|Cap ₅₉|Hidden Lord.


Me encontraba parada, sin dejar paso a Jungkook, pues él quería ver a Hidden Lord, algo de lo que ni mis amigas ni yo permitiríamos.

De las personas que se hallaban en esta casa, nada más Hwasa sabía su identidad, por lo que tenía entendido.

—Jungkook, cálmate —lo miré a los ojos, intentando tranquilizarlo.

—¿Cómo quieres que me calme? —frunció su ceño—. Un maldito asesino está ahora mismo en la misma casa en la que estoy yo, un oficial de policía —gritó.

—Ya, pero recuerda que además de policía, te volviste en asesino —dije, para ganarme un silencio instantáneo por parte de él.

Insensible.

—¿Sabes cuánto tiempo hemos estado buscando a esta persona?

—Años, lo sé —suspiré, y entrelacé mis manos—. Jungkook, estás en mi casa, no puedes hacer esto —dije en una voz temblorosa, pues me había acostumbrado a ponerme nerviosa si se trataba de discutir con Jeon.

—Carajo... —se volteó, caminando en forma contraria, mostrando su espalda—. ___...

—Jungkook... Tú sabes quien soy, siempre supiste a qué me dedicaba. Ahora no te hagas el sorprendido si te digo que tengo a un asesino en la sala de mi hogar.

—¿Sabes lo que en realidad me preocupa? —volteó, para mirarme a unos cuántos metros—. No quiero que te vuelvas en una asesina, no quiero que ensucies tus manos por alguien. ___, no tiene sentido, no quiero que hagas alguna locura.

—¿Al menos sabes lo que haré? —me acerqué unos dos pasos.

—¿Sabes el dolor que siento al saber que he matado a alguien? ¿La agonía que me hace sentir? —su pecho subía y bajaba con agitación.

—Responde mi pregunta.

—¿A quién querrías asesinar? No tiene sentido.

—¿No quieres saber? —pregunté, con miedo.

Si tenía que decirle la verdad a Jeon, lo haría. No perdería otra vez a la persona que amo por un secreto mío.

—Sea quien sea... —bajó su mirada, y sorbió su nariz—. No lo hagas, por favor.

Caminó hacia mí, con intención de abrazarme, y así lo hizo, haciendo que posara mi mejilla en su pecho. Por su puesto, había recibido su afecto.

—No por favor, no lo hagas —comenzó a acariciar mis cabellos, sorbiendo su nariz—. Cariño, no lo hagas, te lo ruego, no mates a alguien.

—Jungkook... —me separé un poco de su pecho, sin dejar de rodear su cuerpo con mis brazos—. Déjame hacer esto.

—No, por favor no —sus ojos empezaron a llorar.

Jungkook siempre lloraba, sea por felicidad, tristeza o rabia, siempre lo hacía, pues todo le afectaba de alguna u otra manera.

Eres mi bebé llorón.

—Te amo demasiado como para dejar que arruines tu vida como lo he hecho yo. ___, matar a alguien no es fácil, es algo que deja muerta tu conciencia. Pienso en Channy cada minuto desde ayer —arrugó su nariz, mirándome a los ojos, su llanto no cesaba.

—Jungkook... —posé mis manos en sus mejillas, limpiando sus lágrimas con ayuda de mis dedos pulgares.

—___...

—No lo haré...

Eso fue lo último que dije, para luego apagar las luces de la habitación, cerrar con seguro la puerta y adentrarnos en la cama.

Jungkook dormía a mi lado, sin dejarme de abrazar, pues yo tenía mi cabeza arriba de su brazo, usándolo como almohada. Era hermoso sentir su pesada respiración directamente en mi oído, escuchando el sonido de la paz. Mi amada persona dormía junto a mí, no podía pedir nada más, era feliz junto a Jungkook.

Este tiempo no era para matar a Hara. No cuando Jungkook luchaba contra él mismo, yo no debía darle más para sostener en su mente.

Intenté salir, dejando el brazo de Jungkook a un lado reposado en el colchón. Salí de la cama y en puntillas me dirigí a la salida del cuarto, antes de irme le eché una última mirada, para luego abrir la puerta, salir y cerrar ésta misma.

El pasillo estaba iluminado, desde la sala se podía escuchar la risa de Solar y la ronca voz de Hidden Lord.

Me dispuse a bajar las escaleras para lentamente acercarme a la sala y así verlos.

Me situé bajo el gran marco de la entrada a la lujosa sala, donde se hallaban los tres sentados en los sillones, junto a tasas de té puestas encima de la pequeña y hermosa mesita de centro.

—Hola.

Hablé, llamando la atención de los tres.

—¿Eres ___?

—Depende. ¿Eres Hidden Lord?

—Depende —se levantó del sofá, haciendo una reverencia.

Imité su acción, para luego avanzar por la sala y sentarme en uno de los sillones, teniéndolo frente a mí, ya que éste se había vuelto a sentar.

—Depende, si quieres asesinar a Hara al igual que yo —agregó.

Cabía destacar lo escondido que se hallaba su persona. Llevaba una mascarilla negra puesta en su rostro, divisando nada más sus ojos y parte de su pálida piel. Su ropa era negra, desde zapatos a chaqueta.

—No lo haré.

—¿Qué? —cuestionó de inmediato Hwasa.

—No mataré a Hara —dije, mirando a cada una de mis amigas.

—___, no puedes hacer esto, Hidden está aquí —habló nuevamente la pelinegra.

—No le haré esto a Jungkook, no ahora.

—Hidden Lord —llamó la morena, mirándolo.

—Sólo diré —se levantó de su asiento, mirándome a los ojos—. No sé qué razones tenías tú para asesinar a esa perra, y está claro que no me interesa, pero yo también tengo mis razones. No importa si ya no la quieres muerta, yo sí, y así será.

Su próximo movimiento fue sacar una galleta de su plato, y salir de ahí junto a Hwasa; su perrita faldera.

—Espera, por favor, no te vayas. ¡Duerme conmigo esta noche! —fue hablando tras él.

Finalmente Hwasa salió junto a él de casa, para luego de unos minutos volver con una cara de pocos amigos.

—Pensé que lo harías, ___.

—Cambio de planes —dije, tomando una galleta del plato y llevando esta misma a mi boca.

—Jungk... dart... com... ja... —masculló la rubia en un murmuro, el cual pude escuchar a medias.

—¿Qué dijiste, bitch?

—Dije que Jungkook debe darte como caja —aclaró la voz, seguido de eso tomó de su té.

—¿Crees que eso me hace obedecerle? —la rubia asintió, yo fruncí mi ceño—. Pues no es eso. Yo lo amo —me declaré frente a ellas.

Al decir aquellas últimas palabras, las dos se atragantaron con sus tés, mirándome con asombro.

—¡¿Que tú lo amas?! —gritó la morena.

—No grites, Jungkook descansa —hablé en un susurro.

—___, tú no lo amas, estás loca si piensas así. Tú no amas —agregó la rubia.

—Ustedes no saben lo que siento, ni si quiera un poco. No se atrevan a decir cosas que no tienen idea.

Yo amaba a Jungkook, pero no tenía que demostrarlo frente a todo el mundo para que pareciera real, eso lo tenía más que claro.

—Además, no quiero ver nunca más la pálida mirada de Hidden Lord, pues ya he dicho, no mataré a alguien.

Salí de ahí, corriendo escaleras arriba, necesitaba ir con Jeon. Quería estar junto a él y nunca más separarme de su respiración.

Abrí la puerta de mi habitación, entrando a ésta y caminando en puntillas, me acerqué a la cama. Encendí la lámpara de luz cálida que albergaba en el lado de mi cama, alumbrando nada más un poco del lugar.

Me cubrí con las frazadas. Jungkook estaba caliente, todo su cuerpo ardía a causa de estar durmiendo, su cuerpo aumentaba su temperatura sólo por ese simple hecho. Me quedé viendo su perfil derecho, deleitando sus hermosas facciones. Se sentía como admirar una de las más famosas obras de Piccaso.

Sin querer, Jeon comenzó a lamerse los labios, para luego ir abriendo poco a poco sus ojos, dándose cuenta de mi presencia a su lado.

—Hola —saludó en una voz dormilona.

—Hola —saludé, queriendo parecer normal, aunque por dentro moría de ternura.

—¿Me estabas observando? En realidad me das miedo, mi vida.

Amaba cuando decía esas palabras, era como un choque directo al corazón. Simples pero profundas palabras como: Amor, cariño, mi vida. Me hacían volverme realmente loca.

Antes me daban asco.

Antes de Jungkook.

—Vámonos a vivir juntos —posé la palma de mi mano en su mejilla izquierda.

—Hablas de ¿tú y yo? —sus redondos luceros brillaban.

—Sólo tú y yo —esbocé una sonrisa cálida.

_________________

|Nota de la escritora|

"Hidden Lord" fue el personaje de un fanfic que ya no existe. Ese fanfic no está ni si quiera en borradores, sin embargo en su momento estuvo publicado en este perfil y relacionado con esta historia, "Poles Apart" y ese fanfic se narraban en el mismo "universo". Los lectores antiguos reconocen de lo que hablo.

Lo único que deben saber para que entiendan el personaje de "Hidden Lord", es que es un mafioso y asesino. Su vida está asociada con la de Hwasa y Solar, pero eso la protagonista no lo sabe.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top