Capítulo 2: Secretos


"Bueno, ¿Qué jugamos hoy amigos?" preguntó Flora.

"¿Qué les parece a las escondidas?" propuso Dash.

"¿Otra vez? Ayer también jugamos a eso" dije.

"Además, hiciste trampa" agregó Ember.

"¿Trampa? ¿Cómo?" se rió Dash.

"Pues era el turno de Ember y te pasaste como una hora escondido en un lago" dijo Flora, "Ellos son Charmander, no pueden sumergirse en agua"

"Hey, pero tienen que admitir que fue un buen escondite"

"Sí, debido a tu ventaja acuática. No es un combate" dijo Ember.

"Está bien, está bien, juro solemnemente no volver a ocultarme en el agua"

"Está bien, pero para quedar perdonado, te toca contar" dije.

"Está bien, está bien, contaré" dijo Dash.

Una vez decidido quién contaba, nos pusimos a ello. Disfrutamos todos juntos esa misma tarde, eran momentos muy felices con mis amigos, pues solo éramos unos niños. Y tras largas horas de juego llego la tarde y el sol se estaba ocultando mientras veíamos el cielo

"Vaya" dijo Flora, "se pasó muy rápido la hora de jugar"

"Rayos, ahora que ya casi ganaba" dijo Dash, "solo me faltaba encontrar a Ember..."

"¡Aquí estoy!" gritó ella saliendo de un agujero debajo de una roca, "parece que encontré un nido viejo de Sandshrew que resultó ser un buen escondite"

"Me alegra haberlo pasado bien amigos" les dije a todos, "¿mañana a la misma hora?"

"Sí, con mucho gusto" dijo Ember, "es hora de volver, mis padres se molestarán si llego tarde"

Dash y Flora asintieron. Luego, ambos regresaron a sus respectivos hogares: el lago tortuga y el prado de flores. Por mi parte, Ember y yo tuvimos que regresar a las cuevas, al otro lado de un extenso valle donde practicaban los adultos de nuestra especie.

Mientras nos acercábamos a las cuevas, Ember me preguntó:

"¿Y bien Alex, ¿qué querías decirme el otro día?"

"¿Eh? ¿a qué te refieres?" traté de parecer desconcertado pues lo recordaba: era cuando casi se me escapa que ella me gustaba de verdad.

"Ya sabes... lo de ese día..."

"Esto... bueno..."

Estuve a punto de decirlo, cuando de repente la voz de mi madre me salvó de confesar mis sentimientos:

"¡Alex ven, es hora de que vuelvas a casa se hace tarde!" dijo ella, parada fuera de la cueva.

"Lo siento, Ember" dije apresuradamente, "mi mamá me llama, ¡ya voy!"

"¡Hasta mañana Alex!" dijo Ember, y se marchó a su propia cueva.


Yo entré a mi casa y, como de costumbre, papá volvía de su revisión diaria de que todo estuviera en orden en el bosque, el valle o la pradera.

"Anda debes comer tu cena y después irte a dormir para que mañana tengas otro día lleno de aventuras" dijo.

Yo obedecí a mi padre con una sonrisa, y los tres nos sentamos y cenamos. Luego, era momento de ir a la cama.

"Gracias mamá" le dije, agradeciéndole por tan rica cena, "Los quiero mucho a los dos"

Y diciendo eso, los abracé a ambos. Ellos me devolvieron el abrazo.

"Nosotros también te queremos Alex" dijo mi padre.

"Sí, así es" dijo mi madre, "ya bueno, es hora de irse a la cama"

Así lo hice, y me fui hasta un lado de la cueva, la cual era mi habitación.

Al cabo de un tiempo, me desperté de un sueño intranquilo, creo que tenía insomnio. Todo seguía igual: mi habitación, la cueva, todo. Necesitaba un cuenco con agua, el juego de escondidas me había dejado exhausto. Me dirigí lenta y cautelosamente hasta la cocina...

"No sé si deberíamos decírselo Ignus" dijo la voz de mamá, parecía triste "era muy pequeño entonces, y aún lo es"

"Lo sé, pero mientras más mientras más crezca, más le costará asimilar la verdad..." dijo la voz de mi padre.

Me quedé helado, sin duda mis padres estaban hablando sobre algo serio, porque nunca los oí tan preocupados.

"Tal vez debería contarle la verdadera historia..." continuó papá.

"¿Y cómo crees que reaccionará?" lo interrumpió mamá, "¿cómo crees que lo tomará si le decimos que antes era un bebé humano, y el Pokemon legendario Ho-oh fue el que logró transformarlo en un Charmander para que sea nuestro hijo? ¿Qué en realidad, no somos sus verdaderos padres?"

Me sentí increíblemente frío, a pesar del calor de mi colita. No podía creerlo... ¿en serio era adoptado? Y más aún, ¿antes era humano? Estaba impactado pues me enteraba de cosas que jamás imaginé que mis padres me ocultaran.

Tarde un par de minutos en asimilar todo eso más sin embargo comprendí que sus razones debían tener ellos para ocultarme esas cosas: seguramente sufriría siendo un humano o seguramente no tenga un lugar para vivir.

Decidí hacerme como el que no escucho nada regresando a mi habitación y fingiendo despertar dando un gran bostezo audible. Mis padres notaron que me había despertado.

"¿Qué es lo que pasa hijo?" preguntó mi padre mirándome despierto.

"Me desperté porque tenía algo de sed" dije, "¿puedo tomar un poco de agua, papá?"

"Toma Alex" dijo mamá, dándome un cuenco con agua. Me lo bebí rápido.

"Gracias mamá"

"¿Quieres que te acompañe a tu habitación hijo?" dijo mi papá.

"No papá, estoy bien me iré yo solo" le dije, "Hasta mañana"

"Duerme tranquilo, hijo" dijo mi mamá.

"Sí, no te preocupes mamá"

Y regresé a la cama muy pensativo. Pero al cabo de unos minutos, me dormí.

Al día siguiente no dude en contarles a mis amigos el descubrimiento que hice, pero ellos creyeron que no era verdad puesto que yo tendía a exagerar las cosas que yo escuchaba alguna que otra vez.

"Tal vez tus padres pelearon por otra cosa y tu tanto sueño tenías que seguramente lo mal entendiste" dijo Flora.

"O tal vez fue una pesadilla" dijo Dash

"Se los juro por mi colita encendida que lo que les digo es verdad" les dije.

"No sé si creerte, la verdad"

"Yo tampoco" apoyó Flora.

"Por favor, ustedes son mis amigos. No me atrevería a ocultarles la verdad" me defendí.

"Yo te creo" dijo Ember, quien había estado callada durante toda la conversación, "¿pero porque tus padres Pokémon te ocultaron todo eso?"

"Pues... no lo sé" dije un poco pensativo, "tal vez simplemente... porque no querían que lo supiera, tal vez porque querían protegerme"

"¿Y porque no se los preguntas?" preguntó Flora.

"No, no podría. Mis padres no están ni enterados de que yo sé todo eso. Además, me regañarían si les digo porque pensarán que yo los estaba espiando"

"Pero ellos ni tus padres son, bueno no tus padres biológicos" dijo Dash.

"No importa que no sean mis padres biológicos, ellos fueron los que me criaron y me dieron un techo donde vivir. Por eso, para mí, sí son mis verdaderos padres"

Hubo al menos un minuto de silencio.

"Bueno, dejemos eso a un lado" dijo finalmente Dash, "¿qué les parece si jugamos a unas carreritas?"

"Sobre la tierra, nada de agua" dijo Ember.

"Sí, y nada de trampas" dijo Flora, "¿vienes Alex?"

"Esto... sí, creo que será mejor jugar en vez de quedarme todo el día pensando" me animé.

Esos eran buenos tiempos que mis amigos y yo aprovechamos, claro que los buenos tiempos nunca durarían, puesto que nosotros no seríamos niños por siempre.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top