Capítulo 22
🦁
—Como oyes, me sorprendí mucho yo también —JungKook dijo.
—Pero ¿cómo es que tú...? —JiMin negó con la cabeza intentando aclarar sus pensamientos—. Será mejor que me expliques bien las cosas, porque te juro que no te capto.
—Bien, ¿recuerdas que te conté sobre el problema de TaeHo y su pantera? —JiMin hizo memoria y asintió cuando lo recordó—. Pasa que TaeHo no sabe que es su compañero.
—¿Qué? Kook, solo me estás enredando más.
—Solo escucha, ¿sí? —JungKook se inclinó aún más sobre su escritorio—. La cosa es que, debido al problema con su pantera, el olfato de TaeHo es incluso inferior al de un beta, ¿comienzas a entender?
—Eso creo.
—Bueno, pues resulta que ellos se conocen hace un par de años, solo que nunca interactuaron en sí hasta hace poco.
—Ya, pero cómo es que tú te enteraste de que son compañeros.
—Porque JaeMin me lo dijo.
—¿Y, quién rayos es JaeMin?
—El compañero de TaeHo —JungKook dijo, como si debiera ser obvio para el omega—. ¿Puedes concentrarte?
—No es mí culpa que no expliques bien las cosas —bufó y el alfa rodó los ojos.
—JaeMin es un compañero de la universidad de TaeHo, hace dos semanas fui a la universidad de Tae para hablar con él, pero este estaba con JaeMin porque tenían un proyecto que hacer —aclaró.
—Entiendo.
—Pues pasa que este chico puede captar todos sus aromas, porque resulta que TaeHo no huele a vainilla en sí o más bien no solo a vainilla.
—¿Cómo? Pero cuando me lo presentaste, solo pude percibir la vainilla en él.
—Exacto. Nosotros solo percibimos el aroma a vainilla, pero al parecer según lo que JaeMin me dijo, TaeHo en realidad huele como a pastel de vainilla y merengue.
—Espera, ¿cómo puedes estar seguro de que dice la verdad? Quiero decir, todo el mundo solo puede oler la vainilla en su esencia, ¿cómo saber si no miente?
—Ese... es un buen punto. —JungKook frunció el ceño, enderezándose hasta sentarse correctamente en su silla—. No lo había pensado.
—No es seguro, pero es una posibilidad. —JiMin se encogió de hombros.
—Tienes razón; sin embargo, no creo que mienta, ¿sabes? Por lo que vi, parece ser un buen chico; además, ¿por qué me mentiría?
—No lo sé, Kook, a veces las apariencias engañan. Por otro lado, dices que TaeHo lleva años conociéndolo y él nunca mostró ninguna señal de que sean compañeros, ¿no es eso raro? —El omega cuestionó.
—Otra vez estás pasando por alto lo que te acabo de decir —JungKook gimió—. La razón por la que TaeHo no mostró sentir nada, es justo porque no lo sintió. Como su olfato es inferior al de un beta, él no pudo captar el aroma de JaeMin y por lo tanto, su lobo no lo reconoció.
—Debo admitir que eso tiene mucho sentido. —JiMin asintió para sí mismo—. Pero ¿cómo estás tan seguro de que TaeHo realmente no puede olerlo?
—Porque le pregunté. Esa misma noche cuando hablamos, le pregunté a qué olía JaeMin y me dijo que no sabía.
JungKook se acomodó un mechón de cabello que le molestaba en los ojos.
—Incluso me reprochó que me burlara de él, porque según, me había dicho que su olfato es tan malo que literalmente no puede percibir ningún aroma a menos que esté en celo —concluyó.
—Vaya... pobre chico. —JiMin sintió simpatía por su situación—. Debe ser difícil para él.
—Hasta cierto punto lo es, sí —JungKook suspiró y se pasó las palmas por los muslos—. La cosa es, JaeMin me dijo que la primera vez que lo vio y captó su aroma, pensó que TaeHo era su compañero, pero que como este simplemente pasó de él, terminó descartando la posibilidad.
—Eso es jodido, Kook. —JiMin apretó los labios.
—Dímelo a mí, ¿sabes lo confundido que ha de haber estado el chico durante todo este tiempo? Siento pena por su situación. —JungKook hizo una mueca—. Es jodido no poder estar con tu compañero, pero no estarlo porque este es incapaz de literalmente reconocerte y no porque te niegue, es el doble de jodido.
—No lo sé, Kook, yo diría que están al mismo nivel —JiMin dijo, medio en broma medio en serio.
—Si te niega, no está contigo por elección; sin embargo, si no puede reconocerte... de cualquier forma, ambas situaciones son jodidas —sentenció finalmente.
—Supongo. —JiMin tamborileó los dedos en su escritorio—. Entonces, ¿esa fue la razón por la que estuviste desaparecido? Obviando la semana que pasaste fuera por trabajo.
—Uh-ju, yo quiero ayudar a TaeHo, ¿sabes? Ya que él sí tiene una buena oportunidad de estar con su destinado, quiero que estén juntos —confesó.
JiMin le dio una afligida mirada al menor. —Lo siento, Kook.
—Está bien, creo que pasar tiempo con TaeHo me ha ayudado a aceptar que la posibilidad más fuerte es que... TaeHyung termine casándose con tú alfa.
—Él no es mi alfa.
—Miéntete tanto como quieras, Minnie —JungKook dijo, provocando que el ceño del omega se frunciera—. Quita esa cara, sabes bien a lo que me refiero, que no quieran estar juntos, no significa que él dejara de serlo.
—Claro —bufó—. Repíteme eso después de que Tae y él estén casados y enlazados, entonces yo veré qué te digo.
—Tal vez nosotros deberíamos considerar estar juntos.
—No funcionaria, soy demasiado bueno para ti —contestó, acomodándose el pelo con altanería.
—¿Disculpa? Ya quisieras tener todo esto para ti. —JungKook se barrió a sí mismo con una mano—. ¿Sabes cuántas personas querrían tenerme en su cama?
—Millones seguro. —Blanqueó los ojos—. Y sin embargo, ya te he tenido muchas veces en la mía. —Le guiñó un ojo.
—Sí, yo me refería para hacer algo mucho más divertido que dormir.
—Lamentablemente, aunque no para mí, no estoy interesado en tener sexo contigo. Sería bastante perturbador. —JiMin fingió un escalofrío.
—No lo sé, yo lo consideraría. —JungKook entrecerró los ojos y se acarició la barbilla mientras fingía repasarle con la mirada—. Tienes un trasero que...
—Y aquí es donde la broma pasa de ser divertida a escalofriante —el omega cortó, ganándose una carcajada del menor.
—Eres tan fácil de pinchar —Kook burló.
—Lo que digas, ahora tengo trabajo que hacer, así que, si me permites. —Hizo un ademán hacia la puerta, ganándose un puchero del alfa.
—¿Me estás echando?
—Para nada, te estoy invitando amablemente a que salgas de aquí.
—Y luego dices que me extrañas, que porqué me desaparezco y...
—Sí, sí, sí. Nos vemos en casa esta noche, Kook —despidió.
JungKook refunfuñó; no obstante, se puso de pie para irse. Este estuvo a punto de cerrar la puerta cuando JiMin dijo:
—Y Kook, responde los mensajes de TaeHyung. Me ha estado preguntando por tí.
—Lo pensaré.
—Deja de ser un idiota, Jeon. Está bien, Tae no actuó bien y es comprensible que te enojaras, pero ya han pasado dos semanas—regañó—. Si no hablan, nunca resolverán nada, ¿así es como pretendes que al final se quede contigo?
JungKook no le respondió, solo se despidió con un ademán de mano y cerró la puerta. JiMin se sobó la frente con la palma de su mano, estresado por la situación de sus amigos y la suya propia.
🦁🦁🦁
—Y eso fue lo que hice hoy —HaNeul terminó de relatar y YoonGi asintió, sonriendo hacia su pequeño.
—Tuviste un día bastante entretenido —contestó, HaNeul hizo un sonido afirmativo con su garganta, concentrado en lamer el helado que se escurría por los lados del cono en su mano—. Es bueno que te divertieras.
—¿Qué hiciste tú, papá? —Preguntó el infante con repentina curiosidad.
—Oh, yo definitivamente no tuve un día tan entretenido como el tuyo —afirmó—. Pasé toda la mañana en el juzgado, luego tuve un almuerzo tardío con un cliente donde acordamos algunas cosas de su caso, después estuve en la oficina un par de horas y finalmente pasé a buscarte a la escuela.
—Pero parece que hiciste muchas más cosas que yo —comentó inocente.
—Tal vez; sin embargo, no fueron ni una cuarta parte igual de divertidas que las que hiciste tú.
—Entonces ser abogado es aburrido —sentenció repentinamente el pequeño.
—A veces —YoonGi concordó, sus comisuras curvadas en una sonrisa divertida—. Pero me gusta ser abogado, así que lo tolero.
—Papi dice que si amas lo que haces, aunque a veces se vuelva... te-tedi... ¿cómo era?
—¿Tedioso?
—¡Eso! Aunque a veces se vuelva tedioso, lo soportarás sin problemas.
—Tu papi tiene razón.
—Ajá, papi es muy inteligente, ¿no? —Preguntó risueño.
—Por supuesto que sí. Siempre lo fue, recuerdo nuestros días de universidad, siempre se estresaba cuando no entendía algo, a pesar de que al final aprendía las cosas bastante rápido. —Sonrió, porque aún podía recordar con claridad al JiMin de esa época.
—¿Cómo era papi antes de que yo naciera? —HaNeul preguntó—. ¿Cómo fue cuando estuvieron juntos?
YoonGi titubeó un momento antes de decidirse a responder.
—Tu papi siempre fue muy alegre, donde quiera que iba, llamaba la atención; era imposible ignorarlo —YoonGi suspiró mientras las imágenes invadían su mente—. Era demasiado hermoso y encantador como para hacerlo.
—Papi todavía es hermoso y alegre. —HaNeul puchereó.
—No me atrevería a decir lo contrario —contestó con tono bromista, a pesar de que en realidad lo decía en serio.
HaNeul asintió, al parecer conforme por lo dicho por el alfa. Él sonrió a uno de los trabajadores del edificio cuando este le saludo.
—Hola, señora Moon, ¿cómo está Baozi? —Preguntó.
—Tan haragán y glotón como siempre —la señora contestó, a la vez que hacia una pequeña reverencia al alfa, misma que este respondió.
—Si no lo fuera, entonces no sería Baozi. —El pequeño soltó una risita—. Por favor dele mis saludos, dígale que me gustaría jugar con él otra vez y que aún no lo he olvidado.
—Anotado. —La señora le sonrió—. Un día de estos lo traeré para que juegues con él.
—Eso me gustaría mucho. —HaNeul le dedicó una gran sonrisa.
Poco después se despidieron de la señora, quien continuó con su trabajo mientras ellos subían al ascensor que los llevaría a la oficina del omega.
—Entonce, ¿quién es Baozi?
—Es el gato mascota de la señora Moon, es gordito y peludo, muy suave también —HaNeul tarareó, terminando su helado.
—¿Te gustan los gatos?
—Por supuesto que sí, ¿qué clase de cambiaformas león sería si no, papá? —HaNeul rio.
—Sé de cambiaformas felinos que no se llevan bien con los gatos y demás felinos no cambiaformas. —Se encogió de hombros.
—¿En serio? —Preguntó el infante con aparente sorpresa. El alfa asintió—. Pues que raros son.
—Para el gusto los colores dicen, también para todo lo demás.
—¿Qué? —HaNeul preguntó confundido.
—Que cada persona tiene gustos diferentes.
—Ah... pues supongo que sí, como tío HoSeok que prefiere los perritos. Aunque siempre pensé que era porque él es un lobo —murmuró para sí mismo.
—Puede que tenga que ver, pero también puede que no.
HaNeul simplemente se encogió de hombros, soltando su mano y prácticamente corriendo fuera del ascensor cuando las puertas de este se abrieron.
—¡Hola Noona! ¡¿Hay alguien con papi?! —HaNeul preguntó casi entre gritos.
—No, está libre. Puedes entrar —ella contestó.
—¡Gracias! —HaNeul se sostuvo del borde de su escritorio y parándose de puntitas, se inclinó sobre este con los labios estirados.
Lisa rio y se acercó hasta este ofreciéndole su mejilla, donde HaNeul dejó un ruidoso beso que le dejó la cara manchada de helado. Ella no pareció molestarse por eso, simplemente le devolvió el beso al menor.
—Iré a saludar a papi ahora. —Entonces HaNeul se apresuró hasta la oficina de JiMin, quién abrió la puerta justo cuando HaNeul fue a sostener el pomo—. ¡Papi!
—¡Pero qué...! —JiMin se sobresaltó ante el repentino grito, pero sonrió inmediatamente después al ver a su bebé—. ¡Mi amor!
El omega no dudó en agacharse y tomar a su hijo entre sus brazos, llenándole las mejillas de besos.
—Hmm... Sabes tan dulce hoy —JiMin ronroneó.
—Es el helado, ¿quieres? —El infante ofreció y JiMin tomó una lamida.
—Hmm... menta, mi favorito. —JiMin sonrió y luego puso al niño en el suelo—. Terminalo y luego ve al baño a lavarte, ¿está bien?
—Ok.
Entonces JiMin se acercó hasta Lisa y dejó la carpeta en su mano sobre el escritorio de ésta, indicándole lo que debía hacer.
YoonGi, que se había mantenido al margen, finalmente se acercó a ellos y les saludó. Estos le devolvieron el saludo; sin embargo, JiMin no se centró en él hasta que terminó de discutir los arreglos de algún local donde tenían un evento.
—Lamento eso y gracias por pasar por HaNeul —el omega dijo una vez terminó.
—Sabes que no tengo ningún problema.
—Lo sé, pero también sé que puedes estar muy ocupado, realmente se suponía que te llamaría y le pediría a Kook, pero lo olvidé.
—Hey, realmente no hay problema. Además, HaNeul también es mi hijo y es algo que puedo hacer siempre que tenga tiempo.
—Bueno —aceptó el menor—. Uh, ya que estás aquí, ¿te gustaría ver el diseño que hice de su boda? Se supone que se lo enviaría más tarde a Tae, pero ya que estás aquí...
—Claro, vamos.
—Correcto —JiMin se giró hacia HaNeul, que se había sentado en uno de los bancos contra la pared—. Bebé quédate aquí con Lisa unos minutos, ¿ok? Iré a mostrarle algo a YoonGi. No olvides ir al baño en cuanto termines.
—Está bien, papi —respondió el pequeño.
—Te lo encargo —JiMin dijo a Lisa, quien asintió.
JiMin los guio a través por uno de los pasillos del lugar al que nunca había entrado, en este habían dos puertas más y YoonGi las miró con curiosidad.
—Esa es la sala de reuniones y la siguiente puerta es donde vamos a entrar —JiMin dijo, al parecer notando su mirada—. Éste es el lugar de trabajo de Kyung, es quien se encarga de hacer los diseños en 3D.
Entonces JiMin abrió la puerta y un chico de al menos veinticinco años estaba sentado tras el escritorio tecleando algo en su ordenador. Este tenía el pelo castaño, camisa de vestir enrollada en los brazos y con los dos primeros botones desabrochados en un aspecto relajado. El chico, beta, por lo que había podido captar, levantó la cabeza poco después y fijó la mirada en ellos, revelando unos cautivadores ojos verdes.
—Señor Park, ¿en qué lo puedo ayudar? —Preguntó, poniéndose de pie.
—Hola, Kyung, he traído al señor Min para que vea el diseño de su futura boda —JiMin señaló a YoonGi.
—Un gusto —el alfa dijo y este hizo una pequeña reverencia respondiendo de igual forma.
—Entonces, ¿puede por favor mostrarnos? —JiMin pidió.
—Por supuesto, solo deme un minuto.
Entonces el chico Kyung, tomó un control remoto de su escritorio y encendió una pantalla plana que había en una de las paredes. Luego fue nuevamente hasta su ordenador y tecleó unas cosas; poco después, las imágenes se proyectaron en la pantalla.
—El señor Park fue muy específico en cuanto a los detalles, creo que literalmente nunca había tenido tantas especificaciones y eso es mucho decir —Kyung comentó, acercándose a la pantalla, que había resultado ser touch, para moverla y que pidieran ver varios ángulos.
—Está... hermoso —YoonGi aceptó, acercándose un poco más para apreciar a más detalle cada una de las decoraciones que se presentaban en la pantalla—. ¿Puedo? —Preguntó a Kyung y el beta asintió.
—¿Realmente te gusta? —JiMin preguntó, acercándose a él después de un rato donde YoonGi se estuvo desplazando de un lado a otro por el tipo de presentación o plano 3D.
—Sí, estoy seguro de que Tae lo va a amar —YoonGi respondió, mirándole de reojo.
—Eso espero, me aseguré de que Kyung pusiera todo lo que acordamos, cada mínimo detalle —murmuró mirando la pantalla orgullo y algo que parecía terriblemente parecido a melancolía—. Es el proyecto que más me ha gustado hasta ahora —confesó el omega, estirando su mano y tocando la pantalla con los dedos cuando YoonGi pasó a ver los arreglos de la iglesia.
—¿En serio?
—Así es, este ha sido muy... especial para mi —murmuró, su mirada perdida en la pantalla. Momentos después este parpadeó, alejando su mano y sacudiendo la cabeza un poco—. Después de todo es la boda de mi mejor amigo y...
—JiMin —YoonGi llamó, cortando las palabras del omega—. Lo siento.
—¿Por qué te disculpas? —El menor sonrió, fingiendo ignorancia.
—Por esto. —YoonGi miró la pantalla una vez más—. Este era tu sueño y yo... hice que lo cumplieras para alguien más.
—No seas tonto. Son solo arreglos, además no soy al único al que le gustan las rosas azules. —JiMin se encogió despreocupadamente de hombros.
—Aún así, lo siento —dijo.
JiMin simplemente negó con la cabeza y volvió a fijar su mirada en la pantalla. A sus espaldas, Kyung se preguntó por qué sentía que había mucho más de lo que parecía entre ellos dos.
🦁🦁🦁
Cuando JungKook abrió la puerta de su departamento, definitivamente no esperó encontrar a TaeHyung tras esta y mucho menos se esperó la bofetada que le soltó segundos después.
—¿Qué demonios, TaeHyung? —Jeon se llevó una mano en la mejilla.
—No, ¿qué demonios contigo? ¿Qué es lo que te pasa? —TaeHyung le empujó del pecho y JungKook trastabilló unos pasos hacia atrás por el inesperado ataque—. Llevas dos malditas semanas ignorándome, ¡no contestas mis llamadas! ¡No contestas mis mensajes! ¡Ni siquiera eres capaz de leerlos!
Con cada frase, TaeHyung le dio un nuevo empujón, por lo que al final, Jeon tuvo que sostenerle las muñecas para que dejara de hacerlo. TaeHyung luchó con él, revolviéndose y rugiendo, tan enojado como no lo había visto nunca.
Cuando no pudo liberarse de inmediato, el omega levantó un pie y lo dirigió a la espinilla del menor; sin embargo, gracias a sus reflejos pudo evitarlo. Esto pareció enojar aún más al mayor, pues comenzó a luchar con más ahínco.
—¡Suéltame! —El omega exigió.
—¡No hasta que te calmes! —Cuando el mayor intentó patearlo otra vez, JungKook le giró y lo sostuvo en un fuerte abrazo por su espalda.
—¡¿Qué me calme?! ¡¿Cómo te atreves a pedirme que me calme?! —Gritó con tono indignado el mayor—. Primero apareces con ese chico clon mío, que no sé de donde mierda sacaste, luego cuando este se fue, no dudaste en correr tras él y finalmente decidiste que ignorarme era una excelente idea, porque claro, ¡burlemonos del estúpido de TaeHyung!
—¿Qué tonterías estás diciendo?
—¿Tonterías? Fuiste tú quien no hizo más que hablar estupideces, jurando que eras un buen alfa, que podía confiar en ti, que no eras como los demás, ¡que ibas a luchar por convencerme! ¡Que no ibas a rendirte sin importar qué! Y, ¿sabés qué? ¡Lo lograste! ¿No estás orgulloso? Por un momento me tragué toda tu mierda.
Finalmente JungKook tuvo que liberar al mayor, puesto que este no dejaba de retorcerse en sus brazos y temía lastimarle de alguna forma. TaeHyung se alejó varios pasos de él y se giró, encarándole.
—¿Recuerdas lo que me dijiste en tu cumpleaños? Bueno pues, oficialmente te digo que no voy ni quiero ser tu compañero. Nunca-jamás.
Entonces JungKook enfureció por sus palabras, echó la cabeza hacia atrás soltando una fingida y amarga carcajada.
—Gran sorpresa —escupió con ironía—. Cómo si no fuera lo que pensabas hacer de todas formas. Dime TaeHyung, ¿no han sido estos siempre tus planes? Dejar que el estúpido alfa te ruegue para finalmente rechazarlo e ir a jugar a la casita feliz con un alfa que no te pertenece.
—Eres tan imbécil —TaeHyung contestó mirándole como si fuera algún tipo de bicho raro—. No puedo creer que por un momento de verdad me planteé dejarlo todo y quedarme contigo.
—Aww, ¿no es lindo? ¿Realmente esperas que me crea eso? ¿Estás acaso intentando hacerte la víctima?
El labio inferior de TaeHyung tembló durante unos segundos.
—Vete al infierno, Jeon.
Dicho esto, el omega se giró y se encaminó hacia la puerta; sin embargo, JungKook le tomó del brazo y le obligó a volver a enfrentarlo.
—Ah, no, ahora no te vas —dijo—. ¿Qué pasa? Ya soltaste toda tu mierda, ahora es mi turno.
—¡Suéltame! No me importa lo que tengas que decir, tú y yo seremos desconocidos a partir de ahora. Puedes hacer lo que se te de tu regalada ganada con tu vida.
—Por supuesto, porque la tuya siempre debe ser la última palabra, ¿no es así? Pues te jodes porque yo también... —JungKook calló, su ceño frunciéndose aún más mientras observaba en dirección al mayor, porque recién se daba cuenta de que este olía como sí:— ¿Estás en celo?
—¿Qué te importa? —TaeHyung se safó del agarre, su rostro sonrojado mientras respiraba pesadamente.
—¿Me estás diciendo que viniste todo el camino hasta aquí en medio de tu maldito celo? ¿Enloqueciste?
JungKook no podía entender el razonamiento del mayor, él había asociado su aspecto a lo enojado que había estado debido a su pelea, no a que realmente estuviera en su celo. Quiere decir, ¿a qué omega en su sano juicio se le ocurre salir en medio de este? Aún más sin, al parecer, tomar algún medicamento.
—Repito, ¿qué-te-importa?
—No empieces, TaeHyung —gruñó, tratando de respirar lenta y superficialmente, pues aunque no quisiera, el aroma de este comenzaba a afectarle—. ¿Al menos viniste en tú auto? Responde —exigió en un gruñido cuando el omega solo se le quedó mirando obstinadamente.
—Vine en taxi.
—¿Viniste hasta aquí en taxi en medio de tu celo? ¿Estás realmente loco?
—Era un beta, ¿ok? Pedí específicamente que fuera uno —aseguró.
—Ya, ¿y, qué pasa si quien hubiera ido a recogerte hubiera sido alfa? ¿Qué crees que te habría pasado?
TaeHyung apretó los labios y desvió la mirada, consciente de sus palabras, pero aún demasiado enojado con él como para aceptar que no había actuado racionalmente.
—Lo que sea. —TaeHyung se removió en su sitio, apartando el pelo de su rostro y abanicándose un poco con la mano—. Tengo que irme, ya dije todo lo que quería decirte.
—Tú sí, pero yo no. —Finalmente JungKook tuvo que llevarse dos dedos a la nariz y apretarsela cuando el olor se volvió demasiado para él—. Joder, al menos pudiste tomarte un superior o algo.
—Já, ¿ahora resulta que te molesta mi olor?
—Sabes bien que no es eso, es solo que... —JungKook miró hacia su ingle y el omega siguió su mirada, percatándose de la tienda de campaña que comenzaba a formarse en los pantalones deportivos del menor—. No puedes volver solo a casa mientras hueles tan... —JungKook sacudió la cabeza.
—¿Y qué pretendes? ¿Qué me quede aquí? —JungKook le blanqueó los ojos con obviedad—. No gracias.
—TaeHyung, hablo en serio, te pondrías en peligro si sales así. Y puedes dejar de fingir, sé bien que estás teniendo un golpe de calor ahora mismo, no creas que no me he dado cuenta de cómo estás apretando las piernas. —JungKook le miró de arriba a abajo y el omega se estremeció—. Mierda, tú realmente tienes que salir de aquí.
—Es lo que he estaba intentando hacer —bufó.
—No te irás solo y yo no puedo... no lo soportaría —sinceró, pues realmente no se sentía capaz de estar con TaeHyung oliendo tan maravillosamente, en un lugar tan reducido y simplemente mantener sus manos para sí mismo—. Llama a Min para que venga por ti.
—Por supuesto, porque es un maravilloso plan que llame a YoonGi para que venga a buscarme a tu departamento, solo para descubrir que estaba aquí solo contigo en medio de mi celo —escupió con ironía.
—Bueno, mierda. Pues no llames a Min, pero haz que alguien venga por ti antes de que... haga algo estúpido.
—¿Algo estúpido?
—¡Sí! Algo estúpido como ir allí y tomarte. —Kook negó con la cabeza y se alejó aún más del mayor, quien se había recostado de la pared al parecer comenzando a sucumbir en los efectos del celo—. Llama a JiMin, seguro que él viene a buscarte sin problemas.
—Son las diez de la noche, idiota, JiMin tiene un hijo al que cuidar.
—Entonces llama a algún otro amigo, a tu mánager o a quién sea, pero consigue que te saquen de aquí.
—Cualquiera diría que realmente odias tenerme aquí, a pesar de que irónicamente fuiste quién impidió que me fuera —acusó.
—No seas estúpido, ¿tienes idea de lo mucho que estoy luchando ahora mismo contra mis impulsos?
TaeHyung se pasó los brazos por el vientre cuando tuvo algunos calambres.
—¿Sí? B-Bueno pues... —habló entre jadeos, doblándose un poco sobre sí mismo—, lamento informarte que ahora mismo no hay nadie a quien pueda llamar. Mierda —gruñó al final, deslizándose por la pared hasta que quedó sentado en el suelo.
TaeHyung recostó su cabeza en la pared y cerró los ojos, su rostro contorsionado en una mueca de dolor. Cuando los volvió a abrir, estos estaban nublados y húmedos.
—A-Alfa —gimió y JungKook se rompió.
🦁🦁🦁
Stars_Satur.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top