Soy un perdedor que te ama
Si, soy una miseria, una miseria
Para ti, soy una molestia, soy un extraño
Pero en este momento tú eres lo único que necesito

La mamá de Chanyeol estaba sentada platicando con Baekhyun, mientras Yoora y Chanyeol preparaban el té.

—¿Me vas a explicar? —preguntó la chica.

—No —contestó sin voltear a ver a su hermana—. No hay nada que explicar, hace mucho que salgo con él y bueno ya es hora de que lo presente. Nada fuera de lo común.

—Pero te vas a casar, Chanyeol. ¿Cuándo pensabas decirnos? ¿Acaso lo ibas a ocultar siempre? Él debería esconderte a ti, no tú a él. Es tan hermoso, parece un muñeco.

No lo iba a negar, Baekhyun era lo más cercano a una belleza extraordinaria, pero habían personas que por más bellas que sean no solían atraer, aquello era lo que le sucedía a Chanyeol con el de ojos grises. Recuerda que Minseok quedó fascinado con tal imagen, al igual que Kris, pero a él no le atrajo o, a lo mejor, tenía tantos problemas en la cabeza como para fijarse en el bello chico que lo miraba con ojos soñadores.

Chanyeol salió de la cocina llevando las tazas con él y se sentó a lado de Baekhyun, quien platicaba cómodamente con su madre. Su mamá, por el contrario de Yoora, se veía tranquila e incluso feliz.

—Baekhyun es un encanto. ¿Por qué no nos habías presentado? —preguntó la señora Park.

—Porque sentía que no era el momento, pero creo que ya llegó —Chanyeol suspiró ante lo siguiente que diría—. Queremos casarnos.

—Chan, creo que es muy pronto no tenemos mucho dinero ahorrado y bueno, ahora no estamos en nuestro mejor momento —contesta la madre de Chanyeol con evidente preocupación.

—No se preocupe, madre. Platicando creímos que lo mejor sería un pequeño almuerzo solamente con mis padres y ustedes —contesta Baekhyun tratando de calmar su angustia—. Todo será algo muy sencillo, además el juez podrá ir a mi casa. Será muy íntimo.

Chanyeol miró como Baekhyun hablaba con mucha ilusión ante tal acontecimiento y él estaba demasiado a ajeno a toda esa situación e incluso estaba a punto de arrepentirse, pero Baekhyun complicó todo al venir a su casa y él le completó presentándolo como su prometido, estaba más que enterrado en esa situación.

—Madre, sé que está saliendo del hospital, pero quisiera llevarme a Chanyeol unos momentos, queremos decidir una fecha pronta y demás —pide Baekhyun.

—Baekhyun… ¿No estarás embarazado? —Yoora soltó ese comentario y su hermano terminó escupiendo su té—. Uy... creo que sí.

—No —responde el joven de ojos claros—. ¿Puedo llamarte Yoora?

—Claro, pero preferiría cuñada.

—Bueno, cuñada —Baekhyun se sonrojo un poco con eso—. Nosotros no estamos esperando un hijo, aunque espero eso pueda ser en unos años más, por ahora solo somos nosotros adentrándonos en una aventura.

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Ambos subieron al auto y Baekhyun realmente no sabía dónde llevarlo, no quería ir a un restaurante caro porque no quería ofender a Chanyeol, pero tampoco conocía lugares sencillos pues no los acostumbraba, realmente era de salir muy poco.

—¿A dónde vamos? —La voz de Chanyeol lo hizo sacar de sus pensamientos.

—Yo... realmente, no sé.

—¿Entonces estás manejando sin dirección? —cuestiona el más alto.

—Más o menos.

Sus padres invirtieron en un pequeño restaurante a las afueras de la ciudad, realmente tenían muchos negocios en Seúl, pero el más sencillo fue ese y fue por pura nostalgia. Era un pequeño lugar que encontraron por casualidad y justo cuando comían les hablaron para decirle que habían sido aceptados para una adopción, para ellos era especial y cuando se enteraron que cerraría por que el dueño estaba en bancarrota decidieron invertir para que ese lugar no cerrara y fue ahí donde Baekhyun llevó a Chanyeol.

Era incluso más chica que la cafetería en donde trabajaba Chanyeol, tenía solamente seis mesas y una decoración relacionada con el mar, a pesar de todo el dinero, Baekhyun no conocía el mar y por eso era uno de sus lugares favoritos.

—Joven Byun. —Ahí estaba Sehun, quien era el hijo del dueño. Al igual que Chanyeol, Sehun no era alguien de su clase social—. Que bueno que vienes.

—Hola, Hun —saluda sonriente—. No vuelvas a decirme Joven Byun, eres el novio de mi mejor amigo.

—Lo siento, Baekhyun. —contesta sonriente—. En un momento te llevo el menú.

—Gracias.

Chanyeol se sentó en una de las mesas y Baekhyun siguió el acto, tenía una carpeta en la mano donde el primero estaba seguro que venía el contrato que marcaría el principio de todo. Vió que Baekhyun se paró rápido y salió del lugar, le extrañó ver qué regaba un árbol y con la misma entró.

—Siempre que vengo le echo un poco de agua —empezó a explicar mientras no quitaba la mirada de él—. Ese árbol, mis padres lo sembraron cuando llegué a ellos.

—¿Cuándo naciste? —pregunta Chanyeol.

—Sí, algo así.

—Bueno… Empecemos, Baek.

Le entregó las hojas y solo leyó dos párrafos, no creía que Baekhyun fuera una persona tan cruel como para tenderle una trampa, así que lo firmó todo ante la mirada atónita del chico que tenía frente a él.

—No leíste nada.

—¿Algo de qué preocuparme? —A Baekhyun le dolía mucho no ver ninguna expresión en el rostro de Chanyeol.

—No, nada —contestó con una extraña mueca.

—¿Cuándo conoceré a tus padres? 

—Yo les dije que cualquier día podría ir a casa contigo, hay cosas que necesito que confirmes, al menos el hecho de que tenemos un año de noviazgo.

—Está bien.

—Me gusta el color blanco —Empieza Baekhyun—. Además mi cantante favorito es Ed Sheeran, me gusta cantar y bailar, tengo alergia a los pepinos y siempre he querido tener un perro.

—¿Por qué me dices esto? —dice Chanyeol mirándolo.

—Supongo que son cosas básicas que debes de saber, a lo mejor mi padre se pondrá loco con las preguntas, después de todo soy su único hijo y en sus palabras su más grande tesoro, se supone estamos perdidamente enamorados.

—Tienes razón.

—Quiero saber más de tí, Chanyeol. —El nombrado no entendió porqué el chico ponía tanto esfuerzo en algo que sabía no funcionaría.

—Me gusta tocar la guitarra, me gusta cantar y mi color favorito es el negro —el alto se siente fastidiado y no puede disimularlo.

—Oh, bueno.

Después de leer el menú, ambos pidieron hamburguesas con refresco y comieron en silencio. Aún no había nada en común, eran dos extraños que estaban a días de contraer matrimonio por un trato, no por amor.

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Baekhyun le dijo a Chanyeol que estuviera listo a la una de la tarde, pues pasaría por él para

 llevarlo a casa de sus padres, la diferencia entre una relación real y ésta era muy notoria. Se supone que al conocer a tus suegros debías sentir nervios de caerles mal o bien, por el contrario, Chanyeol estaba casi fastidiado de que eso pasara, sin embargo, se arregló lo mejor que pudo y esperó a Baekhyun en la puerta de su casa.

El chico era puntual y a la una en punto estaba estacionando. Chanyeol se subió al carro sin ni siquiera saludarlo, lo que a Baekhyun le dolió un poco, pero se atrevió a darle un beso en la mejilla el cual no fue rechazado, simplemente vió que a su pareja le dio igual.

La casa de Baekhyun era lo más parecido a un castillo de cuento de hadas y eso tenía una explicación, según el papá de Baekhyun.

—Quiero que sepas, Baek, que en serio lo voy a intentar, es solo que nunca he tenido una relación o me ha interesado alguien como tal, solo tenme paciencia. —La sonrisa de Baek era muy bonita a los ojos de Chanyeol y era la primera vez que se fijaba en eso.

—Confío que este tiempo va a pasar rápido y tu llegaras a sentir algo por mí —declara Baekhyun esperanzado.

—Yo también lo espero.

Bajaron del auto y, aunque Baekhyun tenía miedo, fue Chanyeol quien tomó su mano y le devolvió la sonrisa. El corazón de Baekhyun empezó a latir con velocidad porque era la primera sonrisa que le estaba dedicando, una sonrisa que era solo para él.

Baekhyun abrió la puerta y la casa dejó sorprendido a Chanyeol; realmente parecía un castillo por fuera y también por dentro, incluso había un enorme candelabro en medio todo era sumamente impactante. El bajito lo dirigió por otro lado y solo lo siguió, esperaba encontrar un enorme comedor al ver tan impresionantes cosas, por el contrario, era una mesa que, si bien era lujosa, era del tamaño de la que tenía en su casa.

—Ji Hee —gritó Baek y apareció una mujer detrás de él —. ¿Dónde están mis papás?

—Le pidieron a Taekwon que pusieran una mesa en el jardín, ellos están ahí afuera esperándote —contestó la mujer.

—Oh, gracias. Por cierto, él es Chanyeol, mi prometido —Baekhyun enrojeció al declarar aquello.

—Un honor conocerlo —dice la mujer con una reverencia.

—El honor es mío —Chanyeol devuelve el gesto.

Después del saludo fue nuevamente jalado por Baekhyun por la casa y llegó a un enorme ventanal que dejaba ver el jardín y dos personas paradas una frente otra tomándose las manos, de repente sintió su mano ser liberada y vió como Baek corría hacia donde estaban sus padres y los abrazaba. Los tres eran una postal maravillosa y de repente se sintió envidioso, algún día quería algo así. Sus pies se movieron solos hacia la escena y una mirada acompañada de una sonrisa fue lo primero en posarse en él.

—Aquí está mi rival —dijo el hombre frente a él.

—Un gusto señor Byun —hizo una reverencia de noventa grados y cuando se paró vió la misma cálida sonrisa.

—Se supone que yo sería el único hombre en la vida de mi hijo, pero salió al mundo a encontrar un chico igual de apuesto —contestó el padre de Baekhyun.

—Tu eres más apuesto amor mío —la señora extendió su mano para que Chanyeol la tomara y así lo hizo—. Byun Baekhee, pero llámame madre.

—Gracias seño... Madre.

—Pasemos a la mesa, tenemos un rato esperándolos —dice la mujer.

—Perdona, padre, yo le dije a Chanyeol que a esta hora, ustedes no suelen ser puntuales —Baekhyun ve de manera "juzgadora" a sus padres.

—Cuando se trata de algo importante para ti, siempre lo seremos.

Chanyeol pudo entender porque Baekhyun haría todo por "conseguirlo" sus padres lo adoraban como si de un dios se tratara, estaba seguro que si pudieran besarían el suelo donde su hijo caminaba e incluso estaba seguro de que, si se hubiera acercado a ellos a pedirles un Chanyeol, lo hubieran conseguido.

La comida fue muy tranquila para la sorpresa de Chanyeol, los señores Byun no eran presumidos o alzados, eran unas personas muy agradables. Le contaron anécdotas vergonzosas de su hijo y esa vez en donde casi mueren de un susto por una travesura, no pudo evitar reír con cada ocurrencia de Byun SeJun. Después de comer, el señor Byun le pidió que por favor lo acompañara a dentro para platicar, Baekhyun se puso nervioso por eso, pero Chanyeol aceptó.

Lo llevó a la biblioteca que tenían dentro del lugar, a diferencia de esas imágenes que tenía de las bibliotecas de los ricos, esta era del tamaño de una habitación sencilla, donde dos paredes estaban cundidas de libros y las otras dos de fotografías, de viajes y de Baekhyun en toda etapa de crecimiento.

—Es hermoso, ¿no? —Preguntó el señor Byun mientras observaba una foto de su hijo—. Este fue el día que llego a casa.

—Se ve tan pequeño —contesta enternecido con la imágen que ve.

—No creyeron que fuera a vivir, su madre falleció en el parto y bueno… —Chanyeol casi se va de espaldas cuando escuchó eso y trato de no lucir sorprendido, se supone que debería saber estas cosas.  No quiero decir que fue una bendición que pasara, pero todo sucede por algún motivo. Recuerdo esa llamada donde nos dijeron que por fin tenían un bebé para nosotros, en el momento que mis ojos se cruzaron con su carita, supe que sería el amor de mi vida.

—Es adoptado —lo dijo más para él que para su "suegro"

—Eso lo hace más especial, es casi como el matrimonio, elegir a la persona para tí, también es un proceso complicado y mientras más esperas para estar juntos más crece el amor.

Se supone que las cosas deberían ser así y en su caso no lo era.

—Baekhyun es lo mejor que me ha pasado en la vida —dice SeJun mirándolo—. Y espero que sea lo mejor que te haya pasado en la vida igual, para ser sincero de dónde vienes no importa siempre y cuando lo ames y lo cuides con la misma devoción que nosotros, los señores Byun, lo hacemos.

—Le prometo que intentaré darle todo el amor que se merece.

—Y eso es lo único que importa, toma —dijo entregándole una cajita que Chanyeol estaba seguro que contenía un anillo dentro— Con este anillo le pedí a mi esposa que estuviera conmigo toda su vida, quiero que se lo des a Baekhyun.

—Pero señor... yo no puedo. —¿Qué excusa inventaría?

—Este anillo fue hecho con todo mi amor, yo participé en el proceso para que pase de generación en generación, así que es hora de que lo utilice mi hijo.

—Señor, no puedo aceptar eso.

—Yo sé que puedes considerarlo mucho, pero...

—Yo no podría costear esto, no es algo que yo le daría a Baek porque no salió de mi —"Porque no lo amo con la misma devoción que usted" pensó—. Yo ya he comprado un anillo, es más sencillo, pero es el que quiero darle.

—Chanyeol…

—Me gustaría que fuera en una semana, si a usted le parece.

—Creo que eres la persona indicada para mi hijo, eres un muchacho que vale mucho la pena, sean inmensamente felices —SeJun estrecha la mano de su yerno y sonríe—. Nos vemos aquí en una semana juntos a tu madre y hermana, ahora seremos una familia.

Salieron de la biblioteca con dirección al jardín y ahí estaba solamente Baekhyun mirando al cielo con una preciosa sonrisa, porque ahora a Chanyeol la sonrisa del chico le parecía preciosa.