Atsushi y Ryunosuke habían llegado al centro de Yokohama, comenzaron a reír tras la persecución que tuvieron – y... bien ¿A dónde vamos? – pregunto Atsushi sonriente

― ¿acuario o zoológico?

― Mmm...

― Elige Jinko o elegiré yo

― Ah... ¿e-e-eh? N-no sé, aam...

― Bien – tomo la muñeca del albino – vamos al Zoológico

― ¿zoológico? ¿po-por qué?

― Por qué así lo digo yo

Atsushi se sonrojo, siguió al mayor. Iban en el tren hacia el zoo, Atsushi miro al azabache - ¿después podemos ir al museo de fideos? – pregunto

― Claro, en nuestra siguiente cita iremos al acuario y comeremos fideos en el museo de fideos – menciono y miro al albino – eres algo rarito en eso. – Atsushi inflo sus mejillas

― Me gu-gustan

― Está bien, está bien – le sonrió - ¿quieres ir a Sankeien gardens en otra?

― Me en-encantan las flores

― ¿Qué quieres ver en el zoológico?

― Mmm...

― ¿los tigres?

― ¡camaleones!

― ¿camaleones?

― Si – dijo Atsushi emocionado – son tan bonitos

― El chico tigre enamorado de camaleones

Hubo un gran silencio, su parada llego, bajaron dirigiéndose al zoológico. Pagaron sus entradas y comenzaron su recorrido, eran un lugar completamente verde, más como ir caminando en el parque, los animales estaban sueltos pero lejos de ellos, podían disfrutar de cada lugar y estatua. – Atsushi

― ¿mmm? – el azabache le coloco unas orejas de tigre - ¿e-esto?

― Ahora eres un tigre

Atsushi le puso al azabache un gorro de camaleón con una cola de colores, no pudo parar de reír al verlo así. Akutagawa sintio una ligera sensación de querer matarlo al verse tan colorido pero ver a Atsushi reír a tal punto de tomar su estomago, era maravilloso

Más tarde a mitad del recorrido comían una hamburguesa - ¿seguro que puedes comer eso? Hoy trabajas a las 22:00, y jamás te he visto comer cosas con grasa

― Tranquilo Ryu, puedo comerlo – dijo metiéndose papas fritas a la boca – eres tan lindo al preocuparte pero no he desayunado no me vendrá mal algo extra para el resto del día

― Tu y tu hermano comen muy poco     

― Bueno cuando te dedicas a estar en el aire sostenido por una tela o sosteniendote de un tuvo debes tener cierto reglamento de comidas y ejercicios - le sonrio - no te preocupes, en serio 

― Como sea

― Me gusta eso

― ¿Qué?

― Que seas así, rudo y lindo... es una increíble combinación tuya

― ¿eres masoquista?

― Estoy comenzando a creer que quizá un poquito – menciono sonriente – Ryu

― ¿Qué quieres?

― ¿Por qué te gusto?

― ¿eh? Eso... Es un secreto

― Vamos dime, dime

― Hace años... Estuve hospitalizado, te lo mencione

― Si...

― Yo había perdido esperanza en mi tratamiento, pero hubo un chico que se me acerco, sus palabras me dieron fuerza para seguir, no sé si era la luz o que pero todo brillaba y gracias a él a su voz pude despertar

― Oh... e-ese chico debió ser de gran ayuda

― Eras tu

― ¿qu-que? ¿yo?

― Reconocí tu voz pero el hospital me lo dijo todo, tu pasabas tiempo en ese hospital

― Hablar con otros chicos... - se preguntó a si mismo Atsushi – no recuerdo haber hecho... ah

Atsushi recordó, cuando recién había llego al hospital, habían varios chicos que no eran visitados, y sintió un estrago al pensar en su hermano, así que acostumbraba a ir a las salas a visitar a otros – tu... ¿eras uno de los pacientes?

― Si... - tomo su mano – te debo mi vida

Atsushi se puso peor que rojo, estaba casi morado – Ry-Ryu... yo no te re-recuerdo y...

― No importa... sé que eras tú, tú mismo acabas de recordar que era un paciente ¿no es así? – le sonrió – antes llevaba el fleco largo

― ¿en verdad? – Atsushi movió el cabello del azabache - ¿y tenías cejas?

― Sigue y te golpearé

― Pe-perdón – Atsushi comió de su hamburguesa ensuciándose un poco

― Iré por servilletas

Ryunosuke se alejó, Atsushi suspiro profundo – Así que... Yo soy realmente importante para él... - miro su pecho y lo golpeo – apúrate, siente amor por él – aguanto las ganas de llorar – no seas desgraciado con alguien tan genial...

Akutagawa regreso y ayudo a limpiarlo, le miro mejor - ¿lloraste?

― Es-es que estaba conmovido

― Gato tonto – dijo el azabache y acaricio su mejilla – Ya hablamos de esto, no importa lo profundamente enamorado que este de ti, tu debes avanzar poco a poco y ver lo genial que soy, ya te gusto asi que llevas la mitad del camino

― S-si... - Atsushi se sonrojo. ¿como decirle que ni siquiera le gustaba? ¿Como podría seguir con esa farsa? Era obvio, daría todo de si para enamorarse de él, no importaba ya nada más. Respiro profundo y le sonrio al azabache

Siguieron su recorrido después de comer, estaban viendo unos monos jugar cuando el albino miro al azabache – los leones eran lindos ¿no?

― Los pavo reales y flamingos también

― Oh si, y esos caimanes

― Eran hermosos

― Los monos... juegan

― Si – le sonrió – sigamos, sigue el rio con patos y gansos

― ¿podemos acércanos?

― Si pero no podemos acercarnos a los pingüinos

― ¿hay pingüinos?

― Si, ¿no has visto el mapa?

― N-no – menciono con sus manos en su espalda – Ry-Ryu...

― ¿si?

― Mmm... e-esto... pues...

― Ya casi llegamos

― ¿eh?

― A los pingüinos

Y cierto, habían llegado con los pingüinos, Atsushi los vio entretenido y miro al azabache, tomo su mano, y esté le miro - ¿tomados de las manos?

― Di-dijiste le-lento ¿no? Y-yo qui-quiero sentirte ce-cerca

― Ya veo, está bien

― Ry-Ryu...

― ¿si?

Atsushi miro alrededor, casi no había gente – ¿po-podemos be-besarnos?

El azabache se sorprendió, Atsushi estaba completamente sonrojado. Tomo su otra mano, se miraban uno frente al otro, el albino comenzó a sonrojarse más. Cerró sus ojos y sintió... una tela. Atsushi abrió sus ojos teniendo la manga del azabache en medio – Ry-Ryu

― Te dije que lento, tú aun no estás enamorado de mí, ¿no dijiste que querías enamorarte?

― Y-yo...

― Tranquilo, tómalo con calma y vamos a divertirnos juntos ¿no crees?

Atsushi sintió un peso menos de encima, Akutagawa era todo lo que no había imaginado, era fuerte y delicado, era rudo pero fiel, inteligente y todo lo que le importaba era él y tenerlo cómodo. Atsushi apretó la mano del azabache – yo... ¡y-yo sé que me enamoraré! ¡Eres un chico increíble! Sería un idiota si no crece esto que siento por ti

El azabache sonrió y acaricio el cabello del albino – Sí no sintieras nada por mí, no me hubieras besado. Confió en ti – menciono tranquilo. Atsushi bajo la cabeza - continuemos

― S-si...

La cita continuo por los animales de granja donde Atsushi se montó en un caballo, se siguieron divirtiendo con las aves y terminaron el recorrido con un helado. Debían regresar antes de las 20:00. Atsushi debía salir a trabajar, o más bien, todos.

Finalizaron su cita y regresaron a casa. Más tarde, los Nakajima acaban de terminar su segundo show, Toru por fin se dignó a ver a su hermano - ¿te hizo algo?

― No me hizo nada Toru, la pasamos bien

― Cuéntame

― Fuimos al zoológico

― ¿en serio? – suspiro – supongo que no te quiere solo para coger

― Cla-claro que no, vamos paso a paso, hoy nos tomamos de las manos

― Atsu, ya lo besaste

― Pero fue un arrebato – menciono algo triste y miro a Toru – esto que hacemos... Es real y es muy bonito... E-Estoy aprendiendo a quererlo cada día más y es fabuloso... él es fabuloso - menciono sonriente - me hace sentir tan querido... 

― Vaya, nunca habías hablado así, jamás te acercas a las personas

― Lo sé... a mi... en verdad me debe gustar Ryu

― Suenas algo forzado Atsu... - le miro, Atsushi esquivo su mirada - Bien – suspiro Toru – solo porque estas todo emocionado porque te tomo de las manos, confió en ti

Atsushi sonrió, miro a los Akutagawa, ellos se quedaban a los lados de la puerta y le sonrió al azabache, suspiro un poco cansado, tenía un ligero dolor de estómago pero no le puso atención.

El tercer show termino, Ryunosuke llevaba a Atsushi al camerino cuando esté sintió un golpe en su estómago – hey ¿estás bien? – pregunto llamando la atención de Toru

― S-sí, estoy bien – respondió entrando al camerino

― Atsu, ¿estás bien?

― Sí, estoy bien

― ¿Quién está mal o por qué preguntan? – cuestiono Dazai entrando al camerino y viendo al joven albino apretar su estómago, obviamente Atsushi se soltó y se paró recto en cuanto Dazai apareció.

― No es nada Dazai-san – dijo Atsushi evadiéndole la mirada

Dazai tomo la barbilla de Atsushi y lo miro a los ojos – Nakajima Atsushi ¿te sientes mal? Mañana tienen show

― Estoy bien Dazai-san

― Dazai-san, no es para tanto – dijo Toru

― Bien – Dazai se sentó en el mueble del camerino – díganme par de gemelos revoltosos ¿Qué han comido en toda la semana?

― Ah...

― ¿café no es así? No han comido bien

― No-nosotros comimos algo de sopa

― Y helado

― pescado frito también 

― arroz deli-deli 

― Atsushi, Toru – les llamo Chuuya – saben perfectamente que deben comer bien y

― Está bien, no comimos nada de grasa, quizá algo de helado pero

― ¿grasa? – pregunto Ryunosuke y miro a Atsushi – Atsushi ho

Atsushi le tapó la boca, el azabache se la quitó - ¿Qué haces?

― N-no digas... - susurro Atsushi

― ¿hoy qué? – pregunto Dazai serio

― Hoy hizo... poco de calentamiento, debió tener un mal tirón – menciono Ryunosuke

― Bien – suspiro Dazai – ahora también debo vigilar sus comidas – dijo Dazai cansado

― Dazai ¿Qué vas a hacer?

― Hablare con una estúpida nutrióloga – dijo Dazai saliendo del camerino. Chuuya le siguió.

― Ryu, yo...

― Dijiste que podías comerla – dijo el azabache molesto

― Atsu ¿Qué comiste? – pregunto Toru preocupado

― Comió una hamburguesa y papás fritas – se quejó el azabache molesto

― Atsu – se quejó Toru - ¡puedes caer de la tela!

― Que-quería comerla – se quejó el albino

― ¡Atsushi! – le regaño Toru

― ¡que-quería pasarla bien! ¿de acuerdo? Como un chico normal que come comida chatarra en su cita

― No eres normal, necesitas mantener tu peso

― ¿mi peso? ¡apenas comemos!

― Es suficiente – dijo Sousuke, señalo a ambos Nakajima – ustedes dos, desmaquíllense, iremos a su casa

― S-si – respondieron los Nakajima

― ¿estás pensando lo mismo que yo? – pregunto Sousuke a Ryunosuke

― Claro que si – dijo Ryunosuke molesto – ese estúpido Jinko no se escapará de lo que le espera 

...

La buena noticia es que se va armar un desmadre, la mala noticia es que ese desmadre tendrá consecuencias, la buena noticia es que va a ver sexo, la mala noticia es que se descubrira todo, la buena noticia es que eso ya no importará y la mala noticia es que pronto terminará.

¡Gracias por leer!