Una vez que los chicos entraron al salón, el maestro entró con noticias muy importantes.

Maestro: Buenos días, alumnos.

Todos: Buenos días, maestro.

Maestro: Les tengo una noticia muy importante: hoy vamos a tener tres nuevos alumnos.

Greg: ¿Tres alumnos nuevos? -*Dijo susurrandole a Amaya y Connor*

Connor: Así es Greg, eso quiere decir que tendremos nuevos amigos. -*Dijo susurrando*

Amaya: Chicos, silencio. El maestro los va a presentar. -*Dijo susurrando*

Maestro: Bueno, pasen. No sean tímidos.

En eso, los tres alumnos nuevos pasan y nuestros héroes se sorprendieron al ver quienes eran los nuevos alumnos.

Maestro: Presentense a la clase, por favor.

Romeo: Hola, mi nombre es Romeo. Y espero tener un buen comienzo con ustedes.

N. Nocturno: Hola, soy Nick. Y también espero llevarme bien con ustedes.

Luna: Hola, yo soy Luna. Y yo también espero tener un buen comienzo.

Greg: Ay, ¿porque tenían que ser ellos? -*Dijo susurrando*

Amaya: Ahora ya no podremos estar en paz en la escuela. -*Dijo susurrando*

Maestro: Bueno Romeo, siéntate al lado de Amaya. Nick, siéntate al lado de Connor. Y tú Luna, siéntate al lado de Greg.

A la hora del receso...

Nuestros héroes se encontraban escondidos detrás de la escuela viendo a los nuevos alumnos.

Greg: No puedo creer que los nuevos alumnos sean los villanos nocturnos.

Amaya: Seguro se inscribieron aquí para hacernos la vida imposible.

Connor: Pues si queremos saber qué traman, vamos a tener que interrogarlos.

Amaya: Connor tiene razón. Siempre la tiene. -*Dijo mirando a Connor*

Connor: Em, ¿ok?

Con los villanos...

N. Nocturno: ¿Estás seguro que querran hablar con nosotros, Romeo?

Romeo: 100% seguro, Ninja Nocturno. Además, es la única opción que tenemos.

Luna: Pues de verdad necesitamos su ayuda. Pero conociendolos, seguro no nos querrán ayudar.

Romeo: Pues tendremos que convencerlos. Si quieremos recuperar nuestras cosas perdidas en ese lugar.

N. Nocturno: Sólo espero que nos crean.

En eso nuestros héroes se acercan a ellos.

Luna: Que bueno que están aquí, insectos en pijamas.

Connor: ¿Se puede saber por qué se inscribieron a nuestra escuela?

Amaya: Seguro para hacernos la vida imposible.

N. Nocturno: No nos inscribimos para eso.

Greg: ¿Ah, no?

Romeo: Vinimos porque necesitamos su ayu... Ayu... Ayu... Buagh.

Amaya: ¿Nuestra ayuda?

Romeo: Sí, eso.

Connor: ¿Para qué? Seguro para traicionarnos después.

Luna: Nada de eso. Queremos que nos ayuden a encontrar nuestras cosas perdidas.

Greg: ¿Dónde las perdieron?

N. Nocturno: Cuando pasábamos por ese bar abandonado.

Connor: ¿El bar dónde ocurrió esa masacre hace más de 20 años?

Romeo: El mismo.

Amaya: Pero si eso es una leyenda.

N. Nocturno: Leyenda o no, nuestras cosas desaparecieron ahí.

Luna: Por favor, ayudenos.

Greg: Bien, los vamos ayudar. Pero con una condición. Nada de trucos.

Romeo: Prometemos que esta vez no haremos trucos.

Amaya: Más les vale.

Luna: Entonces, ¿nos vemos esta noche?

Connor: Sí.

En eso suena el timbre de regreso a clases. Los seis van corriendo directamente al salón.

Continuará...