¡Hola, personas!

Les tengo unos cuantos avisos antes de pasar al capítulo de hoy.

Primero, les pido una disculpa por lo cortos que estuvieron los capítulos de la semana pasada. Estuve pasando por una mala racha (emocionalmente hablando) y eso afectó mi proceso creativo. Así que espero que esta semana, que ya me siento mucho mejor, pueda retomar lo épico de la historia xD

Segundo. Los invito a pasarse por una nueva obra que les dejaré en el vínculo externo. Si no pueden ver ese vínculo, entonces busquen entre mis obras: Los Cuentos de Astaria. ¿Qué es esto? Bueno, comenzaré mi carrera de autora autopublciada y quiero usar Wattpad como una forma de promoción.

Ñee, Alison Oropeza nos va a abandonar para comercializar sus obras. Sólo le importa el dinero. Sólo escribe para ser popular, ñee...

No, paren, no quieran matarme todavía D: Como algunos de ustedes saben, y los que no lo sepan se enterarán ahora, yo quiero vivir de mis libros. Ser escritora profesional y eso. Es por eso que publicaré mis novelas en Amazon (atención, si eres usuario de Kindle y quieres apoyarme, te lo agradecería mucho). Eso no quiere decir que desapareceré de aquí, pues aún tengo muchos otros fics que ofrecerles y demás :'D Así que no me odien D:

Ñee, sólo te quieres beneficiar con nosotros, no vamos a comprar tus libros, los queremos gratis, ñee...

Esperen, esperen D: Lo único que quiero pedirles es que se pasen por Los Cuentos de Astaria. Si pueden y si quieren, quisiera que leyeran los capítulos que estaré subiendo y me regalen un voto o un comentario. (Ñee, sólo quieres hacerte publicidad, no vas a subir la historia completa, yo no voy a leerla, sólo quieres que la compremos, ñee...). ¡No! Lo único que necesito es que ustedes me ayuden a que la historia suba al rankin de, al menos, las mejores 50 del género de fantasía de Wattpad, para que pueda llegar a más personas :3 ¡Así que no me maten! (Ñee). ¡Que no me maten, dije!

Ya saben, pásense por Los Cuentos de Astaria. Me encantaría conocer sus opiniones :3 Si están interesados, pronto les daré más noticias de la publicación, tanto en formato electrónico como en físico (más adelante, y sólo de ser posible). La fecha del lanzamiento en Kindle será el 1 de enero del 2015, por lo cual les agradeceré si me ayudan a promocionar los primeros capítulos con sus votos, comentarios, y compartiendo la historia entre sus amigos :D

Ñee.

¡A callar!

Sin más por ahora, les dejo el capítulo. ¡Gracias por su atención!

     Nunca me había imaginado que llegaría el día en el que estaría en esta posición, en el que estaría totalmente dispuesta a darlo todo con tal de vengar una injusticia. Mi sorpresa es aún mayor sabiendo que se trata de la persona que detesté toda mi vida. La ira aún sigue latente en mi interior, así que no es necesario evocar el recuerdo de lo sucedido para que la furia se apodere de cada parte de mí ser y así sea un buen justificante para mis próximas acciones. Especialmente, no tengo problemas para recordarlo pues todos los eventos siguen muy recientes en mi memoria. Es casi como si hubiera sido hace horas. Como si recién hubiera soltado la mano de Skyler. Como si recién hubiera soltado su último suspiro.

     Lo juro por mi vida, ese crimen nunca quedará impune.

     — ¡Omastar, espera! ¡Deja que Vaporeon se encargue de esto!

     Omastar accede, así como mis otros Pokemon. Vaporeon se contonea a la hora de colocarse al frente. Adopta una posición de batalla y suelta un gruñido. Jason se mantiene en silencio. Mejor así, no quiero monologar con esa arpía.

     Vaporeon lanza el primer ataque sin necesidad de que yo se lo indique. Ataca con una ráfaga de viento gélido que Dragalge consigue esquivar dando un gran salto. No consigue tomar por sorpresa a Vaporeon al caer, pues Vaporeon lo ve venir y lo esquiva. Ataca de vuelta con una ráfaga de burbujas que Dragalge desvía con un golpe de su cola. Dragalge ataca con polvo venenoso que Vaporeon destruye con una ráfaga de agua.

     Dragalge podrá ser ágil, pero he entrenado a Vaporeon para ser más ágil que cualquiera.

     Vaporeon debe dar otro salto para esquivar una embestida. Gira sobre sí mismo en el aire y golpea con sus patas delanteras a Dragalge para derribarlo. Cae sobre el Pokemon enemigo y lo acorrala con sus dos patas delanteras contra el suelo. Dragalge, sin embargo, se recupera y le propina a Vaporeon un fuerte golpe para sacárselo de encima. Aturdido y adolorido, Vaporeon cae al suelo soltando un chillido. Se da cuenta de que quiero correr a tomarlo en brazos, así que se recupera y suelta un leve gruñido antes de volver a la contienda.

     No puedo hacer más que sonreír, el entrenamiento ha rendido sus frutos.

     — ¡No te rindas, Vaporeon!

     — ¡Nunca te perdonaré si pierdes este encuentro, Dragalge!

     Esas son las primeras palabras que Jason pronuncia desde que inició la batalla. No puedo hacer más que fulminarla con la mirada en cuanto la escucho hablar. Quisiera decirle algo, cualquier cosa con tal de que sepa lo mucho que la odio. Pero no, no puedo hacerlo. No puedo permitir que ella piense que soy débil. No puedo dejarle saber que sus crímenes me han herido en niveles que ni siquiera yo consigo comprender. Sólo puedo apretar los puños con fuerza.

     Me pregunto si Skyler habría hecho esto por mí…

     Mierda… ¿Qué fue lo que me pasó?

     No vi llegar el golpe, la oscuridad fue bastante útil para él.

     Bueno, al menos lo fue antes de que se le ocurriera semejante plan estúpido.

     Él ahora está inconsciente debajo de una montaña de escombros. Yo sólo siento todo mi cuerpo adolorido, algunos pocos trozos de cristal han causado cortes en mis brazos y en mis piernas. Mi pómulo derecho sangra.

     — ¡Humana!

     ¿En qué momento fue que Umbreon salió de su Pokebola? ¿No se suponía que estos Pokemon sólo podían salir si su Entrenador los llamaba?

     —Humana, ¿te encuentras bien?

     Su nariz húmeda empuja levemente mi mejilla para hacer que me incorpore. Yo sólo puedo esbozar una mueca de dolor.

     — ¿Qué ha pasado? —le pregunto cuándo levanto la cabeza.

     Mi voz se apaga cuando veo la herida que surca su ojo derecho. Eso sin duda dejará una cicatriz. ¿Quién se lo ha hecho? ¿Por qué parece no importarle? ¿Acaso no siente dolor?

     —Ese humano llamó a un Arcanine que causó una explosión —explica Umbreon—. Los he abatido. Podemos escapar ahora.

     ¿No los ha matado?

     ¿Por qué no los ha matado?

     —Idiota… —Consigo ponerme de pie y me tambaleo un poco. Persian sale de entre los escombros para ayudarme a mantenerme estable, se levanta en sus patas traseras para sostenerme—. ¿Por qué no los has matado? ¡Ahora nos perseguirán!

     —Pero… Yo creí que… ¿Acaso la humana más pequeña quería que los asesinara a todos?

     —Lo que Perla haya dicho no debería importarte, tu entrenadora soy yo.

     Maldición, Umbreon es como un pequeño cachorro. Incluso su mirada me recuerda a esos animales estúpidos con los que Max y yo solíamos entrenar.

     Max…

     No, no me deprimiré de nuevo.

     —Vamos, Umbreon. Tenemos que buscar a Itou y salir de aquí.

     —Pero, ¿qué hay de los humanos que veníamos a rescatar?

     Le doy la espalda y empiezo a caminar, tan velozmente como mis piernas heridas me lo permiten.

     —No podemos salvarlos. Vámonos antes de que Harrison despierte.

     Que le den a ese hombre, lo único que me importa es irme de este maldito lugar.

     Vaporeon intenta asestar una mordida en el rostro de Dragalge, misma que falla por poco. Así que utiliza otra fuerte ráfaga de agua para dejar un poco aturdido a su enemigo. Dragalge contraataca lanzando de nuevo ese veneno que Vaporeon consigue esquivar. Sin embargo, Vaporeon ataca por la espalda y Dragalge cae al suelo. Usando un zarpazo, Vaporeon hiere el rostro de Dragalge y ataca de nuevo con un viento gélido que no es tanto potente como para congelarlo, pero sí consigue paralizar la parte inferior de su cuerpo.

     Eso es, lo tengo.

     — ¡Dewgong, congélalo!

     Las pupilas de Jason se contraen cuando me escucha, pero no hace nada por evitarlo. Y aunque lo intentara, no podría hacerlo. Dewgong ataca de inmediato con una de sus ráfagas de hielo que convierten a Dragalge en algo similar a una escultura hecha con nieve. Deja de moverse, el hielo que recubre su cuerpo sólo se cuartea un poco antes de que él deje de moverse por completo. Miro entonces a Gyarados de forma autoritaria y él obedece, golpeando con su cola a Dragalge y transformándolo en mil pedazos de hielo. Desesperada, Jason me mira con impotencia e ira.

     —Esto aún no ha terminado, zorra —le digo y me cruzo de brazos.

     Pero todo mi interior se congela cuando ella me apunta con el cañón de esa arma.

     —Debí hacer esto desde el principio —dice y presiona el gatillo.

     La detonación resuena en mis oídos, pero me lanzo a un lado antes de que la bala pueda entrar en mi cuerpo. Me aseguro de que todos mis Pokemon entren a sus Pokebolas y echo a correr, escuchando y sintiendo cómo ella me persigue a toda velocidad.

     Sólo necesito encontrar un escondite donde pueda cubrirme de las balas.

     No va a matarme, no repetirá conmigo lo que hizo con Skyler.