Capítulo 37
-Kazunari, te toca robar.- Dijo Itsuki.
-Sí... Voy.- Dejé mi teléfono al lado.
-¿Seguro que estas bien? Llevas todo el rato mirando al teléfono.- Kylie se acercó a mí, pero yo en seguida me aparté.
Desde ese "pequeño accidente" donde Kylie casi intento hacerlo conmigo, me alejé de él. Pero Kylie se disculpó, dijo que comprendía que yo estuviera enamorado de otro y, que no era justo lo que él había intentado.
-Estoy bien tranquilos.- Sonreí.- Voy a por algo de beber, ¿Alguien quiere?- Los tres negaron con la cabeza.- Está bien, ahora vuelvo.
Bajé hasta la cocina, sirviéndome un vaso de agua.
-¡Onii-Chan!- Gritó Kaori desde el despacho de Daisuke.
-¿Qué ocurre?
-¡Ayúdame con esto!- Gruñí y subí hasta el despacho, encontrando me con Kaori, rebuscando en un montón de cajas que no desempaquetamos en la mudanza por falta de espacio.
-¿Que es todo esto?- Agarré un pequeño peluche que había en la caja.
-En clase... Nos obligan a hacer la media que teníamos en la escuela junto a la de ahora para ver como hemos "crecido".- Chasqueó la lengua.- Y no encuentro el dichoso boletín de notas finales de primaria.
-¡¿Y cómo se supone que te ayude yo?!
-Mira por esas cajas, yo miraré por estas.- Di un suspire, empezando a mirar por las cajas que Kaori me había señalado.
-¿No las habrás tirado? O a lo mejor mamá las guardó en otro sitio.- Dije después de casi diez minutos buscando. Kaori también suspiró.
-Puede ser... Gracias por ayudarme.- Volvió a guardar todo lo que había sacado, y yo me fui hacia mi habitación.
-Siento la tardanza, ¿Por dónde íbamos?
-Es tu turno.
-¡Cierto!- Me senté en el suelo, robando una carta. Al terminar mi turno, miré el teléfono de nuevo. Aunque sabía que era imposible, aun esperaba que Shin me enviará un mensaje.- ¿Eh?- Dije al ver mi teléfono.
-¿Pasa algo?- Itsuki me miró.
-Algunas... De mis conversaciones se borraron... La que tengo con mi hermana, contigo, algunos de mis amigos de Japón y... La de Shin.- Susurré lo último con tal de que no me oyeran.
-¿Cómo?- Kylie se acercó a mí.- A mí me pasó algo similar hace unas semanas. Supongo que será cosa de la aplicación o un virus.- Sonrió.
-Ya... Un virus.- Gruñó Itsuki.
-¿Qué pasa?- Miré hacia él, quien en seguida sonrió.
-Nada tranquilo, venga, sigamos jugando.
Después de dos horas jugando, todos se fueron hacia su casa, o al menos eso creía. Cuando yo ya estaba por ir a preparar la cena, alguien llamó al timbre. Tragué saliva, esperando que no fuera Kylie quien estaba tras esa puerta. Por suerte, al abrirla estaban Itsuki y Shuichi.
-Kazunari... ¿Podemos hablar?
-¿Eh? Claro. Parecéis preocupados, ¿Todo bien?- Se miraron entre ellos.
-¿Pasó algo entre tú y Kylie?
-¡¿Q-Que?! ¡N-No! ¡Claro que no!- Me sonrojé al recordar aquello.- ¿P-Porque?
-Cuando... Antes has ido de la habitación. Kylie se apresuró a agarrar tu teléfono y...
Flashback.
-¿Qué haces Kylie?- Pregunté al ver como tomaba tu teléfono.
-Solo quiero saber qué hora es.- Empezó a teclear algo.
-No deberías coger las cosas de los demás sin permiso.
-No seas aguafiestas. Solo me hago una foto para que Takao no me eche de menos cuando no esté.- Shuichi y yo nos miramos, eso había sonado demasiado extraño.
-¿Cómo?
-No importa, déjalo.- Volvió a teclear. Me intenté acercar a él, pero cuando pude mirar tu teléfono, se apartó. Al cabo de cinco minutos, tecleó algo por última vez y dejó el teléfono antes de que tú entraras.
Fin del flashback.
-Decidimos no decirte nada delante de él porque sabíamos que lo negaría.
-E-Estas diciendo que él borró...- Asintió.- No te preocupes, además, sí se hizo una foto con mi teléfono. Seguro que decía la verdad, ¿N-No?
-No lo sé... Yo solo te lo digo, hay algo en él que no me gusta.
-Seguro que no es nada.- Sonreí nervioso.- Al menos eso espero.
.
.
.
.
Un año después, empecé la universidad. Durante todo este año, no había hablado con Shin, mejor dicho, no había hablado con nadie de Japón. Me entristecía el no hacerlo, pero no podía hacer nada para remediarlo.
-Ah... Como odio la universidad.- Me senté en mi cama.
-¿El instituto tampoco es el cielo sabes?- Se burló mi hermana.- Voy a ir a estudiar a la biblioteca.
-Nos vemos luego.- Me despedí de Kaori con la mano.- Será mejor que... Empiece a estudiar.- Me levanté del sitio, yendo hacia el escritorio. Pero antes de poder llegar a él, alguien llamó a mi teléfono. Lo cogí, viendo el nombre de contacto de este, "Miyaji-San".
-¿D-Diga?
-¡TU!- Miyaji gritó tan fuerte que tuve que apartar el móvil de mi oído.- ¡¿Se puede saber que hiciste?!
-¿Q-Que? ¿M-Miyaji-San que ocurre?
-¡¿Como que "Que ocurre"?! ¡¿Quién es ese Kylie?!- Abrí mis ojos completamente.
-¿C-Como sabe ese nombre?
-¡Porque Midorima me lo dijo! ¡¿Le engañas té con él, cierto?! ¡¿Sabes cómo tuvo que sufrir Midorima por eso?! ¡Idiota!
-¿Q-Que? Y-Yo... N-No le engañé. ¿P-Porque dice eso?- Tragué saliva, sintiendo un nudo en la garganta.
-¡¿Como que porque?! ¡Porque tu actual novio le escribió a Midorima, diciéndole que ahora le tenías a él!
-¡¿C-Como?! ¡E-Es imposible! ¡Ni-Ni siquiera estoy con Kylie! ¡Y hace más de un año que no hablo con Shin-Chan!
-¡Un año en el que Midorima ha estado con depresión!- Gritó, haciendo que quedara completamente en blanco.
-¿D-Depresión? ¿Q-Que? D-De verdad Miyaji-San que... No entiendo nada.- Miyaji suspiró.
-Hace un año que Midorima entró en depresión. Todo porque recibió un mensaje del tal Kylie diciéndole que tú estabas con él. Desde ese día no salía de casa, incluso su madre nos pedía que le ayudáramos de alguna forma, pero él se negaba a salir. Hasta hace poco no nos dijo la razón de todo esto. Y fue esa conversación... ¿Takao?
-¿S-Si?
-¿Estas llorando?- Llevé mis manos hasta mis ojos, limpiando las numerosas lágrimas que ya caían de mis ojos.
-N-No.- Miyaji suspiró de nuevo.
-Creo que... Fui algo duro. Pero, lo que te dije es cierto.
-Y-Yo... N-No sabía nada de esa conversación. S-Si e-es cierto que Kylie q-quería salir conmigo, p-pero le rechacé.- Sollocé con más fuerza.- P-Por favor... Mi-Miyaji-San se lo pido... Haga que Shin-Chan hablé conmigo... P-Por favor... Necesito aclarar todo con él.
-No lo sé Takao... Midorima apenas habla con na...
-¡Por favor! ¡Necesito hablar con él!
-Yo...-Suspiró.- Rayos... Veré que puedo hacer.- Colgó el teléfono.
Apreté el teléfono entre mis manos con fuerza. Pensaba hablar con Kylie, ya no solo me había hecho daño a mí, sino que también había hecho daño a Shin, y eso no pensaba perdonárselo. Agarré mis llaves y mi teléfono, y salí corriendo de mi casa en dirección a la de Kylie. En menos de veinte minutos estaba allí. Llamé al timbre, y Kylie abrió la puerta.
-¿Kazunari? ¿Qué te trae por aquí?
-No me vengas con eso.- Casqueé la lengua.- ¿Se puede saber que le dijiste a Shin-Chan?
-¿Cómo? Si yo no he hablado nunca con él.- Sonrió.
-¡No me vengas con eso! ¡Se perfectamente que hablaste con él y le dijiste que estábamos juntos cuando no lo estábamos! ¡¿Porque lo hiciste?!- Me acerqué aún más a él gritando.
-De verdad, yo no...
-¡Dije que no me vinieras con eso!- Di un puñetazo contra el marco de la puerta.- ¡¿Que rayos fue lo que le dijiste a Shin-Chan?!
-Supongo, que ya no tiene razón esconderlo. Sí, hablé con él, pero lo hice por tu bien.
-¡¿Por mi bien?! ¡Que se supone que gano yo de todo esto!- Fui a dar otro puñetazo, pero antes de hacerlo Kylie me besó.
-Porque estamos hechos para estar juntos, tú no te mereces a ese, estarías mucho mejor conmigo.- Me abrazó por la cintura.- Yo no dejaré de hablarte, yo no te haré llorar, yo nunca haré que estés mal. Por eso, debemos estar juntos.- Sonrió, con una sonrisa completamente perturbada. Me aparté de él, empujándolo y haciendo que cayera al suelo.
-No vuelvas a hablarme.- Dije casi escupiendo mis palabras. Salí de allí, cerrando la puerta detrás de mí. Ahora, tan solo necesitaba que Miyaji consiguiera que Shin hablara conmigo.- Por favor Miyaji-San.- Susurré suspirando.
(...)
Una semana después del "incidente" aun no tenía noticias ni de Miyaji ni de Shin. Hasta que hoy, cuando apenas quedaban unos segundos para tener que entrar en clase, el teléfono sonó. Mi pulso se aceleró al ver el nombre del contacto, "Shin-Chan".
-¡I-Id sin mí! ¡Yo ahora vengo!- Les grité a Itsuki y a Shuichi yéndome de allí, para esconderme en unos arbustos cercanos.
-¿S-Shin-Chan?- Pregunté al descolgar la llamada. Silencio en la otra línea.
-Ho-Hola.- No pude evitarlo, al oír su voz al otro lado del teléfono, empecé a llorar.
-Ho-Hola, Shin-Chan.- Sonreí entre lágrimas al contestarle.
-Takao... Estas... ¿Llorando?- Reí.
-No es nada Shin-Chan, solo... Me alegró tanto de oír tu voz.- Shin calló unos segundos.
-I-Idiota...
-¿Te sonrojaste?- Volví a reír.
-C-Cállate.- Sonreí y tomé aire, tenía que aclarar lo que había pasado.
-Shin-Chan... No sé si Miyaji-San te dijo algo pero... De verdad que yo no estoy, ni he estado con ese chico. Él era un amigo mío, quiso salir conmigo pero, le rechacé. Yo... No tenía idea de que él te había hablado desde mi teléfono, algunas conversaciones se me borraron o... Mejor dicho él las borró. De verdad que yo no...
-¿D-De verdad?- Oí como Shin sollozaba, haciendo que ese dolor que sentía desde hacía tanto, aumentara.
-Jamás te mentiría Shin-Chan.- Sollozó con más fuerza.- Shin-Chan... No llores o si no... Tendré que ir a Japón para hacer que dejes de llorar.- Reí levemente, intentando animar a Shin.
-Sigues siendo un idiota.- Susurró.
-Pero... Sigo siendo tu idiota ¿Cierto?- Por alguna razón, esa pregunta hizo que mi pulso aumentara.
-Siempre serás mi idiota.- Mi lágrimas volvieron a caer, y por primera vez en mucho tiempo, eran lágrimas de felicidad.
-Y tú siempre mi tsundere.- Reí aun llorando, pero en ese momento sonó el timbre.
-¿Tienes que entrar en clase?- Negué con la cabeza aun sabiendo que él no podía verme.
-No, diré que tenía una llamada de urgencia.
-Bien... T-Takao...-Calló por unos segundos. Sonreí, sabiendo lo que Shin quería pedir.
-Te quiero Shin-Chan.- Agrandé la sonrisa.- Hacia mucho que no lo decía, ¿No?
-Bakao... Ta-Tambien, te quiero.- Dijo lo último aún más flojo, esperando que no le oyera.
-¿Te volviste más tsundere?
-¡Oe!- Reí con fuerza.
No sé cuánto tiempo pasamos hablando, como si nada en estos últimos dos años hubiera sucedido, como si yo nunca me hubiera llegado a ir de su lado. Tan solo se, la última frase que le dije, y la última frase que él me dijo.
-Shin-Chan... ¿Podremos hablar todos los días?
-Sí.
Esa fue la última vez que hablamos en cuatro años.
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
Hola~ Lo primero es decir que para las que leéis mi fic de OS MidoTaka, a diferencia de lo que dije en el último OS, en principio no tengo intención de pausar esta fic, yo odio cuando me las pausan así que intentaré no pausarla. Además, si no caluclo mal, esta fic está apunto de llegar a su fin.
Muchas gracias por los votos y comentarios y nos leemos en el próximo capítulo~
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top