II. Capítulo 37: Retazos

El sol del amanecer mostraba su luz inundando toda Ciudad Jubileo. Aly estaba frente a la ventana pensativa.

Cira salió del cuarto, somnolienta.

-Buenos... Uaaah- Cira pegó un largo bostezo- días. No esperaba que fueses a estar despierta temprano.

-Encargarme de niños me ha permitido adquirir la habilidad de dormir poco- contestó con una pequeña sonrisa recordando a sus tres favoritos: Mudkip, Pichu y Vulpix.

Al ser niños perdidos, nunca supo sus nombres pues muchos de ellos apenas tendrían dos o tres años cuando eran humanos y al transformarse se desarrollaban antes... Tampoco parecía que fuesen a recuperar sus vidas... Ni a sus padres...

-¿Así que eres madre?- preguntó Cira

La Braixen se tensó dejando ese pensamiento de lado de golpe y se sobresaltó con soltando una carcajada.

-¡No!- protestó nerviosa y sonroja. La cola se movía nerviosa- Es decir, no he... Aún no soy... Si, si es por cuidar... Pero no porque...

Cira soltó una carcajada y la tocó, a lo que a Aly respondió tensando su cuerpo.

-Tranquila, no pretendía ponerte nerviosa- dijo Cira.

La Braixen respiró varias veces para calmarse.

-A ver, es algo que hemos hablado Ikena y yo, y bueno... Digamos que no nos conviene sabiendo que tenemos que cuidar a los que han sido abandonados...

-Así que se trata de eso. No sabía que había lugares donde aún hay compasión y empatía- respondió Cira con cierta ironía. Aly sonrió.

-Bueno, digamos que cuando empezó todo esto, nosotros ya sabíamos lo que podría llegar a pasar; así que nos preparamos. Lo que no esperábamos fue que la gente hubiera sido manipulada fácilmente como para dejar a los hijos ser transformados a cambio de comida... Por lo que intentamos hacer lo que pudimos para salvar a los que pudiéramos.

-Al menos tú tuviste suerte y tenías un refugio- suspiró Cira mirando hacia el horizonte - mi madre no fue precisamente fuerte al momento de ser camelada por sus discursos... - luego en voz más baja agregó- Siendo Guardiana de Azelf...

- Nos dijiste antes que eras su Guardiana, ¿por qué no nos protegen? - la Braixen se apoyó en la ventana mirando hacia el cuarto.

-Ella... Ya no está...- respondió con tristeza- para poder realizar lo que la Zorua explicó, ha matado a los tres Pokemon de la Cadena Roja.

-¿No podrían haberlos capturado vivos? - preguntó Aly.

Cira negó:

-Desde aquel incidente hace algunos años, los Pokemon del Lago volvieron a designar a sus Guardianes tras siglos de silencio. A mi abuela la tocó por ser descendiente directa de sus antepasados que fueron guardianes. Azelf entonces decidió solo aparecer cuando su guardián estuviera presente por lo que aquellos que buscaban consejo o guía por parte de Azelf, mi abuela era como su mensajera. Sé que mi madre tenía relación con el de Mesprit ; pero cuando estalló todo esto, desapareció; probablemente murió.

-¿Y el guardián de Uxie? - preguntó Aly

-Nadie lo sabe. Cuando se lo preguntaron a Azelf o a Mesprit, dijeron que no iba a revelarlo porque no quería que la vida de sus protectores fuera de reclusión y aislamiento; condenándolos a una vida alejada de la normalidad- contestó Cira con una pequeña sonrisa y suspirando- supongo que vio cómo habían tratado a sus guardianes Azelf y Mesprit y se dio cuenta de que quizás no tenía sentido recluir a un ser humano para beneficio suyo; sino como Pokemon que nos dieron voluntad, sabiduría y emoción... - algo se iluminó en su mente- Puede que Deimos los estuviera buscando no solo por la Cadena Roja, sino porque el poder de los tres Pokemon juntos...

-...Componen las virtudes de los humanos y teniendo el poder de los tres puedes llegar a controlar una de las dimensiones importantes del ser humano- interrumpió Zerio que se había despertado al oír el nombre de Deimos, aunque previamente estaba ya despierto con los ojos cerrados- Con la Esencia, ese poder que guardaban Uxie y Mesprit se potenció y así se manipuló a la gente que justamente no tenía suficiente voluntad.

-Lo iba a decir con menos "palabros" pero sí. Eso pensaba- respondió Cira un poco indignada por la interrupción.

Aly lo miró con cierta desconfianza, Zarky le había contado lo que había hecho; y aunque la noche anterior dijo que estaba de su lado, aún no se fiaba.

-¿Qué más nos puedes decir de lo que habéis hecho con los otros dos y que tiene que ver que nos transforméis en Pokemon? - preguntó

-Vaya, qué directa- suspiró Zerio reprimiendo sus ganas de pegarle un puñetazo- A ver, ya lo expliqué anoche: nosotros los Pokemon somos más dóciles, especialmente cuando encontramos una afinidad con una persona. Si manipulas los corazones, entonces eso activa aún más esa docilidad. Dependiendo de la especie, este vínculo es más o menos fuerte. Pero dejémonos de charlas, aún hay algo que tenemos que averiguar.

La Braixen tragó saliva. La puerta de la entrada se abrió. Zarky y Jack estaban en la puerta. La Zorua tenía una mirada muy seria.

-Zerio- la voz de Zarky parecía estar cargada de ira y miedo- Dime que padre... digo, Deimos no ha logrado fusionar aún su ADN con Arceus

El Zoroark negó:

-Se supone que soy yo quien dirige el experimento... - luego con una voz un poco más baja agregó- bueno yo, y...

-Y quien más- quiso saber

-Sandra, quien estuvo a cargo de restaurar la Esencia. Puede que ella también esté haciendo algo

-¿Quien es Sandra? - preguntó Aly

- Es quien dirige las operaciones de Ciudad Puntaneva. La responsable de todo ese incidente y del secuestro del Lucario y el Sylveon- contestó Zarky- el lugar donde fueron transformados en un Sylveon y en un Vaporeon al haberlos expuesto a la Esencia. Estuvimos investigando la forma de revertir la transformación; y poner un alma de un Pokemon para controlar su voluntad.

Aly se estremeció. A Zarky le estaba costando decirlo. Zerio abrió los ojos

-Creía que solo extraíais su sangre.- respondió el Zoroark sorprendido- recordó estar en esa época también por ahí porque Deimos le había pedido los elementos para desbloquear la Esencia- ahora entiendo por qué hubo problemas...

-Dani escapó cuando estaban doblegándolo; ya que no había forma de controlarles por ninguna otra manera- prosiguió Zarky con cierto tono analítico- pero lo hizo sin siquiera estar yo. Obviamente iba a salir mal.

Zerio ahogó una pequeña risa y sonrió.

- A veces das un poco de miedo, Zarky- dijo la Braixen.

-Perdón- suspiró Zarky - parezco apasionada pero no me enorgullece.

-¿Pero cómo es eso de que te metan la voluntad de un Pokemon ? - preguntó Jack- No entiendo absolutamente nada.

-Es mejor que no te lo explique- replicó Zerio sombrío- pero no es nada bueno ni para el humano ni para el Pokemon

-Las consecuencias son una pelea eterna entre tu parte humana y tu parte Pokemon. Dos consciencias en una misma. La más dominante gana. Si favoreces a una, entonces la otra se duerme y puede hasta desaparecer. Controlas una y la otra puede incluso hasta creer que es el estorbo- miró frente a Jack que, por alguna razón, se estremeció- pero en fin, - dirigió su mirada a su hermano- responde.

-He intentado darle resultados fallidos- dijo respondiendo - logré hacer que funcionase, desgraciadamente; pero sé qué es lo que pretende y estoy intentando evitar que consiga el poder de Arceus...

-Porque si lo hace, la humanidad entera estará perdida, la Esencia podrá ser liberada, doblegará a los Pokemon más poderosos, podrá ir a por otros mundos y doblegarlos a todos... Y controlar el destino conforme a su voluntad- continuó Zarky.

-Quiere que no haya enfrentamientos, guerras, mentiras... - dijo Zerio-  El ser humano por lo general suele destruir para crear; pero con todo creado, el ser humano ya no pinta nada; solo hace daño tanto a sus especie como a nosotros.

Cira desvió la mirada. Aly se revolvió un poco en el interior. Zerio las miró y con una pequeña sonrisa

-Pero alguien me enseñó que los seres humanos son más que eso. Ella me mostró un poco de ese vínculo, y no sé por qué, necesito saber que lo que ella cree aún existe...

-Vaya, es rara esa respuesta por tu parte- dijo Zarky. El Zoroark le devolvió la mirada con cierta seriedad, intentando esconder su vergüenza.

-Bueno, - dijo Aly en seco- creo que es mejor que vayamos al museo ya; es pronto y ni los Pokemon diurnos y nocturnos están activos. Hay que aprovechar.

Todos asintieron.

Cuando todos salieron por la puerta, Cira agarró a Aly. La Braixen se giró sorprendida. Había permanecido callada todo este tiempo.

-¿Qué ocurre?- preguntó Aly

-Vas a renunciar a tu humanidad- le dijo en el el oído.

La Braixen se paró en seco. Sí, es lo que había dicho. Tuvo que reprimir sus sentimientos de ansiedad, miedo y pérdida.

-¿Có... como... ?

-Azelf me lo ha dicho- cortó Cira. Su gema estaba brillando tenuemente

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