"Primeras veces."

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Respiro profundo, intentando mantener lo más tranquilo posible mientras esperaba, sentado en el comedor de su hogar, observando un punto fijo intentando distraerse con cualquier cosa que tuviera al frente, tal vez debería de pensar seriamente el poner algo en aquella pared, una pintura o flores, cualquier cosa que le ayudará a su mente a seguir distrayéndose y que no le hiciera pensar...

—¡Ya casi está listo Ash! ¡Es solo de que suene el reloj y habré terminado!

—¡Si mi amor, estoy impaciente por probar tu nuevo pastel!

Oh por un Giratina, no estaba listo y jamás lo estaría, claro, no era la primera vez que su esposa se tomaba su tiempo para preparar alguna comida por vez primera y se lo daba a probar, su víctima predilecta en el mundo para hacerle sufrir siempre con la comida, porque su esposa aún no era tan malvada como para hacer que sus hijos también probaran aquella comida... Aunque claro, también ayudaba que los pequeños no pasaban de los tres años y no parecía buena idea darles una rebanada demasiado grande de pastel o el postre en turno que Misty, su "amorcito" hubiera decidido intentar llevar a cabo.

—¡Saliendo del horno!

Sostuvo el tenedor con su mano derecha, usando más fuerza de la necesaria mientras seguía esperando, evitando temblar para que su querida esposa no se fuera a enojar por su reacción, aunque viendo la manera en que se encargaba de hacer todo y la sonrisa con la que usualmente dejaba el plato frente a él casi, parecía que lo hacía con maldad.

—Provecho Ash.

—Gra-gracias Mist, provecho para ti también... Te quedo, hermoso.

Trago saliva una vez más, observando el pedazo de pay que descansaba sobre el plato de porcelana, el cual, sinceramente, se veía perfectamente, como si lo hubiera comprado y no preparado en casa, pero, sabía, por comidas anteriores, que el exterior se viera bien, no significaba que el interior lo fuera a estar, siempre había una primera vez, para Misty, esa primera vez parecía repetirse siempre, al menos para la próxima ya sabia cual había sido el fallo y por eso no lo volvía a repetir... Si tan solo no fuera el conejillo de indias para probar tal cosa.

—Es pay de calabaza, por si estas intentando adivinar qué pay es.

—¡Oh! ¡Calabaza! Me gusta la calabaza, huele bien.

—¿Verdad que si? Creo que esta será la primera vez que no me faltó ningún ingrediente, ¿tu que dices?

Pico la hermosa parte superior, la cual se encontraba bellamente coloreada del color exacto, antes de cortar un pedazo pequeño, escuchando el crujir que normalmente solía escuchar en algunos otros platillos, antes de caer en cuenta de que algo hacía falta, al menos, por cómo se veía todo el platillo, algunas cosas principales como la harina y el huevo parecían estar en su lugar, pero no era seguro que todos los demás estuvieran ahí, sobre todo si Misty únicamente se dedicaba a verlo fijamente y no era la primera en probar lo que ella misma hacia. Tramposa.

Sin muchas más opciones a la vista, usó su tenedor para tomar el pequeño bocado que había cortado, lamiéndose los labios antes de abrir la boca y comérselo de un mordisco, esperando unos segundos antes de armarse del suficiente valor como para comenzar a morder lentamente su bocado, saboreándolo... Antes de finalmente tragarlo cuando no sintió ninguna clase de asco ante comida cruda, lo que sí sintió, fue un pequeño detalle que raramente parece ocurrir, pero que le hizo cerrar los ojos y dar gracias al de arriba, antes de dirigirse a su apasionada esposa que esperaba buenas noticias sobre su postre.

—Mist...

—¿Sí, Ash?

—Creo que olvidaste la calabaza...

—¡¿Qué?! ¡Eso no es...!

Observó cómo el rostro de su esposa se quedaba en blanco, antes de golpear su cubierto contra la mesa y levantarse apresuradamente hacia la cocina, soltando varias maldiciones mientras escuchaba como todo en la otra habitación estaba siendo desordenado.

Bueno, siempre había una primera vez para todo... Al menos era seguro que este platillo no le iba a dar diarrea.