Misión Imposible
Argentina estaba tirado en el sillón con un bote helado en sus manos mientras veía un maratón de comedias románticas.
–¡Ey! Pequeña nube gris– saltó México sobre él –¿Todo bien? ¿Por qué tan deprimido? –.
–Me gustan mayores, eso es lo que pasa– respondió.
–¿Ok? ¿Y eso es novedad, por qué?–.
–ONU sale con FBI– tomó otra cucharada de helado.
–Oh ¿Entonces los rumores si eran ciertos?–.
–¡SI!–.
–¿Y cómo lo sabes? –.
Argentina bufó –Ayer, después de que Estados Unidos me dio su número, ONU ofreció llevarnos a mí y a Francia a casa. Y yo pensé "¡Oh, genial! El que me gusta me llevara a casa", pero entonces abrí la puerta del coche y FBI estaba manejando ¡Y ONU LO BESÓ!– gritó –¿Y sabes qué es lo peor? Es un amor de persona, hacen una pareja perfecta– se volvió a recostar.
–Bueno, Argie, sabías que igualmente lo tuyo con ONU era algo imposible–.
–Lo sé, pero era bonito creer que tenía un poco de chance– miró al suelo –¿Crees que deba decirle que me gusta?–.
–Pues como tú veas la verdad– se encogió de hombros –¿Y no te han dicho nada sobre Inglaterra?–.
–ONU dijo que haría lo que estuviera en sus manos, pero sin un testigo externo o pruebas físicas no hay mucho que se pueda hacer– gruñó –En resumen, mi vida es una mierda–.
México se quedó mirando la película un rato con él.
–Argie ¿Nunca grabaron un vídeo?– preguntó después de un rato.
–¿Uno porno? Giu no. O sea, si me lo propuso, pero me parecía muy incómodo tener a la cámara enfrente–.
Otro silencio.
–¡ESPERA UN MOMENTO!– gritó el argentino –TUVIMOS SEXO EN LA SALA DE JUNTAS–.
–GIU– soltó el mexicano.
–No, no giu. Bueno, si, pero ese no es mi punto– giró los ojos –México, hay cámaras, está grabado–.
–Las grabaciones de seguridad– sonrió.
–¡Exacto!– celebró el menor –Pero ONU nunca nos dejaría verlas– miró al suelo.
–Sí– suspiró –Y el edificio está cerrado los domingos–.
Ambos se lamentaron por unos minutos.
Entonces Paco pasó frente a ellos y levantó una de sus patitas para orinar.
–¡FRANCISCO LORENZO DE LA INMACULADA CONCEPCIÓN DE LA PURÍSIMA TRINIDAD, QUE TE HE DICHO DE ORINARTE DENTRO DE LA CASA!– gritó México –¡Que estés recién operado no te da derecho a chiflarte– lo regañó.
El chihuahua salió corriendo a máxima velocidad y huyó al patio por uno de los huecos de los barrotes de las ventana.
–Hijo de tu mamá, no huyas– gruñó –Tiene mucha suerte de ser pequeño– se cruzó de brazos.
–Ojalá nosotros también supiéramos escabullirnos– murmuró Argentina.
Ambos reaccionaron al mismo tiempo.
-Llamaré a Chile– dijo México.
–Yo a Perú y Vene– lo secundó su hermano menor.
–De acuerdo, gente, este es el plan– habló México –Perú, tú eres el más enano, así que deberás entrar por la ventilación. Vene y Chile te cargarán. Cuando logres estar dentro deberás abrirnos, entonces llega la parte difícil– sacó un mapa de su mochila –Lo dividí en secciones. Perú y Venezuela, ustedes revisarán la sección sureste y noreste–.
–Sí, señor– dijeron al unísono.
–Chile, tú y yo iremos a la noroeste y suroeste; Argie, ya que la oficina de ONU está en estas secciones vendrás con nosotros, ya que eres el que mejor la conoce–.
–De acuerdo– sonrió su hermano.
–¿Alguna pregunta?– preguntó el del águila.
–Yo tengo una– hablo Chile –¿Cuánto tiempo durará esto? Por qué tengo una cita con Ale en tres horas y realmente ahora si planeo ser una buena pareja y no quiero dejarlo plantado–.
–No te preocupes, Chile, no planeamos tardar más de una hora y media– respondió su mejor amigo.
–Pero si en cierto momento tienes que irte, siéntete con total libertad– agregó Argentina.
–Está bien ¡HAGÁMOSLO!–.
Perú trepó por la ventilación y se arrastró por todo el lugar hasta llegar a estar dentro. Tomó una de las llaves a lado de la puerta y la abrió.
–Ese es mi chico– celebró Venezuela.
–Gracias, gracias, muchas gracias– hizo una ligera reverencia.
–¿Qué carajos están haciendo?– preguntó una voz a sus espaldas.
Los cinco se congelaron.
–¿Argie?–.
–Brasil– rio nervioso el menor –Emm, nosotros solo... ok, seré sincero. Hay pruebas de la pedofilia de Inglaterra en las cámaras de seguridad y queremos conseguirlas–.
–¿Eso no es ilegal?– habló Uruguay.
–Digo, si la ley no se da cuenta, no hay pedo– respondió el mexicano.
El trío guardó silencio un rato.
–¿Los ayudamos?- sonrió Paraguay.
–¡CLARO! Mientras más mejor– accedió el argentino.
–De acuerdo, entonces, Chile irá con Argentina y...
–De hecho, México, creo que Brasil y Argentina hacen un gran equipo– interrumpió Uruguay.
El brasileño lo miró, este le guiñó un ojo.
México notó esto, no pudo evitar hacer una sonrisa involuntaria; le agradaba Brasil, al fin su hermano podría tener una buena pareja.
–De acuerdo, entonces Argentina irá con Brasil– aceptó.
Después de reorganizar el plan, todos se fueron a sus asignados sectores para investigar lo de las cintas.
–Espero que todo esto por fin se acabe– le dijo Chile a Mex.
–Ni que lo digas– suspiró –¿Cómo te va con Ale?–.
–Es un amor de persona– respondió –Enserio no entiendo por qué era tan estúpido, quiero decir, sí Argentina es lindo y todo eso, pero Alemania... es simplemente perfecto–.
México rio –Te extrañaba, hace mucho no salíamos, o al menos no solo tú y yo–.
–Lo sé– sonrió –Pero ey, de nuevo ambos estamos saliendo con los hermanastros, podremos volver a las citas dobles–.
–¡Oh sí, esas eran divertidas!– abrió una de las puertas.
El edificio era un lugar enorme, con 15 pisos y la mayoría de habitaciones eran desconocidas para los countries. La única persona que realmente podía guiarse ahí era ONU, y tal vez Argentina, que se había vuelto como el confidente de la organización.
México y Chile se quedaron congelados al ver la habitación.
–Vaya, parece que nuestro suegro hizo una pequeña travesura antes de ser echado de aquí– murmuró Chile
Todo el lugar estaba pintado de un color rojo chillón con cuadros del nazi por toda la habitación; había uno que destacaba de entre todos, en la pared del fondo había un autorretrato con Third Reich posando desnudo, acostado, con solo una sábana cubriéndolo, y sobre cuadro colgaba una bandera con la conocida esvástica.
–Sí... no creo que las cintas estén aquí–.
Paraguay y Uruguay caminaban por el quinto piso del lugar buscando en todos los cajones, bajo macetas e incluso en la ventilación.
–Si encontramos las cintas primero y se las damos a Fin seguramente al fin nos acepte una cita– se emocionó Paraguay.
–Emm sí– lo siguió Uruguay.
–¿Todo bien?–.
–Sí, solo que estaba pensando y Argentina realmente confía en nosotros si nos contó–.
–¿Tú crees?–.
–Eso parece– se encogió de hombros –Y realmente no parece tan mala persona, o sea, obviamente está algo chiflado, pero es amable y digo, por algo le debe gustar a Bra–.
Paraguay se quedó quieto un momento –¿Somos los malos?– preguntó.
–Aún no estoy seguro– respondió.
–Ya le mandamos el mensaje a Fin ¿Qué podemos hacer?–.
–No lo sé, tal vez no sea tan malo todo esto, quiero decir, no creo que Finlandia este encontra de que un pedófilo vaya a prisión–.
–Tienes razón– sonrió –Entonces ahora seremos amigos de Argentina ¡Wow! Eso nunca me lo esperé–.
–¿Encontraste algo, Per?– preguntó Venezuela.
–Nop– respondió para después mirarlo –¿Por qué Jamaica?–.
–¿Uh?–.
–¿Por qué sales con él? Quiero decir, de Rusia a él... simplemente no me cuadra–.
–Emm, es una larga historia–.
–Y no me la contaste– miró al suelo.
–Vamos, Per, tú tampoco me contaste en su momento lo de tu asexualidad–.
–Eso es diferente– giró los ojos –Estaba definiéndome, pero tú solamente no me dijiste que estabas interesado en un hijo de puta–.
–¡Perú!–.
–¿Qué? No planeo apoyarte en esa relación, como tu amigo debo aconsejarte y créeme que esto no es una buena idea– tomó su mano –Vene, puedes contarme lo que sea ¿Enserio no te pasa nada?–.
El de las estrellas tragó saliva –No– mintió.
El peruano soltó un bufido –De acuerdo, te creo, por que confío en ti. Pero hablo enserio, Jamaica está enamorado de México y no lo va a olvidar por ti–.
–¿Disculpa?–.
–Hay algo que se llama obsesión, Jamaica no te quiere y si está contigo es por que planea algo que puede terminar dañando a tus amigos ¿En verdad quieres eso?–.
–¿Por qué de repente sospechas tanto de mí?– gritó.
–¡POR QUE TE QUIERO, CARAJO! Me preocupo por ti. Haz pasado muchas cosas y quiero evitar que pases por más dolor. Soy tu mejor amigo, debes confiar en mí. Aléjate de Jamaica–.
Los ojos del mayor se cristalizaron.
–Está bien, lo haré–.
–Gracias- lo abrazó –Sabía que no eras un completo idiota– rio –Aunque a veces lo parezcas–.
El contrario correspondió el abrazo.
¿En qué carajos se había metido?
–De acuerdo, si yo fuera ONU ¿Dónde guardaría las cintas de seguridad?– se preguntó Argentina.
–Não são as gavetas? (¿No están en los cajones?)– hablo Brasil.
–No, ahí guarda sus informes e información sobre los countries– respondió –Oh dios– se acercó a su escritorio –Su silla– se sentó –Es tan cómoda como me la imaginaba– se emocionó –Y huele a vainilla, justo como él– suspiró.
Brasil hizo una mueca –Ei, o que você gosta na ONU não é sério, certo? (Oye, eso de que te gusta ONU no es enserio ¿Verdad?)–.
–No, sí que lo es– corrigió –Quiero decir, sé que nunca pasará, pero no puedo evitarlo, es simplemente perfecto. Además, imagínate, yo con un bello vestido de novia de encaje y el con un smoking, viéndose sensual como siempre. Y es realmente atractivo, nuestros hijos serían hermosos–.
–E seria ilegal (Y sería ilegal)– interrumpió el mayor.
–¿Qué son 14 años?– bromeó. El contrario giró los ojos –Ay ya, Brasil, no tienes que ser tan serio siempre– fue junto a él –¿Me vas a decir que tú no tienes un amor súper secreto?–.
Este se sonrojó –Bem, sim, mas não é ilegal, ou então eu acho (Pues sí, pero no es ilegal, o eso creo)–.
Argentina rio y se le quedó viendo.
–Enserio eres un gran amigo, Bra– dijo –De hecho te considero el mejor que he tenido nunca– tomó su mano –Me siento tan cómodo contigo– se acercó a su rostro –Enserio, gracias por todo– besó su mejilla.
El sonrojo del contrario se hizo aún más grande –Eu também te amo, Argie (Y-yo también te quiero muchísimo, Argie)–.
–Pareces un tomate– soltó una risita –Estás demasiado ro... Rojo–se quedó en silencio un rato.
–Bem, isso é algo que só você pode fazer comigo (Bueno, eso es algo que sólo tú logras causar en mí)– respondió con un tono coqueto.
–Rojo– lo ignoró.
–Sim, vermelho, eu sei que pareço idiota assim, não como você parece completamente adorável corando. Quero dizer, você sempre parece adorável, mas ... (Sí, rojo, sé que yo me veo estúpido así, no cómo tú que luces completamente adorable sonrojado. O sea, siempre te ves adorable ,pero...
–¡ROJO! El cuarto de Reich– sonrió –Ahí están las cintas, Bra– sacó su teléfono e informó a los demás –Vamos– lo jaló.
Cuando todos se reunieron en el tan curioso cuarto, y cuando todos superaron los traumas que este les había causado, Argentina se acercó a la pintura del fondo.
–ONU una vez me dijo que le gustaba esconder cosas en los lugares más inesperados– explicó –Chile, Bra ¿Me ayudarían a descolgarlo?– estos obedecieron –¿Qué lugar más inesperado que este?– sonrió orgulloso al ver la caja fuerte.
–Genial ¿Ahora cómo sabremos la combinación?– preguntó Venezuela.
–Muy fácil, seguramente sea 1567, es el número favorito de ONU de cuatro dígitos– contestó el del sol.
–Ok, ese es un dato realmente random que me da un poco de miedo que sepas– mencionó México.
–Pero es útil– le sacó Argentina la lengua y abrió la caja –¡AQUÍ ESTÁN!– sacó la caja –Tomemos las de Marzo y Abril, fue alrededor de esas fechas– empezó a buscar –¡Y VUALÁ!– las agarró.
–Genial, ahora vámonos, antes de meternos en problemas por una estupidez– dijo Chile.
–Oki doki– accedió Argentina.
Entonces todo salió mal, pudieron escuchar como alguien entraba al edificio.
–WHO'S THERE!? (¿¡QUIÉN ANDA AHÍ!?)– gritó.
–Mierda– masculló Paraguay.
–¿Qué haremos?– preguntó Uruguay.
–Ok, tranquilo– hablo México –Todos hay que escondernos y entonces todo estará bi...
Se activaron los rayos láser.
–El sistema de seguridad– chilló Argentina.
–¿En qué carajos nos metimos?– soltó Venezuela.
–No puedo ir a la cárcel, no podría llegar a mi cita– dijo Chile.
Los pasos del desconocido se escuchaban cada vez más cerca de ellos, pudieron escuchar como cargaba una pistola.
México tragó saliva.
–Si este es el final, solo quiero decirles que los amo, chicos. Y que si hay algo que debo confesar es que... Argie, hace un año me preguntaste si me había comido tu pastel y yo te dije que no, pero la verdad es que sí– confesó México.
–La verdad, yo sólo soy una mierda de persona por que tengo miedo a encariñarme con alguien– lo imitó Chile.
–Yo juro que le soy fiel a Finlandia, pero a veces no puedo evitar sentirme atraído por Estonia– lloró Paraguay.
–No soy gay, pero enserio me gustaría saber como se siente el sexo anal– lo siguió su mejor amigo.
–¡Me gusta ONU!– soltó el celeste y blanco.
–Estou apaixonado pela argentina (Estoy enamorado de Argentina)– dijo Brasil.
–¿¡Qué!?– lo miró el mencionado.
–Yo puedo ver y escuchar a los lectores por que cuando era chiquito me caí de la cuna y eso despertó una parte en mi cerebro que me hace estar consciente de mi existencia y toda la que esta implica– habló Perú rápidamente.
Todos se le quedaron viendo.
La puerta empezó a abrirse, todo levantaron sus manos y bajaron la mirada.
–¡BESÉ A RUSIA!– gritó Venezuela.
–¿¡Qué!?– lo miraron todos.
–I got you! (¡Los tengo!)–.
Todos gritaron.
–Argentina?–.
El menor abrió uno de sus ojos.
–¿FBI?–.
–What are you doing here? (¿Qué estás haciendo aquí?)– se acercó a él –Are you a little troublemaker? (¿Eres un pequeño busca problemas?)– sacudió su pelo con una risita.
–Emm yo... Siendo sincero, quería revisar unas cintas para comprobar la culpabilidad de Inglaterra–.
–Oh– murmuró –Why didn't you say anything to the UN? He surely would have supported you (¿Por qué no le dijiste nada a ONU? Seguramente te hubiera apoyado)–.
–Yo no lo creo, odia romper las reglas–.
–That's true (Eso es cierto)–.
–¿Podrías por favor no decirle nada de esto?– suplicó.
–Your secret is safe with me (Tu secreto está a salvo conmigo)– le guiñó un ojo –Or may I say,you two secrets? (O debería decir ¿Tus dos secretos?)–.
El menor se sonrojó ¿FBI había escuchado todo? Si así era estaría en serios problemas.
–Fiuf– soltó Venezuela –Bueno, entonces supongo que está todo...– se topó frente a frente con México –... bien–.
–¿C-cómo está eso de que besaste a mi novio?– lo miró.
El contrario suspiró –Mex, yo enserio lo siento, te juro que...
–¿Cuándo?–.
–El día del cine–.
–¿Hace tanto? ¿Y ni tú ni Rusia me dijeron nada?– se le cristalizaron los ojos.
–Él me prometió que no te lo diría–.
El del águila lo cacheteó –¡ERES UN ASCO DE PERSONA! CONFIÉ EN TI– gritó –Confié en ti– murmuró.
–Mex...
–Creí que éramos amigos– le dio la espalda y caminó hacia la salida.
–Somos amigos– contestó rápidamente.
–¡NO, NO ES CIERTO! Un amigo jamás me haría eso– salió del edificio.
Todos se quedaron callados.
–Mejor vámonos de aquí– habló Paraguay.
Tanto como Uruguay como Brasil obedecieron.
–Y creí que no podías caer más bajo– susurró Chile para después irse.
–Espero que te sientas realmente mal ahora– lo miró Argentina –Por que no eres más que un maldito hipócrita– se fue.
Entonces solo quedaron él y el peruano.
–Per...
–Confías en mí ¿Eh?– negó para después dejarlo solo en el salón.
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JELOUUUUUU
Oigan, no mamen, ando bien inspirada con esta historia jsjsjs
Los loveo <3
Y nos leemos pronto ;·
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