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Después de la reunión con el Consejo Akane decidió entrenar un poco. Además de discutir algunos asuntos privados con Sasuke quien seguía siendo su guardia personal

En medio del entrenamiento ella preguntó mientras bloqueaba una serie de golpes consecutivos —¿Qué piensas de la creación de una nueva villa en Honshu?— la villa imperial que creó junto a su padre después de su primera campaña sin Naoko era bastante estable y un fuerte de apoyo sólido que le daba seguridad a la región. Estuvo contemplando la idea detenidamente durante los últimos días, sin embargo necesitaba la opinión de su consejero

Si bien una villa imperial sería de gran ayuda también era una gran responsabilidad crearla, hacerla subsistir y sobre todo encontrar a alguien digno y capaz de manejarla. Ya que representaría el poder de la capital en esa región

—Es una decisión difícil. No contamos con tropas para el ejército de base y todavía debemos ajustar los presupuestos militares— respondió honesto. La creación de la villa Yoshio se llevó a cabo debido a que Naoko llevaba meses planificando e incluso utilizó recursos de sus arcas personales

Akane sabía este hecho, por eso mismo necesitaba consultar los libros de contabilidad del Imperio para saber dónde podía reducir o minimizar costos. El modelo económico debía cambiar, además tenía el propósito de iniciar un apoyo constante para sus nuevas escuelas. El proporcionar edificios y materiales también provino de su propio dinero. Aunque podía seguir manteniendolo de esa manera, cuando ella fuera remplazada en el trono probablemente sus lugares de enseñanza desaparecerían. Por lo tanto necesitaba dejar un registro tangible de ello

—Tienes razón— concedió respirando profundamente para reponerse —Le pediré al funcionario Suzuki que me habilite los registros del presupuesto de este año. Más tarde te encontraré para reconsiderar la idea. Por hoy hemos terminando— dijo dando por finalizado el entrenamiento

Cuando salió de su Dojo privado se dirigió a sus habitaciones, le dolía enormemente el pecho pero seguía erguida mientras caminaba por los pasillos. Llamó a una de sus odaliscas y ordenó suavemente —Ve a llamar al emperador— luego se metió en la habitación sin más palabras

La joven sirvienta se apresuró a realizar el pedido de la emperatriz sin demora. No obstante antes de que llegara a la puerta siquiera observó cómo de la habitación salían dos soldados revisando que nadie los viera y luego se alejaron rápidamente ¿Esto era...? Olvídalo, ella no se entrometería en esos asuntos

Se acercó tocando la puerta unas cuantas veces antes de retroceder y bajar la cabeza con respeto

—¿Qué es?— la gentil voz de Safron sonó al otro lado con un tono de infinita paciencia

—Su Majestad la emperatriz lo espera en sus aposentos— informó

—Puedes retirarte— ordenó entonces mientras arreglaba sus indumentos frente al espejo. Emperatriz Akane, ah, emperatriz Akane. Si tan solo tuvieras una idea, una sonrisa sarcástica se deslizó en sus rasgos ¿Cuántas veces no planeó asesinar al linaje de Poliandría? Y ahí estaba a punto de darle un masaje a uno de sus miembros

Su expresión relajada gradualmente se volvió salvaje. No podía esperar hasta que pudiera exterminarlos a todos bajo sus pies, no tenía intenciones de dejar pasar más tiempo, era hora de acelerar sus planes

Tomó una caja de boticario listo para ir a los aposentos de Akane, sin embargo detuvo sus pasos un momento —Guardias— llamó en voz baja. Siempre había un guardia como mínimo custodiando su puerta. Después de dejar una orden se fué, sin embargo ¿Qué fué lo que ordenó?

Cuando estuvo frente la puerta corrediza en los aposentos de la emperatriz una odalisca informó su llegada —Su Majestad el emperador está aquí— tan pronto como terminó corrió la madera en un  sonido ligero

—Bendiciones a su Majestad— saludó él al verla sentada en el tatami con un montón de misivas delante de ella

—Safron, adelante— consintió haciendo un gesto con su mano para que las sirvientas se retirasen —Esta tarde he tenido un dolor de pecho más punzante— dijo con sinceridad. Ese dolor agudo le provino desde el día de su boda, todo lo que hacía era punzar pero era peor que morir atravesado por una espada

—Déjeme echar un vistazo— dijo dejando el botiquín médico en la mesita de té. Akane se recostó en el tatami aflojando el kimono para que pudiera hacer su chequeo —¿Ha estado expuesta a mucho estrés últimamente?— consultó mientras presionaba algunos puntos vitales en la parte superior de su torax

—Nada nuevo, hemos hecho las reuniones de la mañana igual que siempre pero los problemas en la región no son demasiado serios— respondió ocultando un poco de información para sí. A pesar de agradecer que él fuera el vencedor del torneo, Akane seguía en la idea de manejar ella la mayoría de asuntos relacionado a su gobierno. Safron no era una figura decorativa para el puesto de emperador, claramente tenía tareas que realizaba pero no se le dejaba saber demasiado

Por supuesto él sabía de todo lo que Akane planeaba, se había infiltrado en la capital de forma tan profunda que por supuesto tendría formas de averiguar todas las ramas de poder dentro y fuera del Palacio así como sus funciones o capacidades. Fingió ignorancia mientras asentía significativamente —Entonces puede deberse a un padecimiento crónico— esas palabras solo cimentaron las sospechas de que Naoko sufría un trastorno de salud similar y por eso desfalleció a mitad de una campaña. Sin embargo en cuanto a porqué Akane presentaba los síntomas a su edad era una pregunta que debería hacerse

—Ya— Respondió meditabunda, tal vez su madre siempre lo ocultó, tal vez ella estaba demasiado ocupada para notarlo, sin embargo el que Naoko viviera un período de vida considerable le daba esperanza a la muchacha. Al menos quería hacer prosperar el Reino antes de morir

Mientras se acomodaba nuevamente la ropa, Safron preparó un par de píldoras y agua desde su botiquín —Su Majestad— ofreció la medicina con una sonrisa amable —No debería ponerse triste, encontraremos una manera de solucionar este obstáculo— consoló antes de cambiar de tema —¿Ha pensado ya en su banquete de cumpleaños?

Akane dió un pequeño sobresalto. Su banquete de cumpleaños, se habría olvidado del asunto si no fuera por el recordatorio del emperador —No he pensado mucho en ello— fué honesta —Para ser franca no me apetece una gran fiesta

El banquete en sí, sólo era una formalidad. Desde que nació tuvo grandes fiestas por su cumpleaños, sin embargo ahora su estatus era diferente, un banquete de la emperatriz no solo significaba afianzar lazos entre las facciones y brindar seguridad armónica entre todas las fuerzas que componían el Imperio

También era una forma de representación ante el estado del país en general. Hubo quienes se aprovecharon y tuvieron grandiosas celebraciones debido a la prosperidad del Imperio pero ese no siempre fué el caso. Por ejemplo, durante sus primeros dos meses como emperatriz tuvo que lidiar con grandes problemas debido al ataque de las diversas aldeas antes de ascender al trono. Los cofres del presupuesto nacional se vieron afectados por los constantes apoyos a las zonas en conflicto y a los salarios militares de los nuevos reclutas

Además mucha gente murió en los combates mientras que los sobrevivientes seguían tratando de prosperar nuevamente. Hacer un evento lleno de pompa y extravagancia no sería bueno en lo absoluto —Creo que debemos ser frugales— dijo a continuación. Safron debería entender sus intenciones

—Su Majestad tiene razón. Deberíamos hacer una donación en lugar de hacer un evento a gran escala — aunque no estaba satisfecho con lo que oyó aún la apoyaba, mientras las facciones poderosas fueran testigo de su enfermedad habria posibilidad de discusión entre los círculos influyentes para prepararse y en el peor de los casos, encontrar una suplente para su puesto.

Una semana más tarde, el emperador se encontró con los resultados de sus órdenes de aquel dia. —¿Quién es?

—Es un soldado del Palacio, su nombre es Shimotsuki. Estaba de turno vigilando los jardines

Ese día después de que la odalisca lo llamara, escuchó a alguien fuera de su ventana, e inmediatamente mandó su captura. Había escuchado asuntos que concernían a sus planes así que no podía dejar ese cabo suelto, más bien podía usarlo

—¿Familiares o gente allegada?

—Su esposa, la señora Haruka y su hija, la señorita Plum

—Traigan a ambas para mí— ordenó fríamente antes de que su informante se fusionara con las sombras y desapareciera

Continuará...

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