Primer Día de Clase
Me llamo Hiro Hamada, tengo 17 años, estudio en la más prestigiosa escuela de magia llamada Pumpkin Castle, estoy especializado en hechicería de invocación y de ataque.
Hace unos años había descubierto a mi hermano Tadashi usando magia cuándo un par de ladrones entraron en la cafetería, Tía Cass y yo habíamos estado completamente atónitos, pero después nos comentó que nuestros padres eran magos, mi hermano tenía que seguir esperando si yo presentaría algunos síntomas. Pero los presente semanas después cuándo levite al pobre de Mochi, lo bueno es que Tadashi estaba en casa, si no el pobre estaría aún flotando por toda la cafetería.
Entonces decidí irme a estudiar a este colegio, dónde nuestros padres estudiaron, aprendí muchas cosas y además conocí a nuevos amigos, Hipo especialista en los animales, y por ende conoció a su gran compañero Chimuelo, ese dragón cuando me ve ama lamer me y mi amigo de infancia Kubo el cuál se especializa en manejar objetos a su manera por medio de su shamisen, él siempre me ha acompañado hasta en las situaciones más extrañas, supe de su magia cuando entre a esta escuela, nunca me molestó el aue no me dijera, porqué siempre sentía algo especial en él.
Hoy es el primer día de clases, después de nuestras vacaciones de verano, ya extrañaba estar de vuelta, en este nuevo curso tendríamos nuevos profesores, nuevos cursos y actividades fuera de la escuela. Yo estoy emocionado por las expediciones, muchos rumorean ir a diferentes mundos para investigar nuevas criaturas. Eso me podría servir para comenzar mi libro de hechicería hecho por mí.
Y ahora aquí estamos, frente a la puerta del colegio, estoy emocionado y nervioso a la vez.
-¡¡Hey Hiro!!!!- oí una voz llamándome.
-¡¡Hipo!! ¡Que bueno verte!- choque mi mano con la de él- listo para comenzar nuestro nuevo ciclo.
-Claro que sí, estoy emocionado escuché sobre los posibles expediciones a otros mundos, yo espero ver más dragones, para ir a mostrárselo a mi aldea.
-Oye hablando de dragones, ¿Dónde esta Chimuelo?- miré por todos lados buscando al dragón, pero sólo lograba ver a más alumnos en el camino.
-¡ah! Lo lleve a las granjas, para que se quedé allí hasta el final de clases, no quería que hiciera algunos desastres, hoy amaneció más animado.
-Ya veo, en el receso vamos y lo visitamos- en eso una pequeña figura de una ave de papel voló sobre nosotros, acompañado de unas notas de un shamisen a lo lejos, entonces miramos a donde regreso la ave y allí estaba mi otro amigo.
-¡¡Kubo!! ¿Cómo estás?
-Hola chicos, bien, contento de volverlos a ver- nos dio un pequeño abrazo a cada uno- mi abuelo les manda un saludo, ah y -busca entre su mochila- estos amuletos son de la suerte.
-Dile a tu abuelo que muchas gracias-dijo Hipo tomando su amuleto.
-Tal vez le enviemos una carta, más tarde- dije pensando en cómo enviarlo, algunas aves de la escuela aún no han llegado.
-bien, ya tengo el horario,-sacó Kubo una hoja- bien entonces nos toca en el salón de hechizos de defensa.
-Vamos entonces- dijo Hipo comenzando a caminar adentro.
Pasamos por algunos pasillos, en donde los vitrales dibujan algunos sucesos de la historia del colegio, como la gran batalla de magos, el primer regalo del mundo de las hadas o la ciudad de las sirenas que aún no ha sido explorada.
Además, los candelabros en el techo brindaba mucha luz que podías ver más allá del pasillo hasta llegar a la gran biblioteca.
Nosotros debíamos subir unas escaleras en forma de caracol, que nos llevan al segundo piso, cerca de la torre de vigilantes, allí se encontraban algunos grupos de alumnos, y nuestro salón estaba allí.
Al entrar a nuestro salón, todos nuestros compañeros hablaban de sus vacaciones, las voces de todos inundaban la habitación, tomamos nuestros asientos que eran ubicados en la primera fila, nos encantaba estar allí por ambas cosas: una de que estaba cerca a la puerta y dos nos salvamos de las explosiones con algunas pociones.
-Oigan, dicen por ahí que tenemos un nuevo maestro ¿Será cierto?- dijo Hipo acercándose con nosotros.
-Bueno, dicen qué fue un alumno muy dotado y que ahora es uno de los más jóvenes- acompaño Kubo en la plática.
-Pues tenemos que esperar y ver si es cierto ¿Y qué hicieron en sus vacaciones?
-Yo descubrí un nuevo refugio de dragones junto a mi mamá, tuvimos que cuidar algunos bebés, esta mordida me lo dio uno de ellos- nos mostró su brazo derecho, se veían unas pequeñas marcas de colmillos, pero no eran tan graves.
-wooooow- dijimos unísono Kubo y yo.
-Yo y mi abuelo, fuimos a la aldea a hacer algunos shows de cuentos para niños, y otro para el grupo de tercera edad, uy me dolieron mis mejillas por un par de días, y aprendí hacer nuevas canciones para crear objetos con papel.
-Eso suena emocionante, bueno yo en mis vacaciones, no hice mucho, estuvimos patrullando la ciudad de costumbre, pero descubrimos algunos ataques de duendes en la Universidad de mis amigos, pero no fue mucho.
-Esos duendes siempre haciendo problemas, uy allí viene el profesor-hizo Kubo una seña hacia la puerta, mis ojos se abrieron grandes cuándo vi quién era nuestro nuevo profesor.
-Buenos Días chicos, soy su nuevo Profesor de hechicería de defensa, Tadashi Hamada.
-¡Tadashi!- grité un poco bajo que solo mis amigos pudieron alcanzarme a oír.
- Tu hermano es nuestro profesor, que genial- dio unos pequeños brinquitos Kubo.
-¿No es emocionante? Tu hermano y tú estudiando juntos- dijo Hipo tocandome el hombro.
-Si...eso parece- no me creía esto, por eso actuaba extraño en la mañana, de seguro quería ver mi reacción y burlarse de mí más tarde.
- Espero llevarnos muy bien, si tienen alguna duda, no tengan miedo en preguntarme entendido, bien comenzaremos con nuestra clase.-acomodó sus cosas en el escritorio, y me miró sonriéndome y haciéndome una seña.con el pulgar arriba. Perfecto mi hermano mayor será mi profesor, pero entonces se comenzaron a oír algunos murmullos de mis compañeras, algunas decían lo lindo que era mi hermano. Puag, empiezan las moscas a revolotear.
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Las clases comenzaban irse rápidamente, tuvimos otros profesores que eran nuevos, cómo el Profesor Héctor, proveniente de México experto en hechicería a través de la música, era extraña pero muy eficiente, con ella podías controlar a las más fuertes bestias con un par de tonadas. Aún que cuándo intenté hacer uno, hice bailar a uno de mis compañeros dando giros en el suelo, que al final término yendo a la enfermería.
Y cómo no olvidar a nuestra Profesora Imelda, que nos enseñó a utilizar objetos como modo de ataque, otros hacerlos explotar o arrojarlos con mayor fuerza, allí Hipo logró arrojar un pequeña caja de metal a lo lejos hasta que cayó en la cabeza del Profesor Héctor, la profesora lo felicitó.
Aunque estaba muy feliz de que la profesora Callagan nos volviera a enseñar, pero esta vez solo comenzamos con teoría para comenzar a invocar portales a otros universos. Sabía que esta clase me gustaría y en un futuro, tal vez lo utilice.
El receso había comenzado, y nos dirigimos al patio central de la escuela, hoy todos estaban muy animados, mucho murmullos se escuchaban por todos lados, nosotros nos fuimos a sentar debajo de un árbol que estaba allí, siempre nos gustaba ir a ese lugar se estaba más tranquilo y a Chimuelo le gustaba subirse entre las ramas para dormirse.
-Uff, al fin tenemos paz- dije recargandome en el tronco del árbol.
-Jaja apenas llevamos la primera ronda y ¿ya buscas paz?- dijo Hipo colocándose a un lado mío.
-No pero, ya los comentarios de las chicas me tenían harto por mi hermano.
-¿Estás celoso?- dijo Kubo soltando unas leves risas.
-No pero, ellas no son dignas de estar detrás de mi hermano.
-Si, como digas- dándome una sonrisa sarcástica el chico del dragón.
-Bueno, bueno está bien, que tal si los relajo un poco- comenzando a tocar su shamisen, dando algunas notas leves y suaves, haciendo que algunos papeles que estaba por allí tomarán formas.
Me encantaba oír como Kubo nos relajaba en estas situaciones, nos mostraba algunas historias, pero esta vez está melodía me hacía sentir diferente. Una de las figuritas de un chico parecía que bailaba sólo pero entonces se topó con otra pequeña figura igual de un chico, que chocó y se vieron frente, y entonces comenzaron a bailar juntos. Las dos pequeñas figuras se veían felices, sin importar nada, una de ellas se veía más enérgica y mientras qué el otro se veía tímido y reservado, pero aún así se complementaba. Eso era lo que me hacía sentir diferente, como desearía conocer a alguien así.
-¿Hiro?- dijo Kubo deteniéndose.
-amm si que ...¿Qué pasa?
-Estabas poniendo una cara algo...triste- dijo Hipo mirándome de nuevo.
-¿Lo estaba haciendo?
-Si- dijieron los dos chicos al mismo tiempo.
-Eh...no nada solo pensaba, pero no es muy importante.
Los dos chicos se miraron entre sí, lo sabía no me habían creido, pero aún así continuaron con lo suyo, ¿Qué me estaba pasando? Si todo esta bien, bueno espero que sólo sean cosas mías.
Al regresar a nuestra clase, Kubo e Hipo se habían adelantado a la clase, mientras que yo regresé de nuevo al patio, ya que Hiro Hamada había olvidado su mochila, Dios jamás olvidaba mis cosas, pero esta vez lo hice, cuando llegue, estaba mi mochila en el árbol dónde estábamos sentados.
Al tomar mi mochila, el viento comenzó a soplar, pero de pronto escuché unas notas, si eran unas notas de una guitarra, pero miré por todos pero no miré a nadie, estaba solamente yo. Aún la melodía se escuchaba, caminé en dirección de esa melodía, me sentía atraído, como si me estuviera llamando.
Cuándo iba doblar en dirección a las habitaciones, miré a un grupo de chicos guiados por un profesor parecía que les estaba mostrando el lugar, tal vez eran nuevos alumnos, los tres eran de color moreno, dos de ellos eran más altos que el otro, pero entonces allí parecía que mi corazón se detuvo, un lunar cerca de sus labios, dejaba ver un pequeño oyuelo en su mejilla, su pelo estaba un poco alborotado, sus ojos eran de un color café que dejan mostrar un hermoso brillo, llevaba en su espalda una guitarra blanca.
Mi corazón, estaba acelerado, pareciera que estuviera en un trance, no podía moverme, pero esos ojos me vieron directamente. El chico se detuvo, me miraba atentamente, nuestras miradas estaban entrelazadas, él me hizo un movimiento con su mano, me estaba saludando, y me dio una leve sonrisa, igual respondí algo tímido, pero otro de los chicos que se parecía a él me miró y parece que hablo algo, y los dos continuaron su camino.
Ahora estaba allí parado, mi corazón latiendo a todo su esplendor, y mis mejillas las sentía cálidas, lo más seguro mi color estaba a flor de piel. Soy Hiro Hamada y he quedado hechizado por un chico desconocido.
Continuará...
Helloooo, es mi primera vez haciendo un Higuel xD , pero bueno se que les sonará a alguna película por allí de magia, pero de allí surgió esta historia :3, espero hacer lo mejor. Espero que les agrade.
Notas:
Aquí Tadashi esta vivito y coleando :3 lo necesitaba aquí.
Habrá personajes de muchos otros ships.
Así que nos vemos en el sig. Cap. :3
Beka-san~
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