Andas en mi cabeza

Esa apariencia carcomía lo sublime y extasiaba lo impune, un pequeño gesto de avaricia dislumbraba tu humanidad. Sí, demasiado completo complacía el gesto inmoral. ¿Pero quién se atrevería a irradiar tal vigorosidad ajena al cegarse por la ignorancia.

Devoraste mis palabras, ser de tremenda capacidad bestial.

----

"La sangre que se ha derramado es el producto que el mismo demonio en sí ha tentado"

O esos eran mis pretextos para aminorar mis actos... cuando en el juego de la verdad clandestina el más susodicho es victorioso, pero esos no son prioridades frecuentando una presencia monótonamente sublime. En sus ojos podrías apreciar ira y euforia.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top