A principios del siglo XX, se empezaron a fabricar las primeras pokéballs como medio óptimo para controlar a los pokémon y así obtener armas más efectivas en las guerras venideras. Este fue uno de los detonantes principales para la Primera Guerra Mundial, pues muchos países se vieron privados de dichos artilugios, y querían reclamar su derecho sobre ellos por la fuerza, o empezaron a fabricar los suyos propios por defecto y decidieron poner a prueba su efectividad de maneras poco éticas.

Durante el conflicto bélico, España se mantuvo apartada de cualquier relación con ninguno de los bandos beligerantes, pues habría perdido mucho más de lo que hubiera ganado, eligiera el lado que eligiera. Supo sacarle provecho a su posición neutral, pues así fue como un país atrasado en casi cualquier aspecto frente a sus vecinos, consiguió el acceso a las tan ansiadas pokéballs. Sin embargo, esto propició su declive al cabo de un tiempo.

Tras años de tensión entre los partidos políticos, y que el ejército incorporase en sus filas a los primeros entrenadores pokémon, durante Julio de 1936, comenzó la conocida y sangrienta Guerra Civil española. Esta enfrentó al Bando Republicano formado en torno al Gobierno por el Frente Popular, contra el Bando Nacional formado en torno al primitivo Alto Mando por la Junta de Defensa Nacional.

Una de las razones por las que empezó dicha contienda, aparte de los conflictos de lucha de clases, la guerra religiosa, el enfrentamiento entre fascistas y comunistas, y la Dictadura Militar contra la Democracia Republicana que atañen a la época en cuestión, fue la significativa represión del Gobierno contra el ejército, pues este adquiría cada vez más poder y prestigio dentro del país, así que les privaron de muchos de sus derechos y les prohibieron que contasen con los pokémon como armas a su favor, pues sabían que sería cavar su propia tumba a futuro. Lo que no sabían, es que su tumba ya estaba siendo cavada desde fuera.

Si bien en un inicio no había un claro vencedor debido a la falta de organización en ambas partes, y parecía que el Bando Republicano tenía las de ganar en un inicio por las ventajas con las que contaba, como los pokémon que habían estado preparando para la guerra a espaldas de la milicia, la cosa se tornó rápidamente a favor del Bando Nacional cuando el General Francisco Franco Bahamonde asumió el liderazgo, y la Alemania Nazi y la Italia Fascista le dieron todo su apoyo, que no incluía solo armas mucho más avanzadas gracias a su potente industria que les permitiría someter a distintos tipos de pokémon, sino una buena cantidad de pokémon propios mejor preparados junto a entrenadores mucho más competentes, contra los cuales no bastaban únicamente las armas convencionales pues había muchos capaces de soportarlas o incluso ser completamente inmunes.

En esta tesitura, el Bando Republicano se dio cuenta muy tarde de que la única arma efectiva contra un entrenador y su pokémon, era un mejor entrenador con pokémon más fuertes.

Para fortuna de muchos, y pese a la deuda por el apoyo recibido durante la Guerra Civil, Franco no metió a España en la Segunda Guerra Mundial, lo cual fue una decisión "acertada", ya que el país estaba en la ruina y habría acabado mucho peor de haberse puesto del lado de Hitler.

Aunque el Mundo entero ignoró a España al término de la guerra, el Gobierno aprovechó sus pocos recursos para mejorar lo poco que sabían sus dirigentes: sus capacidades para la lucha. No era de extrañar, pues el país se regía por una Dictadura Militar ultra católica, y las cosas que mejor sabían hacer eran rezar y luchar por su nación. Fue así como, pese a la mala racha que hubo durante los primeros años de la Dictadura, que el país impulsó lo mejor que pudo su ejército gracias a la tan demostrada efectividad de los Entrenadores Pokémon, llegando a ser uno de los países más poderosos del mundo en ese aspecto.

A inicios de la Década de los 70, el Alto Mando y el ejército del país se encontraban anticuados y obsoletos pese a su gran poder, y no fueron pocos los que pensaron que un cambio no vendría mal tras la muerte de Franco en 1975. Fue así que, cuando se redactó la Constitución de 1978, una de las cosas que más decidieron modificar era la estructura del Ejército.

El Alto Mando había sido signo de veneración junto al Dictador y su Dios todopoderoso, lo cual daba mala impresión a los más progresistas y al pueblo en general. Entendían que los que tenían que estar arriba debían ser personas corrientes, admirables sí, pero humanas a fin de cuentas. Gracias sobre todo al por aquel entonces Consejero del Gobierno, Alfonso Nicolau Eimeric, surgió la idea de cómo debía formarse la milicia en aquel entonces.

Los "jóvenes" que de verdad quisieran servir a su país debían demostrar que de verdad lo amaban, y para ello, debían conocerlo bien y sin distinción de territorios. Esto se llevaría a cabo con el sistema de líderes de gimnasio de cada provincia; estos serían entrenadores veteranos capaces de evaluar el progreso de los jóvenes en base a la cantidad que ya hubiera derrotado, así como aconsejarles en su camino. Una vez derrotados los 49 líderes del país, todos aquellos que lo hubieran logrado se deberían enfrentar en Madrid, en la Capital de España, durante la Liga Pokémon. Al término de esta, los entrenadores serían recompensados con opciones de empleo acordes a su progreso y logros, independientemente de no haber avanzado mucho en el Torneo o de no haber entrado siquiera, para que no hubiera demasiado resentimiento entre aquellos que no hubieran cumplido con las expectativas pero que hubieran dado parte de su vida por el país a fin de cuentas.

Alfonso Nicolau se propuso a sí mismo como el primer Líder de Gimnasio de una provincia, Salamanca, y escogió a la mayoría de los que consideró los más aptos para ostentar dichos cargos en el resto de regiones.

Tras unos años de preparación, la primera Liga Pokémon se celebró en España en 1982, dando como vencedor al vigente Campeón y actual Jefe del Estado Mayor de la Defensa, Álvaro Javier Cánovas del Castillo y Luna; así como a la mayoría del Alto Mando Actual:

Ignacio María Sabatel de la Fuente Jiménez Sagasta (el Empecinado Patriota) como el Jefe del Estado Mayor de la Guardia Civil.

Arturo Marín Salmerón de Rojas (el Rey del Mar Mediterráneo) como el Jefe del Estado Mayor de la Armada.

Sergio Montero Barroso de Azcárraga (el Señor de la Tierras Ibéricas) como el Jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra.

Fernando Félix Aznar de Palomares (el Mago del Cielo Español) como el Jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire.

David Guerra de Cervantes Sotelo (el Salvador del Relámpago Peninsular) como el General Jefe de la Unidad Militar de Emergencia.

El puesto de Director del Centro Nacional de Inteligencia iba a ser otorgado a Jacobo Centeno Azaña, pero cierta mujer ocupó antes ese puesto pese a ser mucho más joven: Marta Auxiliadora Sánchez Caballero (aunque cambió su apellido en honor a uno de los mayores héroes caídos durante una contienda, su marido, Antonio Jesús "López" Brenes) pues esta demostró que valía mucho más para el cargo tras su gran aportación en los atentados del 11M, y que amaba a su país por encima de sus propios hijos mellizos.

Y es que ninguno de los miembros se ganó sus títulos por su triunfo en la Liga. No, se lo ganaron demostrando nuevamente su valía en una serie de conflictos ajenos al país en los años posteriores, como lo fueron la Primera Guerra del Golfo (1990), la Guerra Civil Somalí (1993), las Guerras Yugoslavas (1995) o las Guerras de Afganistán (2001) e Irak (2004).

Actualmente, en 2016, los 7 miembros ostentan su cargo con total legitimidad, y lo ejercen con toda la intención de seguir ayudando a su país, el cual es de los más prósperos del mundo desde los últimos años. Tal y como había esperado el actual Líder de Gimnasio y Rector de la Universidad de Salamanca, Alfonso Nicolau, la situación social es aparentemente estable, gracias a que las distintas ramas del Ejército que él mismo ayudó a reformar y consolidar hacen su trabajo de manera sobresaliente, y las generaciones más jóvenes les tienen como modelos a seguir, aunque la mayoría de las historias que cuentan sobre ellos sean más leyendas que hechos verídicos.

No obstante, nada es perfecto ni todo el mundo puede estar contento. Las disputas políticas jamás han cesado entre los partidos de distintos extremos, y esto alcanza normalmente a la población para que quieran tomar cartas en el asunto saltándose la Ley. Por otro lado, una de las mayores amenazas internas que se tuvieron que frenar fue la de ETA, que fue prácticamente disuelta en 2010 gracias a la intervención de cierto joven determinado a implantar el orden y a hacer justicia con las víctimas; joven que, a día de hoy, es el tercero al mando del ejército y Líder de Ciudad Real. Por no hablar de los constantes atentados de la organización terrorista paramilitar conocida como Al Qaeda, la cual tenía a España como uno de sus mayores enemigos, pues en muchas de sus regiones, el Catolicismo extremo seguía teniendo mucho poder e influencia en su población.

De cualquier modo, todas estas no eran más que nimiedades comparadas con lo que suponía la influencia de muchos de sus propios compatriotas con puestos importantes dentro del país, los cuales no todos ejercían sus cargos con las mejores intenciones, y sus actos no siempre se podían considerar del todo "lícitos". Esto era algo que casi todos ignoraban, los que lo sabían hacían la vista gorda y solo unos pocos lo sabían pero que no sabían cómo proceder; no era para menos, pues el poder de controlar a la gente por todos los medios a su alcance era algo que no les era desconocido a ninguno, y también sabían que no debían subestimarlo.

Antes de la medianoche, el teléfono sonó en el taller subterráneo de un hombre de avanzada edad.

-Dígame - preguntó con voz temblorosa el anciano al coger el teléfono.

-Anselmo, ¿ya te has enterado? - pregunto el hombre con voz áspera e irritada.

El anciano suspiró profundamente aliviado, pues se temía una mala noticia o algo peor.

-Así es Leo, ¿Dani está bien? - le preguntó ahora con preocupación.

-¡Está en un hospital, con las costillas fracturadas y una hemorragia interna! ¿Cómo coño va a estar bien? - le respondió alterado en un arrebato de furia.

-Tranquilo, tu hijo es fuerte, igual que mi nieto y todos sus amigos. Me han dicho que están fuera de peligro, y que una de las mejores Doctoras del país va a hacerse cargo personalmente.

-Oye, - continuó con intención de discernir en ciertos detalles aparte - ¿no creerás que esto es cosa de esos viejos enemigos tuyos?

-Lo dudo, pero estoy seguro de que hay muchos interesados en el trabajo que estamos realizando juntos. Y si el ataque fue por esa razón... no te ofendas, pero veo más probable que a tu hijo se le escapase algo en algún momento, y que le escuchase gente que no debía. Igualmente veo improbable que fuera por esa razón.

-No voy a negarlo, habla muchas veces sin pensar. Pero en serio, nos la estamos jugando demasiado con este proyecto. Sino sale bien, podríamos ganarnos la ruina, tanto para nosotros como para nuestras familias. Estoy dispuesto a hacerlo, como siempre, pero si pongo en riesgo a mi hijo, olvídate - le dejó bien en claro antes de continuar -. Si te sirve como pista para imaginar con quién estamos lidiando, los chicos dieron ciertos detalles que Armando ya me ha hecho saber: ¿nunca has tenido una disputa con alguien de ojos dorados?

Anselmo quedó dubitativo varios segundos, pensando en quién pudiera cumplir en su descripción con un detalle tan particular. Cuando por fin dio con la respuesta, una mezcla de terror y rencor se apoderaron de él.

-Espero equivocarme, pero hace muchos años tuve la desgracia de coincidir con el que actualmente ostenta el mayor cargo religioso de toda España.

Leonardo Muñoz Heredia sabía a quién se estaba refiriendo, y aquello le hizo soltar un aspaviento como si fuera de las insinuaciones más absurdas que había oído.

-Sí, tú y la religión católica tenéis vuestra historia. Pero estás acusando al Arzobispo Mayor de Santiago de Compostela y Cardenal con mayor poder y posibilidades de convertirse en el próximo Papa. Permíteme dudarlo.

-Yo no he dicho que sea él, solo respondía tu pregunta. Es la única persona que he conocido con ojos dorados, y aunque no le estoy acusando de nada, tengo entendido que tiene bastantes familiares...

-¿Y crees que alguno haya podido tener algo que ver?

-No lo sé, pero recuerdo que tenía cierto interés por... Zapdos.

-¿Zapdos el ave legendaria de la tormenta?

-Sí, decía que era un signo del Fin del Mundo, y que debía dar con él para someterlo... no sé, locuras de fanáticos religiosos supongo. Me ponen enfermo, así que no les presto mucha atención, y menos a mis años.

-Independientemente, ¿Cómo es que sabes que hay muchos interesados en nuestro trabajo?

-Porque un tipo muy extraño, encapuchado, vino hace cosa de un mes. Dijo que representaba a la rama científica de una organización, y que les vendría muy bien nuestra ayuda, dado nuestro historial.

-¿De qué organización hablaba? Si eran científicos encapuchados me huele más a secta que otra cosa.

-No me dio el nombre, aunque dijo que él se llamaba Killian, y que su jefe había estudiado nuestro historial y había quedado sorprendido, remarcando eso como algo excepcional.

-¿Nuestro historial, excepcional? Pero si Rotom está en secreto a buen recaudo en manos de aquel chico de Murcia, y ni siquiera hemos logrado hacer que Magearna funcionara, y ha quedado registrado como un fracaso anónimo ¿Qué interés pueden tener en nosotros?

-A ver, lo de Magearna no podemos decir que sea un fracaso total, dado que las Coránimas son funcionales y podemos hacer que tengan muchas aplicaciones más allá de poner en marcha a marionetas arcaicas destructoras, y en cuanto a lo otro... igual confían en nuestras habilidades, no se puede decir que no tengamos ideas buenas.

-Anselmo, yo tendría cuidado con ese tipo de gente. Si se enteran de lo que tenemos entre manos con los "Maestros de Ilusiones" irán a por ellos, y no podemos dejar que les pongan más en peligro de lo que ya están.

-Respecto a eso, todavía les queda su escondite en Córdoba, y allí no les pueden tocar. Por lo pronto centrémonos en ir a Ronda, que Álvaro ya se ha asegurado de que muchos de los chicos vengan, y tendré que compensarles por su ayuda en calidad de guardaespaldas.

-Está bien. Al menos es una excusa para que mi hijo me vea haciendo mis experimentos como cuando era pequeño - aceptó con ensoñación.

-Decidido pues, iremos a ver a los Zoruas, y nos aseguraremos de que todo salga según lo planeado - concluyó colgando el teléfono, ansioso por recuperar el sueño profundo.