendente como decía, quizá si era un villano.

Y entonces al hablar con su tutor y maestro, Aizawa Shouta, solo consiguió ser amenazado.

"Enfrenta tus sentimientos o haré que cada entrenamiento sea un infierno".

Entonces se vio obligado. Lo primero fue pedir disculpas de la forma más cursi y tonta que te puedas imaginar. Pero a Midoriya le gustaban esas cosas, le gustaba el romance. Él rompería su zona de confort porqué Izuku lo perdone. Y así fue. Le dijo lo arrepentido que estaba, lo mucho que lo aprecia, lo maravilloso que era, como le encantaba tantas cosas de él, como extrañaba su tiempo juntos e indirectamente sus sentimientos encontrados. La conversación se desvió de una disculpa a una confesión nerviosa y rápida. Entonces tomó sus manos y las acarició.

"Yo también estoy enamorado de ti, Shinsou-Kun". Parecía seguro, pero sus manos temblaban y su cara estaba roja, con sus pecas parecía una fresa.

Siempre pensó que el amor romántico era tonto, una idiotez...Hasta que lo vivió en persona. Experimentó y, tal vez, ahora era menos tonto.

Ahora estaban ahí con cinco meses de relación. Ya no era un secreto, quizá al principio lo hicieron íntimo entre los dos (y el profesor Aizawa que se quejó de que eran demasiado obvios) pero eventualmente decidieron dejar de ocultarlo.

—Podrías hacer estás mejoras...Sería más conveniente remplazar lo que no puedes hacer normalmente con tu Quirk—Hablaba y opinaba sobre su don. No le molestaba, le hacía feliz sentirse especial y que era valorado.

Pero no lo entendía.

—¿Pasa algo, Hitoshi?

—No es nada. Sigue.

—Es solo que...Has estado muy callado, más de lo normal.

Quiso poner una excusa pero no veía la razón de mentir. Ciertamente, tampoco le gustaba el tener que decir sus inseguridades a su pareja, porque era tonto pensar en todo eso. Él lo amaba, ¿Por qué daba tantas vueltas?

Su boca se cerró, las palabras no podían salir ahora.

—No es nada importante.

—¡Lo es para mí!

No pudo evitar sentir ternura cuando lo vio. Joder, Izuku lo hacía inexperto en vivir, sus sentidos no estaban claros y su cabeza consciente. El amor era tan ridículamente raro. Eso le agradaba.

Desvió la mirada pensativo evitando que descubriera lo que sus ojos dictaban. Suspiró como si realmente estuviera cansado y despegó sus labios.

—¿Por qué?

—¿Eh?

Seguro no entendió bien.

—¿Por qué yo? ¿Que hice para merecer esto...A ti?—Liberó, se sentía bastante estúpido. No debió haber dicho eso. Odiaba sus sentimientos, debían ser exterminados.

—Eres extraordinario—Respondió.

—¿Eh?

—Hitoshi, toda mi vida he sido ordinario. Siempre me lo han dicho y sí, lo soy. Pero tú eres extraordinario, contigo me siento así. Yo...Quiero ser extraordinario junto a ti que ser ordinario separados.

Escuchó en silencio con un sonrojo y grandes ojos abiertos. Estaba sorprendido de tal confesión, sabía que era dulce y empalagoso, nunca pensó que tanto.

Tal vez sus sentimientos no eran tan malos.

—Te equivocas.

—No lo hag...—Fue interrumpido.

—No soy extraordinario. Soy ordinario, nunca he hecho algo especial. No soy especial, ni siquiera pude ir al curso de héroes. No creo serlo.

Finalmente vio a su novio a la cara.

—Lo eres.

—No, al contrario, tú lo eres. Incluso pudiste quitar los efectos de mi Quirk en el festival. Eso fue...Nada ordinario—Admitió.

—¡Tienes un kosei increíble!

—Tú igual. No soy especial.

—¡Hitoshi!—Lo llamó—¡No te menosprecies! Yo...Porque tú me haces sentir especial, si soy extraordinario entonces eres el único que me hace sentir así—Soltó su mano, en todo el tiempo no lo hicieron. Si no la hubiese soltado jamás se daría cuenta de que aún las tenían agarradas—¡Por favor, siéntete así conmigo!

Pidió tomando su mejilla. Ese momento mágico en donde ambos se miraban a los ojos, el ambiente era romántico y cálido; se leían los ojos y viajaban su vista por el resto de su cara admirandola; disfrutaban de respirar el mismo aire que el otro; simplemente se decían "te amo" en silencio.

—Ya me siento así—Algunas veces odiaba ser cursi, se avergonzaba demasiado y su rostro sonrojaba—Pero sigo sin entender el porqué.

—Porque te amo y tu me amas. Solo por eso.

Sonrió. Maldito Izuku y su hermosa existencia. Era una de las mejores cosas que le podía haber dado la vida. El universo fue demasiado generoso está vez, pero no se quejaría. Estaba agradecido.

—Yo...Igual.

Izuku era la excepción a todo lo que dijo que nunca haría.

Ambos se besaron.

Sus labios son dulces, suaves. Vainilla, chocolate, caramelo. Todo lo azucarado que puedas imaginar en la boca de una persona. Al ser una persona que duerme poco, el azúcar era esencial en su vida. Por esa razón sus labios eran obsesivos.

Les importaba una mierda la gente que pasaba y los veía; los que los apuntaba con desaprobación, los que los miraban con ternura ¡Que más da! Todos podían irse muy a la...

Se separaron para volver a mirarse dulce.

¿Por qué no podían pasar toda la vida así?

Aizawa no le gustaban las novelas románticas, ni los romances juveniles llenos de drama. Pero esto...Era una obra de arte. Su pupilo y su alumno, juntos.

En cualquier otra ocasión los hubiera reprendido por mostrar ese tipo de muestras de afecto en la escuela, sin embargo, se veían tan lindos juntos que fue incapaz.

Ellos hacían buena pareja. Uno de ellos era amargado, un antisocial raro con baja autoestima, el otro un chico optimista, tímido, dulce, inocente y friki. Era la mejor pareja.

Le gustaba que estuvieran juntos, tanto así que no dudó en amenazar a Shinsou para que se confesara (si no lo hubiera hecho habría puesto el entrenamiento tan duro que él estaría al borde del suicidio).

¿Por qué emparejar a dos adolecentes?

¿Y por qué no?

Desea estar vivo lo suficiente para el día de su boda. Él sabía que se iban a casar, algún día. Y por su parte, no podía esperar.

N/A: Me enamoré de la pareja y no pude evitarlo. ES QUE SON HERMOSOS.

No tenía con quien shippear a Deku, así que me fijé en esta pareja. Fue la mejor decisión decisión de mi vida.

Incluso tengo fanfics en Inglés de la pareja ¡Que lindos! Tengo algunos 20 y aún le faltan por ver. El shipp no es popular, pero aún se encuentran joyitas por ahí. Pienso hacer más pero- flojera y colegio.

Sé que me salió medio feito, pero es un buen intento para ser la primera vez que escribo sobre está pareja. Al principio iba a ser diferente, comenzaría narrando Izuku, pero decidí dejar eso para un posible futuro fanfic.

Ser simp de Izuku 🤝 Ser simp de Hitoshi = Shippearlos de paso.

aHHH- espero que les haya gustado.

Hay una referencia de una serie, si saben cuál es les pediré matrimonio.

Por cierto, estoy 100% segura de que Aizawa es ShinDeku shipper. Los mira y dice: "OTP". No tengo pruebas pero tampoco dudas.

Ahora sí, ¡Nos vemos!