He estado entrevistando a los espeluznados habitantes del pueblo durante todo el día, tratando de descubrir qué sucedió anoche. Una oscura sombra de terror cubría las calles mientras los espectros acechaban y una mujer de aspecto siniestro sembraba el caos. Pero lo más perturbador de todo fue descubrir que el único que parecía ajeno a este mal era Lucio. ¿Qué conexión podía tener con esta pesadilla infernal? El tiempo apremia, no puedo permitir que las pistas se desvanezcan en la oscuridad. No quiero morir, no quiero que mi amada Marlian ni mi hija Lisides sean víctimas de esta maldición. Si esto vuelve a ocurrir, debo encontrar la manera de enfrentarlo. Estoy convencido de que habrá una próxima vez, pero ¿podré evitarlo? Quizás, en lugar de enfrentarnos a estas abominaciones, la clave esté en descubrir la causa de su aparición y así poder prevenirla. ¿Es posible que haya un modo de escapar a su influjo terrorífico?Me adentré en el misterio hablando con Lucio, esperando encontrar respuestas en su morada. Allí, me reveló que su hogar estuvo inexplicablemente protegido de aquellos monstruos gracias a un antiguo conjuro, invocado en el preciso instante en que la enigmática mujer hizo su aparición. "No podía abandonar mi refugio", susurró Lucio, "el conjuro solo surtía efecto en el interior de mi morada". Decidió recostarse y orar para que los demás tuvieran la valentía de enfrentar el horror mientras él, en un extraño giro del destino, se sumía en un sueño profundo. ¿Es posible dormir en medio de semejante pesadilla?Mi investigación me llevó a conversar con aquellos cercanos a Lucio, buscando pistas en las sombras de su vida. La criada me contó que, en la tarde, Lucio la despidió temprano, unas horas antes de que la noche engullera el pueblo en su oscuridad. El cansancio se apoderaba de él y decidió acostarse temprano. La criada mencionó que Lucio había estado inmerso en intensos estudios de magia y alquimia, dedicando largas horas a un misterioso proyecto. Ultimamente, se había retirado a descansar antes de lo habitual, algo comprensible dada la extenuante labor que ella misma había sido testigo. Cuando le pregunté sobre los detalles más específicos de su trabajo, la criada se encogió de hombros, incapaz de proporcionarme más información. Sin embargo, sus palabras dejaron un rastro de inquietud en el aire. Parece ser que Lucio estaba obsesionado con el efecto de los sueños, hablando enigmáticamente sobre la posibilidad de alcanzar la inmortalidad. ¿Qué secretos ocultaba en las profundidades de sus anhelos oníricos? En los sueños, el tiempo se distorsiona, permitiendo vivir horas o incluso días enteros, mientras en la realidad exterior apenas han transcurrido unos segundos.

***(EN LA NOCHE ANTERIOR)...

En el corazón de la ciudad, una mansión se alza majestuosa. Sus muros de piedra parecen susurrar secretos antiguos, mientras las sombras danzan en sus pasillos. En su interior, Lucio, un hombre de oscuros secretos, se deleita con la compañía de los demonios de la noche.

Desde lo profundo de su morada, Lucio desata un poder ancestral, convocando a los seres de la oscuridad para que bailen al son de su voluntad. Sus ojos brillan con una malicia inhumana, mientras su risa se mezcla con los aullidos de las criaturas infernales.