Hazme sentir que llego

y te alegras

que, con mi presencia

te agitas,

que mi aroma te perturba.

Hazme sentir

que te inquieto.

Que, con mi mirada

 te enciendo,

y con mi tacto

 te enloquezco,

cuando me empeño

en amarte.

Y hazme sentir

que me recuerdas si me alejo

que me piensas,

si me ausento.

Que me necesitas

si me marcho.

Hazme sentir

que soy

lo que necesitas

para vivir.