Capítulo 11: Sin miedo, ¡Ultra Evolución!
Uff, sí que me demoré en subir el capítulo. Espero que lo disfruten. Gracias a Andy24032007 por la sugerencia de los Pokemon que aparecieron en este capítulo.
Luego de abandonar Azurview, nuestros héroes recorrieron campos de hierbas no muy altas, con dirección al Este, donde les habían indicado. Según el mapa, les tomaría alrededor de una semana para llegar hacia la Aldea Tesoro.
Lo perturbador del viaje es que, según el mapa y algunas indicaciones que marcaban los caminos, deberían estar recorriendo campos repletos de flora exuberante como el Prado Néctar, pero en realidad estaban caminando a través de menos zonas verdes y más campos llanos, sin mencionar que algunos conjuntos flores estaban marchitas y árboles habían caído... ¿era todo aquello causa del mal en el mundo Pokemon?
"¡Cuidado!" les detuvo Dylan, cuando miró al frente.
Todos se detuvieron. Frente a ellos estaba una bajada bastante empinada y, terminada esta, un cráter tan enorme que había ocasionado un cañón. Bajando con mucho cuidado, se preguntaron cómo llegar al otro lado.
"Podemos usar eso" sugirió Sky señalando un árbol viejo y seco.
"Yo me encargo" propuso Mina, "¡A evolucionar!"
Mina se convirtió de nuevo de Nidoran a Nidorina. Y, usando su más potente cabezazo, impactó y derribó el árbol de tal forma que en un segundo tuvieron un puente para cruzar.
"Debemos ir de uno en uno" sugirió Rose al ver el delicado camino.
Sky podía fácilmente volar y acompañarlos en caso de que alguien tropezara, así que, con mucho cuidado, cada uno de ellos atravesó el puente. No obstante, cuando llegó el turno de Rex, este se apanicó mientras ponía una pata.
"No mires abajo... no mires abajo..." pensaba Rex mientras avanzaba en el tronco.
Pero cuando llegó a la mitad, una vibración llegó a los oídos de todos y, haciéndole perder el equilibrio. Entonces Rex resbaló y casi cae. Por fortuna, Sky quien parecía menos afectado, le sostuvo con una de sus garras para hacerle recuperar el equilibrio.
"Gracias..." dijo una vez terminado de cruzar el puente. Era obvio que aún le costaba enfrentar sus miedos.
"¡Ayuda! ¡Ayuda!" gritaba una vocecita chillona.
Era un Noibat, quien volaba de un lado al otro produciendo aquella vibración, en aquella especie, era común ese comportamiento incluso cuando estaba asustado. Por su aspecto sucio, parecía que acababa de salir de algún tipo de peligro.
"¡Oye!" le gritó Sky volando hacia él, "¡Cálmate! ¿Qué te sucede?"
El Noibat voló junto a Sky en dirección a los niños elegidos, pues eran los únicos que podían ayudarle.
"Mi colonia fue atacada por un Noivern" les explicó, "Era un simple Noibat antes y fue expulsado por nuestro anterior líder debido a una disputa que tuvieron. Pero volvió hace poco con sus ojos rojos de maldad y evolucionado. Derrotó a nuestro líder y ahora está abusando de mi colonia"
"¿De casualidad ese Noivern despide un aura negra a su alrededor?" preguntó Rex, ya recuperado.
"¡Sí! ¡Y ojos rojos brillantes! ¡Creo que es la causa de eso por lo que es poderoso!" aclaró Noibat.
"¡Un átomo oscuro!" gritaron todos
"Debemos ir a ayudar" sugirió Zach, "No es verdad, ¿chicos?"
"Sí" dijeron el resto.
"Muchas gracias..." dijo este.
Desviando su camino hacia el norte, los chicos elegidos siguieron a Noibat a través de un corto bosque, hasta que este se terminó y frente ellos se mostró una cueva curiosamente con un color azul brillante como si se tratara de...
"Esta es la mina Lapislázuli" explicó Noibat, "Hace tiempo que estaba deshabitada y mi colonia la ocupó. No solíamos tener visitantes desde hace tiempo, pero tiene el toque perfecto de luz y oscuridad"
"¿Lapislázuli?" preguntó Dylan al ver las rocas, "Woah, son minerales raros. Nunca antes lo había visto tan de cerca"
"Recuerdo que mi abuela me contaba que mi abuelo le regaló tenía un par de estos en aretes" comentó Mina, "Pero se perdieron y nunca más lo volvieron a encontrar..."
"Podrías llevarle un par" propuso Rose.
"Bueno... no creo que cause mal" respondió mientras tomaba un par de piedritas y las guardaba en la maleta, "Creo que le encantarán"
"Bueno, preocupémonos por las piedras más tarde" propuso Zach, "Hay que atravesar este lugar. Rex, ¿haces los honores?"
"Claro" contestó este, yendo primero. Al ser el único con la cola llameante, podía dar luz a los demás.
Caminaron así un rato (excepto Sky y Noibat al que se le oía su lento batir de alas). Extrañamente, la cueva no era tan oscura como se había estimado; y eso era tal vez porque algunos débiles rayos de luz atravesaban pequeñas grietas en las paredes. Esto, sumado a la luz que emitía Rex, les daba un ambiente libre de oscuridad, pero aún no se comparaba con el exterior.
"¿Tu colonia vive en lo profundo de esta cueva?" preguntó Zach.
"No..." comentó Noibat, "Deberían estar solamente estar en..."
Pero antes de que pudiera continuar, un zumbido pequeño se hizo perceptible. No obstante, este se volvió más y más fuerte hasta que hizo un ruido tan horrible que despidió una gran onda de energía que los expulsó a todos de la cueva a gran potencia. Cuando se recuperaron de aquel impacto (el cual les dejó una vibración en la cabeza de cada uno), se levantaron y se dieron cuanta de que no estaban solos: un Pokemon de cuerpo es color negro y morado y sus alas de un gran tamaño estaba cerca de ellos, inconsciente. Su apariencia recordaba vagamente a una gárgola. Era un Noivern.
"¡Jefe!" gritó Noibat (parecía el único que no estaba tan afectado por la vibración, "¿Se encuentra bien?"
"El desertor..." musitó este, "Ha convertido a nuestra colmena en..."
Varias vibraciones le cortaron, solo que no eran tan poderosas como la primera, pero eran demasiadas que todos tuvieron que taparse los oídos. Al segundo siguiente, una colmena de al menos una centena de Noibats salió disparado de la cueva. Cuando los chicos se recuperaron, notaron el peligro: cada uno de ellos tenía ojos rojos y un aura oscura poseyéndolos.
Sin embargo, el verdadero problema surgió (literalmente) de las profundidades: un Noivern más grande del herido jefe salió volando por encima de los demás Noibat, e igualmente estaba imbuido en oscuridad.
"¡Es él!" gritó Noibat.
"¡Únete a nosotros, Rye!" le dijo el Noivern, "¡Somos ahora más poderosos!"
"¡Soy fiel a mi colonia! ¡Jamás me uniré a ti!"
"Pues entonces, ¡desaparece!"
Con esa última palabra, el Noivern desertor ordenó a los Noibat que atacaran. Volviendo a aguzar sus sentidos, los chicos se prepararon.
"¡A evolucionar!" dijeron todos al unísono.
Y, como antes, todos evolucionaron a su forma superior: Charmeleon, Frogadier, Bayleef, Luxio, Nidorina y Tranquil. Luego, todos se distribuyeron para acabar con los Noibat.
"¡Hidropulso!"
Dylan saltó alto y lanzó un potente y concentrado disparo de agua hacia los Noibat, pero a penas de logró dar a dos o tres, pues estos se separaban y emitían ondas que dificultaba la concentración. Casi no ve a los cinco Noibat detrás de él.
"¡Látigo Cepa!"
Rose protegió a Dylan con sus enredaderas, y azotó a los Noibat desde una distancia prudente. Cada Noibat que caía desprendió un átomo oscuro.
"¡Gracias!" le dijo Dylan.
Por otra parte, los ataques eléctricos de Zach eran los más efectivos contra los Noibat.
"¡Impactrueno!"
Con un solo choque eléctrico, pudo derrotar a veinte Noibat. No obstante, el número de Noibat de la colmena de Rye (el Noibat amigo) era abrumador. En otra perspectiva, los demás también luchaban desesperadamente.
"¡Lanzallamas!"
"¡Picotazos veneno!"
"¡Viento cortante!"
Diez, veinte y hasta treinta Noibat cayeron derrotados con los ataques y la cantidad pareció mermar, pero de improviso, los chicos fueron derribados con la misma onda sonora que los expulsó de la mina Lapislázuli. Noivern estaba atacándolos a ellos ahora.
Rex intentó levantarse mientras veía al Noivern atacar a gran velocidad. No podía hacerlo más rápido, y se veía un doloroso golpe, hasta que el otro Noivern (el jefe de Rye) se interpuso y este resultó derribado en lugar de Rex.
"¡¿Tú de nuevo?!" gritó con enfado el desertor, "¡Eres un...!"
"¡Espada Santa!"
Un ataque cortante y brilloso de color azul claro salió del bosque cercano y le dio de lleno al Noivern. Asombrados por aquella repentina y milagrosa intervención, Rex, Mina y Sky vieron al Pokemon que lo había ejecutado: tenía un aspecto de un caballo, pero era azul y tenía un cuerno curvo en la frente, como una espada. Además, su crin era azul celeste y poseía una melena. No era un Pokemon oscuro, eso era seguro.
"¿Quién eres tú?" preguntó Rex, desconociendo a aquel Pokemon.
"Hola, me llamo Keldeo" le dijo este, ayudándoles a levantarse, "Estaba de reconocimiento y escuché un fuerte sonido en los alrededores, debió de ser ese tipo..."
"Keldeo, el aprendiz de los Pokemon espadachines" musitó el Noivern maligno quien sobrevivió a la Espada Santa de Keldeo, "Tú no tienes que nada que hacer aquí"
"Veo que eres más resistente un Pokemon de nivel superior normal" recalcó Keldeo, "Y te advierto que no soy un aprendiz, sino que soy un espadachín auténtico"
"Keldeo..." musitó el Noivern jefe, "El está... imbuido en oscuridad..."
"Así que son ciertos los rumores..." dijo Keldeo escuchando eso, "Hay oscuridad poseyendo a los Pokemon. Bueno, no importa: ¡yo te voy a derrotar!"
"¡No me atraparás!" gritó el desertor volando hacia el cielo y lanzando su poderosa onda sonora de nuevo.
El ataque fue bastante poderoso y casi los manda a volar a todos.
"¡Rayo burbuja!"
Keldeo contraatacó con un ataque de agua, pero Noivern lo esquivó en el aire. Mientras estuviera allí, sería más difícil de atacar.
"Si lo atacan desde el aire, podrán derrotarlo" les aconsejó el Noivern jefe, "Pero es tan fuerte que deben atacarlo con un ataque conjunto para vencerle"
"Yo puedo volar, pero no tengo tanto poder para vencerlo" dijo Sky, "Si alguien viene conmigo, podremos hacer un ataque conjunto"
"Yo soy muy grande para ir" sugirió Keldeo, pero luego vio a Rex, "Pero tú si puedes ir"
"¿Yo?" preguntó Rex, "Pero... me da miedo las alturas"
"Sé lo que es sentir miedo. Pero si no lo enfrentas, tus mejores amigos lo pagarán"
Las palabras de Keldeo crearon un punto de consciencia en Rex, dándole algo de valor. Algo motivado, Rex aceptó ir con Sky y volaron juntos en dirección hacia Noivern. El Charmeleon estaba aferrándose a las plumas de su compañero, mientras que trataba de no mirar abajo.
"Estamos cerca, Rex" le advirtió Sky. "¡Ataquemos juntos!"
"¡Vale!" confirmó Rex.
El Noivern oscuro los detectó de inmediato.
"¡Drago-aliento!"
Rex y Sky contraatacaron con un ataque combinado.
"¡Tornado!"
"¡Lanzallamas!"
Ambos ataques se combinaron en un torbellino de fuego. Pero, aunque el ataque combinado era potente, el poder de ese ataque fue más poderoso pues era de tipo dragón y estaba potenciado con una poderosa energía oscura. Aquel ataque superó al de los chicos elegidos y les hizo perder el equilibrio y, por fortuna, no cayeron. No obstante, Rex sintió miedo pues vio debajo de él.
"¡No!" pensó tratando de despejar su mente, "¡No tengo que tener miedo!¡Necesito concentrarme!"
"¡Cuidado!" gritó Sky.
Mientras trataba de mantenerse firme frente a su miedo, Noivern los atacó con potencia atronadora y les derribó. Ahora estaba perdido para Rex: iba a caer, iba a morir... pero en su mente no quería que eso pasara. Su valentía se estaba sobreponiendo al miedo... y se sentía un calor distinto en su pecho.
"¿Qué es esto?" se preguntó al verse.
Un símbolo brillante había aparecido en su pecho: este representaba una llama, un símbolo de fuego. Al mismo tiempo, su Pokephone comenzó a brillar más que nunca. Rex, sintiendo que era algo nuevo gritó:
"¡Ultra evolución!"
En ese instante, el símbolo se separó de su cuerpo, y junto al brillo del Pokephone, hicieron evolucionar nuevamente a Rex. Su cuerpo creció, su color cambió de nuevo a naranja, le crecieron dos cuernos y finalmente... alas. Ahora, gracias a su valor, no tenía que tener ningún miedo a las alturas, pues podía volar. Había evolucionado de Charmeleon a Charizard.
"Woah..." se dijo a sí mismo mientras miraba su nievo, "Se siente extrañamente más poder que antes. Y... ¡puedo volar!"
"¿Rex?" preguntó Sky, recuperándose, "Vaya, has vuelto a evolucionar. Esto debe ser a lo que se referían Lugia y Alakazam"
"¡Chicos! ¡cuidado!" les advirtió Mina.
Justo a tiempo, esquivaron el ataque del Noivern maligno. Ahora, la batalla había dado un giro. Sky parecía algo agotado, pero Rex había recibido un aumento significativo de energía.
"¡Pulso Dragón!" atacó Noivern.
"¡Lanzallamas!" contraatacó Rex.
Pero en lugar de lanzar un Lanzallamas, se formó una figura de fuego con forma de estrella que superó al pulso dragón e impactó fuertemente contra el Noivern oscuro. Este, había conseguido sobrevivir con ciertas quemaduras. No obstante, había llegado a sus límites luego del ataque de Keldeo y el de Rex. Entonces, en un último ataque, se lanzó contra el Charizard para intentar morderlo.
Instintivamente, Rex recordó su batalla contra el Charizard de Azurview y, esquivando la mordida de Noivern, le detuvo ambas alas y se elevó reteniéndolo, para luego lanzarse en picada hacia el suelo.
"¡Movimiento Sísmico!"
En el último segundo, Rex soltó al Noivern y este impactó fuertemente contra el suelo, cayendo derrotado y despojado de aquella energía maligna que lo controlaba. A su vez, los amigos de Rex también habían conseguido vencer y liberar al resto de la colmena de Rye.
"¡Rex!" gritaron todos al verlo aterrizar junto con Sky. Su forma de Charizard era increíble y se le había borrado del rostro el miedo a la altura. Sin embargo, al segundo siguiente, volvió a su forma superior y luego a la base.
"Vaya, fue genial mientras duró..." dijo Rex, respirando cansadamente, "Al menos, terminó"
"¿Puedes volver a ser un Charmander?" preguntó Keldeo sorprendido, "¡No creí que eso fuera posible!"
"No solo él" comentó Mina y todos volvieron a su forma base, dejando más sorprendido a Keldeo.
(Minutos después...)
"Les estamos en deuda por su ayuda" les agradeció el jefe Noivern recuperado y junto a sus hermanos Noibat, "Ahora podremos descansar tranquilamente en nuestro hogar"
"Ha sido un placer ayudar" les dijo Rose, "Ahora, debemos regresar a nuestro camino"
"¿A donde se dirigen?" preguntó Keldeo.
"Nosotros nos dirigimos a..." comenzó Zach, pero de inmediato, Rex y Sky se desmayaron.
Rápidamente se percataron de que algo malo les había sucedido: sus cuerpos mostraban signos de estar inmovilizados y algo enfermos. Noibat y Noivern reconocieron aquel síntoma.
"El ataque Drago Aliento del desertor" dijeron, "Causa parálisis, ¿tienen bayas Zrezas?"
"¡Sí!" respondió apresuradamente Rose mientras sacaba un par de la maleta y se los daba a ambos.
Rex y Sky comieron las bayas. No obstante, no mejoraron de inmediato.
"Esa energía oscura combinada con el ataque Drago Aliento debió causar un efecto diferente" sugirió Keldeo, "Necesitan tratamiento"
"Estamos muy lejos para regresar a Azurview"
"No hay problema, conozco a una Audino que vive cerca de aquí..." mencionó Keldeo.
"¡Keldeo!" gritó alguien detrás de ellos.
Un Pokemon alto se dirigía hacia ellos: tenía la apariencia de una gacela con cuernos verdes enrollados y una especie de enredaderas rosas alrededor del cuerpo. Sus pies parecían unas botas verdes.
"¡Virizon!" respondió Keldeo.
"Te estaba buscando, supe que había ido a investigar sobre esas extrañas vibraciones..." dijo Virizon.
"Lo sé, lo sé. Pero no hay tiempo" y señaló a Rex y Sky, "Están enfermos, Virizon. Hay que llevarlos con la señorita Audino en Paraíso"
La Pokemon echó unvistazo rápido de dos para analizar la situación y luego, aceptó llevar a loschicos elegidos a Paraíso junto a Keldeo.
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