Te lo debía.



-¡Lo conseguimos!



-¡Ahora ya podremos seguir adelante!- Asentí con determinación, mientras Pichu se subía a mi hombro, decidido a afrontar todo lo que viniera tras esa entrada.- Es posible que ya estén llevando a cabo sus planes al otro lado ¿Todos preparados?



-¡Por supuesto, general!- Me llevé una mano a la frente.



Los dos intercambiamos de nuevo una mirada de complicidad, como dándonos ánimos para lo que nos sobreviniera y entramos por el agujero. Caminé rozando la pared con la mano todo el trayecto para no tropezar en ningún desnivel ya que no se veía casi nada. No tardemos mucho en entrever la luz del Sol y salir al exterior, un exterior continuamente barrido por una lluvia de cenizas que caía como nieve en polvo y un lago de lava a nuestro alrededor, que amenazaba con eructar en cualquier momento. Giremos la vista hacia el frente y nos topemos de frente con los enemigos.



El rubio de mecha roja estaba apuntando a una columna de llamas con su guante de control, el cual emitía unas ondas rosadas que iban directas a una silueta dormida parecida a la de un ave fénix. Sin poder controlarlo, intervine.



-¡Red Eye! ¿¡Que estás haciendo?!-  Di un paso al frente. Los dos Nappers que le acompañaban se giraron sorprendidos.



-L-líder...¡Son los Rangers!



-¡Eso ya se ve, idiota!- Le replicó el otro.



-Aaah...¡Qué los he reconocido por la voz! - Red Eye dejo su tarea unos instantes para darnos la cara y dedicarnos una de esas falsas sonrisas ...¿Es que los malos no se cansaban nunca de eso?- Desconozco hasta que punto estáis al tanto de mis planes, pero igualmente...¡Bienvenidos al Volcán Fascuas!-Apreté los dos puños de las manos ¿Ahora a qué venía eso, quería burlarse de nosotros o qué? - Pensaba que no nos íbamos a volver a encontrar. Que pena que mis Electrode no hicieron bien su trabajo...-Se rió con sorna.



-Este no para de hablar todo el rato...-Susurró Ben.



- ¿Sigue hablando y le partimos la cara cuando menos se lo espere?


-Hecho.



-Pero lamento deciros que no tengo buenas noticias para vosotros. Moltres va a salir de su sopor en cuestión de segundos. En otras palabras...¡Llegáis tarde! -Exclamó, rematándolo con una risa de satisfacción, felicitándose por tal acto. Las llamas titilearon.



-¡N-no puede ser...!



-Cobarde...-Alcanzó a decir Ben y llamó mi atención con un gesto.- No está todo perdido, mira. Aún queda tiempo.- Y tenía razón, a pesar de too lo que había dicho seguía lanzando ondas de control, así que aún no habían terminado su cometido. Podíamos lograrlo.



-Decid lo que queráis, Rangers.- Dijo seriamente y nos lanzó una mirada fría.- Espero que sepáis cómo regresar, vuestros minutos de turismo por el Volcán Fascuas han llegado a su fin ¡Ya podéis ir bajando! ¡Y cuidado de no tropezaros!



-¡Ya está bien de burlarte de nosotros!- Estallé.- ¡Estamos aquí para proteger a Moltres de ti y de tus siniestros planes!



-¡Silencio! Je...Parece que me he topado con unos turistas que no temen por su suerte...¡A ver, vosotros!- Llamó la atención de los dos reclutas, que quedaron tiesos al oír su tono de enfado.-¡Haced el favor de enseñarles el camino a estos estúpidos turistas!- Los Nappers se colocaron entre Red Eye y nosotros, mientras él seguía lanzando ondas expansivas al Pokmon legendario.



-¡Al momento!



-¡Esperamos que hayan disfrutado de nuestros servicios y que nos envíen una postal desde su próximo destino: ¡Los infiernos! – Alzaron sus guantes de control y nos mandaron a dos Scythers que nos atacaron inmediatamente.



-¿Les mostramos nuestro poder de captura compartida?- Sonrió Ben. Asentí y alcemos a la vez los Capturadores.



-¡Captura...EN MARCHA! -Exclamemos al unísono, pulsando el botón que liberaba el disco y comenzamos a hacer círculos alrededor de aquellos bichos voladores de afiladas cuchillas. Fue fácil al fin y al cabo, gracias a Pichu la mayoría de la captura fue terminada gracias a sus potentes ataques eléctricos y sus notas traquilizantes. Una vez hecha, los Scythers se marcharon volando por la boca del volcán hacia el exterior y soplé el Capturador.



-Captura completada ¿Qué os ha parecido eso?



-Los Scyther...¡Los han capturado!- Exclamó la recluta, retrocediendo a la par, por el contrario, nosotros avanzamos terreno.



-¡Lider! ¡Lo lamentamos profundamente!



- Habéis perdido, así que ahora os toca bajar el volcán sin rechistar ¡Andando!- Amenazó Ben con una de esas miradas que me daban miedo hasta a mí.



Un nuevo temblor azotó el lugar. Miré a mis pies y a todos los lados, temerosa de perder el equilibrio en cualquier momento. Estábamos en medio de un lago de lava, en lo que parecía ser una isla conectada por un estrecho camino a la cueva de la que habíamos salido y el temblor, agravaba la situación. Red Eye se giró, dejando de molestar a Moltres, pero con una extraña sonrisa en el rostro. No...





-¡Ja, ja, ja! –Estalló en carcajadas.- Poco importa quién haya ganado o perdido ¡Admirad a Moltres! ¡Llegáis tarde Rangers inútiles!



La columna de fuego se quebró y de ella apareció un hermoso pájaro de ardiente, extendiendo sus grandes alas como lenguas de lava. Su presencia era imponente y majestuosa y una sola mirada suya te hacia retroceder. No...¡No me puedo creer que lo hayan logrado!



-¿¡Así que el único cometido que tenían tus sicarios era entretenernos para darte tiempo, eh?!- Exclamó Verán realmente enfadado. 


¿Cómo no estarlo? Apreté mis manos y cerré los ojos con fuerza ¿Habíamos...fallado? N-no, ¡No puede ser! Esto no se acaba aquí...¡Aun nos queda una oportunidad, tal vez, si averiguamos de él mismo la forma de terminar con todo esto y revertir el proceso haya una oportunidad...! Llamé la atención de Ben discretamente mientras los Nappers admiraban al legendario Pokemon y le conté lo que pensaba. Al principio dudó de ello, pero no nos quedaba de otra, y asintió.



- Ha costado más de lo que suponía, pero ya podemos decir que uno de nuestros planes a salido redondo. – Sonrió satisfecho uno de los reclutas. 



Moltres alzó el vuelo a baja altura y se dirigió en nuestra dirección a toda velocidad. Por suerte pusimos cuerpo a tierra a tiempo pero por unos segundos pensé que sus llamas me rozarían. Después de levantarnos rápidamente, ya habíamos perdido la pista de Moltres en el cielo, ya solo quedaban las ascuas que desprendía su cola, hasta se podría decir que la temperatura abrasadora del volcán bajó drásticamente al no sentir cerca la presencia de su Señor. 



-¡Eh, vosotros, manos a la obra con el siguiente encargo!- Ordenó a sus secuaces. Estos se colocaron una mano en la frente, como modo de respeto y Red Eye se subió a su dadajet rojo, flotando unos centímetros sobre el suelo. Corrimos hacia donde estaba, teníamos que impedir que se escapase.



-¡Ato ahí, Red Eye!- Le advertí.


-¡No deberíais darle la espalda a vuestros enemigos! Es de muy mala educación...-Ben se cruzó de brazos, con una sonrisa retadora. Hacerle cabrear era parte del plan.



-¿Pero no os cansáis de ser tan pesados?- Se burló sonriente. Parecía que disfrutaba cada minuto de su victoria.- ¡Charizard! ¡Enséñales a estos mocosos cómo saber darse por vencidos cuando les conviene!- De la nada apareció un Charizard furioso que se lanzó en mi ataque.



Vale, mal plan, muy mal plan. Con eso no contaba. Todo había sido tan rápido que no podía apartarme, era inútil, solo me quedaba recibir el ataque con los brazos como escudo. Cerré los ojos, esperando sentir unas garras incrustándose. Pero...no llegó...¿Qué? Abrí poco a poco los ojos, sorprendida. Estaba ilesa ¿Como era eso posible?...Por desgracia, me di cuenta tarde.



Él arqueó una rodilla y crispó la expresión, apretándose con fuerza un costado. No pude reaccionar, o sabía que hacer...y sin embargo esa herida seguía sangrando lentamente. El dragón alado se retiró junto a su dueño sin el más mínimo gesto de remordimiento y los dos se fueron volando a toda velocidad, dejándonos con un amargo sabor y el eco de su insoportable risa en el aire, flotando. Yo tan solo me dejé caer de rodillas, congelada. Sabía que al ser Rangers pasaban esas cosas, lo sabía...¿Pero tan directamente...? Es como si...no le importara nada...



 - ¡Asi aprenderéis a no meteros en mis asuntos, niñatos! ¡Hasta la vista Rangers!- Se despidió con otra de sus estresantes carcajadas y salió volando con su dadajet hacia el cielo a mucha velocidad.



-¡Es-espéranos! ¡Líder!- Exclamaron los dos reclutas, subiendo a sus dadajets grises y siguiendo a Red Eye de cerca.



-...¿B-Ben...? -Susurré con un hilo de voz. El mencionado se giró, intentando sonreír y ocultar su herida bajo el brazo. Unas lágrimas amenazaron con salir. Me partió el corazón verlo así y creo que a él también le pasaba lo mismo. Estaba en blanco.- ...lo...lo siento.



-¿Qué? Agh...-Intentó moverse de golpe, pro rápidamente el dolor volvió.- ¿Qué? N-no es culpa tuya...e-enserio, estoy bien. No es tan grave como parece...- Mentía, y descaradamente, pero no quería verla llorar, aunque no le salieran esas mismas palabras.



-¿Por qué te pusiste en medio? -Agaché la cabeza, no quería que nadie me viera. Odiaba ver a mis seres queridos así...por mi culpa.



-¿Recuerdas? -Esa respuesta me sorprendió. Levanté la vista, secándome con un brazo los ojos. Lucía una sonrisa.- ¿Recuerdas cuando tú hiciste lo mismo...? Es mi forma de agradecerte. -Aquello logró aliviar un poco mi shock y sacarme una muy pequeña sonrisa. Suspiré.



-Hay más formas de hacerlo...-Bromeé sin querer, ni sabía por qué lo había dicho. Él hizo ademán de reír pero acabó en la misma situación que antes. Con ayuda de unas rocas, ambos nos levantemos, mirando con cierta neutralidad el cielo.



-Se han escapado...Supongo que hemos fracasado. 


-Hey, no te preocupes por eso. -Le puse una mano en el hombro y me dirigí a Pichu.- ¿Puedo confiar en ti para que lo acompañes hasta el Unión? -El pequeño me asintió.- Perfecto.


-¿Eh? ¿Qué vas a hacer tú?


-Ovio. Perseguir a esos criminales.- Sonreí, con una mirada más animada, pero a la vez preocupada.


-A ver si comprendo...-Hizo gestos con las manos, algo confuso.- ¿Me estás diciendo que piensas ir detrás de ellos...después de ésto? - Asentí.- ¿No puedo hacerte cambiar de idea, cierto? -Negué. Era imposible y lo sabía.- Bien...entonces...-Suspiró y silbó tan fuerte que al principio no comprendía nada. Sin embargo, de la nada apareció un Staraptor.- Rapt, ayuda a Brisa.



-¡Staaaarrrr! -Ahora la sorprendida era yo.


- Tendrás que darles alcance volando, ¿no? -Sonrió y no supe agradecérselo de otro modo. Lo abracé demasiado fuerte.- Auch, auch... -Ups...Me disculpé con la mirada y mi compañero le quitó importancia.- Buena suerte.



-Gracias...en serio.- Sonreí y monté sobre Staraptor, emprendiendo el vuelo.- ¡Regresa al Unión! -Me despedí.



- ¡Igualmente! ¡Confío en los dos!- Nos animó desde abajo. No puedo negar que me preocupaba, pero estaba segura de que Eustaquio se encargaría.



-¡Vamos Staraptor! –Le animé y volamos más rápido, en su persecución. Las nubes pasaban a gran velocidad cerca de nosotros y en un par de minutos logramos estar a pocos metros de Red Eye en su huida por el cielo.- ¡Red Eye, detente!- Advertí. De repente dos Nappers se plantaron en frente de mí, saliendo de debajo de las nubes.




- ¡Nosotros seremos los que te plantemos cara!



- Prepárate para enfrentarte...¡A los hermanos Dada!- ¿Dada? ¿Qué clase de nombre era ese? No es que lo estuviera criticando...bueno, sí, pero solo un poco, ¿Y esa decisión, es que no se concienciaban de que íbamos a vencerles?- ¡Quedamos los segundos en el Concurso de Dadajet! ¡Casi nada!



-¡Ni el líder esta a nuestra altura si se trata de acrobacias aéreas!



-¡Pero eso lo vas a ver tú, aquí y ahora!



-¿Es que había dicho algo de después?- Los miré con los ojos de lado y una gota en la cabeza.



- ¡Nos has robado el protagonismo, esta si que te la cobramos!- Dijeron furiosos a la vez. ¿Pero esta gente no se enfadaba siempre por tonterías?...



Navegador: Se han detectado dadajets en las cercanías. Están cargando energía. Tened cuidado y esquivad los disparos de plasma.




-Ya hacia tiempo que no te aparecías por aquí. - Le reproché y de nuevo coloque mis dos manos sobre Staraptor, preparada para esquivar el cañón de plasma. Advertí a Staraptor y los Nappers empezaron a lanzar bolas de plasma directas hacia nosotros como su principal objetivo- ¡Izquierda!...¡Abajo y a la derecha!...¡Ahora gira en círculos y colócate arriba!...¡Abajo!...¡Mantente ahí Staraptor!...-Le iba diciendo para protegernos de los disparos, a medida que lo iba cumpliendo. Salimos ilesos de aquella vez, por suerte.



-Uhm...¿Crees que ha llegado el momento de retirarse? -Le comunicó a su compañero.



-¡No digas memeces, hermano! - Dijo el otro, también sudando la gota gorda.- ¡Aún nos quedan Pokemon para seguir atacando! ¡Adelante, Hoothoot, no os cortéis ni una pluma!



Una bandada de Hoothoot, entre diez y quince de ellos, se abalanzaron sobre nosotros. Dudaba de la eficacia del Capturador en las nubes, pero era la única opción que tenia para seguir adelante, asi que me armé de valor y lancé el disco hacia los Pokemon. Bastaron un par de círculos y se marcharon en diferentes direcciones. ¿Qué esperaban? ¿Qué tuvieran la fuerza de un Pokemon Legendario o qué?



-Pues ahora si que me temo que tendremos que recurrir a...



-Me duele en el ama reconocerlo, pero sí, tendremos que llamar a...



-¡Nuestras eternas rivales!- Exclamó uno, y bajó hacia abajo, ocultándose entre las nubes y desapareciendo.



- ¡Piensa que es nuestra única opción!- Se decía a si mismo el otro recluta.- ¡Le pasamos el testigo a las Campeonas del Concurso de Dadajet!- Dijo esto por último y se retiró también. ¡Por fin el camino despejado! Me dije a mi misma, y avanzamos unos metros mas pero cuando ya teníamos a Red Eye en el punto de mira...



-A ver...como lo digo...Hay una competición en la que se mide la pericia manejando un dadajet. El nivel es muy alto y...-Dijo nerviosa una chica que salió de la nada. Jo...que estaba ya muy cerca...



- ¡Pero mira que eres lenta!- Dijo otra chica que salió de entre las nubes.- Resumiendo...¡Somos las C.C.D!- Arqueé una ceja, confusa.



- ¿No te había dicho que ya está bien de abreviaturas? -Me miró la tercera de ellas, también salida de alguna parte. - ¡Ranger, prepárate para el asombro de tu vida! Somos las Campeonas de Concurso de Dadajet...¡Las hermanas Dada!- ¿Pero es que aquí no tienen otros nombres o qué? No sé, pero no pude evitar esbozar una sonrisa, al menos no soy la única que es muy poco original para los nombres...¿wiii?



o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o

Continuará...


Esto me hizo mucha gracia...XD



Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top