Capítulo 22: No me dejes

Daisuke despertó abruptamente y se sentó de golpe en lo que sea que hubiese estado acostado anteriormente, entonces se dio cuenta de que se encontraba sobre una camilla de hospital. No llevaba puesto nada de su uniforme de héroe sino una bata de color verde y estaba conectado a un suero.

- ¿Qué mierda? -Trató de quitarse el suero pero una mano se lo impidió. Alzo su mirada para encontrarse con Enji-. ¿Enji, qué haces aquí? ¿Qué hago aquí? ¿Qué pasó con Mei? ¡¿Esta bien? ¿Dónde está?!

-Quédate tranquilo, tu hija se encuentra en terapia intensiva...salió del quirófano hace seis horas -Se acercó a una mesa, agarró un vaso de plástico que tenía agua y se lo acercó al castaño-. Toma, estás deshidratado.

Aceptó el vaso con cierta duda para luego tratar de quitarse el suero de nuevo, cosa que hizo molestar al pelirrojo con quien empezó a forcejear.

-Deja que me vaya con mi hija, ella me necesita a su lado -Le ordenó con voz retadora mientras trataba de quitarse el suero.

-Ella te necesita fuerte, y tú ni de pie puedes ponerte -Lo empujó de vuelta a la cama y se sentó en la silla de al lado-. Pero si no me crees...intenta levantarte de la cama.

El ojiverde se quitó la sabana de encima y cuando se puso de pie se tambaleó varias veces hasta caer al suelo con fuerza.

-Te lo dije, idiota -Se levantó de su asiento y lo ayudó a acostarse de nuevo.

- Lo que me faltaba -Murmuró mientras se refregaba los ojos con cansancio- ¿Cómo están los demás chicos?

-Ellos se encuentran fuera de peligro...pero no han dejado de preguntar por Mei...

- ¿Y por qué no les dijiste que se encuentra bien? Porqué lo está... ¿Verdad? -El ojiceleste se tensó al escuchar eso y desvío la mirada-. ¿Enji? Tú sabes algo y no me quieres decir que es...dímelo.

-Daisuke, no estás en condiciones de...

- ¡Que me lo digas mierda!

Enji o miró por varios segundos para luego soltar un suspiro.

-Mei no está muy bien -Comenzó a explicarle el pelirrojo-. Logró soportar la operación, por suerte ningún órgano fue dañado en el ataque...pero al poco tiempo comenzó con un cuadro febril que fue aumentando poco a poco.

- ¿Cuánto tiene? -Preguntó Daisuke con preocupación.

-Cuando fui por ultima vez tenía 40°...y seguía subiendo -Le respondió con seriedad.

- ¿Y-Y te dijeron los médicos cuanto era lo máximo que una persona puede soportar? -Le preguntó mientras bebía el agua del vaso.

-...42...

-Dios mío... ¿De que me sirve estar así si no pude salvar a mi hija? -Se refregó la cara con fuerza para luego bajar la mirada, tratando de que el pelirrojo no viese sus lágrimas.

- ¿Qué no la salvaste? Daisuke ¡La trajiste de la muerte, eso es prácticamente imposible! -Exclamó Enji con fuerza. Al ver como el ojiceleste rompía en llanto lo sujetó por los hombros-. Quizás no la sanaste por completo, pero al menos le diste la posibilidad de luchar por su vida.

- ¿Por qué eres bueno conmigo? -Le preguntó el castaño sin entender porque se comportaba así.

-Porque eres mi amigo...o lo fuiste hace tiempo -Le respondió mientras se separaba-. Y....no soporto verte así de desesperado y preocupado.

-Ay Enji... hiciste muchas tantas cosas mal y tu carácter de mierda no ayudó en nada...pero yo nunca dejé de considerarte mi amigo -Lo sujetó del hombro para luego sonreír-. Eres mi hermano...

-De otra madre... -Enji terminó la frase para luego sonreír-. Odio cuando usas esas cosas a tu favor.

-No es mi culpa ser tu debilidad -Sonrió con diversión para luego secarse las lágrimas-. Oye, ¿Le avisaste a mi madre y a Yuu?

-Si, vienen en camino -Le respondió el hombre con seriedad-Por cierto, Shouto quiere entrar a la habitación de tu hija desde que salió de la cirugía, pero solo permiten pasar a las personas que la familia autorice.

-Esta bien, di que permito que él entre a verla hasta que llegue su madre -Le dijo mientras se recostaba en la cama.

-Bien, se lo iré a decir -Sin más que decir salió de la habitación rumbo a la donde se encontraban los estudiantes.

Apenas entró a la habitación se dio con qué su hijo se encontraba solo en la misma y se caminaba de un lado al otro de forma casi desesperada, sin embargo se detuvo al verlo entrar.

- ¿Sabes algo de Mei-san? ¿Ya se encuentra fuera de peligro? -Le preguntó sin tratar de ocultar su preocupación. Era lo menos que le importaba en ese momento.

- ¿Por qué no la vas a ver mejor? El señor Takeyama te permitió entrar a verla -El joven asintió lentamente, sintiendo como su corazón comenzaba a latir más rápido-. Se encuentra en la habitación 312, en el piso de arriba.

Shouto salió de la habitación y caminó lentamente hasta llegar al ascensor, al cual se metió junto con otros pacientes del hospital y subieron hasta el segundo piso. Una vez afuera, caminó a paso lento hacía la habitación donde se encontraba la castaña y abrió la puerta con lentitud, sintiendo como su corazón se encogía al ver a la ojiverde conectada a tantos cables.

Se acercó lentamente a la cama mientras veía como una enfermera estaba revisando todos sus signos vitales y los anotaba.

-Disculpe -La mujer lo miró para luego dedicarle una sonrisa-. ¿Qué son todas esas maquinas y cosas a las que está conectada?

-Pues el pulsioximetro que tiene en el dedo índice nos permite saber cuanto oxigeno circula en sangre, además de que le estamos realizando transfusiones porqué perdió demasiados líquidos y tiene anemia -Comenzó a explicarle la mujer-. El electrocardiógrafo que tiene conectado al pecho nos ayuda a saber como se encuentra su actividad cardíaca.

- ¿Y como se encuentra? -Preguntó con ansiedad y preocupación mezcladas.

-No muy bien joven, la fiebre no ha bajado todavía, comenzó a delirar hace poco y está a nada de llegar a los 42°...lo siento mucho -Hizo una reverencia para luego salir de la habitación, dejándolos solos.

-Estás así por mi culpa...si no hubiese bajado la guardia no hubieses tenido que cometer la imprudencia de defenderme de Stain -Tomó la mano de la castaña con delicadeza, quien no paraba de mover la cabeza de una lado al otro por la fiebre-. Sabes...cuando te conocí...no me gustaba tu carácter tan positivo, despreocupado y torpe...pero nunca me imaginé que eso sería lo que más me iba a gustar de ti.

Besó delicadamente el dorso de la mano de Mei para luego sujetarla con sus dos manos y apretarla suavemente, sintiendo lo húmedas que estaban por la transpiración.

-Por favor Mei...no me dejes...no me dejes...-Murmuró el bicolor mientras sentía cómo sus ojos se llenaban de lagrimas-. Tú eres uno de los motivos por los que cambié...y siento que mi vida volverá a ser igual de monótona si no estás a mi lado para alegrarme con tus tiernas sonrisas, tus bromas sin sentido y tu total incapacidad de esconder lo que sientes.

Alzó su mirada, sintiendo como una pequeña lágrima caía por su mejilla y se acercó lentamente hacía el rostro de la joven quedando a poco centímetros.

-Me gustas tanto, Mei -Tragó con fuerza, sintiendo sus nervios a flor de piel-. Y no sabes como me arrepiento de no habértelo dicho aquel día que fuimos al parque de diversiones.

Terminó de acortar la distancia que los separaba y unió sus labios con los de la joven en un suave y delicado beso; cerró los ojos con lentitud mientras disfrutaba de aquellos tersos labios que había deseado probar desde hace cierto tiempo, incluso se atrevió a mover un poco sus labios sobre los ajenos sin embargo se separó a los pocos segundos.

Volvió a sujetar su mano y apoyó su frente en estas, volviendo a cerrar los ojos con lentitud.

Estuvieron en la misma posición durante aproximadamente veinte minutos hasta que la castaña comenzó a balbucear cosas sin sentido, sin embargo Shouto alzó la cabeza rápidamente para tratar de entender que quería decir.

-F...f-f-f...-Trató de hablar la castaña sin dejar de mover la cabeza de forma errática.

-Mei, ¿Qué te pasa? ¿Qué sientes? -Le preguntó con preocupación-. Llamaré a la enfermera.

-F-Fr-Frio...f-f-frio.

- ¿Frio? -Repitió sin saber si realmente estaba sintiendo frio o si solo se trataba de un delirio propio del estado febril en el que se encontraba.

Entonces se le ocurrió una idea para poder calmar el frío de la joven, una peligrosa idea que podría asegurar su muerte con el padre de la ojiverde. Sin embargo eso no era importante en ese momento, ahora solo le importaba hacer todo lo que estuviese en sus manos para que la menor se sintiese bien.

Se acercó lentamente al cuerpo de la castaña y la movió lo suficiente para dejar un espacio a su lado pero sin dañar la herida que tenía en el abdomen; rodeó la cama, se quitó los zapatos y se subió a la cama para luego acomodarse al lado de la ojiverde. Se acomodó de costado y levantó uno de los brazos y lo puso alrededor de su cuello, rodeo el cuerpo herido de la menor con delicadeza y los cubrió con la manta de la cama.

-Espero que esto funcione -Escondió su rostro en el hueco que formaba entre el hombro y el cuello de Mei y activó su lado izquierdo con la suficiente fuerza para transmitirle calor al tembloroso cuerpo y no quemar la cama en el proceso.

Varios minutos después la ojiverde dejó de temblar un poco a la vez que el bicolor que quedaba profundamente dormido, sin embargo su Quirk seguía generando calor. Al final los dos se quedaron profundamente dormidos.

Con el paso de las horas, Yuu llegó al hospital junto con la madre de su esposo casi al borde de un ataque de nervios. Para ese entonces Daisuke ya se encontraba lo suficientemente estable como para poder caminar pero aun seguía algo débil; cuando se encontró con su esposa, lo primero que hizo fue abrazarla y tratar de tranquilizarla pues no paraba de llorar ante la idea de perder a su única hija. Luego se la llevó hacía la cafetería donde le explicó que era lo que había pasado y cual era la condición de su hija.

Todoroki se despertó de golpe y se separó un poco del cuerpo de la castaña, el cual estaba mas relajado y ya no se movía de manera errática. Se refregó los ojos con fuerza y se bajó de la cama con lentitud mientras colocaba su mano sobre la frente de la menor.

-Sigue algo alta -Murmuró para luego depositar un beso sobre donde había puesto su mano anteriormente-, iré por la enfermera.

Se puso los zapatos y comenzó a caminar hacía la puerta.

-Shouto... ¿Dónde estamos? -Aquella voz adormilada hizo que Todoroki frenara de golpe y girara con lentitud, sintiendo como los latidos de su corazón comenzaban a acelerarse.

- ¿M-Mei? -Preguntó el bicolor mientras se acercaba lentamente a la cama. No pudo evitar sonreír al ver como la castaña fruncía el ceño y levantaba un poco la mano-...Mei...tú...

- ¿Yo qué? ¿Por qué me siento tan pesada? -Preguntó mientras trataba de acomodarse en la cama, sin embargo se detuvo al sentir una fuerte puntada en el abdomen-. Mierda ¿Podrías dejar de mirarme con esa cara de bobo feliz y ayudarme?

-Reaccionaste, por fin reaccionaste Mei -Susurró el bicolor mientras posaba su mano sobre la pálida mejilla de la ojiverde y la acariciaba con delicadeza-. Pensé que no despertarías más.

-Necesitas ser más positivo -Murmuró mientras alzaba su mano con lentitud y acariciaba el cabello del bicolor con suavidad, haciéndolo sonreír.

- ¿Shouto? -El nombrado giró rápidamente encontrándose con el padre de la castaña, quien al verlo se alejó de la camilla.

Daisuke desvió su mirada del bicolor y la fijó en su hija, quien trató de acomodarse en la cama para luego sonreír levemente...sonrisa que se borró al ver como él mayor comenzaba a llorar.

- ¿Papá, Por qué estás llorando?

- ¿Y aún tienes el descaro de preguntarlo? -Sonrió entre lágrimas y se acercó a la camilla con lentitud para luego estrecharla entre sus brazos con suavidad-. Pensé que te iba a perder para siempre...

Mei correspondió el abrazo con cierta debilidad y apoyó su rostro en el hombro de su padre, sintiendo como las lágrimas comenzaban a formarse en sus ojos. De pronto, la madre y la abuela de la castaña ingresaron al cuarto, pegaron un grito de felicidad y se acercaron rápidamente a la cama para poder abrazar a la ojiverde.

Shouto consideró que lo mejor que podía hacer en ese momento era salir de la habitación para darles una mejor privacidad y comenzó a caminar rumbo a la habitación que compartía con Lida y Midoriya, sonriendo levemente por lo feliz que sentía en esos momentos.

Debía contarle a sus amigos las buenas noticias.

Durante las dos horas siguientes, los tres estudiantes fueron llamados uno por uno para realizarles un chequeo que consistía en revisarlos de pies a cabeza para saber si ya estaban mejor o si necesitaban otros tipos de cuidados; durante ese tiempo se la pasaron charlando e incluso hasta llegaron a hacer bromas sobre todo lo que había pasado en las horas anteriores, sin dudas ya se encontraban mejor y mucho más relajados.

En cierto momento Shouto se quedó solo dentro de la habitación por lo que decidió acercarse a los gigantescos ventanales y posar su vista en un punto inexistente, recordando todo lo que había pasado en aquella habitación junto con la castaña. Una sonrisa se formó al recordar lo glorioso que se había sentido tener entre sus brazos el pequeño cuerpo de la castaña; inconscientemente se relamió los labios al recordar lo gratificante que se había sentido probar aquellos labios después de tantos intentos fallidos, sin dudas había disfrutado esos cinco segundos.

Tan encimado se encontraba en sus pensamientos que no se dio cuenta cuando Daisuke entró a la habitación y comenzó a caminar hacía donde estaba. Cuando estuvo cerca del bicolor no pudo evitar sonreír con picardía al leer los interesantes pensamientos que surcaban la mente del joven en ese momento.

-Así que hiciste todo eso durante esas cinco horas -Aquel comentario hizo que Todoroki abriera los ojos como platos y se girara rápidamente.

- ¿Disculpe? Creo que no lo entiendo...

-Yo creo que si sabes a que me refiero -Se sentó en la camilla sin dejar de mirarlo-. Sabes, el médico me dijo que no comprendía como era posible que se haya recuperado tan rápido...por lo que tuve que retroceder en el tiempo para ver que había pasado.

Todoroki tragó con fuerza mientras comenzaba a mover las manos con nerviosismo. Mierda, era chico frito.

-Yo...

-Vi lo que hiciste Shouto, TODO lo que hiciste durante ese tiempo -Daisuke amplió su sonrisa al ver como comenzaba a sudar frío-. Si que sabes sacar provecho de la situación.

Todoroki comenzó a tartamudear mientras buscaba la forma de explicar todo lo que había hecho; sentía como sus manos temblaban como locas mientras que sus piernas se tensaban lo suficiente como para llegarle a doler , pero sus nervios aumentaron cuando el mayor comenzó a reírse para luego apoyar su mano sobre su hombro.

-Tranquilo chico, no vine a matarte... -Tranquilizó su respiración para luego formar una suave sonrisa-. En realidad, vine para agradecerte por lo que hiciste.

Okey, eso si que no se lo esperaba el bicolor.

De entre todos las posibles reacciones que pudiese haber tenido el castaño, que todas eran con un final violento y destructivo, jamás se hubiese imaginado que le diría esas palabras.

-Y-Yo no comprendo a que...

-Salvaste a mi hija -Shouto abrió los ojos con sorpresa al escuchar aquello-. Quizás piensas que solo la ayudaste a que dejase de tener frio...pero hiciste mucho más. Gracias a tu idea lograste bajarle la fiebre y así impedir que pudiese pasar algo peor.

- ¿Yo...la salvé? -Daisuke asintió mientras se levantaba y se acercaba al joven, quien se sorprendió al sentir como lo abrazaba con fuerza.

-Si, gracias por eso... -Murmuró para luego separarse- ¿Me permites darte un consejo? -El bicolor asintió con lentitud-. Los besos se dan cuando las dos partes están conscientes...sino no tienen mucho sentido.

Las mejillas del bicolor se tiñeron de rojo al escuchar aquello, sobre todo al ver la sonrisa ladina que tenía el mayor.

-S-Sobre eso...yo...

-No necesitas explicarme nada niño, yo no te voy a regañar ni nada por el estilo sino todo lo contrario -Todoroki alzó una ceja al no entender a qué se refería-. Vengo a decirte que yo ya no me interpondré entre ustedes, tienes el camino libre para conquistarla.

- ¿De verdad lo dice? -Daisuke asintió varias veces-. Pensé que después de lo del festival...y lo de anoche su odio hacía mi había aumentado.

-Puede que al principio si, pero luego me di cuenta que no importa lo mucho que te odie a ti y a tu familia...nada cambiaria lo que mi hija siente por ti -Le respondió con total sinceridad, dejando a un Todoroki sorprendido-. Te quiere mucho Shouto, lastímala y te cortaré el pene.

-No se preocupe señor, lo menos que quiero es verla sufrir -Le aseguró el joven para luego tragar con fuerza por la "tierna" amenaza.

-Confió en ti muchacho, no me decepciones -Le revolvió el cabello para luego irse del lugar.

Shouto no pudo evitar soltar un suspiro para luego sonreír, sintiéndose extrañamente feliz al saber que el mayor ya no sería un obstáculo en su intento de acercarse a Mei.

Quizás ahora todo sería mas fácil.

Mientras tanto, un piso más arriba, la ojiverde se encontraba junto a su madre y abuela en la habitación charlando animadamente cuando sintieron unos suaves golpes en la puerta para luego ser abierta con delicadez, mostrando a una joven enfermera.

-Disculpen la intromisión, pero aquí afuera hay un joven que quiere ver a la paciente -Las tres presentes ladearon el rostro con confusión.

- ¿Y quien es ese joven? ¿Es uno de los otros tres chicos internados? -Preguntó Yuu con interés.

-No señora, dice que se llama Mirio Togata -Le respondió la joven mujer.

- ¿Tintín está aquí? -Preguntó Mei con sorpresa para luego sonreír, gesto que no pasó desapercibido por su madre y abuela.

-Háganlo pasar entonces -Ordenó Mary.

La enfermera hizo una reverencia y salió de la habitación rápidamente, entonces se escuchó un "¡No puede entrar con todo eso joven!" y a los pocos segundos apareció casi a los tumbos un sonriente rubio que tenía las manos llenas de regalos para la castaña que iban desde globos, flores, osos de peluches y hasta golosinas.

Aún llevaba puesto su traje de héroe, por lo que la menor supuso que no había regresado a su casa o a la agencia en todo ese tiempo. En cuanto a Yuu y Mary, estas sonrieron con asombro al ver las cosas tan bonitas que había comprado para la menor.

- ¡Hola Mei! ¡Hola señoras Takeyama! -Hizo una reverencia sin borrar su sonrisa-. Me alegra saber que ya estás fuera de peligro, pitufina.

-Mejor los dejamos solos, para que charlen más cómodos -Ambas mujeres se tomaron del brazo y caminaron hacía la puerta no sin antes mirar de arriba abajo al rubio para luego asentirle a modo de aprobación a la ojiverde, quien negó entre risas.

Una vez solos, Mirio se acercó a una mesa y dejó todos los osos junto a los globos de diferentes formas y colores que había comprado.

-No sabía que flores te gustaban, así que te traje las que más me recordaban a ti -Dijo el mayor mientras se acercaba a la camilla para entregarle el ramo de claveles rosas-. ¡Ah, también te compré bombones con almendras! Me dijeron que son tus favoritos.

-Por dios Mirio, eres un ángel -Le acarició la mejilla con ternura para luego agarrar el ramo y oler las flores-. Me encantan, muchas gracias por todo esto...pero no debiste gastar tanto.

-Nada de eso, lo volvería a hacer de nuevo con tal de verte sonreír de esa forma -Dejó el ramo en la mesita de noche y se sentó al lado de la camilla-. Dime ¿Cómo te sientes?

-Como si me hubiese atropellado un camión -Le contestó la ojiverde con diversión a lo que el rubio tomó su mano con delicadeza para luego acariciar el dorso de la misma- ¿Y tú como estás?

-Ileso si a eso te refieres -Sonrió levemente-. Muerto de sueño...pero feliz al saber que estás bien.

- ¿Estás aquí desde hace mucho? -Le preguntó con curiosidad.

-Desde que entraste al quirófano -Le respondió el mayor con suavidad-. No me he movido de la sala de espera desde entonces, bueno fui al baño y a comprar esto pero no fui a ningún otro lado.

-Siento haberte preocupado tanto -Apretó un poco el agarre del mayor para luego sonreír levemente.

-Cambiaria de lugar si pudiese hacerlo -Dijo con seriedad.

-Seguramente tú hubieses salido ileso de esa batalla -Murmuró la castaña mientras fruncía los labios y desviaba la mirada-. Fui tan torpe e imprudente, yo sola me provoqué esto...fui un completo desastre.

- ¿Bromeas verdad? -Mirio soltó una risita para luego tomarla por la barbilla con delicadeza para que lo mirara-. Mei, le hiciste frente a uno de los villanos más peligrosos de la ciudad ¿Y tu crees que eres torpe o imprudente solo por tratar de proteger a tus amigos de un maniático asesino?

Mei lo miró fijamente para luego negar levemente.

-Claro que no, es lo más natural y humano del mundo querer proteger a quienes queremos.

-Supongo que tienes razón...

-No porque seas torpe e imprudente significa que eres un asco como héroe, Mei -Le aseguró el rubio mientras la sujetaba por las mejillas-. Mírame a mi, soy igual de torpe y atolondrado que tú y sin embargo soy uno de los mejores estudiantes de la academia. Y no te digo esto porque sea un egocéntrico y me encante restregárselos a todos en la cara, sino para mostrarte que cualquiera puede ser lo que quiera si se esfuerza.

La ojiverde lo miró fijamente, sintiendo como sus ojos se llenaban de lagrimas, para luego abrazarlo con cierta fuerza. Mirio correspondió el abrazo con delicadeza mientras acariciaba su cabello con dulzura, sintiendo con la menos comenzaba a sollozar.

Se separaron del abrazo y el rubio secó las mejillas de la menor con delicadeza.

-Ahora quiero que dejes de llorar, porque considero que te ves más bonita cuando sonríes -Mei esbozó una tierna sonrisa para luego sorber su nariz, gesto que le pareció muy tierno al mayor.

-Lo sé, me lo dijiste cuando nos vimos por primera vez -Murmuró la ojiverde-. Gracias por venir Mirio, me ayudaste a sentirme mejor.

-Siempre que me necesites estaré contigo -Se acercó y le dio un suave beso en la mejilla-. De todos modos no te salvarás de mis visitas, mañana me tendrás de nuevo aquí.

-Entonces te esperaré ansiosa -Mei amplió su sonrisa mientras lo veía acercarse a la puerta, sin embargo se giró para verla-. Nos vemos Mirio.

-Hasta mañana, pitufina -Le guiñó el ojo y luego salió de la habitación.

Apenas cerró la puerta, se apoyó en esta y soltó un suave suspiro atolondrado; cerró los ojos con lentitud, esbozó una gran sonrisa y se llevó una mano al pecho para poder sentir sus acelerados latidos.

- ¿Qué me estás haciendo, Mei? -Se preguntó para luego morderse el labio inferior con suavidad-. Me tienes como un bobo enamorado.

Ensanchó su sonrisa y cuando se dispuso a caminar con alegría por el pasillo rumbo al ascensor, todo esto sin darse cuenta de que tanto Todoroki como Daisuke también se encontraban en el pasillo...y de que habían escuchado todo.

Shouto miraba al joven campante con una frialdad mezclada con sorpresa; se giró para ver al castaño, quien se encogió de hombros sin entender mucho e ingresó al cuarto de Mei, luego regresó su mirada al pasillo por donde había desaparecido el rubio y soltó un suspiro cansado.

-Mierda...

Nada iba a ser fácil a partir de ahora.

%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%

¿Les gustó el cap de hoy (͡° ͜ʖ ͡°)?




Hola gente, como stan?

Espero que esten pasando una mañana/tarde/noche genial!

Pues...empecemos con este cap llenos de feelings por tos laus jajajajajaja


Finalmente.....

Despues de muchos intentos....

HUBO BESOOOOOOOOOOOOOO ENTRE SHOUTO Y MEI KSKSLSJSLAHSKAJSJSJS

Vimos un momento super nais con el enji y en Daisuke, mostrandl su amor homosensual 7u7 jejejejje

Finalmente Daisuke aceptó el amorts entre Mei y el Todoiko!!!!!!!!

Y todo se vino abajo con la apasionada declaración del tintín

Pero seamos sinceras chicas, Mirio se comportó como todo un caballero enamorado regalandole todos esos osos, globos, chocolates y flores 💖💖💖💖💖💖💖👌🏻👌🏻

Por cierto, las flores que Mirio le regaló son estas:


Son las flores más hermosas de too el world 😍😍😍😍😍💖💖💖💖💖

Y como dijo el Todoroki....

Nada será fácil a partir de ahora.

muajajajajjajajaa

La verdad que yo casi me muero de la risa al ver las teorias ultras locas que comenzaron a inventar en el capítulo pasado we XD
Que si "MEI SE OLVIDA DE TODOROKI Y ESTE SE QUEDA CON MOMO Y MEI CON MIRIO" "DAISUKE VIAJA EN EL TIEMPO PARA EVITAR QUE SE CONOZCAN" "MEI SE MUERE Y SE TERMINA TODO"

Ame cada teoría mis amores, jamás me imaginé que una historia mía llegase a tener teorías.
Eso si....no se necesita que Mei pierda la memoria para que esté con Mirio 7u7 jejejejje.

Otra cosa mas!

Quiero hacer un especial pero no piedo elegir entre dos ideas, así que pediré su ayuda :3.

La primera es un tipo "Backstage" de la historia, como la fui creando, las primeras ideas sobre la prota y datos curiosos y secretos sobre la historia.

La otra es flashback al paso de Enji y Daisuke, sobre su adolecencia y amor homosensual 7u7
Ayudenme a elegir weeeeeee

Eso es todo :3

Próximo Capítulo:
"Frente a Frente"

Sin más que decir...

Bye Bye

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top