Me doy cuenta que cuando escuchas un "te quiero", un " te amo", tu mente se vuelve loca y tus manos se tensan, los pies fríos, inamovibles las partes de tu cuerpo, cómo diciéndome, que acabas de decirme que no lo creo .

Recostarme contigo, es cómo un refugio, una protección, siento mi corazón alterado si me tocas la cabeza o las manos, son sensaciones inexplicables, que realmente uno cree interpretar bien más no lo sabes.

Al estar a tu lado, no puedo dejar de pensar en el cariño que me haz dado,ese amor, ese aprecio,  eres cómo un regalo, una reliquia de valor sagrado, que va, nada se compara con tu esencia, porque tan solo esto es una metáfora de la elocuencia  .

GABRIEL CORONADO ...