Úrsula:

Nos reímos coqueteando cuando nos despedimos del público para entrar al salón exclusivo. Vince y Amalia fueron a buscar copas de champagne para brindar por el éxito de Matthew en la conferencia.

—Oh, por dios, con esos discursos ganas por goleada, Matthew— susurro llevando los brazos a su cuello cuando entramos al ambiente, donde nos encontramos solos. Beso su mejilla con profunda intensidad—tienes el poder de enloquecerme siempre.

—Todavía quedan varias fantasías por vivir, Ursu— susurra en mi oído y siento mi piel temblar. Me intimido ante sus palabras y él ríe en bajo cuando se separa ante la llegada de Vince y Amalia.

Sonrío e intento disimular mis mejillas coloradas, caminando por el espacio y observando las pinturas.

—Muy bien, muy bien— Vince sirve copas de champagne mientras Amalia le dedica una sonrisa coqueta— hoy brindamos por el éxito, y por el arte— sonríe amable. Nos acercamos a la pequeña mesita para sujetar las copas.

—Espera, amor... también tengo una novedad importante— prosigue Amalia, mirándome contenta. Carajo. Mi corazón palpita mientras mi rostro se sonroja— Ursu, mañana tienes prioridad en la editorial para definir detalles de la impresión de los dos libros, es decir, lo adelantaron porque no pueden esperar más... y por otro lado, tendrás una exposición breve donde puedes hablar de tus libros y todo lo que quieras transmitir ante el público de una reconocida muestra de nuevos autores— finaliza.

Trago saliva intentando asimilar la realidad. El sueño llega. No se demora más. Todavía no lo puedo creer.

—Esa chica quiere arder en el mundo— susurra Matthew en mi oído en tanto se acerca con precisión hacia mí. Amalia y Vince se miran sonrojados por tal acción.

***

Una semana después:

Las personas van de un lado hacia otro, fascinadas del ambiente literario, los libros y sus autores favoritos. Me encuentro en un stand especial preparándome antes de salir a la conferencia. Me sorprendo cuando Meli pasa la puerta con una sonrisa llena de nostalgia.

— ¡Meli! Ay por dios no te tenías que molestar en venir, solo te quise avisar para que vieras a esa niña que creció en tu librería y biblioteca, mostrando al mundo el arte de escribir...—una lagrima amenaza con correr en mi mejilla.

— ¿Cómo no iba a venir a verte, Ursu querida? — susurra acercándose a mí para darme un gran abrazo— tus padres están muy orgullosos a pesar de los inconvenientes que han tenido.

— ¿Mis padres? ¿Hablaste con ellos, Meli? — exclamo sorprendida.

Sí, mis padres. Lo que parece lo más básico para mi es algo lejano, muy lejano. Mi relación con ellos nunca fue suficiente, es decir, nunca nos compartíamos nuestras cosas ni disfrutábamos bien la vida, ya que ellos viven trabajando nunca pudieron estar para mí. Por eso me acostumbre a crecer sola, a ser independiente y, en el mundo de Meli, a sentir un poco de hogar donde no lo tenía en mis orígenes.

—Sí, Ursu. No pude evitarlo. Te felicitan y te mandan saludos desde España— ella acaricia mi mejilla y le sonrío en respuesta, todavía sorprendida.

Entra Amalia por la puerta principal, junto a Matthew.

—Oh, buenas tardes— sonríe Amalia saludando amablemente a Meli. En el transcurso de ese despeje Matthew me susurra con sus labios "la biblioteca" haciendo referencia de burla a lo que sucedió con el mueble cuando follamos.

Siento mis mejillas encenderse y él ríe en bajo.

—Un placer, soy Matthew Stone— saluda Matt frente a Meli, quien me mira atrevida para guiñarme el ojo. La intento callar pero las risas incomodas desprenden en el pequeño ambiente.

—Gracias por cumplirle un sueño a Úrsula— vuelve la mirada hacia Amalia.

—Un placer, es encantadora— se sonríen entre ellas y Matthew levanta las cejas aprobando lo de encantadora, aunque con una mirada un tanto perversa— bien, vamos. Debemos desocupar el stand para que Úrsula salga cómoda al escenario...

Amalia y Meli se despiden, yendo junto al público. Matthew cierra la puerta con el fin de quedarnos solos. Se acerca a mí apoyando sus codos en la mesa y con una de sus manos juguetea con mi cabello.

—Estoy nerviosa, Matthew. Hay muchas personas, no lo sé... ¿Debo hacerlo? — me relamo los labios ansiosa. Él prosigue acariciándome el rostro.

—Es tu momento, Úrsula. Confía en ti...

Lo miro dudosa y bajo la mirada un poco intimidada. Él toma mi mentón con su pulgar para volver a llevarme a sus ojos.

—Muéstrale al mundo esas chispas y ganas de arder, Úrsula — prosigue, acercándose a mis labios para dejar un pequeño beso— y recuerda la frase que decía Cerati — susurra en mi oído y empiezo a temblar— "Mereces lo que sueñas" — sonríe dejando un beso en el lóbulo izquierdo, para luego despedirse hacia el público y dejarme sola antes de salir.

***

Luego de que el presentador anuncie mi nombre, me acerco lentamente al escenario aunque sienta mi cuerpo lleno de ansiedad y nervios.

—Buenas tardes a todos— susurro despacio ante el público cuando recibo el micrófono. Carajo— bueno, estoy nerviosa, perdón— río sonrojada y todos me acompañan con leves risas. Ante tal acción empiezo a aflojarme. Matthew me guiña el ojo brindando la suficiente confianza para continuar.

Respiro y exhalo, dejando el silencio como eco en el espacio lleno de personas. Cierro los ojos un pequeño instante y recuerdo las palabras de Matthew

"Muéstrale al mundo esas chispas y ganas de arder, Úrsula"

Los abro otra vez, encontrándome en sus ojos. Esos hermosos ojos que jamás me cansaría de verlos. Esos ojos que me dan vida, fuerza y me potencian. Esos ojos que me incitan a volar.

—Soy Úrsula... tengo veintiún años, y esta es la primera vez que publico mis escritos en físico, por tal, estoy todavía bastante shockeada—sonrío y observo la mirada de la gente atenta— siempre me gustó escribir, desde chica... desde chica creaba mundos llenos de reflexiones y aprendizajes, me dejaba comer por esas sensaciones profundas que solo existen en las páginas de un libro... ustedes, siendo lectores, deben saber de esa magia particular, de la imaginación y vivenciar todo como si fuera real— pauso y acaricio el libro en mis manos, mientras una lagrima corre en mi mejilla— siempre fui una chica bastante intensa, siempre traté de volcar en cada página todo lo que me ocurría, por eso en "Sentimientos de una adolescente" se tratan a través de los escritos diversos temas de la adolescencia, un poco de mi poesía para calmar corazones o... para acompañar el dolor. En este libro se tratan situaciones a través de la escritura, imágenes, frases, poemas... un enfoque claro en esta revolución inmensa que tenemos como humanos a la hora de crecer. Por eso me llena de nostalgia poder mostrarles en estas letras mi adolescencia reflejada...

Silencio. Matthew empieza a aplaudir ante el público, en tanto las personas empiezan a acompañarlo. Siento que mi corazón se alivió de los involuntarios latidos que resonaban en mi cuerpo.

—Por otro lado... "Escritos de fuego" para un ambiente más erótico— susurro levantando la mirada hacia Matthew, quien me mira atrevido. Sonrío tímida para continuar hablando— aprendí que... lo que uno siente, sea lo que sea, lo debes dejar ser, no reprimirlo... solo les diré que, la Úrsula adolescente se hubiera sentido mal por compartir este tipo de escritos o hablar del sexo de una manera jodida, pero... se trata de crecer y evolucionar, de aceptarlo y de que la opinión de los demás no les importe. Por lo tanto sí, escritos de fuego tiene un alto nivel de erotismo, reflejados en un artista del que me enamoré intensamente. Y por primera vez, no me jode en absoluto como puedan llamarme los haters por ser estas sensaciones, me han dicho puta, podrán imaginarse... ahora sé que nada me detendrá en lo que quiero mostrar.

Su mirada me come iluminada. Le dedico una sonrisa rápida sintiendo mis mejillas acaloradas, recordando cada momento juntos y su manera de estremecerme constantemente.

—Para finalizar, avisarles que, en estos dos libros, estarán entrando al mundo caótico de esta chica intensa, que un día no soportó más el silencio y quiso sentirse libre, liberando todo lo que le sucedía, sus pensamientos y emociones, su lado más tierno y su lado más... ¿Caliente? — río ante mi última frase. Todos acompañan mi risa en un breve momento. Vuelvo a una extrema seriedad y sujeto fuerte la cadenita de mi pecho para mirar a Matthew, casi olvidándome de todo el público— no tengan miedo de sentir, hacer y pensar lo que quieran, no tengan miedo de ser quienes son, y si se sienten en un pozo oscuro, porque yo sé de esa sensación de no quererse, les juro que la luz en algún momento estallará, que se van a encontrar a sí mismos pero... nunca dejen de hacer lo que llevan en el alma, no desconfíen de sus sentimientos y de la llama que cada uno lleva en su interior... y júntense con energía que los potencie, y demuestren a todos aquellos que quisieron tirarlos abajo que pueden y podrán con todo lo que venga, enfóquense en ustedes mismos y... como dice Cerati...— respiro y exhalo, deteniéndome en el tiempo— merecen lo que sueñan— le sonrío sintiendo mi rostro empapado de lágrimas. Matthew me dedica una mirada profunda y llena de ternura.