En una mazmorra debajo de la lujosa ciudad de Francia un par de Caballeros se encontraban enfrentando esqueletos que habían estado aumentando sus números debido a la gran cantidad de restos que había debajo de la tierra francesa.

Una cabellera blanca se podía notar debajo de una pequeña esfera de luz dorada, a su lado caminaba un pelinegro, ambos con una mirada serena de profundos ojos azules, un ataque sorpresa por parte de un esqueleto con una cimitarra estaba por alcanzar a la chica de cabellos blancos, pero el pelinegro, usando una katana de color verde que resplandeció como jade por la pequeña esfera de su compañera destruyó con facilidad al esqueleto que después fue desintegrado por la mujer quien lanzó un pequeño hechizo pulverizando los huesos con facilidad.

—Shin, ya estamos cerca del jefe. ¿Estás seguro que solo nosotros podemos con él?

—Claro, con tu magia de luz será sencillo acabar con el jefe, han estado matando a niños en el parque cercano, al menos tres muertos, debimos haber venido antes. —El pelinegro presiono un poco su espada. Los esqueletos se habían salido de control en los últimos días, los Knight en esa Raid lo atribuyeron a que los monstruos ahora tenían un buen número por lo cual habían decidido salir para comenzar una Conquista.

—Shin, no es tu culpa. —La chica colocó su mano libre en el hombro de su compañero. —Ya estamos aquí, no dejaremos que sigan matando a más inocentes, ¿Si?

El pelinegro relajo el agarre sobre su arma y sonrió de manera casi imperceptible. —Si... —El ruido constante de huesos comenzó a escucharse en las catacumbas, ya estaban a solo metros del jefe.

Ambos se adentraron más en la zona que se iluminaba con el caminar de los dos, entonces, ante ellos, un grupo de 20 esqueletos y uno más grande con cuernos de un casco vikingo vislumbraron a los Knight.

Un agudo sonido de traqueteo por parte del líder envió a los huesos vivientes en contra de ambos. La espada de Shin resplandeció en un color verde y antes de que el jefe se diera cuenta, la mitad de sus seguidores había sido eliminada.

—Clair, dame apoyo. —Pidió el chico para que su compañera lanzará una luz dorada sobre él.

Los Tek-Eyes de Shin brillaron en color azul y mostraron rápidamente su estado gracias al hechizo de su compañera.

[LUZ GUARDIANA DEF +100]

[BENDICIÓN DORADA MAG +50]

Un resplandor cubrió el cuerpo del joven quien desenfundó una pistola de su pierna y disparó de manera repetida a los esqueletos restantes. Disparos de color azul y rojo mostrando su afinidad mágica al rayo y fuego eliminaron a cada monstruo con certeros ataques incluso siendo solo huesos. Solo le tomó un minuto estar en un uno contra uno con el jefe.

—[EXORCISMO] —Una luz de color azul en forma de circulo mágico resplandeció en la pequeña caverna en la que peleaban eliminando por completo a los esqueletos derribados y dañando levemente al jefe quien había quedado cegado por el ataque de la albina.

Nuevamente la espada de Shin resplandeció solo que ahora de un color azul, además, pequeños relámpagos comenzaron a fortalecer la ya de por si filosa hoja. —[MIL HOJAS]

A una gran velocidad, el pelinegro perforó y dio tajos con su espada al jefe de los esqueletos logrando hacerlo solo poco más que polvo. Clair camino al lado de su compañero y lanzó el hechizo final en contra del jefe logrando limpiar la zona.

Sus teléfonos celulares sonaron con la notificación de la ARK de Francia, rápidamente miraron la actualización solo para sorprenderse.

[La alianza rusa y japonesa lograron su cometido al lograr recuperar la zona de Bolchevique. Una nueva bandera de recuperación ha sido levantada. La Raid internacional dejo varias bajas...]

El mensaje continuaba, pero la noticia era obvia. Los ojos de ambos se abrieron con sorpresa, primero el ataque directo a Shinjuku y ahora esto. El país natal de Kuroi Shin había estado siendo atacado de manera constante, y, por lo que leyó sobre los Oni, habían sido un problema grave.

—... —El pelinegro presiono un poco el teléfono, entonces miró de manera decidida a su compañera. —Tengo que regresar Clair...

—Lo sé, —le dedicó una sonrisa para después continuar. —Iré contigo. Después de todo el Torneo será en Corea, así que estaré algo cerca. —Termino con una sonrisa que el pelinegro compartió de manera leve.

Hacia un tiempo que estaba residiendo en Francia solo por ella, pero necesitaba volver, leyendo la cantidad de bajas, Japón necesitaría que un Alpha como él lo era, regresará para dar más apoyo.

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En el gran castillo Ita, Japón, más específicamente en la ciudad de Nagoya, un chico de cabello negro, sudadera ligera y el pantalón recogido a media pantorrilla, se encontraba caminando de manera tranquila hasta que llegó a una zona donde estaba una chica que parecía asustada de las multitudes cercanas al castillo.

La chica, de cabello corto color rosa pálido a excepción de dos mechones largos que llegaban poco debajo de su barbilla, está sentada en una pequeña jardinera mientras veía pasar a las personas, sin embargo, se le notaba con cierta ansiedad, el hecho de estar entre tantas personas la afectaba, pero en cuanto vio llegar a su amigo de cabello negro, se logró relajar un poco.

—Noah, tardaste mucho. Estaba por irme, h-hay mucha gente. —Dijo un tanto nerviosa tratando de ocultarse detrás de su amigo de nombre Noah.

—Tranquila, es lo que sucede cuando los humanos se encuentran con algo que no pueden explicar. —El chico sacó su teléfono celular y leyó la Notificación que tenía.

[GREMIO LIBERTE: EN EL CASTILLO ITA SE HAN TENIDO REPORTES SOBRE AVISTAMIENTOS DE FANTASMAS, SE SOLICITA APOYO DE LOS CABALLEROS ESPECIALIZADOS EN ESTA ÁREA DE TRABAJO]

La chica también había leído, ella no era una Knight como tal, pero le gustaba ayudar a su amigo, razón por la que lo acompañaba, además estaba el hecho de que entre ellos dos habían detenido ya varios de estos "Avistamientos".

—Sayo-san, no tienes que venir si no quieres, puedo hacerme cargo. —Comentó sonriendo a la chica.

—Estoy bien... debo superarlo poco a poco. —Ella le dio una tímida sonrisa y ambos se acercaron a la multitud.

Ambos se acercaron, sin embargo, antes de llegar, Noah tomó una máscara blanca con pintadas que le daban un aspecto felino, se la colocó antes de que alguno de los civiles pudiera capturar su imagen.

Los civiles se peleaban buenos lugares para poder encontrar una posición en la cual pudieran obtener una buena imagen del interior del castillo, el rumor que se hacía cada vez más grande sobre espíritus era algo llamativo, incluso después de la Colisión, era raro que se presentarán fantasmas o espectros debido a su bajo nivel de magia.

—Alto jóvenes, estamos esperando para que el castillo sea limpiado por los caballeros.

—Soy miembro del gremio Liberte, soy el enviado a limpiar esta Guarida. Muévase. —La voz del joven sonaba un tanto seria, y con lo último, el guardia rápidamente se movió, sintió eso último como una orden o casi una amenaza, entre sus ideas no estaban el enfrentarse a un Knight. Incluso un Beta podría lastimar de gravedad a un simple civil.

—C-C-Claro, adelante. —El hombre dio paso a los chicos removiendo la barra de contención.

Ya dentro del lugar, después de varios metros, la chica reprendió a su compañero. —Noah, eso fue agresivo, incluso yo lo puedo entender.

—¿De verdad? Creí que debía decirlo de esa forma.

—Bueno... es una manera, pero pudiste tener más tacto...

—... ¿Si uso mis almohadillas lo comprendería mejor? . —Preguntó mientras su mano se convertía en una garra de gato.

—No me refiero a ese tacto...

Repentinamente, una pequeña presión mágica detuvo su plática, aunque no lo creyeran, un fantasma que portaba una armadura de samurái algo antigua y roída se puso en posición de combate, Noah rápidamente se puso frente a su compañera y lanzó varios Senbon que atravesaron al espíritu.

Por la cantidad de magia en las agujas, el fantasma terminó desapareciendo, pero regresaría si no se encontraban y eliminaban al Boss de esa guarida.

—Iré delante, necesitare tu habilidad en contra del Jefe, así que eliminaré a los que se aparezcan hasta entonces.

La chica hace tiempo que sabía que no podía contrariar a Noah cuando entraban en combate, así que solo asintió a los brillantes ojos que la veían debajo de la máscara.

Minutos después y habiendo dispersado a más espíritus, en el centro de la estructura, un amplio jardín, un No Muerto apareció ante ellos, un esqueleto con una túnica oscura y un hedor a carne podrida que alteró los nervios de Noah, pequeños trozos de carne en estado de putrefacción y algunas moscas de brillante color verde rondaban al ser que tenían frente a ellos.

Nuevamente, Noah lanzó sus Senbon, pero esta vez no fueron en contra del Jefe sino en contra de las moscas, llevaba tiempo enfrentando ese tipo de seres, por lo que sabía que esas moscas solo le servirán al No Muerto para invocar espectros para ayudarle.

El monstruo gritó, en sus manos comenzaba a generarse una esfera negra que se podía distinguir desprendía una gran cantidad de muerte, toda vegetación bajo los pies del flotante ser así como a 2 metros a su alrededor se vio afectada muriendo en el acto.

Estaba por lanzar su ataque, pero el pequeño pendiente en la oreja izquierda de Sayo, así como su mano derecha que apuntaba al Jefe resplandecieron en un color azul que despedía pequeños destellos amarillos.

—Ya lo tengo Noah. —Fue lo dicho por ella, su magia, una completa rareza, había paralizado en seco los movimientos del Espectro de mayor rango, solo su rostro mostraba confusión y un poco de dolor, pero nada más podía hacer, su magia se desvaneció y quedó completamente abierto a cualquier ataque. —Ahora, lo solidificare para que puedas eliminarlo rápido.

La pestilencia del monstruo que parecía ser su aura de muerte desapareció y el olor, así como los trozos de carne se volvieron más visibles para Noah quien ahora también había cambiado.

Sus piernas se tornaron volviéndose las de un gato, de su cabeza crecieron orejas y las uñas de sus manos se afilaron y alargaron, pero lo más destacable, un par de colas felinas de pelaje negro.

—Gracias Sayo-san. —Finos hilos de metal se formaron en sus mortíferas agujas que fueron lanzadas velozmente en contra del monstruo, un sonido como de roca siendo cortada se escuchó, Noah había utilizado magia de Metal que le ayudó a generar esos hilos, esa magia tan aguda como la más filosa de las espadas combinada con sus Senbon veloces y casi invisibles, eran una combinación letal.

La chica bajó su mano y se acercó lentamente al cadáver para después lanzar un hechizo sobre el que expulsó toda la magia de él y después la disipó logrando que el castillo fuera liberado de los espectros que lo acechaban.

—Lo hiciste bien Sayo-san.

—Gracias. —Ella respondió con una ligera sonrisa a pesar del tono serio y algo seco de su compañero.

Ya era por la tarde, ambos habían terminado su misión y regresado al gremio, pero en su camino, pudieron ver en las grandes pantallas como se transmitía la pelea en contra de la cría de Dragón, a pesar de la pelea, Sayo se notaba incómoda, después de todo, estaban en una plaza que atraía mucha gente por su popularidad y ahora, por la batalla.

—Sayo-san, será mejor que nos vayamos. Te ves incómoda con estos humanos.

Algunos chicos escucharon eso y parecieron molestarse por el joven, sin embargo, para él fue completamente normal el hablar de esa forma.

—Está bien. —Respondió y accedió ella tímidamente debido a las personas que la rodeaban.

Llegaron a un parque algo solitario en el cual Noah sacó su teléfono celular y, usando su 4G, comenzó a ver la transmisión junto a su amiga.

La gran cantidad de magia liberada, así como el poder que irradiaban las brillantes escamas azules del dragón era algo que ponía nerviosa a la chica, hace solo 10 años, cuando ella aún vivía con sus padres, Leviatán había devastado la mitad de Estados Unidos.

Noah también recordaba el ataque de Leviatán, había sido un evento que desde que llegó a la tierra, solo veía como los humanos lo evitaban, había sido la catástrofe más grande que los humanos habían vivido, el solo deseaba que no tuvieran que pasar por la desgracia que su casi extinta raza había pasado.

Ambos sonrieron cuando se anunció el final de la Raid, así como la victoria en contra del dragón, les había resultado emocionante, incluso Sayo que no solía poner mucha atención en esos temas le pareció fascinante.

—El capitán Sakazuki estuvo asombroso. Tiene mucho poder. —Comentó ella feliz de ver que el Alpha Eater era más fuerte de lo que imaginaba.

—Si... espera... Sakazuki es el de cabello blanco, ¿Verdad?

—¿Que? No, ese es Haname, Sakazuki es quien libero su poder y atacó junto a Maxim, el Alpha Eater de Rusia.

—Entonces ¿quién es él? —Apuntó a Maxim nuevamente.

—Él es Maxim.

—Pero dijiste que el de cabello blanco era Salame...

—Haname... HA-NA-ME. —Apuntó al albino cerca a los cadáveres de los gigantes. —Él es Haname.

—...Y ¿el quién es...? —Apuntó a Ven'el.

—¿Cómo puedes confundirlo? Es el único Elfo que apoya a los humanos. Ven'el, Sub-Director de Golden Claw.

—Ya veo... los humanos son muy parecidos para mí... Sobre todo, ese Salame y Maxim.

Sayo solo sonrió mientras negaba, Noah siempre se comportaba de esa forma, seguro en cada uno de sus combates, de reacciones rápidas dando a notar sus dotes como Nekomata, pero para recordar cosas o rostros simplemente se le hacía complicado. —Olvídalo... solo, pregúntame sobre ellos si llegas a encontrarlos, no creo que les guste que los confundas.

—...Claro.

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México, San Luis Potosí. Sótano de las Golondrinas.

Un lobo de brillante pelaje blanco se encontraba en lo más alto de la estructura rocosa, miro hacia adentro inclinándose levemente. Sus brillantes ojos azules resplandecieron para ver el lugar y así descubrir en lo extenso del sitio una gran cantidad de arpías que se encontraban anidando ahí, hace un par de semanas que aquel bello lugar turístico dejó de ser visitado debido a los monstruos que ahora lo habitaban.

El lobo llevaba a su lomo una pequeña mochila y en su pata derecha algo parecido a un brazalete digital que comenzó a sonar, la voz firme de una mujer se escuchó del otro lado, parecía molesta.

—Froy, ¿dónde demonios estas?, Tenías una reunión con los representantes del gobierno. Siguen intentando que trabajes para ellos.

—Tu puedes con ellos Andressa.

—Responde a mi pregunta, si no lo haces, en cuanto regreses y te tenga a mi alcanza romperé tus piernas para que por una vez en tu vida asistas a las reuniones.

El lobo respondió con voz temblorosa. —E-En San Luis...

Unos segundos en silencio pusieron más tenso al lobo que ahora sus ojos mostraban miedo. —¿QUÉÉÉ? —El grito alertó a las bestias en la gran caverna que estaba, entonces, la seriedad regreso al rostro del lobo quien se lanzó dentro. —¿Froy? ¡Froy!

—Estoy ocupado. Regresare por la noche, no te preocupes. —Habló durante su caída en el fondo, varios monstruos intentaron atacar, pero sus poderosas garras y fuerte mandíbula destruyeron el cuello y alas de los monstruos que se acercaban a él.

Continuó cayendo como una pesada roca al fondo, en solo 5 metros se destruiría con el choque contra el suelo, pero de su mochila salió una pequeña cabeza de murciélago que tomo rápidamente entre sus fauces, un aura de color morado lo cubrió y después, a solo 2 metros, unas alas salieron de esa aura, negras como la noche misma y tan alargadas pero tenebrosas que el lobo ahora era un monstruo.

Sus alas le dieron vuelo y regresó hacia arriba, en su camino destruyó a los monstruos que se le atravesaban, las plumas de las aves caían al fondo de manera lenta, algunas aún más pesadas debido a la sangre que las cubría y, por último, los cuerpos de cada arpía cayeron al suelo con una gran pesadez. Otra arpía mucho más grande apareció, pero solo pudo soltar un agudo gruñido de dolor cuando el gran murciélago la tomo con las garras de sus alas y la partió a la mitad con mucha facilidad.

El monstruo también cayó al suelo mientras el oscuro murciélago regreso a donde el lobo había estado hace solo unos momentos. Nuevamente esa aura de color morado lo cubrió, pero ahora, un humano de cabellos blancos y profundos ojos azules estaba mirando nuevamente el lugar, sus Tek-Eyes resplandecieron mostrándole lo profundo de la caverna, así como el resultado de su misión.

Levantó su brazo derecho en el que estaba su brazalete digital que brillo en un color azul. —Andressa, la misión está terminada, llegaré antes de lo que creí. —Sin embargo, solo silencio había. —¿Andressa? —Preguntó un poco temeroso.

Un suspiro rompió el silencio de la persona con quien se comunicaba. —Está bien. Estoy en camino a la reunión, haré lo posible para que dejen de insistir, pero sabes que tienes que hacerlo personalmente para que se detengan.

—Lo sé, lo sé. Escucha... diles que hagan una nueva reunión, estaré presente para negarme a trabajar con ellos y dejarlo bien claro.

—Bien

—¿Andressa?...

—Dime...

—Gracias por todo lo que haces.

Un pequeño silencio se hizo presente, después de solo dos segundos, la chica respondió, pero su voz se notaba más tranquila y algo suave para su compañero. —No tienes que agradecer, es lo menos que puedo hacer por ti.

El solo sonrió, Andressa termino la llamada mientras él se volvía a transformar en lobo gracias a un colmillo que usaba como dije en un collar de plata. Gracias a su transformación, logró bajar con facilidad del lugar para después nuevamente mirar su brazalete.

[Hace unas horas en Rusia, se pudo ver como los Alpha Eater de Japón y Rusia, Sakazuki y Maxim, acabaron con los gigantes establecidos en Bolchevique, se reportaron muchas bajas de caballeros nipones, pero lo más alarmante fue el jefe de la guarida, para sorpresa de todos los que observaron la transmisión. Una cría de Dragón apareció haciendo que las bajas de los caballeros en la misión aumentaran por la repentina invocación de más monstruos que hasta ese día no se habían mostrado].

El solo hecho de escuchar sobre un dragón hizo que Froy comienza a sentir ansiedad y miedo. Un dragón era algo que no se atrevería a enfrentar ni pudiendo transformarse en uno, el solo recuerdo del Gran Dragón Leviatán destruyendo a sus compañeros en la más grande Raid aún le daba pesadillas.

Solo recordar los gritos de los caballeros carbonizados o envueltos en fuego le hacían helar la sangre, recordar todo el poder de Leviatán hacia que poco a poco su respiración se volviera pesada, casi como si tuviera un ataque de ansiedad, puede que esa cosa fuera un dragón joven, pero, aun así, se lo hubiera planteado para asistir a esa misión.

—"Maxim y Sakazuki son muy valientes. Incluso en aquel entonces no retrocedieron ante Leviatán". —El albino miró al cielo por unos momentos. —"Espero que nada como eso se vuelva a repetir".

Inconscientemente llevo su mano derecha a su costado izquierdo, si su playera de cuello alto color negro no estuviera, podría mostrar fácilmente una gran cicatriz de quemadura.

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De vuelta en Japón, Lavi se encontraba dormido aun en el Falcon, su [FATIGA] se había recuperado, pero quería dormir un poco de tiempo, debía relajarse después de todo lo ocurrido, había recibido también un poco de experiencia extra por completar las misiones de eliminar al ejército de Draugr, así como a Scoorsch. El [SISTEMA] tomó como completada la misión para el debido al gran ataque, agradecía que ninguno de sus compañeros hubiera notado ese ataque, el cuerpo de uno de los gigantes le había cubierto para que pudiera disparar sin problema, además, gracias a la gran cantidad de magia de Sakazuki y Maxim, nadie le prestó atención.

Pero, eso no era lo que lo preocupaba en ese momento, su más grande preocupación actual era que Nami, a su lado derecho y Shizuka, en su lado izquierdo, estaban recargadas en sus hombros también descansando, antes de caer dormido, ambas habían estado lanzando miradas de enojo, pero después de quedar en un punto muerto, cada una abrazó un brazo de Lavi para después quedar dormidas en los hombros de Lavi.

El, por su parte, se mantenía nervioso, tenía miedo de que Shizuka atacara a Nami, pero parecía que se calmaba debido a que el pelinegro estaba entre ambas, después de unos minutos, Lavi termino dormido inclinando su cabeza hacia atrás en su asiento.

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Londres, Inglaterra.

En una lujosa mansión que era atendida por una gran cantidad de sirvientes, una joven de cabellos rubios, mirada serena y una cálida sonrisa caminaba saludando a algunos de los sirvientes, la chica caminaba con elegancia y de manera firme.

Después de algunos metros, llegó a una gran puerta que abrió en el interior, muchos muebles de fina madera y muchos libros, se encontraba un hombre de al menos unos 40 años, estaba con el rostro cubierto por una tableta electrónica.

—Maestro.

—Ahh, Julieth, gracias por venir.

—Por supuesto maestro, la chica se inclinó levemente a manera de respeto ante el hombre quien bajo la tableta dejando ver un rostro serio adornado por unas gafas estilo aviador de color negro. Rápidamente las quito. —¿Estás preparada para el Torneo de Promoción?, —Cuestionaba mientras agitaba levemente su cabello negro en el cual destacaba un mechón blanco cerca del centro de su cabellera.

—Si maestro. Estoy preparada, avanzare aún más con mi entrenamiento y formación para no fallarle.

—Muy bien. Puedes retirarte, también, dile a Jones que prepare todo para ese día.

—Entendido maestro.

La chica volvió a erguirse para después girar sobre sus talones y salir de la oficina del hombre. En cuanto la chica salió, el hombre lanzó la Tablet a un estante con libros destruyéndola en el acto.

Presionó su escritorio con fuerza destruyéndolo también. —"¿Cómo te atreves maldito fracaso? Me engañaste ¿eh? Bien. Mi nueva creación se encargará de mostrarte tu lugar. Lavi, no eres nada más que una deshonra y un bastardo indigno de llamarte mi hijo".

El hombre relajo el férreo agarre sobre su escritorio el cual terminó siendo destrozado y partido a la mitad para después derrumbarse en el suelo.

Se puso de pie de su elegante silla y miró el gran ventanal de su oficina, al mirar a los amplios jardines, vio a la rubia quien platicaba con un hombre de elegante traje y una pequeña gorra, debía ser un conductor personal.

—"Julieth... tu dominarás sobre todos".

Una tétrica sonrisa se formó en los labios del hombre mientras sus planes se desarrollaban con tranquilidad en su cabeza, solo faltaban un par de meses para que todo comenzará a correr, razón por la que solo podía limitarse a sonreír feliz.

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Nuevo capítulo, este fue el de presentación para los O.C que me prestaron xD. Aún pueden proponer si gustan a un personaje, pero solo faltan un par de capítulos para que inicie ese arco y que ya no pueda meter a tantos personajes. Espero que a los que me enviaron sus O.C, les guste como los plasme en esta primera aparición.

Sin más que decir, muchas gracias por leer y nos leemos en la próxima actualización.