Narra Hana

- ¡Ah, que bien sienta entrenar por las mañanas! - exclamé feliz mientras me estiraba, casi derrotó a Leona y sus compañeros en el entrenamiento de Magift, estoy bastante orgullosa de mí misma.

- ¿Verdad? Me levanto una hora antes y salgo a correr solo - habló esta vez el peliplata.

- ¿Podría acompañarte algún día? - pregunté colocando mis manos tras mi cabeza recibiendo una respuesta afirmativa aunque algo tsundere de su parte.

- Creo que estáis exagerando - habló el animalito sobre mi cabeza agotado - hace poco fue el torneo y ya estáis entrenando.

- Oh es verdad, aún no lo sabéis - habló el de orejas de hiena llamando mi atención - Cada mayo se celebra un torneo incluso más grande que el interno - explicó haciendo que mis ojos brillantes como nunca, me sentía como una niña pequeña a la que le acababan de comprar un dulce.

- Es una competencia entre escuelas - añadió soñoliento Leona.

- ¿Eso significa que hay más escuelas mágicas...? - cuestioné impresionada.

- Nuestra escuela compite contra la Royal Sword Academy cada año - explicó el de ojos verdes, juraría que Che'nya estudiaba ahí.

- Hay muchas escuelas de magia en Twisted Wonderland, pero las que más destacan son la nuestra y la Royal Sword Academy.

- ¿Qué clase de escuela es la Royal Sword Academy? Suena bastante pomposa - pregunté mientras me sentaba en el suelo.

- Es una escuela llena de pequeños príncipes mimados - explicó con algo de asco el líder de Savanaclaw y por un momento pensé en que a lo mejor su hermano estudiaba ahí.

La conversación siguió por unos minutos sobre las dos escuelas mágicas, sus respectivas participaciones en el torneo y cuál era la mejor institución.

- Mucha gente peleó por un puesto el año pasado y hubo un gran alboroto antes de que comenzase el partido - explicó el de cabello moreno con los brazos cruzados.

- ¡Así es como debe ser! ¡Tienes que luchar por el puesto que quieras, yanno! - exclamó mi compañero dispuesto a conseguir un sitio en el equipo para el siguiente partido.

- No lo tendrás fácil Grim, pues yo también competiré por un puesto - hablé determinada a participar en el torneo.

- La competencia entre escuelas es mucho más importante que el torneo interno ¡Así que es una buena oportunidad para mostrar vuestras habilidades! - añadió Ruggie con su típica sonrisa.

- Os recomiendo que penséis en como os van a elegir para el equipo en vez de los espectadores - dijo el de ojos verdes con los brazos cruzados.

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- ¡El desayuno después de sudar es lo mejor, yanno! ¡Me dan ganas de comer más carne! - exclamó alegremente el animalito, después del entrenamiento habíamos ido a la cafetería para desayunar.

- Oh sí ¿Por qué hiciste algo tan estúpido como hacer un contrato con octo-punk? - cuestionó Leona algo fastidiado, empecé a explicárselo y cuando acabé comenzó a reírse - ¡JA! ¿Hiciste un contrato para liberar a esos idiotas? - mi mirada se estrechó al escuchar el tono burlón de contrario.

- Es verdad, ustedes no hicieron un trato con Azul ¿no? Aunque Leona-sempai parece una persona que va por la vía rápida - murmuró el peliplata - Ah, no, por favor, olvide lo que dijo - se disculpó arrepentido cuando se dio cuenta de lo que había dicho.

- Idiota. Nadie en su sano juicio haría un trato con octo-punk. Firmé un contrato con él, pero me costó un ojo de la cara - espero que eso no lo haya dicho aposta, por que sino me voy a ofender mucho okno - en cualquier caso, cuanto más quieras algo, más desventajoso será el trato para ti.

- Igualmente no me rendiré - dije determinada, no podía perder.

- Déjame aclarar esto, las condiciones del contrato son... conseguir una foto del Atlantica Memorial Museum...

- Antes del atardecer del tercer día... - finalizó Ruggie para después quedarse en silencio por unos segundos, poniéndome nerviosa - Mis condolencias... - murmuró apenado mientras sus orejas bajaban.

- Todavía no lo hemos intentando, no necesito vuestra lástima - contesté algo enojada, no me gustaba que me menospreciasen.

- Hm, entonces ¿por qué no vas a y comenzáis a buscar? El tiempo es dinero ¿no? - cuestionó Leona con una sonrisa maliciosa.

- (eS uNa TrAmPa) - pensé - (no caigas ante su provocación y piensa antes de hablar, recuerda que necesitas pensar en una estrategia para derrotar a Azul).

- ¡Eso está hecho! - contesté determinada - (¿¡Qué haces Hana?! ¿¡Eres estúpida?! ¡Te dije que no le hicieras caso!).

- ¡Llevemos también a Ace y Deuce con nosotros! ¡Vamos! - exclamó Grim comenzando a irse junto a Jack, yo no quería, prefería esperar un poco y pensar en un plan, pero quedaría mal frente a Leona y mi orgullo no lo permitiría.

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- ¿Realmente la poción funcionará? - cuestionó Deuce mirándola desconfiado, después de reunirnos con el dúo "una neurona" fuimos a la cámara del espejo para llegar al Mar de Coral.

- No conseguiremos nada si seguimos dudando. Sólo bebamos y acabemos con esto - dije algo impaciente tomando la botellita y dándole un trago al brebaje - blegh... - dije arrugando el morro y desviando la mirada asqueada, había tomado cosas asquerosas muchas veces, pero esto era peor.

- Creo que el sabor de estas pociones mágicas debería mejorarse, pero ¿por qué los adultos actúan como si no fueran nada...? Ugh... -se quejó el pelirrojo sacando la lengua.

- La efectividad es más importante que el sabor ¿sabes? - cuestionó el de dibujo de pica con los brazos cruzados - ¿Qué...? De repente se está haciendo difícil respirar... - su voz empezó a entrecortarse.

- ¿Esto significa que nuestros pulmones se están adaptando? - propuso el de ojos ámbar algo alarmado.

- Mierda, se está haciendo muy difícil respirar... ¡Apurémonos! - se quejó Ace colocando sus manos en su cuello intentando disminuir el dolor.

- ¡Oh, espejo de la oscuridad guianos al Mar de Coral! - gritó el de tez morena con fuerza y un brillo se cubrió todo nuestro alrededor cegándonos.

Cuando abrimos los ojos una maravillosa vista me asaltó, un paisaje marino se extendía ante mí, un brillo estelar apareció en mis ojos y sentí un hormigueo en mis dedos y mi corazón comenzó a latir mar rápido.

- ¿Espera? Puedo respirar... - murmuró aliviado el peliazul.

- Oh, es verdad - añadió el animalito.

- ¡Whoa! ¡El Mar de Coral tiene un paisaje increíble! Si Cater-sempai estuviera aquí diría algo así como de "¡Es momento de tomar una foto!" - habló el de dibujo de corazón con una sonrisa divertida.

- ¡Mira ese pez! ¡Es adorable! - exclamé como niña pequeña admirando unos peces que pasaban cerca, mis ojos brillaban como nunca y me sentía feliz.

- No tenemos tiempo para admirar la vista - me cortó el de orejas de lobo - Démonos prisa y consigamos la foto - y tras decir esto comenzamos a avanzar.

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- ¡Espera, veo algo...! - exclamó Deuce de repente señalando una enorme estructura frente a nosotros.

- ¿Qué? ¡Aquí hay muchas personas que tienen colas de pescado en lugar de piernas! - exclamó el animalito sorprendido mientras señalaba a un par de tritones que custodiaban la puerta del edificio.

- Sirenas ¿eh? Nunca pensé que habría personas viviendo bajo el agua - admitió el de tez morena algo impresionado mientras nos aproximábamos a la estructura, en ese momento sentí como si las raíces comenzasen a extenderse por mis extremidades y un escalofrío recorrió mi espalda, se acercaba un peligro inminente y lo vi.

- Ah~~~Koebi-chan y compañía están aquí - escuché a una voz juguetona murmurar mientras dos alargadas sombras pasaban delante de nosotros, mierda.

- Esa voz... ¡Son los gemelos siniestros! - exclamó Grim señalando al frente y confirmando mis sospechas.

Tras unos segundos los gemelos de Octavinelle aparecieron delante de nosotros, pero no eran humanos.

- ¿Por qué demonios se ven así? - cuestioné levantando una ceja, no sabía si sentir fascinación o repulsión.

- ¿Hm? Siempre nos hemos visto así. Somos sirenas ¿sabes? - contestó Floyd como si tener cuerpo de anguila fuese algo normal.

- ¿Y se puede saber que hacen aquí? - cuestioné con los brazos cruzados y el ceño fruncido, sabía que no estaban allí para darnos un premio.

- Es obvio que vinimos aquí para interponernos en tu camino - contestó el gemelo menor con una gran sonrisa, por cada segundo que pasaba podía sentir como unas cuántas venas se marcaban en mi cuerpo, de verdad que un día les voy a romper la nariz.

El dúo de anguilas no tardaron mucho en lanzarse contra nosotros para atacarnos y nos preparamos para la batalla.

Pero al estar en el agua tanto mi velocidad como mis habilidades se ralentizaron, además ellos eran mucho más rápidos y por alguna extraña razón los hechizos de mis compañeros esquivaban a los contrarios.

- ¡Jaja! ¡Es tan gracioso ver como se desesperan! - exclamó burlón el menor de los dos contrarios haciendo que mi ira empezase a aumentar - Os diré porqué no podéis golpearnos~ Mi magia única "Bind the Heart" hace que los ataques mágicos se desvíen ¿no es interesante? - cuestionó divertido.

- ¡No, no lo es! ¡Eso es hacer trampa, yanno! - se quejó el de orejas llameantes con el ceño fruncido.

- Floyd... No me parece bien que les hayas contado sobre tu magia única - le regañó Jade con los brazos cruzados y una expresión seria.

- Está bien~ No es como si pudieran hacer algo aunque lo sepan - se defendió el otro hermano haciendo puchero.

- (Cómo se nota que no conocen mi tozudez) - pensé mientras una sonrisa maliciosa se formaba en mi rostro.

- Muy bien. Simplemente estoy feliz de que tu magia esté colaborando contigo hoy - comentó el contrario con una sonrisa y, no lo admitiré en voz alta pero, me dio ternura, ver como se preocupaban el uno por el otro era bastante adorable, sino fuera porque me estaban fastidiando la existencia sentiría bastante cariño por ambos - no conseguiremos nada si no estás de buen humor, bastante problemático - al escuchar esto una bombilla se encendió en mi cabeza mientras mis labios se curvaban en una extraña sonrisa, creo que tengo una herramienta que me pueda ayudar con este "problemilla".

- Vamos, vamos~ Daros prisa y huid~ Si os atrapo os estragularé con mi cola ¿algún voluntario? - cuestionó Floyd con esa típica sonrisa psicótica que de tan mal humor me ponía.

- ¡Retrocedamos por ahora! - exclamé empezando a alejarme de los dos "pequeños" psicópatas.

- ¡Ajá, lo mismo sucederá cuando volváis! ¡No hay forma de que esas endebles piernas vuestras puedan ganarnos en el mar! - amenazó el menor de los dos a modo de burla, ya veríamos si eso pasaba 😈

- Esperamos vuestra próxima visita - se despidió el sonriente Jade haciendo que mis ganas de golpearles aumentasen ¿Acaso soy demasiado agresiva? Quizás.

- ¡Maldita sea! ¡Esto no acabará así! - fue lo último que dijo Grim antes de que hiciéramos una retirada estratégica.

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- ¿Estáis bien? - preguntó el de dibujo de pica cuando llegamos a la cámara del espejo.

- Más o menos... - contestó el compañero exhausto.

- No pensé que esos tipos serían sirenas... - admitió el peliplata algo devastado.

- Creo que nadie se lo esperaba - comenté sonriendo intentando mejorar el ánimo de mis compañeros.

- ¡Siento como si un tiburón me hubiera perseguido! ¡Es tan injusto que ellos puedan nadar tan rápido! - se quejó mi compañero como si fuese un niño pequeño.

- No hay forma de que podamos ganar contra las sirenas bajo el mar - habló el pelirrojo derrotado.

- No os desesperéis - dije esta vez - este ha sido el primer intento, íbamos sin plan y no sabíamos lo que nos esperaba. De los fallos se aprende y esta no es un excepción, la próxima vez tendremos un plan y les derrotaremos - finalicé mi discurso con la mano sobre el pecho. Aunque realmente odiaba cometer errores, en mi mundo, si cometías cualquier error, por mínimo que fuera, te podía costar la vida.

- Pero tenemos que conseguir esa foto pronto o no recuperaremos el dormitorio abandonado - habló Grim con las orejas gachas y un tono derrotado, me mataba verlo así.

- Primero, replanteemos nuestros movimientos - dije tomando al de cola de tridente en mis brazos para reconfortarle lo cuál funcionó pues se acurrucó en estos con una sonrisa adorable - tengo algún as bajo la manga, necesito algo de tiempo para tenerlo listo, aunque justo es tiempo lo que nos falta - finalicé algo frustrada, quizás podría quedarme toda la noche despierta intentando no hacer mucho ruido para no molestar a "su majestad".

- Sí... También le preguntaré a Cater-sempai por ayuda - dijo esta vez Ace recuperando algo de su buen humor, al parecer mi "discurso" había funcionado.

- Volvamos a Savanaclaw y hablemos con Ruggie-sempai y los demás también - añadió el de tez morena mientras empezaba a irse. Me despedí de mis amigos de Heartslabyul y me fui junto a Jack.

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No sé porqué pero tengo mucho sueño, en fin ¿qué os ha parecido? El otro día revisé el final de este arco y todas las cosas que tenía planeadas ¡Se han ido al traste >:v! Aunque creo que las fanáticas de Malleus van a agradecer este cambio, pero bueno, no puedo decir nada 😈😈😈😈😈😈

Tengan un buen día/tarde/noche y nos vemos en el próximo capítulo.

Continuará ❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️