—¿Estabas demente? —Jisung cerró su casillero y vio a chan.

Sus lentes oscuros estaban en la punta de la nariz, su boca estaba abierta y sus ojos veían con incredulidad al alfa frente a él.

Los pasillos estaban vacíos, nada más estaban Jisung y Chan fuera porque llegaron tarde a su clase de contabilidad.

—Mira, sé que empezó siendo muy raro pero tengo esperanza que él me acepte de verdad.

Jisung rió.

—Chan, no lo entiendes, él ya está perdido por ti. —Jisung sonrió. —Solamente dile lo que sientes.

Chan se recostó contra los casilleros, dejándose caer lentamente al suelo.

—¿No crees que se asustara? ¿Qué pensara que tome provecho de la situación? —chan tenía sus manos en su cabello.

Jisung se sentó junto a él.

—Lo puede llegar a confundir, pero chan, de verdad le gustas. —Jisung le sonrió. —a ti te gusta Felix, tú le gustas a Felix... Solo dile.

Chan vio a Jisung.

—A todo el mundo le gusta Felix. —chan vio hacia enfrente, viendo a ChangBin, uno de los jugadores de fútbol.

El alfa había empezado a odiar a chan desde que confirmo su relación con Felix.

¿Por qué?

El alfa estuvo detrás de Felix por meses pero Felix nunca le hizo caso.

El alfa justo ahora estaba viendo a chan.

¿Qué trama?

Después de unos minutos el timbre de que la clase había llegado a su fin se escucho, haciendo que chan se levantase para ir al aula de enfrente donde estaba Felix.

Al ver a Felix salir de su salón lo vio feliz con su mochila amarilla, sus vans negras y falda negra con su suéter blanco.

—¿Cómo estuvo cálculo? —chan pasó su brazo arriba de los hombros de Felix.

—Del asco, reprobare. —el omega se acurruco junto con el alfa, dejando caer su cabeza en el espacio del cuello de chan.

Chan sonrió suave.

—Eres muy inteligente, de seguro pasaras la materia. —el alfa se detuvo y puso al omega frente a él, dejo un beso suave en los labios del omega.

Felix sonrió y beso otra vez a chan, poniéndose de puntitas para poder abrazar los labios de chan quien sonrió.

El alfa abrazó la cintura del omega y siguió besándolo.

Un pequeño empujoncito por parte de SooBin detrás de ellos llamo su atención.

Tenía puestas unas alas de cupido, junto con unos lentes de corazón.

Considerando la personalidad fría, neutral y extremadamente seria del alfa esto daba demasiada risa.

Su rostro se mantenía serio a pesar de la diamantina rosada en sus pómulos.

Chan supuso que estaba vestido así porque San Valentín estaba cerca.

—¿Ahora eres cupido? —rió Chan.

SooBin le gruño.

—El evento de beneficencia de YeonJun es el viernes, temática de San Valentín obviamente. —señaló los anteojos de corazón. —Los omegas de blanco y los alfas de rojo, betas pueden ir como ellos quieran.

SooBin les entrego dos folletos de color rojo intenso, tenía corazones blancos por todas partes y los datos de cuando seria el evento.

—Será una especie de fiesta, YeonJun ha estado emocionado con esto durante semanas. —los dos empezaron a caminar hacia la cafetería.

Al entrar se dieron cuenta de que algo extraño estaba sucediendo.

Las personas cuchicheaban, murmuraban entre ellos y cuando se dieron cuenta de la presencia de Felix y chan en la cafetería los cuchicheos aumentaron.

Felix apretó la mano de chan, se acurruco más cerca de él al tener la mirada de todos en ellos.

—¿Qué demonios? —chan frunció el ceño.

Unos alfas en la mesa frente a la suya rieron al ver a Felix.

ChangBin estaba entre ellos murmurando cosas.

—Felix, ¿por qué simplemente no me dijiste que querías un novio de mentiras? —ChangBin rió, sus palabras fueron filosas contra el omega que frunció el ceño. —Pero Bang, ¿por qué finges ser el novio de Felix? ¿ya te acabaste con todos los omegas en esta escuela que tenías que ir por el premio mayor?

Felix soltó la mano de chan y se acerco a ChangBin.

—¿Qué demonios quieres? ¿de qué estas hablando?

—De su teatro, ustedes no son una pareja de verdad. —otro de los alfas en la mesa soltó.

La cafetería estaba en silencio.

Todos veían molestos a los alfas que molestaban a Felix y Chan, ¿a ellos que les importa la relación de Felix con Chan?

—Felix, creo que todos morimos por estar en tu cama... Oh perdón, en una relación contigo. —rieron los alfas, el omega se abrazo a si mismo y chan les gruño molesto.

Se acerco a ChangBin y lo golpeo en el rostro sin pensarlo.

—Imbécil. —escupió Chan.

Chan se dio cuenta de como Jisung se acercaba a Felix quien se veía triste y confundido.

Felix salió de la cafetería.

Jisung se acerco a ChangBin que estaba en el suelo.

Le soltó una patada en el estomago.

—No le vuelvas a hablar a Felix, ninguno de ustedes gorilas subdesarrollados. —Jisung gruño.

—Vamos, Jisung bonito, eres muy bonito para que te enojes. —uno de los alfas rió. —Tu enojado eres un chiste. —dijo grosero.

Jisung frunció el ceño.

MinHo le soltó un puñetazo al alfa que dijo eso.

—No le vuelvas ha hablar así. —MinHo tomo la cintura de Jisung y lo llevo afuera de la cafetería.

—Ninguno de ustedes idiotas vuelva hablar con mi omega. —Chan advirtió enojado y viéndolos con odio.

Corrió de la cafetería y corrió a donde sabía que Felix estaría.

Al llegar bajo las gradas del campo de fútbol americano vio al pequeño omega.

Abrazaba sus piernas, se veía indefenso.

—Lix...

—¿Por qué les dijiste? —susurró triste. —Confíe en ti, Chris.

Chan se arrodillo junto a él.

—N-No lo hice.

—¿Entonces cómo se enteraron? —tartamudeo Felix.

—E-Estaba hablándolo con Jisung y ChangBin seguramente escuchó... —Felix lo vio triste.

—Prometiste que sería un secreto... —Felix se sentó mejor.

Chan tomó su mano y acarició su mano.

—Y-Yo necesitaba un consejo muy importante.

—¿P-Para qué? —Felix vio directamente a los ojos hermosos de chan.

Chan sintió su corazón latir más rápido.

—Y-Yo te quiero... —Chan soltó. —Te quiero de verdad.

Felix sintió su corazón bombear más fuerte.

—entiendo si tú no sientes lo mismo, o si después de esto ya no quieras volver hablarme... Y-yo...

Chan no pudo terminar su discurso improvisado pero lleno de sentimientos sinceros porque los labios de Felix estaban contra los suyos.

—Y-Yo también te quiero... —susurró Felix. —Te quiero de verdad.

Chan sonrió y puso sus manos en las mejillas de Felix, profundizando el beso.

Felix se sentó en su regazo y al separarse acarició las mejillas de Chan.

—Me gustas mucho, Chan.

Chan sonrió y sintió a su alfa ronronear por el toque del omega.

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