Llevamos todas las bebidas a la mesa ratonera de Bridgette y nos sentamos en el suelo. Nos dispone de la siguiente manera: Ámber, Zac, Liz, Claude, Allan, Allegra, Bridgette y yo.

Teniendo en cuenta que todos están con sus parejas (Aunque Bridgette y yo no lo seamos), tranquilamente puede querer participar con las tarjetas rojas.

-¿Todos conocen el juego? -Pregunta Zac

No todos asienten; Allegra, Allan, Liz y Bridgette solo miran la caja que está dispuesta en la mesa.

-El juego dispone de cuatro tipo de cartas.

-¿Cuatro? -Lo interrumpo sin querer, hasta donde yo sabía, eran solo dos.

-Es una nueva versión, incluye verdad o reto, para amigos y parejas.

Vamos a jugar con las cartas de parejas...

Abre la carta, despliega el tablero y saca cuatro mazos de cartas.

-Las verdes son de verdades de amigos, las rojas de verdades de parejas, las amarillas son retos entre amigos y las azules retos entre parejas.

-¿Y como se avanza? -Pregunta Liz.

-Tiras el dado, dependiendo del color del casillero, levantas una carta y si completas el objetivo planteado, sumas puntos. Para ganar, hay que obtener un total de cincuenta puntos.

Zac toma todas las fichas de los jugadores en su mano izquierda y comienza a repartirlas. Comienza conmigo. Cuando llega a Bridgette no hay ficha, parecer ser que solo tiene siete.

-¿No eran ocho? -Le pregunta Ámber.

-Debe haber sido Nadia -Se ríe rascando su nuca- le gustaba mucho la ficha rosa y debe haberla quitado jaja.

Ámber ríe sutilmente sínica. Por lo que puedo notar no le agrada mucho su cuñada. Liz y Bridgette se ríen por lo bajo de ella.

-Alguien va a tener que compartir contigo -Dice Zac resignado.

Allegra, Allan y Claude me miran fugazmente.

-Yo lo haré -Dice Ámber, como asumiendo la responsabilidad.

Tengo que aprender a ser más veloz.

Ámber al darse cuenta de lo que pasó, quiso remediarlo. Pero lo negué con la cabeza.

¡Acaba de perder mi oportunidad de jugar con Félix!

Pero no se lo iba a demostrar a ninguno.

-¿No deberíamos sentarnos juntas?

Ahí se me fue toda oportunidad de estar a su lado.

Félix se levanta y Ámber se sienta a mi lado.

"Perdón" dice con los labios.

Levemente niego con la cabeza.

-Bien, tiremos los dados para ver quien empieza.

Tiramos uno por uno.

Zac saca 8.

Liz saca 2.

Claude saca 8.

Allan saca 10.

Allegra saca 5.

Félix saca 11

Y nosotras 4.

-Tendrán que desempatar -Dice Liz.

Me extraña mucho que Allegra esté tan callada.

Ella no suele ser así. Ella llega a un lugar y empatiza con todos en un instante. Es muy dada con todo el mundo.

Pero, ahora la he notada muy apagada. Aunque siga sonriendo.

Se me hizo un hábito estar en las nubes. Debo corregir eso.

Claude ciertamente mira con un poco de recelo a Zac.

Zac suele ser muy simpático con nosotras.

¿Félix será celoso?

-¿Por qué pienso cosas como estas? -Digo golpeando mis mejillas?

-¿Pasa algo Bri?

Félix me acaba de preguntar si me pasa algo...

La acabo de llamar Bri...

Tengo que evitar ser tan evidente....

Claude y Zac agarran un dado cada uno. Claude lo mueve con brusquedad, Zac lo mueve normal. Quisiera saber porque lo incomoda tanto Zac.

Tiraron los dados.

5 y 5.

Vuelven a tomar los dados. Los vuelven a mezclar.

2 y 2.

Hacen el mismo procedimiento.

6 y 6.

Y otra vez.

4 y 4.

Y tres veces más.

1 y 1.

3 y 3.

1 y 1.

Parece casi improbable, de las siete veces que tiraron, las siete salieron iguales. Son cosas muy inusuales y las cuales pocas veces puedes ver en la vida.

Lo mismo pasa con el amor.

Eso dijo alguna vez mi abuelo.

♡♡♡

Una tarde de verano, estábamos Allegra y yo en el patio de mi casa, jugábamos a atrapar mariposas con unas redes. Nuestros abuelos estaban sentados en unas sillas. Nuestros padres habían salido.

Luego de cansarnos con las mariposas, mi abuela nos preguntó si queríamos jugar a la Oca. Ninguna lo conocía y sentíamos curiosidad. Lo primero que teníamos que hacer era tirar los dados para ver quien comenzaba.

Ellos sacaron una puntuación baja y Allegra y yo sacamos la misma y la más alta.

Mi abuela nos dijo que tiramos cada una, un dado al mismo tiempo para desempatar.

Tiramos los dados.

El orden fue:

2-2

5-5

1-1

3-3

6-6

4-4

Mi abuelo se empezó a reír.

-Es casi improbable, mis pequeñas, que de las siete veces que tiraran los dados, las siete salgan iguales. Son cosas muy inusuales y las cuales se pueden ver pocas veces en la vida. Nos han echo afortunados a todos.

-Sigue tu Bridgette, yo juego después de ti. -Me dijo Allegra.

La tarde continuó en paz.

♡♡♡

Mi primo se ve demasiado pacífico, y por ello hago referencia a lo bien que finge su molestia. Lo conozco muy bien como para asegurar que no le agrada Zac. A mi me resulta indistinto. Si es por celos, me sorprendería bastante, él no es así.

-Juega tu primero -Le dice Zac.

-No, por favor, juega tu... Zac -Dice casi mordiendo su lengua Claude.
-Está bien.

Claude se ve ligeramente sorprendido. Agradezco que Zac no haya seguido con este ambiente que poco a poco se tornaba tenso.

Zac comienza el juego. Al tirar de nuevo, sale ocho. Le toca una carta verde.

-¿Alguna vez le ocultaste algo a un amigo? ¿Que fue? -Dice en voz alta.

Todos los miramos inquisitivamente.

-La verdad es que si, pero fue para protegerlo.

-¿Puedes contar que fue? -Le pregunta Liz.

Él niega con la cabeza.

-Ganaste cuatro puntos, sólo respondiste la mitad -Le dice Ámber mientras se tira levemente unos segundos sobre el pecho de Zac.

Él se ríe y acaricia su cabeza.

-Ya te voy a ganar.

-¡Oye! -Dice Bridgette haciendo presencia.

-Les voy a ganar a ambas -Dice depositando un beso en la frente de Ámber y ella vuelve a su lugar.

La cara de Claude cambió un poco. Esta un poco más relajado. Más tarde le voy a preguntar que le pasó con Zac o si sabe algo de él que le molesta tanto.

-Es el turno de Liz -Dice Zac.

Ella asiente, toma un dado y lo tira sobre el tablero. Sale cuatro, avanza y toca carta verde también.

-La tercera persona a tu izquierda tiene que decir tu nombre completo, doble puntuación.

Es Allegra.

-No te conozco.

Todos se ríen.

-Deduzco que tu nombre es Elizabeth.

Liz niega con la cabeza.

-Mi nombre es Lizbeth, Lizbeth Beauchene.

Yo también creí que se llamaba Elizabeth, y eso que yo hice el trabajo con ella. Estoy en la luna la mayor parte del tiempo, tengo que prestar más atención a mi entorno.

-Es tu turno Claude.

El toma los dados, los tira. Sale doce. Otra vez carta verde.

-Diga tres cosas buenas de la segunda persona sentada a su derecha.

La risa fue general. Es muy notorio que no le agrada Zac. Mi primo simplemente baja la cabeza y ríe, y Zac solo sonríe un poco. A decir verdad, es extraño que tome como algo tan natural que alguien no lo quiera, eso si lo hace sospechoso.

-Me gusta tu dualidad de colores de cabello, que hayas traído un juego y... -Lo mira entrecerrando los ojos - que finjas que no te duele o molesta el hecho de que no me agrades demasiado.

-Eso si fue muy sincero Claude.

-No sabes cuanto...

Se volvió a formar un ambiente tenso. Parece que ellos se conocen de antes ahora que lo pienso. Lo cual sería extraño también, la mayoría de actividades que realizó, las hice yo también, por lo tanto, también lo conocería.

-¿Era con doble puntuación? -Pregunta Ámber.

-Si, ambos tenemos tres puntos a favor.

-¡Seguimos! -Dice Amber energéticamente.

Tira los dos dados, sale nueve. Carta amarilla, por fin cambia el color.

-Tu con dos amigos o amigas, hagan una pirámide inversa.

-¿Una pirámide inversa? -Les pregunto.

-Una persona de base y dos arriba.

-¿Quieres participar Félix? -Me pregunta Allegra con cierta picardía en su voz.

Simplemente la miro.

-Yo participo.

La mirada sorpresiva pero feliz de mi primo no se hace esperar.

Me alegra mucho que Félix quiera participar.

Mis planes eran sacarlo de mis pensamientos... A este paso solo le estoy dando una invitación a pasar.

-¿Cómo harán la pirámide?

-Supuestamente Félix debería soportar nuestro peso en su espalda o con sus manos -Dice Liz, mientras mira su celular y nos muestra fotos de pirámides.

-¿No te va a doler la espalda? -Le pregunto.

-¿Si se paran en mis hombros?

Ámber asiente. No estoy muy de acuerdo pero acepto.

Félix procede a agacharse y nosotras a sentarnos en sus hombros. Paso siguiente, Félix me toma con una mano a mi y con otra a Ámber, Claude me agarra de la otra mano y Zac de la otra mano a Ámber.

-A la una -Nosotras apoyamos un pie en su hombro-, a las dos -Apoyamos los dos pies- y a las tres.

Nos paramos.

-Son tres segundos -Dice Liz-, uno, dos...

"Las alturas pueden ser peligrosas"

Bridgette parece haberse mareado. Sentí un pequeño tambaleo. Giro haciendo que ambas salgan de mis hombros pero caigan sentadas sobre ellos. Bridgette se me escapa un poco más y termino por alzarla con un brazo.

-¿Te encuentras bien?

Estoy muy cerca de ella.

-Si, sólo me maree, es todo.

-Perdón -Dice Allegra- me olvidé que estabas enferma y organicé una reunión en tu casa.

-No pasa nada Alle, estoy bien, en serio.

-Fue un gran truco, hasta parece sacado de un circo.

En realidad, ahora que lo recuerdo, cuando era chico, un hombre de gran fuerza sostenía dos mujeres en sus hombros, luego ellas saltaban y quedaban sentadas en sus antebrazos.

-Lo vi hace años en uno, no estaba en mis intenciones practicarlo.

-No parece jaja -Dice Zac.

Ahora me tomó confianza ¿Eso será bueno?

-¿Qué te pasó Bridgette?