Se hace tarde, y el plan había sido irse mucho antes, pero War está apartando las bebidas como si tuviera una misión. Me gustaría decir que no es que espere que se emborrache y meta la pata mañana, pero esa idea ciertamente es atractiva.

Sin embargo, no es la razón por la que sigo aquí. War podría perderse si estoy aquí o no. No, en vez de eso tengo este inútil sentimiento de responsabilidad de asegurarme de que todos vuelvan bien a los dormitorios. Incluyendo a War.

—Maldita sea, me voy a perder esto —dice Jumpol.

—Es poco probable —War resopla—. Vas a vivir la vida de la NHL. Hockey, alcohol, puck bunn [Una conejita, fan de hockey]— ah, quiero decir...

Le doy un golpe en la nuca.

—Imbécil.

Gun se ríe y dirige una mirada de asco a Jumpol, mientras me habla.

—Está bien, Topher, sabemos cuál será la realidad.

—Espera... —War pone una mano en mi muslo mientras se inclina hacia Gun—. ¿Cómo lo llamaste?

—Toph...

—No —Lo corto—. No. Nada de eso. No es nada.

—Topher —War se echa hacia atrás, dándome un poco de maldito espacio, y presiona su puño a la boca. Sus ojos están muy abiertos, como si Gun le hubiera dado algún tipo de regalo—. Topher.

—Cierra la boca.

—Lo que tú digas. Topher.

Bueno, supongo que es algo. Todo lo que puedo hacer ahora es tratar de ocultar lo patético que me parece ese nombre. He dejado que Gun se salga con la suya porque es el chico de Jumpol y es un poco gracioso, pero siempre he puesto el límite cuando Jumpol lo intentaba.

Exactamente por esta razón.

War se aferra a cualquier cosa que sabe que va a calar bajo mi piel.

—Di todo lo que quieras. Va a ser el Capitán Topher para ti. War inclina la cabeza.

—Es adorable que pienses eso.

—Lamento que elijas estar en negación.

—¿Negación? —Señala a Pirapat—. Después de que vayamos por estos perdedores, no habrá ninguna duda de quién lleva las armas grandes.

—Un pene grande no significa nada en el hielo.

Su sonrisa de niño bonito aparece con toda su fuerza.

—Y ahí vas, pensando en mi polla otra vez. ¿Tenemos que pedirte ayuda?

Jumpol golpea la mesa.

—Ok, estamos fuera.

Me distrae de una respuesta, y observo cómo él y Gun se levantan. Esto es... vaya. De repente me doy cuenta de que esta es la última vez que voy a ver a mi amigo en... no tengo ni puta idea.

Me pongo en pie torpemente.

—Buena suerte, amigo.

—Gracias —Me atrae para darme un abrazo—. Capitán o no, lo vas a hacer genial este año.

—¿Así que tampoco crees que pueda hacerlo?

—¿Yo dije eso? —Me suelta y Gun hace un saludo incómodo—. Confía en el equipo. Puede que sean un grupo de bobos, pero cuando se trata del juego, son inteligentes. Y —intercambia una mirada con Gun—, diviértete un poco. Es tu último año. Tu última vez con estos chicos. Cuando te pongan retos de mierda, hazlos.

—No puedo evitar pensar que no estarías diciendo eso si esto te estuviera pasando a ti.

—Sí, pero no es así —Se ríe y levanta la mano a los demás—. Me olvidaré de ustedes, imbéciles, cuando sea famoso.

Gun suspira como si ya estuviera demasiado acostumbrado a Jumpol. Para ser justos, todos lo estamos. Está dejando grandes patines que llenar.

Me dejan con una presión en el pecho, y mientras Jumpol rodea a Gun con su brazo, oigo que Gun dice:—Sé que no tengo remedio, pero definitivamente había tensión sexual ahí.

Jumpol se ríe.

Tensión, sí. En eso tiene razón. ¿Tensión sexual? No. No, no, no. Nunca. No.

No. No. Siete no deberían cubrirlo. No, espera, uno más: ¡Maldito no!

Es hora de hacerlo. Estoy a punto de decirle al equipo que levanten los culos y se pongan en marcha, pero cuando me doy la vuelta, sólo me espera War.

—Vamos —Me resigno a otro molesto paseo de vuelta a los dormitorios junto a War.

Nos vamos, y observo a War para ver si voy a tener que cargar con su pesado trasero, pero parece que camina recto.

—No estás borracho —me doy cuenta.

—¿Eh? ¿De qué estás hablando?

—Has bebido al menos el doble que el resto, ¿Cómo sigues de pie? —No estoy ni mucho menos borracho, pero la cerveza me ha dado un subidón.

—Amigo, la mitad de esas eran con Cocas.

—¿Qué?

—Se llama beber con responsabilidad.

—Creía que no conocías el significado de la palabra.

—¿Qué? ¿Beber? He investigado sobre ello.

Dejo escapar un largo y paciente suspiro, recordándome a mí mismo que es estúpido ser serio. El tipo no puede mantener una sola conversación sin que se convierta en una broma.

—Oh, lo entiendo —Me pasa el brazo por los hombros y yo me encojo de hombros inmediatamente—. Esperabas que tuviera resaca para mañana. Vaya. Mal, Topher, incluso para ti.

Paciencia. Sólo necesito un poco de maldita paciencia.

—Aquí estaba pensando que querías convertirte en capitán de la manera honorable. En cambio, querías que me emborrachara para poder aprovecharte de la situación. Y no de la manera divertida.

—¿Alguien te ha dicho alguna vez que tu voz está al nivel del cristal roto [voz fuerte] ?

—Quizás si te quitaras ese palo de hockey del culo, me encontrarías más agradable.

—Lo dudo. Seguirías siendo... tú.

—Interesante —War se frota la mano sobre la mandíbula—. Estoy empezando a pensar que esto entre nosotros es personal.

—¿Sólo ahora te das cuenta de eso?

—Para ser honesto, nunca me había importado.

—Bonita respuesta —¿Desde cuándo el campus es tan grande? Apenas estamos a mitad de camino de la residencia—. ¿Por qué te importa ahora?

— No lo sé. Pero sería mucho más fácil que me quisieras seguir el año que viene si te gustara un poco.

—Sería mucho más fácil que me cayeras bien si no fueras un culo engreído.

—Y ahora estás pensando en mi trasero. Cielos, Topher, tal vez el pequeño juguete de Jumpol tiene razón.

—No llames a Gun así. No estaba hablando de tu trasero. Y nadie tiene razón en nada —Mi cara se está calentando, y vuelvo a recordarme lo de la paciencia. No me voy a enfadar con War por insinuar que soy gay. No lo soy. Pero... no. No. Lo que había pasado por mi cabeza sobre Jumpol era la adoración del héroe y nada más. Sólo me excita el talento serio.

Eso es todo.

Cuando War no responde, sé que algo pasa. Y por mucho que no quiera mirar su cara de suficiencia, no puedo contenerme. Me mira con demasiada atención para alguien que ha bebido al menos tanto como yo.

—¿Qué?

—Nada. Te has enfadado mucho por eso de repente.

—No estoy enfadado, estás diciendo tonterías.

—Ya —Sus cejas se levantan un poco, haciéndome querer borrar esa expresión de su cara—. Eso explica totalmente por qué tienes las manos apretadas.

Me apresuro a soltar los puños.

—Resulta que todo lo que sea estar más de unas horas contigo es más agotador que el primer entrenamiento de la temporada.

—¿Ahora también vas a vomitar?

—Eso fue una vez, en el primer año. Déjalo pasar.

—Claro que sí, Topher.

Gimoteo y trato de no arremeter contra él. El caso es que, de cualquier otro, le diría que se callara y siguiera adelante. Me insultarían, yo les devolvería los insultos y luego pasaríamos a la mierda. Pero War se las ha arreglado de alguna manera para desenterrar todos los pequeños botones que me vuelven loco, y lo más molesto es que dejo que me afecte.

Este verano se trata de trabajar en el equipo, encontrar nuevos talentos y futuros estudiantes de la UC, y demostrar a todos que soy el capitán que necesitan. Si sigo dejando que War me moleste, ninguna de esas cosas va a suceder. He conseguido mantener la calma en los últimos años, pero tampoco he tenido que tratar con él de forma tan cercana.

Y cuando vuelvo a encontrar esa estúpida sonrisa en su cara, sé que este verano me va a aniquilar.

Tengo que encontrar una nueva forma de manejarlo. De lo contrario, puedo despedirme de ser capitán.

🔥 𝕭𝖑-𝖋𝖎𝖈𝖘