3- "First meeting of The Sad Princess and The Winter Soldier"


Friday guiaba a Crystal por los pasillos del complejo cuando se topa con Wanda que la notaba algo desorientada.

-¿Te puedo ayudar en algo?- pregunta la sokoviana.

-Busco a Wanda, seré su compañera de cuarto- responde la chica seria.

-¡Tu debes de ser Crystal, la princesa triste!- Crystal la mira neutra- Yo soy Wanda- se presenta amable.

-Soy Crystal, y lo de la princesa triste no es así... bueno... no tan así- contesta tímidamente y la pelirroja intenta acercarse pero la castaña retrocede- Lo lamento pero... No me gusta que las personas me toquen- comenta la chica.

-Ah, no te preocupes. Lo entiendo-sonríe- ¿Te ayudo con las maletas?- pregunta.

-No, no es necesario. Gracias- agradece.

-No hay de qué. Ven, te llevo a la habitación- la castaña la sigue con las maletas algo temerosa con la idea de compartir cuarto con alguien. Hace años que la chica era solitaria con todo el mundo y había olvidado por completo lo que era la convivencia. Sin duda sería complicada la estadía de la chica en el complejo.

En eso salen de un cuarto Sam y Bucky, que conversaban de cosas triviales cuando el moreno ve a la castaña muy seria tras de Wanda y decide saludar de una forma peculiar. Bucky al ver a la chica quedó algo intrigado con la seriedad que transmitía al igual que su belleza pero logró disimular con éxito.

-¿Pero dónde queda el funeral?- pregunta el moreno a la chica burlón al verla vestida de negro. La castaña acostumbraba vestir con botas, jeans, blusas y chaquetas de cuero de diferentes diseños pero en color negro. Raras veces la chica usaba ropa de color. Al oír aquello la chica lo miró llena de ira y no se quedó callada.

-De hecho voy a ir a tu funeral si vuelves a molestarme- responde sumamente molesta a lo que el moreno sólo levanta las manos y retrocede sorprendido para diversión del pelinegro que estaba en silencio- ¡Y tú que miras!- recrimina la chica mirando al ex soldado.

-Yo no estaba haciendo nada- responde el pelinegro tratando de no reírse de Sam y hacer enojar más a la chica, quien sólo asintió en silencio mirándolo unos segundos a los ojos y luego volvió a seguir a la sokoviana.

El pelinegro volteó disimuladamente observando irse a la castaña, no podía negar que la chica era muy bella, y que al ver en sus ojos mar había notado una inmensa y profunda tristeza en ellos. El hombre no se quedaría con los brazos cruzados y averiguaría más sobre la joven.

-Parece que ya te quitaron el puesto del más amargado del complejo- dice Sam rompiendo el silencio a lo que Bucky sólo niega con la cabeza serio pero riéndose en sus adentros.

-Agradece que sigues vivo, y que no esté yo en este momento en tu funeral por causa de la chica- comenta el hombre alejándose del lugar dejando al moreno sólo.

...

-Entra- Wanda abre la puerta y ve un cuarto espacioso con dos camas grandes- Espero y te sientas cómoda, te hice lugar en el armario para que pongas tus cosas- avisa mientras la chica se instala.

-Siento mi actitud allá afuera... No socializo mucho- comenta y sube la maleta a la cama vacía para empezar a desempacar.

-Siento todo lo que estás pasando, Crystal- la castaña la mira con sorpresa- Tienes todo mi apoyo- sonríe.

-¿De qué estás hablando?- pregunta sorprendida. Ella no podía saber...

-No pude evitar leer tu mente... Necesitas ayuda y poder hablar- aconseja la sokoviana.

-No, no lo haré. Sus vidas estarán en peligro por mi culpa. Todo lo que me pasó es sólo mi culpa- se sienta abrumada en la cama con la cabeza baja.

-La culpa es sólo de él. No entiendo de donde sacas eso de que es tu culpa, eres la que menos culpa tiene en todo esto- murmura la sokoviana guardando su distancia.

-Es mi culpa porque fui y soy débil, porque debi de actuar de otro modo. Pero de nada sirve llorar sobre la leche derramada... Sólo me queda vivir con esta mierda en mis hombros- comenta resignada.

-No seas pesimista, Crystal. Siempre hay esperanza para todo, nosotros te cuidaremos aunque no confíes en nosotros. Estás a salvo aquí. Sólo debes abrir tu corazón y todo estará bien- aconseja.

-Lo siento pero nadie jamás lo sabrá, y espero que tú no se lo digas a nadie. Jamás te perdonaré si lo haces. Iré a tomar un poco de aire- advierte seria antes de irse. La pelirroja soltó una gran bocanada de aire, sería difícil convencerla de que lo mejor sería hablar pero mucho más difícil sería hacer que confiara en todos.

...

Crystal recorría el complejo con sumo cuidado esperando no toparse con alguien e incomodarse. El lugar era muy grande y no encontraba la salida al jardín. Necesitaba tomar aire ya que se sentía sumamente sofocada ante tantos cambios bruscos en su vida.

-¿A dónde vas tan misteriosa, chica seria?- pregunta una voz a lo lejos. Crystal maldice en sus adentros por no ser discreta y voltea al ver al hombre pelinegro de hace un rato.

-No es asunto tuyo- responde a la defensiva y el hombre sólo sonríe levemente y se acerca a ella lentamente.

-Veo que no olvidas la escena de hace rato. Lo siento, mi colega suele ser muy idiota- la chica sólo asiente y mira por todas partes- ¿Te pasa algo?- se acerca y esta retrocede.

-¿Porque haces tantas preguntas?- pregunta la chica algo harta.

-Porque quiero conocerte, ¿no es obvio?- la mira- No me presenté como debía hace rato, pero lo haré en este momento si no te molesta. James Bucky Barnes, pero puedes llamarme Bucky- se presenta y estira su mano. La chica lo mira seria sin moverse.

-Crystalia Amaquelin, pero para todos soy Crystal. No me gusta el contacto físico de ningún tipo- responde al ver su mano extendida y este la baja lentamente.

-Pues mucho gusto Crystal, espero verte más seguido por aqui- contesta con una media sonrisa.

-No lo creo, no me gusta socializar, me abruman las personas-comenta- ¿Puedes decirme donde queda la salida al jardín?- pregunta muy seria.

-Se dice por favor, linda- responde cruzado de brazos divertido cosa que empezaba a molestar a la castaña de sobremanera.

-¿Puedes decirme dónde queda el jardín, por favor?- pregunta rodando los ojos- Y no soy para nada linda- añade molesta.

-Queda saliendo por ese pasillo a la derecha. Y si eres muy linda, y algún día te convenceré de aquello- responde- Nos vemos, Crystal- se va el hombre dejando a la chica algo petrificada por su presencia, cosa que ignoró a los segundos y siguió las indicaciones que el hombre le había dado.

Bucky, por su parte sonreía levemente. La chica nueva lo había cautivado por completo, y su voz era muy parecida a la de su sueño la noche anterior. Su actitud le recordaba tanto a él mismo al comienzo de su camino a la libertad años atrás, cerrado, desconfiado. Se acercaría despacio a la chica y estaría a su lado siempre, sería complicado pero no imposible.

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