Fue una ceremonia blanca. Muy blanca. Tsuna no pensó que Reborn tuviera un gusto tan especial para los detalles, pero fue un lindo descubrimiento.
Era su boda de ensueño, con flores, música, regalos y muchas reverencias hacia su persona. No pudo evitar reírse cuando vio llegar a sus padres y su abuelo quienes estaban en completo shock al verlo tan feliz en medio de ese show

—Ya ves porqué insistí
—Sí, abuelo —sonrió
—Con Reborn nada te faltará. Además es un romántico, aunque no lo parezca
—Lo sé
—Se enamoró de ti solo con verte de lejos una vez y prometió volverte poderoso y temido como nadie. Eso asusta un poco, pero mientras seas feliz, está bien
—Reborn es un hombre muy poderoso, no es así?
—Es un mafioso, pero es buen tipo. Lo considero como familia
—Gracias, abuelo. Ha sido divertido
—Estaré feliz de decir algún día que mi nieto es el omega más poderoso de Italia y Japón
—Abuelo... nuestra familia también tiene oscuridad?
—Sí. Y no pude cambiarlo. Espero no te moleste
—No... Voy a aprovecharlo
—Ahora ve y desposa al más grande asesino
—Sí!

Así lo hizo. Sonrió durante la ceremonia, cuando le cedieron el anillo, cuando le besaron las manos con devoción y cuando le dio un beso amable para sellar su matrimonio

—Sé el más temido jefe —le susurró Reborn—. Y déjame acompañarte en el camino
—Por siempre — sonrió—. Ayúdame a destrozar todo lo que odio
—Será mi más grande placer