A la mañana siguiente ambos habían salido del apartamento de Matt, salieron en la búsqueda de aquel lugar donde se habían hecho los depósitos, pero Frank lo había advertido anteriormente, al llegar todo estaba destrozado y papeles hechos cenizas.

-Perfecto, ahora nuestras posibles pistas fueron destruidas.-comentó la chica molesta.

-No son idiotas, eso es claro.-

-¿Y ahora cual es el plan?- preguntó.

-Seguir con lo segundo, se cómo podemos encontrar al tipo de la foto.-

Dicho estos ambos salieron del lugar, el mayor manejo por algunas calles de la ciudad hasta llegar a un edificio, escondieron el auto que Lorna había robado después de salir del apartamento de Matt y se adentraron al edificio.

-¿Y quién es tu contacto?- preguntó la chica siguiéndole el paso.

-Trabaja para la policía.-

-¿Qué? ¿Acaso estás loco? Te recuerdo que nos están buscando, nos estas llevando directo a la boca del lobo.-

-Sí y eso es gracias a ti, pero hasta el momento es nuestra única opción.- se regresó para verla y después volteó a la puerta, esta se abrió minutos después.

-Me lleva el demonio...- comentó la mujer detrás de la puerta.

-También me alegra verte Madani.-

-¿Qué demonios haces aquí, Castle?-preguntó.

-Necesito tu ayuda, así que si me permites.-

La mujer suspiró pesadamente y se hizo a un lado para dejarlo pasar y su mirada se poso en la chica.

-Madani ella es Lorna, Lorna ella es DinahMadani- se apresuró el mayor.

-Se quien es, es la mutante responsable de Atlanta.-

-Ella misma.- dijo Lorna.

-No pueden llegar como si nada, no deberían estar aquí, en especial tú Frank.- la morena miró al ex teniente. –Ayer Mahoney estaba con dolor de culo todo el día vigilándome.-

-Por favor no me vengas con esa mierda, sabias que no tardaba en aparecerme por aquí, aparte no te pongas amenazante porque lo que estoy haciendo es justo lo que quieres, sé que no te has cansado de seguirle el paso a Billy, pero adivina quien está cerca.-

-Si bueno, pero ayer hiciste un buen trabajo exponiéndote.-

-Esa no fue culpa mía.- se defendió.

-Fue mía, un error pero al menos conseguimos algo. Comentó la mutante que sabia estado callada.

-¿Y tú que tienes que ver con todo esto?- pregunto la rizada cruzada de brazos. –No es tu asunto.-

-Yo he estado siguiendo los pasos de Billy desde hace meses atrás, yo soy mercenaria.- respondió Lorna algo molesta, pues esa mujer no le estaba agradando tanto.

-Y una mutante que mató a policías en cubierto.- recalcó la agente.

-Esos policías eran corruptos, están afiliados con el cartel que eran los socios de Billy.- se defendió.

-¿Qué?- eso le había sorprendido a la mujer.

-Si... Lo que escuchaste, oye yo no voy por las calles asesinando personas porque se me dan la gana, solo a quien se lo merece, la que daña, por eso aquellos dos oficiales que no les hice daño... Trate de protegerlos, pero mis poderes no siempre los controlo bien, fueron daños colaterales, pero tampoco fue mi intención.-

-Vaya, otra loca igual que tu Frank- rodó los ojos. –No me sorprendería que fuera tu novia.- contestó y la mutante rodó los ojos solamente.

-Relájate Dinah, tanto tú como yo y como ella queremos atrapar a Billy, se que tú has estado tratando de seguirle los pasos a Russo, estamos en el mismo equipo.-habló el pelinegro.

-Si bueno aun no entiendo como ella pudo estar cerca de atraparlo.- miró a Lorna. –Debo admitir que eres buena, pero te falta mucho, chica.-

Frank sacó la foto y se la enseño –Lewis Wilson joven veterano, bastante problemático- la agente tomó la foto para verla. –Quiero todo sobre él, la última vez que supe de él fue cuando quiso volar un edificio gubernamental.-

-Lo que sé es que lo metieron a un hospital psiquiátrico, tendré que hacer unas llamadas, esperen aquí, hay café por si gustan.- dicho esto fue directamente a su estudio.

Lorna mira a su alrededor, el departamento de aquella mujer era muy lindo, la mutante caminó hasta la venta; la vista que tenia era asombrosa, podía ver casi toda la ciudad.

-¿Crees que si está haciendo lo que dice?- preguntó mientras miraba los edificios. -¿Qué tal si está dando aviso a su gente de que estamos aquí.-

-No lo conviene, ella quiere la cabeza de Billy tanto como nosotros.- tomó una taza de café y bebió de esta. –Billy mató a su compañero-

-No me jodas...- dijo sin creerlo.

- Madani casi muere, le disparo en la cabeza, ya te imaginaras.-No oba a darle tantos detalles, le ofreció café, pero Lorna se negó.

-Vaya... Quien lo diría.- se abrazó los brazos y volvió a ver la ventana, pero en el reflejo de ella vio que sus fotos estaban en la pantalla. .Oh no... Frank.- se volteó a él de prisa y el mencionada rápidamente tomó el control y subió el volumen.

-En otras noticias, la mutante LornaDane o mejor conocida como Polaris sigue siendo buscada por el servicio Centinela, por lo sucedido de la bahía de Atlanta, se dice que Frank Castle conocido como Punisher ha sido visto con ella, a ambos se les está relacionando con el tiroteo de la tarde de ayer en el bar M & G, se halló muerto a Miguel Gutiérrez dueño del bar y también afiliado con el Cartel de México que estuvo en Atlanta- dijo el presentador de noticas.

-Mierda...-Lorna se llevó las manos a la cabeza.

-Tengan precaución, si alguien tiene una pista de su paradero avisen de inmediato a las autoridades.- puso en mude el televisor y soltó el control en sofá.

-Charles va a matarme...- susurró Lorna. En ese momento el teléfono de Frank sonó.

-Carajo, carajo- sabía que era el teléfono que el mencionado le dio. –Es él- le anunció a la chica.

-No le respondas.- dijo de inmediato.

-Tengo que hacerlo, de todas maneras estamos en el mismo barco ahora.-le dijo y respondió. –Supongo que ya viste las noticias.- se adelantó a hablar.

-¡Qué demonios Frank!- exclamó molesto. –Los quiero en una hora en la mansión.- ordenó.

-Charles...- se iba anegar pero no le dio oportunidad.

-Una hora Frank o te aseguro que daré aviso a la policía.- dicho esto colgó.

-¿Y bien?- dijo nerviosa la pelinegra.

-Nos quiere ver en una hora, en la mansión.- guardó el celular.

-Puta madre...- se llevó su mano a la frente y bajó la mirada tratando de calmarse.

-Si no vamos dará aviso y todo esto se irá al carajo.-

La chica se llevó su pulgar a la boca y mordió su uña nerviosa, no quería ir, prefería estar muerta que al regresar, pero estaban atrapados.

-Tengo algo.- llegó Dinah con una nota y miró el televisor. –Diablos, ahora si están en problemas.-

-Como sea ¿Qué encontraste?- apresuró Castle.

-Lewis esta en el hospital Cambridgtone, en Salem, lo transfirieron hace una semana por falta de espacio, según los registros.- le entregó el papel a Frank.

-Muchas gracias Madani.- guardó el papel.

-Solo lo hago para que atrapes a ese bastardo.- dijo la mujer seriamente. –Trataré de que el idiota de Mahoney no les pise los talones, los tendré informados.-

-Yo te llamaré.- Se giró y caminó a la puerta.

-Gracias.- dijo Lorna a la mujer y esta asintió para verlos salir de su departamento.

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Ambos iban en camino hasta la mansión X, no les faltaba mucho para llegar. Frank podía notar lo nerviosa que estaba Lorna, escuchaba su respiración una y otra vez, sus manos estaban frotándose una contra otra, mientras su pie izquierdo subía y bajaba consecutivamente de forma muy imperativa.

-En diez minutos llegamos, tienes que calmarte.- la miró de reojo y volvió su vista a su camino.

Soltó una risa sarcástica –Claro, como si fuera tan sencillo.- mordió su uña del dedo pulgar.

Siguieron en el camino por tan solo unos minutos, al llegar la reja se abrió y Frank se adentró al lugar; era tan grande como lo imaginaba. Estacionó el auto frente a la puerta y ambos bajaron para subir las escaleras.

-Pase lo que pase... No hay marcha atrás con nuestros planes.- le dijo a Frank cuando puso la mano en la perilla.

El hombre no dijo nada solo asintió y ambos se adentraron al lugar, no había cambiado nada, seguía igual de limpio y elegante como siempre.

-Pensé que este lugar estaría lleno.- comentó el mayor.

-Es un lugar enorme, te puedes perder fácil cuando eres nuevo, debe de haber estudiantes esparcidos.- le hizo una seña para que la siguiera hasta la oficina de Charles donde aseguraba que estaría ahí.

En el transcurso del camino, Castle se dio cuenta de que algunos estudiantes los miraban asombrados o en este caso a Lorna, pudo notar como murmuraban entre ellos y la miraban, como si hubieran visto un fantasma o algo por el estilo. Se detuvieron frente a una puerta de madera caoba y la chica tocó la puerta, desde adentro se escuchó una voz masculina, la mujer tragó saliva y se adentró al salón junto a Frank, cerrando la puerta tras de él.

-Tomen asiento.- Dijo el telepata que se encontraba detrás de su escritorio, ambos hicieron caso tomando asiento. Hubo un lapso de silencio algo incomodo, el hombre puso el periódico frente a ellos donde se mostraban sus rostros en primera plana. – Sabes Lorna... A mí me da gusto verte siempre, pero ahora... No quiero hacerlo.- la miró y la chica se encogió en su asiento.

Esa acción le recordó al hombre cuando regañaba a Lorna al hacer una travesura cuando era más pequeña, pero no se iba doblegar ante ella, estaba sumamente molesto, la chica iba hablar pero él la detuvo.

-Cuando me llamaste estabas desesperada porque te ayudara y eso fue lo que hice, conseguí un vuelo para sacarte de aquí y envié al mejor hombre para que te cuidara ¿Qué demonios es todo esto Lorna?- dijo molesto –Y en cuanto a ti Castle, te pedí que la cuidaras no que también te enredaras en este lío.- miró al mayor.

-Si bueno, tenías razón; ella es absolutamente necia y como te dije, yo también tengo mis propios problemas.- respondió.

-A ver basta, si, lo lamento...- comentó la chica. –Se que debí solo seguir la ordenes de Frank, pero tú sabes bien lo que están diciendo de mi, ellos piensan que maté a esos policías y que soy una terrorista-

-¿Y como no lo van a pensar después de lo que hicieron en el bar?-

-Ese si fue error mío... Me descontrolé, lo acepto- suspiró frustrada. –Yo solo quiero limpiar mi nombre-

-Lorna...- dijo Charles.

-No, Charles, no me vengas con tus sermones, tú sabes a lo que me dedico, es mi trabajo y no pienso escapar sin terminarlo y sin limpiar mi nombre- comentó. –Convencí a Frank de que me ayudara... Por casualidad estos meses he estado investigado a los mismos tipos que Frank busca.-

-Y por esa razón acepté, ese es asunto mío- comentó el mencionado.

-Y ahora por tu imprudencia ya no solo te buscan a ti Lorna, sino también a Frank y el FBI entró al juego.- la miro. –Tienes que dejar de hacerlo ahora.-

La chica molesta se levantó y puso sus manos al escritorio inclinándose. -¡No! No lo voy hacer, no soy una cobarde para escapar cuando todo esto está hecho un caos, estoy cansada que no me crean capaz de resolver las cosas.-

-Yo sé que eres capaz de mucho, pero no sabes controlar tus poderes, eres joven y tienes mucho por que vivir.-

-¿Mucho que vivir?- soltó una risa cínica -¿Y cuáles son esas razones? No tengo nada, lo único que tengo es el trabajo que hago y mi nombre y eso es lo que voy a mantener limpio, entiende que esto significa mucho para mí, se que quieres protegerme y lo aprecio, pero tienes que tener claro que no importa cuánto me quieras alejar, siempre habrá problemas a donde vaya, está en mis genes.- suspiró. –Tenemos pistas y pronto voy acabar con esto.-

-Lorna...-

-No quiero que todos me vean como mi padre, no soy igual que él.- dijo firme.

En ese preciso momento la puerta se abrió dejando ver a un hombre, todos voltearon a ver, la chica se puso tensa completamente y maldijo en sus adentros, tenía que mantener la calma.