Generalmente la guerra surge por una persona corrupta qué sólo piensa en acabar con él que está por de bajo de él.

Al tener ese tipo de pensamientos ambiciosos, él deseo por tener más lo cegara y corrompera hasta qué su final llegue, pero para qué él logre su objetivo necesitara seguidores qué  tengan una ambición parecida a la suya y los motive sin importarles lastimar a su propia gente.

Aunque inclusive ellos deben de tener visión clara, porqué si sólo piensan en matar personas terminarán siendo desechados por sus amos.

En el corazón es dónde las guerras se ganan, es una expresión tan literal pero cierta. Pues si un gran número de personas se unen formando una alianza para pelear por sus ideales, el destino estará de su lado y saldrán victoriosos.

Aunque es cierto qué llegar al fin de una guerra no es cosa fácil. Tienen que pasar varias adversidades y años para llegar a la tempestad.

En una guerra se pierden vidas, seguridad,  estabilidad, y muchas otras cosas. Varias personas se mueren con la esperanza de ver a su país en libertad una vez más, y otros que la tienen no la valoran, tal parece que no podemos vivir sin una guerra en nuestras vidas.