-Tsunayoshi...

-Largo- su voz sonó ronca y agotada.

Mukuro no podía ver bien su estado físico por la obscuridad en la habitación y realmente se preocupo al notar el amargo aroma del omega.

Se había tomado en serio las palabras de Hibari y prometió hablar de nuevo con el castaño. Dejo al cachorro a manos de Hibari de nuevo, para poder hablar bien y después regresaría por el bebé.

-Tsuna, quiero hablar contigo.

-No quiero hablar nada- gruño y se oculto mas en su nido.

Mukuro no se podía acercar demasiado porque el omega no le había permitido entrar a su nido, así que tomo una silla y se sentó a una distancia considerable.

-Siento lo rudo y egoísta que fui estos últimos días, lo tome mal...- no volvió a haber respuesta- no quiero compartirte y... saber que si yo hubiera estado a tu lado, nunca le hubieras dado una oportunidad a Hibari, me enoja mucho más.

Volvió a haber un largo silenció, algo que le dolió al alpha, el siempre había sido el refugio de Tsuna, nunca le ocultaba nada y... ver como lo ignora al ser esta vez el culpable, le jodia.

-Lo siento... de verdad- rogó- te amo Tsuna, aun necesito tiempo para analizar esto, pero te prometo que lo intentaré.

No hubo respuesta, pero esta vez se preocupo. El sonido de su respiración se debilitaba, algo andaba mal. Muy a su pesar entro al nido, arriesgándose a ser golpeado, pero no paso... el cuerpo de Tsuna ardía y efectivamente ni siquiera estaba consiente, no sabia si se desmayo o solo duerme, pero corrió con el castaño en brazos por ayuda.

Algo no estaba bien.

Pasaron unas horas en lo que Shamal trataba a Tsuna y definitivamente la solución es algo que no quería escuchar.

Sus feromonas estaban inestables, aun estaba sensible por el parto y pasar por situaciones difíciles lo ponía en riesgo... claramente Mukuro se creía el riesgo.

-Tsuna aun necesita a su alpha y si esto sigue así, rechazara al cachorro por completo.

-Alguna solución?

-Ambos son sus alphas?- pregunto con normalidad.

Mukuro se iba a negar, pero Hibari asintió primero, negandole la respuesta y amenazandolo con la mirada.

-Si, lo somos.

-Pero no tiene sus marcas.

-Aun estabamos en el proceso.

-Ya veo, pero el bebé es tuyo no?- pregunto viendo al de ojos bicolor.

-Si...- contestó algo incómodo.

-Y tu tienes alguna conexión con él?- le pregunto al pelinegro.

-No, solo fui su alpha durante el embarazo.

-Ya veo. Pues si no lo van a marcar en próximos días, la solución mas simple es que establezca un vinculo contigo- le dijo a Hibari.

-A que se refiere?

-Al no tener marca, su omega esta protegiéndose con el vinculo mas cercano, que es el padre de su cachorro.

-Yo?- dijo Mukuro.

-Si, pero parece ser que algo no esta bien entre ustedes... ya que los dos son su pareja, Hibari deberá establecer también un vínculo para estabilizarlo.

-Y que debo hacer?

-Sexo...- contestó con simpleza.

-Que?- ambos alphas reaccionaron.

-Acaba de dar a luz, no lo haré.

-Ni yo lo recomiendo, por lo menos deberás esperar un mes para que su cuerpo funcione, pero deberemos forzarlo a aceptar al cachorro por completo.

-Él... solo esta teniendo un mal momento, aceptara al bebé- trato de convencerlos Hibari.

-No es que no quiera al niño, su cuerpo lo rechaza por... porque el alpha lo rechaza. Se esta preparando para aceptar un compañero que lo proteja y acepte... pero un cachorro es una amenaza. Entienden?

-Eso quiere decir que se esta hundiendo en sus instintos?- pregunto nervioso Mukuro.

-Si, es la mejor forma de verlo.

-Pero... yo acepte al cachorro- se defendió Hibari, no quería sentirse responsable del rechazo, ese bebé también era suyo.

-Aunque tu lo quieras, no lo vuelve tuyo... la sangre que corre en él, no es tuya. Es del alpha que lo esta rechazando.

Eso fue un golpe duro para ambos. Hibari porque lo estaba intentando, estaba intentando reconstruir su familia, su manada... la relación con Tsuna y el cachorro y algo que no dependía de él, lo estaba arruinando y Mukuro por otro lado, se odió por estar poniendo a su hijo en una posición difícil, en un rechazo que no se merecía y a Tsuna por ponerlo débil y hacerlo sentir mal... no quería que sus acciones fueran a tal grado, se volvió egoísta en un mal momento.

-Hay otra opción?- pregunto Mukuro, tenia que arreglarlo.

-Pueden convivir ambos con él, al mismo tiempo. Algo que le haga sentirse seguro, pero para este punto, aun es necesario la vinculación con el otro alpha...

-El cachorro... será aceptado si hacemos eso?

-Si...

-Bien, es todo lo que importa- dijo aliviado.

-Estas seguro? No te importa lo otro?

-Claro que me importa! Odio compartirlo y ahora odio que tu seas la solución de un problema que yo cometí, pero si mi hijo y Tsuna estarán bien, es lo mejor que puedo hacer.

-Bien, solo... quería estar seguro.

-Me voy a comportar- murmuro- así que concentremonos en cuidar de Tsunayoshi.

-Bien...

-Entonces- interrumpió el médico - por ahora lo mejor es mantenerlo bien alimentado y ambos entren en su nido cuando le den al cachorro, aunque lo odie no pidan permiso para entrar en su nido, impregnenlo y déjenlo adormecido para que pongan al cachorro de nuevo en sus brazos, y así poco a poco hasta que él lo haga de manera natural.

-Bien...

-Él estará entre consciente y entre sus instintos, tienen que hacerlo comprender la situación cuando lo vean presente.

-Podemos con eso.

-Y... probablemente a su tercer mes su ciclo regrese, si ya rechazo al cachorro, su instinto por ser criado regresara antes, así que... cuando hagas lo que te sugerí... probablemente...

-Quede embarazado de nuevo- la frase la completo Mukuro, al ver el estado de shock del otro alpha.

-Se... seguro?- pregunto Hibari.

-Es probable y aun si no queda a la primera, estarás en ese proceso hasta hacerlo estabilizar su estado.

-Ya...

Ambos alphas tenían mucho que pensar, pero solo tenían una cosa clara.

Tsuna era su prioridad.