Advertencia: El siguiente capítulo contiene una fuerte escena sexual con utilización de fuego. Es leve. Pero aprendamos a separar ficción de realidad. Tal como indica el capítulo es una fantasía y es parte de mi imaginación, eso no justifica que lleven a practica o lo normalicen. Si no te sientes maduro para enfrentarlo, saltea el capítulo. No hay problema. 

Matthew:

Sábado

"Olvidaste tu mochila en el auto, Úrsula. Él sábado pasaré por la librería, están las llaves aquí"

Un mensaje que dará rienda suelta a una fantasía. Úrsula lo merece. Ella lo buscó y se lo ganó, las ganas insaciables de hacerla sentir bien y que continúe descubriendo su fuego interno.

Infiltrado, completamente infiltrado cuando observo el cartel con los horarios y el cerrado de su lugar de trabajo. Entro con la llave y procedo a ingresar en esta hermosa biblioteca para dejar todo a mi manera.

Una decoración sensual con velas, una luz tenue brindando un color exótico al ambiente. El lugar transformado completamente.

Estoy loco.

En la tarde Úrsula vendrá, y se llevará una jodida sorpresa.

***

El atardecer se avecina sobre las calles transitadas, despegando un color lila. El clima es agradable, no hay frío visible y la calidez asoma en todos los cuerpos, generando una sensación de bienestar.

Me apoyo en la puerta de la librería disponiéndome a fumar. Exhalo el humo con gran placer hasta que la observo.

Allá la veo. Radiante otra vez. Lleva un outfit simple pero llamativo, una pollera destaca sus curvas mientras una finita remera marca su corpiño de lencería a través de la tela.

—Matthew— sonríe dejándome un beso en la mejilla. Noto sus mejillas acaloradas.

— ¿Puedo entrar contigo? — cuestiono sin dejar sospechas de nada.

—Claro— le entrego las llaves y se dispone a abrir. No sabe lo que le espera. Al ingresar la sujeto de la mano para traerla hacia mí. Su rostro queda delatado con los ojos prendidos ante mi gesto.

—La librería continuará cerrada, Úrsula Lee— susurro cerca de ella, mirándola atrevido.

—Matthew, no entiendo— ríe nerviosa.

Me acerco acariciando su cabello, y noto como la tensión desde su parte empieza a aumentar.

—Shh— beso su cuello cuando estoy atrás de ella, sintiendo nuestros cuerpos cada vez más juntos— si estás sola, déjate llevar aunque sea una locura. Aunque sea déjame intentarlo, si no quieres desistiré— coloco una cinta negra en sus ojos. Ella suspira y su boca queda entreabierta, anonadada.

Sonrío para sujetarla de la mano y dirigirla hacia la biblioteca. La biblioteca de sus sueños. Ese hermoso espacio capaz de fantasear lo que sea.

Siento la respiración acelerada de Úrsula, en una mezcla de tensión, ganas y nervios al mismo tiempo por ser otra vez un lugar público.

En un breve silencio me quito la remera, dejando mi torso desnudo para luego acercarme a ella.

— ¿Recuerdas que me dijiste que tu fantasía era hacerlo en esta biblioteca? — susurro sobre su oído sintiendo su piel erizarse contra mi cuerpo.

—Matt— suspira fuertemente— no lo dije, y además no creo que sea lo correcto.

Río en bajo por su declaración.

—Vamos, dijiste tal vez... y tus ojos me denotaron que sería una buena fantasía.

Traga saliva cuando mis manos descienden en su espalda, asomándose en su abdomen.

—Las fantasías deben cumplirse Úrsula, no las puedes reprimir ¿O acaso quieres dejar este momento candente y seguro único en tu vida? Hazlo. — bajo mis manos por su abdomen trazando círculos a lo que empieza a temblar— ¿Puedes detenerte en cómo te estoy haciendo sentir ahora? ¿Realmente quieres que pare? Dime, Úrsula... ¿Qué hacemos con esto? Pues no imaginas lo hermosa que es la escenografía con una modelo tan linda como tú sobre este fondo...

—Matt, el local...— exhala tirando la cabeza hacia atrás y observo su cinta negra tapándole los ojos.

—Ese estúpido cartel está en cerrado, Úrsula. Ahora estamos solos en la biblioteca que tanto amas de tu trabajo. No vendrá nadie, bonita.

—Matt —suspira fuerte— ¿Cómo puedes provocarme tanto?

— ¿Cómo no podría contigo? — sin soportar más bajo sobre su cuello succionando toda esa zona profundamente, mis lamidas son intensas y no hay una parte que mi lengua no quiera recorrer en su cuerpo tan preciado.

Me dispongo a quitar su remera, a lo que ella corresponde también sin pretextos. Sus manos tocan mi rostro, queriendo besarme.

Si supieras que tan hermosa y candente eres, Úrsula Lee.

Empieza a liberar su reprimido gemido desde que empecé a hablarle, y sinceramente me colapsa tan perfecta sintonía. Carajo.

—Eres jodidamente perfecta— gruño en su oído para sentarla abruptamente sobre el escritorio de la biblioteca en tanto empiezo a quitar hacia abajo su pollera junto a sus bragas.

Sus piernas flaquean leves cuando siente la caída de su ropa.

— Matt quiero verte por favor— muerde suavemente mi lóbulo y sus manos recorren deseosas mis abdominales.

—Espera, bonita. Se me ocurren tantas cosas para complacerte que no quiero distraer la sorpresa con tu vista ¿Confías en mí con lo que haré?

—Confío en ti, Matt. Hazlo ya.

Sujeto una vela que tengo sobre mi costado, abro sus piernas apoyándolas en mis hombros y empiezo a tocar su parte íntima con los dedos de mi otra mano.

Precavidamente, paso con una notoria lejanía la vela sobre su zona con el fin de hacerle sentir calor.

—Ah, Matt... ¿Qué carajos es eso? — gime fuerte y su cabeza cae hacia atrás en uno de los estantes mientras muerde sus labios.

Amo su manera de prenderse tan rápido y olvidarse del mundo terrenal.

—Contrólate, bonita. Que no quiero dañarte ni provocar incendios más que el que llevas ahora en tu interior.

—Matt— libera en un bajo grito ahogado. Suficiente para quitarle la cinta y ver su hermosa mirada encendida. Mira hacia abajo con gran misterio. — Matt, carajo.

Le sonrío disfrutando el placer que estoy logrando que sienta.

—Tengo una cabeza demasiado loca ¿No crees? — paso rápidamente la llama cerca de su zona intima.

—Matt maldita sea— ronronea suavemente.

—Estas tan linda Úrsula, si supieras como estoy disfrutando esto— vuelvo a pasar la llama de una manera más lenta.

—Matthew— gime ansiosa.

—Oh no, espera. Falta la mejor parte.

Paso nuevamente la llama de la vela cerca de su zona, antes disminuyendo el nivel del fuego para dejarlo más bajo, soplo con rudeza sobre mis dedos que resbalan en su humedad lamiendo su interior rápidamente y en profundidad sujetando fuerte sus piernas, ya que con esa simple acción empieza a temblar de manera intensa sin poder controlarlo. Creo que nunca la escuche tan extasiada con sus gemidos y gritos.

—Clímax— susurro sobre su oído volviendo a su cara. Toma mi rostro de manera brusca entre sus delicadas manos para empezar a besarme (o devorarme). Sus labios juguetean con los míos de una manera extremadamente pervertida.

Se arrodilla ante mí con besos en tanto no deja de bajar lentamente, lamiendo mi torso y mi entrepierna, bajando los pantalones para liberar mi erección.

Dulce venganza.

—No puedo soportar verte tan salvaje, acabaré demasiado rápido— sonrío dejándome llevar por su delicado trabajo.

Ella me dedica una mirada atrevida y al mismo tiempo sonrojada.

Es tan perfecta.

Inmensa tortura cuando su lengua recorre lentamente mi miembro.

Dulce venganza.

Sus ojos incendiados me miran con ganas de obtener mi estado más lejano.

Hasta que su boca da el primer paso comiéndome completo.

Y sí que lo logra.

—Ursu...— gimo su nombre como si estuviera en un sueño. Parece un sueño y es una realidad que nadie quisiera detener si le pasara.

Su boca pretende adaptarse a la situación que solo ella puede llevar en este momento.

Ahora soy de ella. Completamente de ella.

Empieza a acelerar sus movimientos y toma sin aviso mi mano para dirigirla a su cabello. Ya entiendo con qué fin.

—No puedo— contesto. Nunca hice sexo oral ejerciendo presión sobre alguien. Ella se separa de mi miembro mirándome atenta.

—Hazlo, Matthew Stone. Quiero sentirte profundamente y estoy seguro de que tú también lo deseas. Somos uno, Matt.

Dudo pero su mirada convencida y en confianza me permite tal acción cuando se desvía otra vez en mi sexo, con notorias ganas.

La sujeto del cabello para acelerar su oral. Tal movimiento y situación me lleva a la perdición.

Y así nos convertimos en uno, ella adaptándose a mí, yo adaptándome a ella. Dos salvajes que se devoran sin compasión con el solo fin de obtener placer. Más y más placer. Como una droga de la que no puedes dejar de consumir.

Cuando estoy a punto de acabar la subo nuevamente cerca de mi rostro. Me apresuro en colocarme un preservativo en tanto nos besamos con pasión y demanda, la doy vuelta para sentarla sobre el escritorio y jadea ante tal brusquedad.

—Somos insaciables, Úrsula— gruño sobre su oído y ella sonríe de lado. Se ve tan hermosa. Tan jodidamente radiante cuando se olvida de esos demonios mentales.

Nos unimos sobre el escritorio, ella sentada dejándose caer sobre la estantería por mi fuerza, queriendo liberar nuestras cargas y sentimientos, queriendo sentir mucho. Los libros tiemblan y amenazan con caerse. Nos reímos levemente. Mis embestidas no pueden controlarse y sus gemidos me llevan a una plena lujuria de la que no nos podemos detener. No hasta liberarnos completamente.

—Matt— gime sujetando mi cabello y tironeándolo. Beso su cuello y sus pechos en tanto no dejo de acelerar para que acabe. Dulce tortura en mi cuerpo esperando su orgasmo.

—Tan linda— susurro en su oído y ella se relame los labios, mordiéndolos. Cada maldito gesto y sonido me prende más y me invoca más a llevarla a un extremo. Mi mano busca su intimidad otra vez, ejerciendo presión en esa delicada zona que libera un éxtasis de sensaciones.

Sus gemidos continúan sin precaución, comiéndose el aire y el silencio donde se escucha la melodía de nuestros cuerpos chocando.

Chocando más y más. Acelerando. Úrsula temblando. Yo soportando. Los sonidos escapando de nuestras bocas.

Libero un fuerte jadeo cuando siento una inmensa corriente sobre mí. Tiro mi cabeza hacia atrás ante mi última embestida más brusca y la aceleración de mis manos en su intimidad.

—Matt, carajo—libera en un grito alto y jadeante cuando siento sus piernas temblar y avecinar un jodido orgasmo que se fusiona con el mío. Ambos llegamos a una potente descarga.

Suspiramos fuertes dejando caer nuestras cabezas en los hombros de cada uno. Las respiraciones continúan intensificadas ante tal intensidad, intentando calmarse. Un leve silencio donde solo queda el inmenso placer vivenciado.

— ¿Qué fue ese ruido? — pregunto agitado y sonrojado.

— ¿Qué ruido?

—Cuando gritaste es como si algo se hubiera roto— sonrío atrevido.

Sus gemidos son mi perdición.

—Matt— me palma riéndose y le devuelvo la sonrisa. Se acomoda para sentarse y se desequilibra. —Ah Matt ¿Qué carajos rompimos?— ríe más fuerte.

—La parte baja del escritorio— prosigo. Ella empieza a reírse nuevamente.

—Ay Matt— sus mejillas se inflan tratando de controlar una tentada pero es imposible. — ¿Qué le diré a Meli?

—Pues que viviste la historia de una novela erótica y muy hot en vida real, que un personaje te tomó y te hizo suya. — muerdo mis labios levantándole las cejas y profundizándole la mirada.

Tira la cabeza atrás, riéndose mientras su rostro se colorea rosado. Puedo ver sus ojos brillantes, sus labios hinchados y rojizos. Tan hermosa.

—Imbécil, ya, le diré que estaba viejo y quise subirme a arreglar unos libros y se rompió. Debo pagarlo. Carajo.

Río acariciando su mechón de cabello revoloteado.

—No estás tan ofendida y lo sabes porque fue uno de tus mejores momentos sexuales ¿No me lo vas a negar, verdad? — le dedico una mirada extremadamente perversa.

Ella se intimida levemente, mordiéndose los labios.

—Idiota, eres un fucking artista sexual hasta en cuerpos reales. Te amo— besa profundamente mi boca mientras muerdo su labio inferior. Gime en respuesta. Le sujeto con mis manos las mejillas para apretujarlas y devolverle el beso con más fuerza.

ELECTRICITY- ARCTIC MONKEYS

Darlin' tell me something I don't know

Be my baby, be my GTO

Call me something no one else calls me

I forget how I want it

That electricity

My heart was breaking and got left unlocked

Didn't see you sneak in but I'm glad you stopped

Tell me something I don't already know

Like how you get your kisses to fill me with electricity

Love like locked horns

Love like dominos

Be my midnight

Be my ebb and flow

I forget how I want it

How it crept up on me

It takes over

Electricity

And my heart was breaking and got left unlocked

Didn't see you sneak in but I'm glad you stopped

Tell me something I don't already know

Like how you get your kisses to fill me with electricity

Separated

There I face it

Love like thunder

Love like falling snow

Tell me something I don't already know

Like how you get your kisses to fill me with electricity

ELECTRICIDAD- ARCTIC MONKEYS

Cariño, dime algo que no sé

Sé mi bebé, sé mi GTO

Llámame algo que nadie más me llame

Olvidé cómo lo quiero

Esa electricidad

Mi corazón se rompió y quedó desbloqueado

No te vi entrar, pero me alegro de que pararas

Dime algo que no sepa

¿Cómo haces que tus besos me llenen de electricidad?

Amor como cuernos cerrados

Amor como dominó

Sé mi medianoche

Sé mi reflujo y flujo

Olvidé cómo lo quiero

¿Cómo se me arrastró encima?

Se hace cargo

Electricidad

Y mi corazón se rompió y quedó desbloqueado

No te vi entrar, pero me alegro de que pararas

Dime algo que no sepa

¿Cómo haces que tus besos me llenen de electricidad?

Separados

Ahí lo enfrento

Amor como trueno

El amor como la nieve que cae

Dime algo que no sepa

¿Cómo haces que tus besos me llenen de electricidad?

https://youtu.be/-GlwKJBPZms