Capítulo 8


Es muy posible que esta noche me mate. Me planteo comprobar los datos de contacto de emergencia en mi teléfono para asegurarme de que he cubierto todas las bases, pero no puedo apartar los ojos de Off.

Un Off bisexual.

Un Off que aparentemente ha estado interesado en corazones... desde que lo conozco.

Trato de imaginarme esas manos grandes y capaces ahuecando la cara de otro hombre, bajando por su pecho hasta su...

Muy inapropiado. No voy a sexualizarlo sólo por saber este pequeño e improbable dato sobre él. Aunque supongo que sólo es improbable porque Mix habla de él con mujeres, nunca con hombres, así que no me he parado a imaginarlo así.

Puede que a Off le interesen los hombres, pero sigue habiendo mucha diferencia entre los tipos de hombres dignos de un capitán de hockey increíblemente guapo y, bueno, yo...

Como se me ha señalado en innumerables ocasiones.

De hecho, que Off sea bisexual puede ser la broma más cruel que me haya gastado CU. Al menos cuando pensaba que era heterosexual, sabía que no había posibilidad de que eso cambiara. Excepto que, aparentemente, lo ha hecho.

Ahora no es mi pene el que reduce mis posibilidades. Es literalmente cada parte de mí.

—Ya puedes dejar de mirarme. —dice Off.

Respondo, porque no ha mirado hacia mí.

—¿Lees la mente?

—Intuitivo. —Su mirada se dirige a mí y se aleja de nuevo—. Estrella del hockey, ¿recuerdas?

—Todavía no he visto la evidencia de eso.

Deja escapar un ruido de total incredulidad y empieza a caminar hacia atrás. Me esfuerzo por mantener una cara seria, aunque me impresiona poco su coordinación.

—Si no lo supiera, diría que me estás hablando mal.

—Bueno, es bueno que lo sepas.

—Hmm... —Off inclina su cabeza hacia atrás mientras me estudia—. Te estoy observando, Gun Atthaphan. No creo que seas tan inocente como dices.

—Nunca he reclamado ese título.

La risa de Off es completamente desinhibida mientras se da la vuelta. —Quizá no verbalmente.

—No sé qué significa eso. —Me tiro de la parte inferior de mi camiseta, que está sólo marginalmente mejor que la que llevaba antes—. ¿Qué es exactamente esta cosa a la que me estás arrastrando?

—Una fiesta.

—Nunca he estado en una.

—¿Nunca? —Me mira de nuevo, y tengo la sensación de que no quiere mirarme demasiado tiempo. Definitivamente lo hago sentir incómodo, aunque me cuesta entender por qué. Es la incomodidad de Off, junto con el momento, lo que me hace estar seguro de que Mix ha orquestado esta noche— Intenta divertirte. Sal de tu cabeza un poco y conoce a la gente.

No señalo que, en general, no quiero conocer a la gente. Quiero saber de ellos. Desde la distancia. —Bien, empecemos por ti. ¿Cuáles son esos profundos y oscuros secretos que ibas a contarme?

—Esperaba que te hubieras olvidado de eso.

—Un chisme como ese va a picar mi curiosidad.

—Lamento decir que eso podría haber sido una estratagema para que vinieras conmigo. No tengo secretos, soy un libro abierto.

Frunzo el ceño.

—Todo el mundo tiene secretos.

—¿Ah, sí? —Dirige otra mirada rápida en mi dirección—. ¿Cuánto me costaría uno de los tuyos?

¿Para que lo use contra mí después? Tiene que estar bromeando.

—No están a la venta.

—Bueno, maldita sea, ahora tengo mucha curiosidad. No puedes ir por ahí diciendo cosas así sin cumplirlas.

—Me confundes.

Off me mira bien esta vez.

—Bien, cambio de tema al azar. ¿Vas a seguir con eso?

—Mucha gente se ajusta a los estereotipos. No del todo, por el factor humano, pero tienen atributos diseñados en torno a dónde encajan y hay ciertas cosas que indiscutiblemente no conviven. Eres el capitán de hockey y eres bisexual.

Se pone rígido a mi lado.

—¿Qué quieres decir?

—Es interesante. No puedo dejar de preguntarme si el conocimiento de tus compañeros de equipo sobre tu sexualidad es en gran medida teórico, por lo que son capaces de ignorarlo.

—¿Me estás preguntando si me han visto enrollarme con chicos?

—Yo... supongo que sí.

—Sí, lo han hecho. No lo oculto.

Parpadeo ante Off, tratando de entenderlo. Aunque nunca he tenido realmente opiniones sobre él, positivas o negativas -aparte de una fuerte dosis de lujuria-, empieza a despertarse un hilo de respeto. No hay mucha gente que pueda existir en un entorno que premia el acostarse con mujeres y seguir siendo fiel a lo que es.

—Sin embargo, tu equipo sigue buscando tu liderazgo.

—Con quién me acuesto no tiene nada que ver con mis habilidades en el hielo.

—Conceptualmente, lo sé. Sin embargo, la atracción por el mismo sexo suele verse como una debilidad.

Off sacude la cabeza.

—Las cosas están cambiando. La gente ya no es tan cerrada como antes.

¿Está bromeando? La gente es exactamente igual de cerrada que antes.

—Definitivamente, esa no ha sido mi experiencia. —digo en voz baja.

Él deja de caminar, así que yo también me detengo. A la luz de la luna, no puedo distinguir el color de sus ojos, pero es imposible no notar su intensa mirada.

—¿La gente te ha estado diciendo cosas?

Algo en su voz tensa me hace sonreír. —Por suerte, la gente de aquí parece contentarse con ignorarme. Excepto un molesto jugador de hockey. Por alguna razón, parece decidido a ser amable conmigo.

—Es un misterio total. —Su mirada recorre mi rostro—. Vamos. Esta noche va a ser buena para ti.

Resignado, me giro para seguir caminando cuando siento algo que casi me hace tropezar.

La mano de Off presiona ligeramente contra la parte baja de mi espalda. Cada nervio de mi cuerpo se concentra en su mano. Se queda ahí, un segundo, luego dos. Aumenta la presión para hacerme caminar.

Luego desaparece.

El calor que desprende su contacto en mi pecho se asienta hasta que reproduzco el recuerdo una y otra vez. La piel me zumba.

Una sonrisa se desliza en mi cara que no puedo quitar.

Soy muy consciente de que ponerse a soñar con Off es, en el mejor de los casos, ridículo, pero las reacciones naturales de mi cuerpo ante él están anulando mi sentido común, y parece que no puedo hacer que se detenga.

La reunión se celebra en uno de los pequeños salones de la Casa Winchester. Al ser uno de los edificios más grandes del campus, Off explica que la mayoría de las actividades se celebran aquí. Es otra estructura de acero y cristal, y aunque falta el aire histórico del campus, no odio del todo las líneas elegantes y las proporciones interesantes.

Off mantiene la puerta abierta y, al pasar junto a él, espero volver a sentir su mano. Esta vez se contiene, y me aseguro de que es obviamente algo bueno porque el contacto accidental sólo me hará desear más.

La fiesta está unas cuantas habitaciones más abajo y, de nuevo, Off abre la puerta. Estoy acostumbrado a entrar y salir de las habitaciones sin que nadie lo note, como una sombra en la pared, pero cuando entramos en el salón, la reacción no podría ser más diferente.

Hay un pequeño revuelo.

Retrocedo rápidamente cuando dos personas se lanzan sobre Off y otras pocas se acercan. Todo el mundo habla rápido y sonríe mucho, y cuando miro alrededor de las cuarenta personas que hay, parece que toda la reunión se ha detenido con la llegada de Off.

—¡Jumpol, has venido! —dice una rubita burbujeante con un piercing en la nariz y demasiado maquillaje. Parece una máscara en comparación con el hombre que está a su lado, también maquillado. Mientras todos se afanan por acaparar la atención de Off, yo me escabullo hacia el fondo, donde estoy más cómodo.

Hay algunas personas repartidas por la sala que no se paralizan por completo ante la llegada de Off, y mi atención se centra en una de ellas cuando se acerca a mí.

—Bebé unicornio. —La extraña chica de la biblioteca me saluda con la cabeza. Su pelo negro empenachado parece más desigual que la última vez que la vi.

—Me llamo Gun.

—No lo he pedido.

—¿Cómo te llamas?

—Ramida, pero la gente me llama Jane.

—¿Por qué?

—Porque yo se los digo. —Hace un gesto hacia la entrada—. ¿Por qué estabas con Jumpol?

Miro hacia donde él está aceptando con facilidad el tipo de atención que me convertiría en un desastre tembloroso. Una chica alta le tira del pelo castaño oscuro y él le devuelve la sonrisa. Me pregunto qué se sentiría. Tener una de sus sonrisas sinceras.

—Es el hermano de mi mejor amigo. Por alguna razón cree que quiero estar aquí.

Me mira.

—¿Eres gay?

—Sí. ¿Lo eres tú?

—As [Asexual]. Aro [Aromatic: Orientación caracterizada por falta de deseo o interés en crear relaciones románticas]. Y, además, no me gusta la gente en general.

—Pero eres una persona.

—Lo sé. —Ella arruga la cara—. Qué mala suerte, ¿verdad?

—¿Ser la especie más poderosa de la Tierra? A mí me parece que es una buena suerte.

Señala a Off.

—Él es poderoso. Nosotros no lo somos.

—Me permito discrepar. Hay poder en ser diferente. —Aunque aún no haya descubierto qué es eso.

—Sólo hasta donde la gente puede explotarlo. —Se encoge de hombros—. Aquí vienen.

Me doy la vuelta y me encuentro cara a cara, con el pecho, con Off, mientras la chica burbujeante parece saltar hacia Jane y le da un beso en la sien. No sé qué cara pongo, pero Jane sacude la cabeza.

—No me deja en paz.

—Jane me quiere, de verdad. —La rubia le pasa una copa a Jane y me sonríe—. Soy Mild.

—Gun. ¿Eres amigo de Jane? Es muy abrasiva. —De nuevo, la advertencia interna de que mis palabras probablemente parezcan groseras no llega hasta que ya he hablado. Me pongo inmediatamente en tensión, esperando la reacción de cabreo que recibo tan a menudo.

Jane resopla.

—¿Seguro que no eres un robot?

La tensión se libera.

—La última vez que lo comprobé. —Compartimos una pequeña sonrisa—. Ustedes dos parecen amigos improbables.

Jane señala a Off.

—Mira quién habla.

—No somos Am...

Off me interrumpe mientras me pasa el brazo por los hombros.

—Sé que no vas a terminar esa frase, Gun.

—¿No lo voy a hacer?

—No. Somos amigos, y esta es la razón: Uno, te he visto sin camiseta.

—¿Cuándo me has visto sin camiseta?

—Un descanso cuando te quedaste en la casa con mi hermano. Nos cruzamos en medio de la noche de camino al baño. Muy memorable. —Sigue hablando, enumerando otras razones aleatorias por las que supuestamente somos amigos, pero no entiendo cómo espera que me concentre en otra cosa que no sea el peso sobre mis hombros y el calor a mi lado. ¿Es posible desmayarse por los nervios? Porque me siento peligrosamente cerca de... oh. He dejado de respirar. Intento inhalar una bocanada de oxígeno, lo que podría ser peor porque casi puedo saborear el aftershave de Off. El olor de su jabón corporal me da vértigo y siento la más extraña compulsión de empezar a reír—Y, por último, ¿Cómo puede esperar Mix que te cuide si no somos amigos?

Es lo único que podría haber dicho para matar la risa. Me encojo de hombros y me alejo rápidamente. —No soy un caso de lástima.

—Nunca he dicho que...

—Quizá debería irme.

—Claro que no. —Jane saca la pierna para evitar que me mueva—. La miseria ama la compañía. Si yo estoy atrapada aquí, tú también, bebé unicornio.

—Estoy seguro de que no funciona así. —Al menos estoy razonablemente seguro de que no.

==========

Off me tira de la manga y asiente hacia un lado de la habitación. Le sigo porque en este punto, estoy tan fuera de mi ámbito de experiencia que necesito que me ancle.

—¿Estás bien?

—Físicamente, sí.

—¿Puedes darme una respuesta directa? Sabes lo que estoy preguntando.

—Yo... —Tengo miedo de decir cualquier cosa que le haga darse cuenta de lo poco cool que soy—... estoy un poco fuera de mi zona de confort.

—¿No es eso algo bueno?

—No creo que sepas lo que es. Estás cómodo en todas partes.

—Pretendo estar cómodo en todas partes.

Le dirijo una mirada que transmite claramente mi incredulidad y, para mi sorpresa, se ríe.

—Ok, normalmente estoy cómodo. Pero eso es porque sé que las palabras no pueden hacerme daño. ¿A quién le importa lo que diga la gente?

—Las palabras hacen daño. Y también otras cosas.

—Otras cosas... Gun, ¿alguien te ha hecho daño? Mix insinuó algo, pero...

Sacudo frenéticamente la cabeza.

—No importa. Ese no es mi punto aquí. La cuestión es que claramente llevamos vidas muy diferentes. Los estándares sociales juegan a tu favor. Estás en forma, eres convencionalmente atractivo, inteligente y muestras los rasgos de confianza en ti mismo que la gente encuentra atractivos.

Sus labios se mueven.

—¿Convencionalmente atractivo? ¿Convencionalmente?

—Tampoco es la cuestión. —No puedo evitar una pequeña risa.

—¿Crees que eres lo contrario a mí?

—Exactamente.

—Hm. No estoy de acuerdo.

—¿Basado en qué pruebas?

La mirada de Off recorre lentamente mi cuerpo, enviando agradables ondas que irradian hacia mis extremidades. Luego aparta la cabeza. —Mix habla muy bien de ti, y mi hermano es un cabrón exigente cuando se trata de amigos.

Eso no es una prueba.

—Yo también lo soy. —continúa—. Y somos amigos, ¿no?

—No creo que podamos serlo.

—¿Por qué diablos no?

—Porque soy tu AT. Podría verse como un conflicto de intereses.

—De ninguna manera. La mayoría de los AT son amigos de los estudiantes en algún nivel porque normalmente han pasado por las clases con ellos. Podemos ser amigos. Sólo que no se nos permite follar.

Me quedo mirando. Y miro fijamente. Porque ahora ha ido y ha puesto esa imagen en mi cerebro, y nunca podré dejar de verla. Si espera una respuesta, va a esperar mucho tiempo.

—¡Jumpol! Ahí estás.

Doy un paso atrás cuando el amigo de Off de la clase se une a nosotros, chocando sus hombros.

—Amigo, ¿qué estás haciendo aquí? —pregunta Off, y con los dos de pie sobre mí, se me ocurre lo impresionantemente alto que es Off.

—Ah... El entrenador quería que te dijera que vas a hacer ejercicios en el entrenamiento de mañana.

—¿Por qué demonios necesitaba un aviso para eso?

—No me preguntes cómo funciona su mente. —Su amigo no lo mira a los ojos. Parece apagado.

Inclino la cabeza.

—¿No se podría transmitir eso en un texto? —Me arrepiento de haber hablado en el momento en que las palabras salen de mi boca porque de repente soy el objeto de la atención de ambos.

La cara de su amigo se ilumina.

—Es el AT. Tú...

—Anan. —Off le lanza una mirada antes de apartar a su amigo—. Vuelvo en un segundo, Gun.

Se van, y es un alivio no sentirme rodeado por un muro de músculos. Observo cómo hablan en voz baja a unos metros de distancia, y no me sorprende que el amigo de Off sea tan guapo como él. Con lo unidos que parecen estar, ¿quizás sea el tipo de Off?

Me acuerdo de las caricias casuales y de las bromas fáciles que comparten durante la clase, y eso me hace sentir esa sensación de malestar que experimenté antes. Las emociones son transitorias. No es más que un deslizamiento temporal en el control. Un control que recuperaré. Me recuerdo por millonésima vez esta semana que mi cuerpo está reaccionando al alfa de Off y nada más. Y sin embargo... miro a su amigo. Está claramente al mismo nivel que Off en cuanto a respetabilidad dentro de la escuela, y es grande y atractivo, pero la dosis de química está ausente.

Y eso es suficiente.

Sólo que ahora no estoy pensando en ellos, sino que estoy demasiado concentrado en el hecho de que Off me ha dejado aquí. Solo. En un lugar en el que ni siquiera quiero estar.

Me pregunto si alguien se dará cuenta si me escabullo.

Los ojos de Jane se encuentran con los míos desde el otro lado de la habitación. Tendré que escaparme cuando no esté mirando.

🔥 𝕭𝖑-𝖋𝖎𝖈𝖘

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top