9°
Natalia.
—¡¿Te pidió salir?! —gritó Clint mientras yo intentaba perfumar mi cuello en paz.
—Es lo que dije.
—¡¿Por?!
—Porque su madre y tú nos pusieron en contacto.
—No han hablado de nada. Incluso, mis charlas con él fueron más y más largas.
—Justamente por eso quiero que vayas, no será una cita como tal. Es una reunión con amigos suyos, dijo que puedo llevar a alguien.
—¿Seré tu chaperón? ¿De eso hablamos? Nat, tengo trabajo mañana y...
—Solo una o dos horas, mientras veo qué quiere. Me gustaría conocer personas, Clint...
—¿Qué es esta energía repentina por conocer el mundo? —preguntó Clint aún algo preocupado.
Avancé por la habitación en busca de mi vestido azul oscuro.
Suspiré y me detuve a ver como mi mejor amigo, aún con su pijama puesto, me veía con ojos de incertidumbre total. No estoy loca por aceptar salir con él.
Pietro es atractivo.
—Es un buen sujeto.
—Es un estúpido oficial o algo por el estilo.
—¡A ti te agrada!
—¡Pero a ti no te agradan esos sujetos, Nat! Lo que no quiero es que vuelvas a caer en las mentiras de otro idiota con dinero para acabar destrozada por él, y sé que tanto Kara como Lena...
—Ellas también creen que debo conocer personas. Ha pasado todo un maldito mes desde que Anthony se casó, Clinton. No puedo seguir recostada preguntándome si él aún piensa en mí, incluso si aún creo que lo amo —dije rápidamente.
Mi mejor amigo dejó de verme como si tuviese lástima por mí, y asintió sin dudar un solo segundo más.
—De acuerdo, lo necesitas, pero... ¿Un soldado? ¿No son acaso los que odian a tu familia? —preguntó acariciando mi mentón.
Sonreí.
—Mi padre...
—Tu padre murió en la guerra, Nat. Melina siempre repite que eligió mudarse para alejarte de todo ese mundo, y...
—Clint... —tomé sus manos —. No me casaré con él, quizá ni siquiera vuelva a verlo, relájate, por favor. Solo será una noche de tragos, con algunos de sus amigos, en un lugar tranquilo. Estarás a mi lado, si es un idiota no intentaré nada.
—Solo no quiero que te lastimen otra vez.
—Créeme que me rindo, no creo que esto de las citas me resulte en algún punto, mucho menos con un hombre que desaparece cada tanto por su nación.
Él suspiró.
—¿Yo conduzco?
Sonreí.
Clinton y yo nos pusimos en marcha hacía el lugar. No dijo mucho más, pero sé que estaba esperando que el sitio fuese cómodo.
Clint y yo somos mejores amigos hace tanto, puedo asegurar lo que piensa, lo conozco, e incluso sabiendo que no está convencido de esto, no lo hizo notar ni siquiera cuando entró de mi brazo y con una sonrisa.
—¡Natalia, querida! —Pietro se acercó estirando los brazos.
—¡Hey! Ahí estás...
—Y has venido acompañada... —dijo observando a Clinton.
—No dejaría a mi chica sola —habló él. Lo golpeé de forma suave —. Mejor amiga, mi mejor amiga.
—Es comprensible, es una mujer hermosa. No es para menos — me guiñó el ojo —. Natalia, te ves despampanante, y usted joven Clinton, no se queda atrás.
Mi mejor amigo estrechó manos con Pietro. El castaño sonrió y acomodó mejor su traje.
Su aspecto cambia bastante desde un uniforme maltratado por el trabajo a un traje de etiqueta y a la medida.
—¿Desean algún bebestible? —preguntó y una sonrisa esbozó entre sus labios y barba tupida.
—Iré por algo para mí y para Nat. Te la encargo.
Clinton se alejó a paso lento y Pietro lo vio alejarse antes de girarse hacía mí.
—Ven, te llevaré a mi mesa.
Tomé su brazo, me guió con una sonrisa mientras todos lo saludaban.
—Eres muy respetado —dije yo.
—Soy un teniente coronel —sonrió —. Muchos aquí desean que los conozca, y me gustaría poder hacerlo, sin embargo paso tan poco tiempo en la ciudad que simplemente...
—No puedes ayudarlos a todos.
—Es justo eso —se encogió de hombros —. Gracias por aceptar esta invitación.
—Gracias a ti por invitarme. No creí que volvería a verte —admití —. De hecho, me sorprendió bastante tu mensaje.
—¿Por qué no te habría invitado a salir? Me pareces una mujer interesante y muy amable, por cierto.
Sonreí.
—Simplemente no creí ser el tipo de mujer con el que sales. Eres un militar.
Él bajó la mirada.
—No salgo demasiado de todas formas.
—Me sorprende bastante, y admito que no lo creo.
Él sonrió.
—¿Crees que con mi trabajo tengo tiempo de ser romántico?
—Mhm... Creo que tienes tiempo de ser un caballero.
Pietro acarició su barba, nuestros ojos se cruzaron y una extraña sensación familiar me inundó de pronto. Es... raro, sus ojos me recuerdan a algo que ya he vivido, ¿es una señal?
—¿Crees que lo soy? —preguntó.
No me dio tiempo a contestar, porque alguien llegó hasta su mesa, un hombre alto y de gran barba.
—Coronel Lehnsherr.
—Teniente Howlett —extendió su mano.
—Me alegra verlo, ha pasado mucho sin saber de usted.
—Estuve en misiones. Los últimos meses no he parado. Me detuve por el matrimonio de mi hermana, con el Sargento Barnes —habló él.
Enarqué una ceja.
¿Es hermano de la señora Barnes?
—Ya veo, próximamente esperamos su boda, coronel.
Ambos rieron y al despedirse, aquel hombre me sonrió.
—Lamento eso. Mucha gente aquí es conocida de mi padre, por ende...
—Saben del famoso coronel Pietro.
—Saben de mi apellido. Soy hijo de alguien importante, no es que yo lo sea realmente.
Clinton llegó a nuestra mesa, y Pietro le invitó a charlar. Pasamos toda la noche entre risas agradables. Él no parece un mal sujeto, no es mal anfitrión y de hecho, disfrutamos muchísimo los tres. Tiene la capacidad de que nadie se sienta incómodo, incluso creo que él y Clint hicieron muy buenas migas.
—¿Entonces también eres fotógrafo?
—De los mejores —dije yo.
—Exageras —Clint bufó.
—¿Cuál crees que es mi mejor perfil entonces? —preguntó Pietro y le entregó su móvil al castaño —. Toma una foto de mí, anda.
Clint rió.
Mi mejor amigo lo fotografió, ambos compartieron una mirada y una sonrisa, y nuestra noche siguió su curso.
Al llegar la media noche, todos los adultos estaban comenzando a irse, y nosotros no seríamos la excepción. Creo que esta gente se pone en pie a las 5 de la mañana, sino es que antes.
—Muchachos. Ha sido una noche agradable —comentó él acercándome hasta el auto de mi mejor amigo —. Clinton, espero verte pronto.
—Estaremos en contacto —dijo mi amigo. Él subió a su auto para darnos algo de privacidad.
—Natalia, gracias por venir. En serio, no creí que aceptarías, y sé que le pareces increíble a mi madre...
—No soy tan buena como parezco —admití. Él pasó un mechón de mi cabello tras mi oreja.
—Discrepo con eso, querida.
—¿Nos veremos otra vez? —pregunté sonrojada.
Él sonrió.
—Me encantaría invitarte a otro lugar esta semana. ¿Te apetece a algo más ruidoso que esta cena de vejetes? —preguntó.
—Sería increíble. Creo que lo disfrutaría mucho.
—Y yo, y yo...
Pietro se acercó para besar mi mejilla, y luego de hacerlo, abrió la puerta para mí.
Definitivamente no me arrepiento de haber aceptado. Tony no era el único hombre en el mundo, eso está claro.
[•••]
Wanda.
—Mamá dijo que Pietro tuvo una cita —dije a Bucky.
Él levantó la mirada desde su café.
—¿Planea casarse pronto? No soporta ser el segundo por primera vez —giró los ojos.
—James...
—No comprendo que planea.
—Nada, él simplemente quiere una compañera, ¿eso es malo? Mamá cree que es hora, y él siguió su consejo. No fue su idea.
—Ajá, claro —James bufó.
—¿Por qué crees que debes tener esta estúpida rivalidad con mi hermano?
—No es que crea que debo tener una... rivalidad con él —dijo molesto —. Tu hermano tiene un problema con no ser el centro de atención.
—Creo que aquella riña de adolescentes por la atención de mi padre debería quedar en el pasado, James —dije seria.
Él no contestó nada a eso. Sé lo mucho que adora a mi padre, sé que lo siente como si fuese suyo, pero es absurdo que odie a Pietro por esto. Mi hermano solo es su hijo, y siendo el mismo ha logrado que papá lo tenga en un pedestal. Eso no significa que quiera menos a Bucky, lo adora, en serio. Se encargó de James desde los dieciséis cuando papá cumplía visitas periódicas en la correccional.
—¿Podemos hablar de algo más?
—¿Como qué?
Él sonrió. Se acercó lentamente a mí, y unió nuestros labios. Cerré los ojos disfrutando de sus besos, pero de pronto lo aparté.
En mi mente se repetía aquello.
"Wanda, uh, James... Bucky, yo... Lo vi, ¿bien? Lo he visto con una mujer. No recuerdo, creo que era castaña"
Imaginarla besando a mi esposo era una tortura por la que pasaba cada que sus labios estaban contra los míos, ¿esto es sano? No lo creo.
—Amor... —lo aparté —. Hablo en serio, ¿serías capaz de prestarme atención en eso?
Él suspiró.
—¿Qué quieres que haga? No me agrada tu hermano, dudo que...
—Okay, pero al menos podrías intentarlo, por mí.
—Wanda...
—James, hasta el día de hoy, siendo tu esposa me cuesta entablar conversaciones con tu madre. Sabes que jamás se sentirá cómoda contigo casándote conmigo.
—Eso no me importa. Yo te amo, y es más que suficiente —dijo él.
—Y justo por eso... Yo sigo intentando que tu mamá note que quiero estar a tu lado y amarte, pero también me gustaría que... Intentes.
Él observó mis labios y me alejé.
—Y deja de intentar solucionar todo con sexo.
Hizo un puchero, y me crucé de brazos.
—Bien, de acuerdo, preciosa. Lo intentaré... —levantó las manos en señal de rendición.
—¿De verdad?
Él asintió pasando sus manos por mi cintura.
—De verdad.
—¿Lo prometes?
—Lo intentaré, amor... Ahora dame un beso. Este general no soporta otro minuto sin besarte.
Me aferré a su cuello y solo lo abracé, permitiendo que él bese mi cuello. No quería negarme, pero era imposible detener mis pensamientos sobre su infidelidad, incluso si estas semanas me ha demostrado compromiso absoluto en nosotros, y que solo fue un desliz. Quiero seguir pensando que soy la única para él.
Nota de autor:
¡Hey! No se olviden de votar y comentar !!
Las actualizaciones diarias volverán cuando vea menos lectores fantasmas, últimamente he visto mucha gente que solo viene a leer y ya no vota, btw, yo no escribo por los votos, honestamente soy más de estar pendiente de los comentarios pq me gusta saber qué sienten en cada capítulo, pero como escritor (dos años en esta plataforma sin parar por más de tres días) es desmotivante esforzarme en crear tanto para una historia, y tramas con personajes interesantes para ver que prefieren no votar porque "es muy hetero", es parte de la trama, les juro que más adelante será mejor, gracias!!
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top