-Hey ____- Me di vuelta encontrándome con Kanu -¿Vendrías conmigo a ver los fuegos artificiales de esta noche?-

Oh cierto que se celebraba algo esta noche.

-Si... claro- Dije sonriendo forzada.

-Esta bien, nos vemos- Dice y me da un beso en la comisura del labio tomándome por sorpresa y luego se va.

Yo suspiré y me di vuelta pero salté como un gato al ver a Tobirama más al frente apoyado por una pared.

Le gusta apoyarse y estar de brazos cruzados a este hombre. Al igual que le encanta esa expresión seria.

Yo me encogí en mi lugar y seguí pasando, pero al estar frente a él, este me mira.

Ambos nos miramos en el momento en que pasé por su lado y no fue hasta que alguien se cruzó en mi campo de visión que cortamos miradas, pero luego ya no lo vi en donde estaba.

Suspiré y miré de nuevo al frente pero un hombre que pasaba corriendo choca conmigo y sus cosas se caen.

-Lo siento... - Dije y me agaché para ayudarlo a recoger sus cosas.

-Ten más cuidado ¿Estás ciega a caso?-

Me quedé como idiota. ¿Y a este que le pasaba? Si fue él quien me había chocado a mi.

Cuando me mira se sorprende pero luego frunce el ceño y se levanta.

-Tú eres la Uchiha... aún no puedo creer que dejen que personas como tú y tu gente entren aquí-

Apreté los puños.

-¿Tienes un problema conmigo y mi clan?- Pregunté de forma fría.

-Si. Y muchos. Se creen tanto y solo son un grupo de idiotas... - Antes de que siguiera, no me había dado cuenta de que había activado el sharingan.

Él retrocede unos pasos.

-¿Qué pasa? ¿No seguirás insultandonos? Anda... di algo más sobre mi clan, te reto- Dije acercándome unos pasos y haciéndolo retroceder -Personas como tú, no son diferentes-

-T..Tú... - Este se queda callado en el momento que yo siento una mano en mi hombro y luego estoy en otro lugar.

Me separé rápidamente de Tobirama y lo miré molesta.

-Regrésame allí. Voy a... - Antes de que siga, él pone sus manos sobre mis hombros.

-Cálmate- Dice con su voz fría, pareciera una orden.

Que, si bien para muchos es intimidante y da miedo... para mi es todo lo contrario... me gustaba...

-Tú no me dices que hacer Senju-

Pero mi orgullo no desaparecería.

Él se me queda viendo serio como siempre.

-No te digo que hacer, solo te recomiendo. Que te calmes- Dice y me suelta los hombros.

No se aleja ni se acerca ni un paso de mi, solo me mira a los ojos y yo a él.

-Mejor regresemos- Dije suspirando y apartando la mirada ya más calmada.

-Primero regresa tus ojos a la normalidad. Luego nos iremos-

Yo me le quedé viendo por mucho tiempo, de forma incrédula.

-¿Es porque tengo el sharingan? ¿Porque soy una Uchiha? Dime ¿Te molesta verme con esto?- Dije apuntando a mis ojos.

-Eso no es a lo que yo... -

-Solo admítelo Tobirama Senju. Tú también crees que los Uchiha somos así tal cual lo dijo ese hombre- Él se cruza de brazos -Que somos todos unos idiotas orgullosos y arrogantes que solo por tener estos malditos ojos somos una amenaza-

-¿Terminaste?-

Suspiré y me crucé de brazos para luego sentarme en el suelo el cual no había notado que estaba repleto de flores y me di cuenta que nos había traído a un claro en el bosque.

-Si, terminé- Dije rodando los ojos.

-Pues entonces... - Sentí que me agarraba la barbilla y me hacia mirarlo a los ojos -Mírame... dime ¿Enserio crees que me molestas por tener esos ojos?-

-Pues... siempre me llamaste molestia, desde la primera vez que nos vimos- Dije.

-Y eso eres. Pero no por tener esos ojos- Dice. No me suelta y no me deja apartar la mirada -¿Ves que ahora me molestan tus ojos?-

Lo miré fijamente.

-No... -

-¿Entonces? ¿Por qué creerías que me molestan?-

Agarré su muñeca y aparté mi cabeza y miré el suelo.

-Porque a todos los demás si. Desde que llegué no paraban de mirarme de esa forma... -

-Estuvimos en guerra bastante tiempo. Eso es lo normal- Dice sentándose a mi lado -Por eso haces esto tan ridículo de casarte-

-¿Por qué dices que es ridículo?-

-Te lo dije antes. Porque tú no quieres hacerlo en verdad. Y el hacer algo que uno no quiere, es ridículo y estúpido-