Narra Hana

- Gracias por el arduo trabajo, Jade ¿conseguiste hablar con Kalim-san? - preguntó el peliplata ajustándose las gafas. Después de que Jamil se llevase con él a Kalim, el trío de Octavinelle me acompañó a mi habitación para seguir con nuestro plan.

- Sí, es como pensabas Azul - contestó el nombrado con una expresión seria - es muy probable que a Kalim-san le estén lavando el cerebro con magia - concluyó haciendo que celebrase mentalmente. No me alegraba de la situación en lo absoluto, pero estaba orgullosa de que mis sospechas fueran acertadas.

- ¿Es eso posible? - cuestionó mi compañero sin acabar de creérselo.

- Ya deben de saber que la magia única de Ruggie-san puede controlar los movimientos de las personas a placer ¿verdad? - nos preguntó el mayor de los gemelos recibiendo una respuesta afirmativa de nuestra parte - hay una variedad de magia hipnótica que también puede controlar la mente de una persona - explicó - Sin embargo, requiere de un alto nivel de magia, pero... no hay muchos magos por aquí que sepan usarlo - añadió.

- Sería imposible a menos que tengan la habilidad mágica de Azul - comentó su compañero algo alarmado.

- Incluso me costaría controlar a un ser vivo - admitió el nombrado. Tenía ganas de mofarme un poco de él, pero viendo la seriedad del momento ni siquiera me lo planteé.

- No creo que haya nadie al nivel de Azul en Scarabia - habló de repente el animalito llamando mi atención - la magia única de Kalim es algo bastante sosa, y Jamil dijo que solo era un alumno promedio.

- No creo que todo lo que haya dicho Jamil sea verdad - comenté pensativa mientras las miradas de todos se clavaban en mí - un halcón listo siempre esconde sus garras, después de todo - finalicé mientras una sonrisa retorcida se dibujaba en mi rostro.

- Entonces ¿quién está haciendo esto y por qué? - preguntó curioso el menor de los hermanos.

- Desafortunadamente, no pude extraer esa información - contestó su gemelo melancólico.

- ¿No podrías haber usado tu magia única? - cuestionó el heterocromático captando mi atención casi al instante.

- ¿La magia única de Jade? - preguntó el de orejas flameantes curioso - oh, sí... todavía no la hemos visto en acción ¿qué hace? - volvió a preguntar.

- Floyd... Siempre te digo que tengas cuidado al revelar nuestra mágica única a los demás - le regañó el nombrado mientras fulminaba a su compañero con la mirada y se cruzaba de brazos.

- Bueno decirle a Hana-san y Grim-san no hará ningún daño - habló el peliplata ajustando sus gafas - alguien sin capacidades mágicas no podrá hacer nada, aún sabiendo la verdad - añadió con una sonrisa burlesca.

- Qué no tenga "habilidades mágicas", no significa que no pueda volver a romperte la cara - contesté crujiéndome los nudillos mientras le miraba con una sonrisa que rozaba lo sádico. Mi ojo, al igual que parte de mi cabello adquirieron aquel extraño tono fucsia que significaba peligro. Pude ver como el cuerpo del nombrado se tensaba levemente y retrocedía un poco, sus acompañantes sonrieron ante aquello con una sonrisa entre divertida y nerviosa.

- Muy bien, entonces... - habló el mayor de los Leech desviando la cuestión anterior - mi magia única se llama "Shock the heart", me permite hacer una pregunta que se debe responder con la verdad absoluta - explicó dejándome atónita, era realmente útil - sólo puedo usarlo una ve por persona y no está garantizado que funcione con magos fuertes o cautelosos como Azul - añadió - aunque funciona a la perfección con crédulos o personas que dudan de sus propios corazones, es una magia única con bastantes limitaciones, me temo - concluyó con una expresión algo triste.

- Aún así es realmente útil... - murmuré para mí misma.

- ¿Oh? Agradezco el cumplido, Hana-san - dijo el mayor con una sonrisa al escuchar mi comentario, mi cuerpo se tensó al oír aquello, mi intención no era que aquello llegara a sus oídos. Sentía mis mejillas arder ante aquella sonrisa, era bastante bonita - en cualquier caso,
Kalim-san es alguien muy amigable, por lo que fue fácil usar mi magia con él, pero... - y así nos empezó a contar lo que había pasado en la bóveda del tesoro.

...

- ¡Jajaja! ¡Qué interesante! - exclamó el prefecto de Octavinelle a carcajadas cuando Jade acabó de contar su historia - la promesa de Kalim-san ganó por completo a tu magia única.

- Es muy frustrante admitirlo, pero eso es lo que sucedió - contestó el nombrado sonriendo, pero aún así podía sentir su enojo ante aquella burla.

- Siempre pensé que Rakko-chan sería un bocachancla, esto es inesperado - comentó la menor de las morenas entretenida.

- Eso solo significa que es una promesa muy querida para él - añadió su compañero con una sonrisa similar a la del anterior.

- Fufu... Aún así, esa dedicación prácticamente ha revelado al causante de todo esto - habló el peliplata con una sonrisa victoriosa, al escuchar aquello solo pude pensar en una persona y no pude evitar sonreír también - todo lo que tenemos que hacer es ajustar un par de cosas y pillar al responsable con las manos en la masa ¿vale? Tengo un plan. Primero... - y nos empezó a contar lo que tenía pensado hacer para acabar con todo aquello.

...

- Hana-san, Grim-san, despiértense, por favor - al escuchar aquella tranquila voz mi ojo comenzó a abrirse dándome cuenta de que ya había amanecido. Tras contarnos su plan, el trío calavera se marchó a su habitación y yo me quedé dormida junto a Grim nada más tocar la cama. En ese momento recordé que había soñado, otra escena de Aladin. Esto era sumamente extraño, nunca había tenido tantos sueños seguidos y menos coincidentes unos con otros. Debía de haber algo más tras de esto.

- Hana-san, vamos - me dijo el de orbes azules llamando mi atención, al parecer me había quedado un rato mirando a la nada. Pedí unos minutos para poder cambiarme y después de eso me fui con ambos integrantes de Octavinelle y mi compañero.

...

- Buenos días, Kalim-san - saludó el mayor de los hermanos al entrar en la habitación del nombrado seguido muy de cerca por el resto del grupo.

- Hnghh... ¿Jamil? Buenos días - le saludó de vuelta el albino más dormido que despierto.

- No, soy Jade - contestó con una sonrisa divertida - nuestros nombres son bastante similares ¿no? Fufu

- ¿Eh...? ¿Qué? ¿Por qué estás en mi cuarto? - preguntó algo alarmado dándose cuenta de la situación.

- Te he traído tu té de la mañana y una muda de ropa - explicó el peliaqua con una sonrisa en su rostro.

- ¿Eh? ¿Qué? ¿Por qué...? ¿Dónde está Jamil? - volvió a preguntar el albino empezando a asustarse.

- No te preocupes, podemos ayudarte con tareas simples - contestó el de orbes azules con una sonrisa parecida a la de su compañero. En ese momento me giré al escuchar como llamaban a la puerta, y cuando ésta se abrió pude ver como tras esta se asomaba el subprefecto de Scarabia.

- Kalim, es hora de... - ni siquiera pudo acabar su frase, pues al acabar de entrar en la estancia se quedó helado al vernos allí - ¿Qué? ¿Azul, Jade...? Grim y Hana también... ¿Qué hacen aquí? - preguntó cruzándose de brazos y fulminándonos con la mirada.

- ¡Oh, buenos días a ti también, Jamil-san! - le saludó el de lentes animadamente - puedes volver a dormir un poco si quieres. Cuidaremos de Kalim-san a partir de hoy - explicó con una sonrisa dejando en shock al contrario - me di cuenta de algo ayer mientras hablábamos por la noche - continuó mientras su expresión se volvía seria por unos segundos - eres el que más ha estado trabajando estos días, Jamil-san.

- A esto le llamamos, el escuadrón para ayudar a que Jamil no se estrese - añadí con una sonrisa en mi rostro, había sido idea de Floyd y Grim ponerle ese nombre, la "reunión" de ayer fue graciosa cuanto menos.

- ¿Q-Qué? No, no puedo dejaros hacer eso - contestó el contrario con el ceño fruncido.

- ¡Oh... oh...! ¡¡¡OOOOHHHHH!!! ¡Esa es una gran idea! - exclamó el de orbes rojizos de repente, creo que me acaba de explotar un tímpano - así podríamos amenizar la carga de trabajo de Jamil.

- Los sentimientos de Kalim-san por su asistente son algo maravilloso de presenciar - comentó el heterocromático conmovido mientras un par de "lágrimas" salían de sus ojos - desearía que Azul aprendiera una o dos cosas sobre él, sinceramente - aunque estuviese sonriendo podía sentir su rabia hacia el nombrado, no sabía si reírme por el comentario o esconderme detrás de alguien, daba bastante miedo.

- ¡Ajá! Realmente te gusta hurgar en la yaga ¿no es así, Jade? - cuestionó el de cabellos plateados con una sonrisa que se desvaneció casi al instante dejando un semblante enojado, uff, los ataques personales están potentes - dicho esto, puedes descansar tranquilo y dejarnos esto a nosotros, Jamil-san - finalizó mientras su sonrisa volvía a su rostro.

- ¡Aceptaré esa oferta! - exclamó el de tez morena alegremente - Bien por ti ¿Eh, Jamil?

- Ahora Jamil-san, descanse un rato más en su habitación - y tras decir eso Jade echó al moreno de la habitación.

...

Tras acabar de preparar a Kalim, los cinco salimos de su habitación y marchamos hacia el salón para desayunar, llevaba un buen rato oliendo comida deliciosa y sentía como mi estómago había estado rugiendo desde hace unos minutos.

Al entrar en el Lounge, pudimos ver como Floyd organizaba a los estudiantes para preparar el desayuno y a Jamil yendo de un lado a otro algo desorientado, por todo el revuelo.

Cuando el moreno nos vio se dirigió rápidamente hacia nosotros, más específicamente hacia Kalim.

- Oh ¿ya te preparaste para el entrenamiento? - le preguntó el de ojos color chocolate al peliblanco - por lo general, desayunamos después de la marcha... - murmuró extrañado.

- ¡En realidad! Como prefecto de Octavinelle, le propuse a
Kalim-san una alternativa para las marchas - dijo saliendo de detrás del de orbes rojizos con una gran sonrisa, pude ver como el contrario se tensaba.

- ¿Qué? ¿De dónde vienes? - preguntó el de cabello largo fulminando con la mirada al peliplata y cruzándose de brazos.

- En lugar de hacer largas caminatas de distancia, deberíamos hacer ejercicios aeróbicos... - empezó a explicar el de lentes - es mucho más efectivo hacer entrenamiento muscular en interiores. En el desierto de Scarabia hace demasiado calor, así que también me preocupa que alguien pueda sufrir algún golpe de calor.

- Tenéis una fuente bastante grande en la entrada ¿lo sabéis? - cuestionó el menor de los gemelos - podríamos nadar todos juntos, cuántas más personas seamos, será mucho más divertido - exclamó ilusionado, como un niño pequeño.

- De hecho, según mi experiencia la natación quema grasa más rápido que caminar - añadió el de lentes con un semblante serio. Al escuchar esto los alumnos del dormitorio comenzaron a celebrar, ya que no tendrían que hacer aquel entrenamiento inhumano - además, tomar un desayuno tardío afecta la concentración y el rendimiento. Sin embargo, comer en exceso es inaceptable - en ese momento recordé lo que vi después de su overblot y no pude evitar sentir pena por él. Unas ganas de achucharlo me inundaron, aunque pude controlarme.

- ¡Todo tiene muy buena pinta! - exclamó el animalito acercándose a los platos, iba a regañarle por estar obsesionado con la comida, pero, para qué mentir. Al ver cómo traían la comida no pude evitar unirme a él.

- Floyd parece estar de buen humor también - comentó el mayor de los hermanos llamando mi atención - cuando está de mal humor, se refleja en su comida... - explicó mientras fijaba su mirada sobre mí con una sonrisa enternecida pintada en su rostro.

- Umihebi-kun se encargó de tu parte Rakko-chan. Vamos, pruébalo - le animó el heterocromático con una sonrisa de oreja a oreja. Y tras decir aquello todos comenzamos a degustar nuestros respectivos desayunos, nunca lo admitiré en voz alta, pero Floyd tiene un talento para cocinar, o por lo menos cuando está de buen humor.

...

- Lo más importante para recordar los antiguos encantamientos es el vocabulario - explicó el líder de Octavinelle. Habíamos acabado de desayunar y ahora mismo estábamos estudiando. Bueno, yo estaba jugando con un lápiz mientras fingía que estudiaba.

- No soy muy bueno memorizando~ me da sueño - admitió el de cabello blanquecino algo triste.

- Si ese es el caso, entonces te recomiendo caminar mientras lees en voz alta - contestó el contrario ajustando sus lentes.

- Es muy recomendable para las personas que no pueden quedarse quietas mientras estudian - añadió la mayor de las morenas.

- ¡Creo que yo también puedo hacer eso! - exclamó el de cola de tridente determinado.

- Muy bien ¡intentémoslo todos juntos! - exclamó esta vez el albino siendo apoyado por sus subordinados. El único que no estaba tan feliz era Jamil, pero ya contábamos con eso.

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Y fin del capítulo ¿qué les pareció? ¿Ven la imagen de multimedia?

Esta. Bueno, esta imagen me inspiró para hacer una escena parecida en la historia, pero creo que en algún momento te aclaran que MC y el trío de Octavinelle duermen separados, así que esa idea se fue al garete, como la mayoría de ideas que he tenido ;v;

Pero bueno, eso ahora no importa, si no calculo mal el overblot de Jamil se acerca y eso va a traer bastante drama y cositas interesantes, así que vayan preparándose, fufufu 😈😈😈😈

Tengan un buen día/tarde/noche y nos vemos en el próximo capítulo.

Continuará ❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️