Debo aclarar que, este cap lo hice muchísimo antes del final y me negué a adaptarlo al mismo.

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Cuando Luz recibió un mensaje de su madre sobre que podía volver a estar en la casa Búho casi deja caer su teléfono en el caldero de abominaciones, agradecía que fuera un receso donde podía con ayuda de Amity poder manejar mejor el material para crearlas.

Estuvo meditabunda todo el día sin saber que creer, por un lado, estaba feliz de saber que podría volver a la casa búho, extrañaba a King, Hunter y a Hooty. Pero por el otro lado, no sabía cómo tomar la repentina decisión de su mamá, pero siendo honesta consigo misma no sabía ni siquiera que pensar.

Era obvio que era una prueba o al menos una trampa, luego del "incidente" las cosas con su madre estaban tensas y extrañas, Vee incluso se atrevió a preguntar si todo estaba bien lo que llevo a que ambas mintieran y le dieran la tonta excusa que se había metido en problemas en las islas haciendo algo tonto.

Relamiéndose los labios no pudo evitar el sonrojarse al recordar lo que había hecho con Eda y Lilith antes de ser descubiertas, la sensación de estar indefensa ante lo que ambas brujas quisieran hacerle y las palabras de Eda en su oído eran cosas que aun pasaban en su mente estando allí.

-Luz, ¿estas bien? Te ves algo roja.- La voz de Willow la saco de sus recuerdos y asintiendo con la cabeza se concentró en los ingredientes, quería lograr en hacer su propia abominación y debía de concentrarse en ello.

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Siendo la hora del almuerzo la latina comía con sus amigos incluyendo a Hunter y a King, quienes estaban discutiendo sobre su puesto como mano derecha de King.

-Mira, si voy a ser la mano derecha de Luz, quiero al menos mi propio ejercito.- Dijo el rubio con el ceño fruncido al saber las funciones que asumiría al ser la mano derecha de la mano derecha del rey de los demonios, y no le gustaba saber que tenía que ser la secretaria de Luz.

-Mmm, bien! Pero solo si puedes conseguirme un sacrificio digno!- El pequeño demonio estaba sobre la mesa frente a Hunter, llevaba una corona que Luz le había regalado cuando volvió al mundo humano.

Era roja con joyas de plástico e incluso llevaba su nombre en ella. Apenas la tuvo en sus adorables patitas decidió que sería su corona oficial como rey de los demonios.

-Te daré mi postre por un año.-

-¡Aceptable!-

Luz junto a Amity se rio de toda la escena, había extrañado a esos dos sin duda. Aunque el hecho de que su mamá estuviera en la casa búho no le traía buena espina.

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Luz trago saliva y se sentía más nerviosa mientras más cerca estaban de la casa, Amity había dicho que tendría que ir a la mansión porque su madre parecía tratar de promover nuevos inventos para así reponer la falta de Belos en el mercado de estos.

Willow y Gus se fueron a una cita juntos por lo que la dejaban con Hunter y King, quienes no tenían idea de nada lo que pasaba algo que agradecía infinitamente ya que dudaba que pudiera explicar algo así.

-¡Hola Luz! ¡Tu mamá está aquí! ¡Hoot! ¡Hoot!-

Entrando vio que la casa seguía en pie e incluso su madre y ambas Clawthorne estaban tomando el té en la cocina, eso la confundió mucho.

-¡Eda, mira! ¡Mi mano derecha por fin tiene a su mano derecha!- Señalo King al rubio pálido quien tenía una insignia casera para el puesto que tenía ahora en el ejército del rey de los demonios.

-Espero cumplas tu parte del trato sino conservare mis postres.- El palismán de Hunter salió de su hombro y se posó sobre la cabeza de Luz quien sonriendo lo tomo en sus manos y acaricio sus plumas rojas.

-Oh, claro. Abandóname por ella.- Dijo Hunter bufando, no era la primera vez que su palismán parecía preferir a la humana por sobre él.

-Vamos Hunter, incluso Owlert ama estar más con Luz que conmigo, y yo lo hice!- Dijo Eda, señalando como su búho y el cuervo blanco de su hermana iban hacía la latina quien empezó a acariciarlos.

-Hipócritas.- Dijo la dama búho, señalando como el pequeño búho solo la veía por un segundo para después colocarse en el hombro de Luz y quedarse allí.

-Creo que Luz tiene un imán de Palismanes, incluso el de Amity parece preferirla a ella.- Dijo King, en el regazo de la Luz quien comenzó a rascarle la espalda. -Oh, sí. Justo allí.-

-Por supuesto, su majestad gran King, rey de los demonios.-

-¡Y que no se te olvide!-

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-Luz, ¿me ayudarías con unos libros? Escuche que quieres hacer tus primeras abominaciones y tengo los libros perfectos para eso.- Lilith le sonrió sin ninguna doble intención, pero Luz conocía aquel brillo en sus ojos.

-Ehh... C~claro...- Dejando a los palismanes en su lugar en el sofá con King, acompaño a la bruja a su cuarto al mismo tiempo que sentía la mirada de su madre en su nuca.

Subiendo las escaleras sintió su corazón latir tan fuerte que estaba pensando iba a salírsele del pecho, tragando saliva entro a la habitación de la pelinegra y fue de inmediato acorralada por esta, su espalda golpeando la pared más cercana fue algo olvidable cuando sintió los labios de Lilith sobre los suyos.

Aferrándose a su camisa no supo si abrazarla o apartarla más no detuvo el beso, sintiendo su rostro calentarse y sabiendo que nunca podría apartarla, la abrazo del cuello y correspondió el beso, sintiendo como Lilith metía su mano por debajo de su camisa.

Arqueando su espalda buscando más contacto, sintió las uñas largas de la bruja jugar con su piel subiendo y bajando dándole escalofríos en todo su cuerpo mientras un hormigueo familiar comenzaba a aparecer.

Lilith sintió como era apresada por las piernas de la humana, lo que hizo que sonriera al sentirla tan desesperada en su beso y como la abrazaba. Nunca entendió porque Luz siempre estaba tan desesperada a la hora del placer físico, cada vez en cada momento con ella o Edalyn siempre trataba de ser tan complaciente de una forma desesperada, como si fuera algo que se le fuera a quitar en cualquier momento.

Tomando sus mejillas con su mano libre, abrió su boca e introdujo su lengua para así comenzar su asalto oral en ella, escuchando un gemido agudo de la morena sonrió al escuchar lo desesperada que estaba, metiendo su mano en su sostén deportivo sintió sus pezones ya erguidos esperando ser atendidos.

Separándose dejando un hilo de saliva sonrió orgullosa de ver la cara de Luz, su boca entreabierta en su rostro rojo y sus ojos vidriosos mientras jadeaba en busca de aire, haciendo juego con sus labios algo hinchados.

-Te extrañe, Luz~- La morena se relamió los labios y se puso más colorada al ver en la posición en la que estaban, lo que hizo reír a la pelinegra.

-Lilith, mami esta abajo...- Trato de persuadirla, algo que no parecía funcionar por como aun abrazaba a la bruja, y como no trataba de quitarle la mano de su pecho.

-Lo sé, pero no me importa.-

-Lil...-

-¿Quieres que te suelte, Luz? Ya vez, puedo hacerlo si me lo pides, Luzita- La pelinegro sabía que ahora mismo estaba siendo espiada por uno de los hechizos de su hermana, quien a su vez le daba a Camila un asiento de primera fila de todo lo que estaba haciendo.

La más joven no sabía ni siquiera que decir, tartamudeando y balbuceando pequeñas palabras parecía muy confundida.

Luz estaba tan confundida que su cerebro no podía pensar en algo concreto. ¿Por qué Lilith le decía eso? ¿Acaso ya no quería tocarla o algo así?

-Ya veo, te soltare. Tu madre esta abajo después de todo.- Sintiendo como la mano de la Clawthorne mayor se iba reacciono y no queriendo perder el contacto.

-¡No!- Callándose espero que su madre no hubiera escuchado eso, y bajando la voz. -Q~quiero que me toques... Quiero que... continues...-

Su rostro parecía un tomate de lo rojo que estaba, aquellas palabras parecieron haber puesto feliz a la mujer y sin que se lo haya dicho dos veces la volvió a besar y a apretar contra la pared.

[.]

King y Hunter discutían su plan de conquista mientras que Eda y Camila en la cocina presenciaban lo que pasaba, la latina mayor veía con las mejillas rojas como su hija rogaba ser tocada. Lilith tomo a Luz en un nuevo beso que se veía mucho más intenso que el anterior, llegando a ver los colmillos morder sus labios mientras usaba su lengua en la de su hija; Dejando a su hija correspondiendo mientras algo de saliva salía de la comisura de sus labios.

-Creo que ya demostramos que no la forzamos. -Quitándole la pequeña bola de cristal de la vista, la dejo a su lado tapándola con un pequeño trapo de cocina, Eda vio con satisfacción la frustración de que le haya quitado lo que parecía deseosa de ver.

-Tú...-

-Bueno, ya que ahora sabes que nosotras no obligamos a Luz a nada, podemos volver a nuestra rutina de siempre. Digo, ya le enviaste el mensaje de que puede volver a visitar la casa búho.- La forma burlona en la que lo dijo, y su sonrisa solo hicieron que Camila deseara golpearla en la cara.

-Eda.-

-¿Qué? Tu querías ver con tus propios ojos si la forzábamos, no es cierto?- Eda se divertía en fastidiar a la mujer, luego de que básicamente haya tenido que conformarse con las pequeñas visitas sorpresa en la escuela donde apenas y podía tocarla a Luz como le gustaba antes de dejar que volviera a su aula, quería al menos desquitarse un poco.

-A menos que... quieras ver cómo nos cogemos a tu hija.- ¿Le importaba lo que estaba diciendo y a quién? No. ¿Quería que Camila Noceda sufriera admitiendo que quería ver a su hija de esa forma? Absolutamente.

Antes de que la latina pudiera hablar ambas escucharon pasos viniendo de las escaleras, y vieron a Lilith y a Luz bajar con algunos libros.

-¿De verdad esto me ayudara para crear abominaciones?- Pregunto Luz, la única evidencia que quedaba de lo que paso arriba, era que sus labios estaban algo rojos.

-Oh si, estos son los principios básicos en la creación de abominaciones. Tendrás una idea de lo que debes hacer con estos.-

Tomando la bola de cristal, la guardo en su cabello y la dama búho le sonrió burlonamente a la madre de Luz, antes de ir hacia su hermana.

-¿Dándole tus libros aburridos? Tengo libros que le mostrarían como hacer una abominación muy genial.-

-¡Absolutamente no! Esos libros hicieron que la escuela terminara cubierta de los restos de abominación cuando enloquecieron.-

-Pero fue genial, Lily. Y nadie murió.-

-¡Termine pegada en el techo de cabeza por 3 horas, hasta que el conserje me pudo despegar, Edalyn!-

-¿Pero te moriste? No, así que no fue tan malo.-

[.]

Camila tenía el rostro rojo al ver su teléfono, sus pensamientos eran en diferentes formas de matar a la bruja que tanto parecía querer hacerla enojar, sus lentes brillaban por la luz del celular donde se mostraba la imagen de su hija desnuda con marcas de golpes en su trasero donde se mostraba una pequeña vista de su vagina, y su rostro lloroso y sonrojado.

Esa imagen hizo que sintiera su vientre tensarse y un cosquilleo familiar se presentara en su entrepierna, tragando saliva intento calmar las sensaciones para que todo ese esfuerzo fuera en vano, al ver una nueva imagen donde mostraba a su hija sentada sobre un juguete, sus líquidos esparcidos por el mismo y su cara contorsionada en una mueca de placer.

Sentía su autocontrol irse por la ventana al ver más imágenes de su hija en diferentes posiciones, mostrando su cuerpo como si nada y siendo exhibida de esa forma. Sus labios vaginales estaban húmedos ya que las imágenes se ponían cada vez más fuertes.

Había una donde Luz estaba chupando lo que parecía un miembro de plástico mientras que una de las hermanas estaba usando uno en la vagina de su hija dando en exhibición cada parte de su cuerpo. Estaba otra donde estaba Luz abriendo sus labios interiores con sus ojos llorando y su rostro rojo, y la que le seguía mostraba como su hija complacía oralmente a una de las Clawthorne.

Se sentía caliente, su vientre estaba tenso y estaba segura que sus pantalones estaban húmedos. Quería, no. Necesitaba ver a su hija, quería observar ella misma lo que tanto Eda como Lilith le hacían, ya había cruzado la línea al ver como Lilith besaba y tocaba a su hija, y no decir nada, había cruzado la línea cuando se tocaba fantaseando con su hija, ¿Qué era otra línea más?.

[.]

Vee había estado confundida por todos esos meses, era comprensible ya que no entendía porque tanto Camila como Luz actuaban raro. Aunque en los últimos días las cosas con Camila eran más raras por como la abrazaba más y trataba de hacer mucho contacto físico, no pensaba que era incomodo solo extraño.

Luz estaba igual de confundida, a ella también le tocaba esos momentos de afecto físico y se veía tanto confundida como algo avergonzada por las veces que su madre la atraía a su regazo para besar su cara.

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-Oh, así que vienes arrastrándote.- Eda sonrió burlonamente, para así ser arrastrada dentro de la casa por la latina quien se veía muy roja y con sudor cayendo por su sien.

-¡Cállate! ¡¿Dónde está Lilith?!- Eda solo señalo las escaleras aun sonriendo.

-¿Edalyn? ¿Qué son estos gritos?- Bajando la pelinegra, tenía en sus manos dos botellas con líquidos de colores.

-¡Tú!- Dijo Camila señalando a la bruja.

-¿Yo?-

Luego de dejar en claro la razón de su visita, estaba con las brujas nuevamente en la cocina tratando de no morir de la vergüenza.

-Así que, déjame tratar de entender.- Lilith se veía muy confundida, parecía tratar de entender lo que estaba pasando mientras que Eda solo tomaba su sangre de manzana con una sonrisa.

-Quieres que lo hagamos con Luz.- Dijo la cuervo, viendo como la madre de la mencionada asentía con la cabeza sonrojada y mordiendo sus labios de lo nerviosa que estaba.

-Y no solo eso, quieres vernos a mí y a Edalyn, haciéndolo con ella. ¿Estoy en lo correcto?-

-Si, lo estas. - Camila se veía increíblemente incomoda, en la cocina se colocó un silencio incomodo del que ahora la morena deseaba ser tragada por la tierra, el sorbo de Eda era lo único que se escuchaba en la cocina.

-De acuerdo, lo hare.- Dijo Lilith sin problemas, algo que hizo que Eda se atragantara mientras trataba de sofocar su risa.

-¿E~En serio?-

-Si, si eso significa que podremos estar con Luz, no veo ningún problema. ¿Qué dices tú, Edalyn?-

-Si eso significa que podemos ver a Camila como la marrana que es, me tienen.- Camila estaba segura que uno de estos día iba a asesinar a Eda y diría que fue un accidente.

-...Háganlo ahora.- Eso hizo que la sonrisa burlona de Eda creciera, y que Lilith la viera sorprendida y algo asustada.

-¡¿Ahora?!-

-Si, justo ahora.-

-Alto. Alto. Alto. Tiempo fuera.- Eda dejo la sangre de manzana en la mesa, y se puso frente a la latina quien se veía aun avergonzada, pero con más confianza.

-Mira, es genial que aceptes que eres una degenerada que quiere ver como dos brujas se cogen a tu hija, en serio. Pero debo detenerte allí, Luz está en la escuela y a ella no le gusta perderse clases, así que tu espectáculo será cuando vuelva. Ahora, esperemos.- Con eso se sentó en su silla para así volver a beber

Se hizo un silencio algo incomodo del que solo era roto por el sonido de un reloj, Camila miraba fijamente a Eda quien la ignoraba a favor de beber su bebida y Lilith solo estaba esperando que algo pasara. Afuera Hooty estaba comiendo insectos.

-Les conseguiré más juguetes para usar con Luz, si la traen ahora.- Dijo Camila seria.

-¡Vamos Lily! ¡Tengo ganas de ver a Luz!- Tomando su palismán en una mano y el brazo de su hermana en otra, se fueron en dirección a Hexside.

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Luz estaba por ir a sus clases de alquimia hasta que fue detenida por el director Bump.

-Oh Luz, necesito que vengas a mi oficina.- Confundida fue con él, dándole una última mirada a sus amigos quienes la vieron algo preocupados y confundidos.

-¿Pasa algo, director?- En ese momento Luz estaba repasando todas las tonterías que había hecho, y cuál de todas había sido descubierta haciendo.

"-Oh no, ¿Qué puede saber? ¿Tal vez las bombas de pintura que le lancé a Boscha?, se lo merecía por haberle quitado su corona a King, o tal vez que yo cause aquella poción pica-pica... ¡Estoy tan muerta!-"

La morena salió de sus pensamientos al entrar a la oficina del director y encontrarse a ambas Clawthorne que estaban sentadas en las sillas de la oficina.

-¿Eda? ¿Lilith?-

-¡Luz! ¡Oh Luz!- Eda se levantó de la silla y abrazo a la humana mientras sollozaba muy, pero muy escandalosamente.

-¿Eh?- La morena sentía sus pulmones ser apretados por el abrazo de la bruja, confundida vio a Lilith quien se veía igual de triste.

-¡¿Alguien me puede explicar que está pasando?!-

-Bueno Luz, lo que ocurre es que parece que tu madre tuvo un accidente y bueno...- Bump se veía incomodo por decir los menos de la escena que tenía enfrente.

-¡¿Qué?!-

-Lo que pasa es que, Camila se cayó en el sótano de la casa y necesitamos que vengas con nosotras a sacarla.- Dijo Lilith, viéndose afligida.

-¡¿Qué?!- Repitió Luz, ahora totalmente asustada.

-Ya que es una emergencia, puedes ir...- Antes de terminar de hablar, vio como la humana tomaba a ambas hermanas y se iban corriendo en dirección a la casa búho.

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Cuando llegaron a la casa, la menor trato de ir directo al sótano sin un plan o protección solo siendo jalada hacia Lilith quien la beso directo en la boca. Sabiendo que probablemente su madre estaba en el horrible sótano de Eda, se alejó y trato de correr.

-Tranquila Kiddo, Cam no está en el sótano.- Dijo Eda mientras hacia un círculo en el aire, lo que hizo que la casa tuviera una burbuja a su alrededor, lo que provocó que Hooty chocara contra ella y se golpeara la cabeza.

-N~no está allí... ¡Entonces porque me dijeron eso!- Enojada se alejó de Lilith quien veía entretenida su arrebato. -¡Casi me matan del susto!-

-Bueno, era la única forma de traerte a casa, sabes?-

-¿Por qué me querían aquí?-

Luz de inmediato sintió las manos de la pelinegro acariciar su vientre y su aliento en su oreja, estremeciéndose adivino porque la habían sacado de la escuela.

-King y Hunter están en el castillo de Belos para que King use las cosas de nuestro emperador, volverán hasta la noche~- Sintiendo su rostro ponerse rojo, trago saliva a la vez que su cuerpo comenzaba a responder ante las caricias de la dama cuervo.

-Podrás ponerte al día luego, queremos por hoy tenerte para nosotras.- Murmuro mordisqueando la linda oreja redonda de la latina quien dio un chillido al sentir los colmillos darle cosquillas, apretando sus piernas pudo ver como ahora Eda tenía una sonrisa que dejaba ver sus dientes y pasaba su lengua por sus labios.

Temblando dejo que Lilith le quitara su uniforme y que Eda mordisqueara sus piernas ahora desnudas, gimiendo sintió los dientes de la dama búho queriendo romper la piel a su disposición, pero sabía que aún no era el momento, la mayor de las Clawthorne la atrajo a un beso mientras sentía como las uñas de la peliplateada bajaban su ropa interior lentamente. Eda observo orgullosa el ver como un hilo de humedad se despegaba de la ropa interior.

-Tan ansiosa~, no es cierto, Lily?-

Separándose de los labios de la humana asintió con la cabeza mientras sus manos arañaban y apretaban el trasero de la más joven.

-Absolutamente. Solo mírala, Edalyn. Está prácticamente chorreando por nosotras~

Los dedos de la ex líder del aquelarre del emperador fueron a su vagina donde comenzó a acariciar los labios vaginales, sacando varios gemidos y algunos chillidos de la humana.

-Mmm, esta tan húmeda que incluso un miembro de troll podría entrar sin dificultad alguna.- Luz movió sus caderas tratando de que los dedos de Lilith entraran dentro de ella, solo recibiendo crueles burlas de dichos dedos.

-Aun no, Luz. Queremos disfrutarte bien.- Eda sonrió al ver la mirada desesperada de la morena, gimiendo de forma triste dejo que Lilith continuara torturándola, la menor de las Clawthorne levanto sus piernas y las coloco en sus caderas para tenerla atrapada entre ella y su hermana.

-Tenemos todo el tiempo del mundo, Cam parece que tiene una reunión en el mundo humano. Y no volverá hasta muy tarde~- Tomando el rostro de la morena sonrió al ver la mirada necesitada de la niña quien estaba moviéndose en un intento de crear fricción.

[.]

Cayendo sobre el nido de Eda, la morena espero a que una de las hermanas se dignara a entrar. Tenía parte del cuello mordisqueado y sus piernas con las marcas de los dedos de la dama búho mientras su vagina estaba algo húmeda por lo que había pasado previamente. El nido de Eda estaba bien acolchado, tenía distintas almohadas y sábanas para mayor comodidad cuando ella y Luz estaban por tener sus momentos íntimos.

Luz capto un sonido extraño en el cuarto, antes de ir a ver que era su cuerpo fue inmovilizado por unas cuerdas que ella conocía bien. Abriendo los ojos vio el brillo dorado conocido por la magia que Lilith había introducido en ellas, sus brazos con sus piernas empezaron a ser atados, y movidos en contra de su voluntad entre medio de todo eso sintió como su cuerpo se suspendía en el aire y cuando todo termino estaba atada y colgada.

Un escalofrió recorrido el cuerpo de la humana, y ansiosa vio a ambas brujas sonreírle mientras estaba expuesta de esa manera, bajando la mirada vio como estaba atada esta vez.

Sus piernas estaban extendidas hacía arriba con la cuerda alrededor de sus piernas en un patrón que las hacía ver como si tuviera cadenas de oro, sus piernas estaban estiradas hacía arriba algo separadas dejando su vagina expuesta para cualquiera y sus brazos estaban atados en su espalda de forma que no podía moverlos, parte de su torso estaba con las cuerdas en un atado intrincado que la hacía ver como si fuera un trozo de carne colgando para ser devorado.

-No creo que necesites ponerte cómoda, Luz.- Lilith se relamió los labios al ver a la humana en aquella posición, Eda tenía varias pociones flotando a su alrededor, pociones que Luz sabía exactamente lo que hacían.

-Vamos, niña. Tú y yo sabemos que no debes relajarte en estos momentos, si lo haces, podríamos comerte~

Las uñas de la dama búho acariciaron la piel de su vientre, arañando de forma ligera y suave la piel de la humana sintiendo como se estremecía ante su tacto, algo que la hizo sonreír al ver la sumisión sabiendo que la madre, estaba disfrutando del espectáculo que le estaban dando y ahora recibiría uno mejor de lo que ella había esperado.

-¿Acaso quieres que estas brujas te coman, Luz~?- Su lengua lamio la mejilla sonrojada de la morena, quien lanzo un gemido y trato de obtener más, lo que agrando su sonrisa y alejándose de sus intentos de un beso solo apretó ambos pezones con sus dedos ganándose que arqueara la espalda y jadeara.

-¿Te gusta que estas dos brujas te follen?- Jalando un poco los pezones, mordisqueo la oreja redonda de la más joven quien estaba gimiendo mientras se removía, tensando las cuerdas en el proceso y provocando que estas empezaran a friccionar contra la piel de la morena.

-Responde, Luz. ¿Te gusta que Lily y yo te follemos como una simple puta? ¿Es eso?- La estimulación que la Noceda menor recibía estaba dejando que apenas pudiera pensar.

-No lo sé, Edalyn. No parece que le guste.- Los dedos de la pelinegra fueron a su vagina donde comenzó a frotar los labios vaginales con lentitud, disfrutando de ver como la humana parecía desesperarse por que empezaran de una vez.

La morena tenía ya una capa de sudor en su cuerpo, su pecho estaba subiendo y bajando ante cada exhalación y trataba de mover sus caderas hacía los dedos de la ex líder del aquelarre mientras que, sus pezones estaban ya erguidos y duros como piedras e incluso de un color más oscuro por la forma en la que la bruja salvaje jugaba con ellos.

En el incognito, Camila Noceda estaba viendo sudorosa y con sus pantalones ya abajo y su ropa interior húmeda, como su hija estaba a merced de lo que las brujas deseaban. Las manos de la mujer estaban entre su vagina y sus senos, su camisa estaba hacía arriba y su sostén hecho girones dejando a la vista sus pechos llenos y sus pezones erectos, los lentes de la Noceda mayor estaban algo empañados y algo de vapor salía de la boca de ella ante cada jadeo, todo con su propio sonrojo en su rostro.

Sus lentes captaban la forma en la que el cuerpo de Luz se derretía ante las atenciones de ambas mujeres, y como parecía rogar más y más de ellas. Sus ojos se aseguraron de grabar la expresión de Luz, incluso dejo su propia satisfacción para sacar su teléfono y fotografiar a su hija como tanto había deseado.

La lente inmortalizo el rostro rojo y algo sudado de Luz, que tenía una expresión desesperada que hacía una hermosa y erótica complementación con los ojos llorosos y las pequeñas lagrimas que salían de sus ojos, su rostro era algo que hizo que las fotografías valieran la pena junto con el inmortalizar con él, la forma en la que Eda y Lilith se encargaban de su cuerpo.

-Mmm, supongo que tienes razón, Lily. No parece que le guste. Deberíamos soltarla e ir por la chica Blight, ella se ve que disfrutaría lo que le hiciéramos.- Al poder registrar lo que la dama cuervo dijo, Luz abrió los ojos y grito.

-¡No!- Había hecho un movimiento brusco, lo que provocó que las cuerdas se tensaran ante el movimiento lo que termino con su piel irritándose ante las cuerdas.

-¿No, que? ¿Mm? Dinos Luz, a que te refieres? -Lilith estaba frustrando a la chica atada, sus dedos jugaban con su entrada haciendo ademanes de entrar lo que terminaba con apenas presionando, para que estos jugaran con su clítoris lo que estaba dejando con su vagina como un desastre húmedo y palpitante.

-¡Me gusta que me follen!- Su rostro estaba en una expresión desesperada y excitada, lo que con las gotas saladas que salían de sus ojos complacían a las tres brujas.

Camila había decidido que era mejor grabar a su hija, si bien las fotografías estarían bien con el video podría rememorar cuantas veces deseara el cómo su hija era devorada por las Clawthorne.

-¡Me gusta que Lilith me coja con sus dedos! ¡Y me gusta que tú me cojas muy fuerte!- Ante lo que dijo, ambas hermanas se encargaron de premiar a la menor quien, dio un gemido muy fuerte.

Lilith comenzó a lamer y estimular el clítoris de la morena mientras sus dedos se encargaban de entrar y salir rápidamente de su núcleo, la humedad hacía mucho más fácil su trabajo de llevar a Luz al orgasmo.

Mientras tanto Eda bajaba hacia el otro agujero libre que poseía la Dominicana, su lengua serpenteo antes de llegar y dejando a la vista su cavidad anal sonrió al ver la forma en la que se tensaba y destensaba para ella.

-Oye Luz, no te molesta si mamá te da un beso especial, no?- Sin darle oportunidad de una respuesta, inmediatamente se encargó de devorar su trasero lo que hizo que en el cuarto se llenara del sonido de gemidos y chillidos a la vez que Luz se retorcía, las cuerdas frotaban bruscamente contra su piel lo que empezaba a irritarla demasiado comenzando a herirla.

Ambas brujas estaban devorando los respectivos agujeros, dejando a la Noceda menor gimiendo y retorciéndose mientras Camila disfrutaba de la vista.

[.]

Eda en algún punto saco su lengua del trasero de la humana quien estaba siendo presa de un orgasmo, dejando a Lilith encargarse de su orgasmo, con un movimiento de su mano, una botella de un líquido verdoso se dirigió hacia ella y abriéndolo se puso mucho en las manos para así empezar a regarlo por el cuerpo de Luz.

-Creo que es hora de que nos dejemos de juegos, kiddo.- Las manos estaban frotando el aceite verdoso, la pelinegro se separó de la vagina de la humana quien estaba jadeando en un intento de recuperarse, al ver lo que su hermana hacía hizo un círculo en el aire y con eso una venda cayo en las manos de la Clawthorne mayor.

Luz apenas pudo reaccionar cuando Lilith le vendo los ojos, como apenas podía lanzar unos cuantos chillidos ante las manos de Eda que, resbalosas que estaban frotando por todo su cuerpo sin importarle si manchaba las cuerdas que estaban empezando a brillar de forma más intensa.

-E~Eda~-

-Shh! Deja que mamá se encargue de esto.- Tomando más aceite comenzó a frotarlo justo en sus piernas que aún estaban hacía arriba, hasta en esos momentos se dio cuenta de la sensación de hormigueo de estas por la posición.

Lilith fue hacia uno de los cajones de su hermana mientras esta se encargaba de cubrir cada centímetro de la piel de la más joven.

-¿Te gusta que Lily y yo te follemos? Bueno, vamos a hacer más que eso hoy, Luz~

Camila se mordió los labios al escuchar eso, sabía que Eda estaba queriendo hacer que nunca olvide esto y se sentía en un extraño conflicto por ello, pero no iba a negarse el ver e inmortalizar la escena frente a ella.

[.]

Luz gimió al sentir el golpe, el sonido de un zumbido rompió el aire de la habitación y sin su vista, pudo sentir las manos de alguien (Eda quizá) abofetear su sensible trasero.

Eda siempre la llenaba de aquella cosa cuando quería escucharla hacer muchos sonidos, era una poción especial que sensibilizaba la piel. Una que al frotarla en la piel de la persona hacía que las sensaciones se amplificaran, si sentía una caricia su cuerpo la sentiría más fuerte de lo que debería y si era golpeada era igual.

-Vaya Luz, parece que disfrutas mucho de esto~

Un gemido salió de su boca al sentir un par de dientes morder su trasero, estaba demasiado sensible y podía asegurar que estaban jugando de esa forma porque adoraban verla rogar.

-Lilith, tranquila. No se ira a ningún lado.-

[.]

Lilith mordió con cierta fuerza una de las nalgas de Luz, quien dio un chillido ante el mordisco y separándose de ella se vio las marcas de sus dientes en la carne y sonrió orgullosa de ver la marca que dejo.

-Me gusta dejar mi marca en ella, Edalyn.-

-Pff, lo se. Trata de no comértela, aun nos falta el platillo principal.-

La morena escucho a las brujas murmurar junto con la risa de Eda y a Lilith regañándola, escucho la madera del piso rechinar junto con el sonido de cajones abriéndose, Luz trato de adivinar que estaban por hacerle teniendo en cuenta que sus ojos estaban fuera de servicio.

Ella no podía ver como ahora Camila estaba visible y siendo las burlas de la bruja plateada, quien no estaba dejándola tranquila con sus miradas burlonas y sus gestos obscenos, lo que Lilith estaba reprochándole para que se detuviera.

Sacando de un cajón un vibrador en forma de huevo solo le saco la lengua a la morena mayor para así empezar a darle un verdadero espectáculo, Luz chillo al sentir el huevo y los dedos de su mentora introducirse dentro de ella, dichos dedos jugaron un poco con ella para dejarla con un gemido decepcionado al sentirla salir.

Relamiéndose los labios Camila observo como Eda encendía el juguete lo que reanudo los gemidos con mayor fuerza, las piernas de Luz intentaron cerrarse lo que les fue imposible ya que las cuerdas le impidieron moverse, sus caderas fueron hacía adelante en un intento de retorcerse lo que le daba a Camila una vista excelente de como la vulva de su hija se contraía y se humedecía.

-Luz~ Quiero que aguantes 5 minutos sin correrte, si lo haces te daremos eso que te gusta.- Dijo Lilith, quien se veía muy emocionada y excitada por la vista, la morena al escuchar su recompensa chillo y asintió con la cabeza.

Eda solo tomo a la Noceda mayor del brazo y la acerco más a su hija, quien estaba ajena a que su madre estaba observándolas con una sonrisa burlona la bruja albina se acercó al oído de la mujer y le susurro.

-Vamos Cam, sé que quieres hacerlo~- Camila estaba ya en su límite, la pequeña parte de ella que estaba recordándole lo mal e inmoral que era todo esto estaba siendo silenciada por la voz de la bruja, que como una vil serpiente le susurraba que cediera.

-Solo mírala, no se ve apetitosa acaso?- Los ojos cafés de la mujer estaban fijos en aquella área de la que su hija estaba siendo sobre estimulada, el líquido vaginal estaba cayendo al piso y podía ver como gracias a ellos su vulva brillaba dándole un aspecto apetitoso.

Luz grito de placer al sentir una lengua lamiendo su vagina, el juguete estaba vibrando dentro de ella mientras que la lengua lamia sobre sus labios vaginales para ir jugando con su clítoris aumentando el placer, lo que hacía que la morena tuviera que usar toda la concentración que poseía junto a su fuerza de voluntad para no correrse allí mismo.

-Llevas 3 minutos, Luz. Puedes aguantar?- La voz burlona de Eda la saco de su estupor, mordiéndose los labios se concentró en cualquier cosa menos en el placer que estaba sintiendo, esta vez era personal.

Camila estaba abriendo los labios vaginales de su hija para que su lengua pudiera entrar mejor, sus lentes estaban casi por salírsele de la cara por los movimientos mientras que en sus mejillas se podía ver el líquido de su hija, tomando un poco de aire mordisqueo el clítoris hinchado.

Sus ojos trataban de no perderse ningún detalle de Luz, quien estaba gimiendo y retorciéndose con su cuerpo cubierto de sudor. Luz estaba en un estado del que ni siquiera era pensar en otra cosa que, en no correrse, la morena grito sin poder evitarlo al sentir como la lengua entraba y salía sin ningún indicio de detenerse.

-Un minuto, Luz.- Las palabras de Eda lograron que la determinación de la humana volviera, tensando su cuerpo evito moverse tanto como pudo mientras se mordía el labio hasta hacerlo sangrar, las vibraciones del juguete aumentaban en un intento de hacerla ceder más ella no iba a rendirse llegando a este punto.

-10 segundos, Luz.- Gritando arqueo la espalda mientras intentaba aguantar hasta que el tiempo se terminara, la lengua parecía haber tomado eso como una señal de ir más rápido ya que podía sentir como la misma iba desde entrar y salir, a ir a su clítoris donde lo hacía girar, para después ser succionado.

-5...- Podía hacerlo, podía aguantar un poco más.

-4...- Su vagina estaba palpitando desesperada por la liberación, necesitaba correrse tanto.

-3...- ¿Todo estaba dando vueltas?

-2...- Estaba tan cerca, podía lograrlo.

-1...- Como si fuera una señal, su espalda se arqueo y un grito salió de su garganta mientras su vagina sufría un fuerte orgasmo, Camila pudo sentir como el juguete salía de su hija ya que ella tuvo que separarse de su vagina, al sentir dicho vibrador salir aún encendido.

El juguete se removía aun encendido en el suelo, Luz mientas tanto jadeaba intentando tomar aire a la vez que sentía su vagina temblar ante la estimulación oral. La lengua estaba lamiendo su orgasmo sin importarle la sensibilidad que estuviera sintiendo, su clítoris palpitaba con fuerza y gimió de forma aguda al sentir como era girado y succionado.

-Eeedddaaa~ P~Por favor~...- Estaba ya llorando ante tanto placer, era como estar en un maremoto de sensaciones todas tan placenteras que sentía iba a ahogarse.

-Creo que está muy sensible Edalyn~- La voz de Lilith la trajo de vuelta, pudo sentir un par de manos en sus pechos que empezaron de inmediato a jugar con sus pezones, lo que solo hizo que sus temblores se volvieran más obvios.

-Te vez preciosa, Luz~- Escucho un chasquido y luego vislumbro debajo de su venda un flash, estaba siendo fotografiada.

De pronto la lengua se fue y las manos igual, las cuerdas se tensaron ante sus espasmos y la humana otra vez quedo sola. Escucho las fotografías una y otra vez, esperaba verse tan sumisa como a ambas brujas les encantaba porque era una de las cosas a las que más empeño le ponía.

-Pero que niña tan buena eres, no es verdad? -Sintió el aliento de la dama búho en su cuello y dando un estremecimiento, su vientre fue acariciado por los dígitos de la bruja salvaje, dio un grito al sentir la boca de Lilith en sus muslos mordiendo y marcando esa área.

-S~Si... soy una buena niña.- Escucho como ambas destapaban otras pociones y sintiendo su rostro más rojo y la emoción gotearle por las piernas, se removió impaciente rogando tener su tan ansiada recompensa.

-Pequeña pervertida, intenta ser paciente!- Una nalgada la hizo quedarse quieta por el otro lado las mujeres del cuarto vieron la marca de la mano de la pelinegro en su nalga derecha.

Camila solo vio con el rostro algo húmedo como su hija parecía rogar por lo que las brujas le tenían preparado. Abriendo los ojos hasta más no poder, la morena mayor sintió su rostro increíblemente caliente de pronto al ver como en el área pélvica, se mostraba dos penes en cada Clawthorne que comenzaban a ponerse erectos.

Sintiendo unas pequeñas bofetadas en su rostro cerro la boca que no sabía tenía abierta, tragando saliva vio casi sin creerlo como ambas brujas con aceite frotaban sus miembros para así acercarse a su hija colocando sus miembros en las caderas de ella para que así los sintiera, sacándole un gemido ahogado.

-¿Querías esto, Luz? ¿Los extrañaste?- Eda estaba restregando su miembro en la cadera de Luz, quien estaba retorciéndose al sentirlos.

-P~Por favor~- Luz estaba llorando de desesperación al sentir ambos miembros tan cerca, pero a la vez tan lejos de ella, necesitaba tanto que alguno de ellos entrase en su interior.

-Por favor, que?- Lilith estaba disfrutando bastante el ver los ruegos de la humana, era bastante catártico tener ese tipo de control sobre ella.

-¡Follenme! ¡Entren en mí!- Lilith beso a Luz, quien correspondió al beso mientras Eda le sonreía a Camila y dejaba que viera a su hermana follarse a su hija.

La pelinegra no perdió el tiempo y colocándose entre las piernas de la humana, junto con el cómodo acceso gracias al shibari coloco su miembro para así poder entrar de una vez, terminando el beso la dama cuervo vio como la morena trataba de tomar aire y que en sus labios había un puente de saliva, agradecía que la niña tuviera una venda en los ojos sino vería su rostro sonrojado y sabia por experiencia que la Noceda menor empezaría a describir a lo que parecía su cara roja.

-Lilith~- Eso hizo que su miembro temblara, aun cuando ella y Edalyn la vendaran en los ojos, la pequeña bruja sabría siempre a quien besaba.

-No voy a ser suave contigo.- Dicho eso, tomo de las mejillas a la morena y teniendo acceso a su boca le escupió para después besarla esta vez usando sus colmillos para así hacer sangrar sus labios, deleitándose del sabor metálico de la sangre humana mientras penetraba su sexo húmedo.

Camila vio con su vagina increíblemente húmeda como Lilith estaba cogiéndose a su hija a falta de una palabra mejor, Eda tenía sus manos en los senos de la adulta mientras usaba los muslos de la mujer en su miembro.

-¿No se ve bien acaso?- Los gemidos de la humana resonaban por toda la casa, las cuerdas se tensaban y brillaban por momentos y la bruja salvaje podía ver a su hermana marcar a la niña con sus dientes.

-¿Cuánto tiempo pasaste negándote esto, Cam? Parece que fue mucho.- Sus uñas torturaban los pezones de la mujer quien estaba dando algunos jadeos silenciosos con el poco autocontrol que le quedaba, Eda se rio al ver como la humedad de Camila se volvía más abundante.

-Lilith~

El gemido de Luz hizo que la peliplata prestara atención a lo que su hermana hacía, apretando los pezones de la madre de su estudiante observo fascinada como aun atada con aquellas cuerdas parecía decidida a moverse aumentando un poco su propio placer, Lilith tuvo que tomar sus caderas para poder embestir mejor aquel lugar.

-Espero no tengas planes para esta tarde, Cam~ Porque creo que tienes mucho que soltar~

Camila solo atino a gemir de forma ahogada mientras sus manos aún estaban en su teléfono grabando todo, sería una larga tarde.

[.]

Luz estaba dormida en su habitación en el mundo humano, lo único que se escuchaba de fondo era el sonido de una pequeña televisión reproduciendo una película antigua. Arriba de aquella litera Vee estaba en su forma basilisca durmiendo, la puerta de aquella habitación se abrió lentamente apenas obteniendo un sonido.

Entrando lentamente Camila intento no hacer ruido, usaba una pijama floja con solo sus bragas cubriendo esa parte de su cuerpo. Observando a Vee en donde estaba, le coloco unos audífonos cancela sonido que ella llego a usar cuando el ruido de las fiestas universitarias fue demasiado para ella.

Tragando saliva se arrodillo en donde su hija dormía, su mano tenía un control que encendería algo en específico, quitándole las sábanas de encima a Luz vio que solo usaba un short para dormir y una camisa sin mangas blanca. Sintiendo su corazón latirle contra su pecho muy fuerte y su rostro adquirió un tono rojizo que, parecía volverse más fuerte mientras más veía a su hija.

Una de las manos de Camila fueron ante la pequeña prenda que cubría la entrepierna de su hija, suavemente bajo aquello que le evitaba ver aquel lugar sagrado. Cuando bajo el short con la ropa interior, pudo ver aquel lugar tan sagrado.

Luego de la faena que tuvo con las brujas, tuvo que irse a bañar y fingir que estuvo en la tierra, aun cuando ella misma hubiera participado de lo que le hacían a su hija. Ella no pudo ver a detalle esa parte en específico.

Tragando saliva nerviosa abrió las piernas de Luz, quien apenas se removió ante eso. Algunas gotas de sudor bajaban de la frente de Camila quien, esperaba su hija no despertara.

Tomando el juguete lo introdujo delicadamente dentro de su hija, estaba suspirando de alivio cuando lo vio adentro.

Ý̗̙̝̫̱͐̄̚͞á̘͉̉ h̫̜̓̂á̘͉̉b̞͚̳̗̳̅͒̅̅̚íá̘͉̉ c̖̩̮̔̾͐́ͅṙ̻ụ̩̪̇͆͑́͜z͉̾á̘͉̉d͇̹͎͖́͐̀͠ó͎̥͡ d͇̹͎͖́͐̀͠e͎̫̻͕͒͒̑̃̊͟m̬̟̑͗á̘͉̉s͚͈̭̦̈́̈̄͒ĭ̢̜͝á̘͉̉d͇̹͎͖́͐̀͠á̘͉̉s͚͈̭̦̈́̈̄͒ l͈̯̾̀ín͕̰̳̏͝͡e͎̫̻͕͒͒̑̃̊͟á̘͉̉s͚͈̭̦̈́̈̄͒. T͙́á̘͉̉n͕̰̳̏͝͡t͙́á̘͉̉s͚͈̭̦̈́̈̄͒ q̛̲̲̥́̀̔͜ụ̩̪̇͆͑́͜e͎̫̻͕͒͒̑̃̊͟ ý̗̙̝̫̱͐̄̚͞á̘͉̉ n͕̰̳̏͝͡ó͎̥͡ q̛̲̲̥́̀̔͜ụ̩̪̇͆͑́͜e͎̫̻͕͒͒̑̃̊͟d͇̹͎͖́͐̀͠á̘͉̉b̞͚̳̗̳̅͒̅̅̚á̘͉̉ n͕̰̳̏͝͡ĭ̢̜͝n͕̰̳̏͝͡g̥̤͌̈ụ̩̪̇͆͑́͜n͕̰̳̏͝͡á̘͉̉, á̘͉̉s͚͈̭̦̈́̈̄͒í q̛̲̲̥́̀̔͜ụ̩̪̇͆͑́͜e͎̫̻͕͒͒̑̃̊͟... ¿Q̛̲̲̥́̀̔͜ụ̩̪̇͆͑́͜é ĭ̢̜͝m̬̟̑͗p̠͖̠̈́͋ó͎̥͡ṙ̻t͙́á̘͉̉b̞͚̳̗̳̅͒̅̅̚á̘͉̉ ý̗̙̝̫̱͐̄̚͞á̘͉̉?

[.]

Luz estaba sonrojada en el desayuno.

Fue lo primero que noto Vee, ella comía su cereal de forma incomoda mientras que Camila tarareaba de forma alegre una canción en español.

-Amor prohibido, murmuran por las calles~ Porque somos de distintas sociedades~-

Sino fuera porque Vee estaba aprendiendo Español, no comprendería mucho lo que significaba esa canción.

-¿Pensando en alguien?- Pregunto, no era que no fuera usual verla feliz, pero el ver aquel humor tan dulce y hasta romántico hacía que la basilisco se sintiera feliz de ver aquel brillo en la mujer humana.

-Ohhh~ Tal vez~- Canturreo mientras apagaba la estufa, tomando la comida la coloco en la mesa.

-Vamos mijas, coman. Necesitaran mas que cereal para tener energía hoy.- Luz solo hizo caso y comió la nueva comida, Vee por otro lado asintió con la cabeza con una sonrisa.

Cuando el desayuno se termino Camila tomo su bolso y antes de irse.

-Las amo, mis amores~

Le beso que le dio en la cabeza se sentía... diferente. No se quejo y le deseo un buen día, cuando llego el momento de Luz esta le dio un beso en su mejilla que la puso roja y tensa.

-Te vere luego, mi amor~

Y con eso se fue.

[.]

Vee no sabía como llegaron a ese punto, los días se volvieron extraños y hasta incomodos. Camila se comportaba de manera más cariñosa y amorosa, era algo bueno ya que se veía de mejor humor.

-Aaaahhh~!- Jadeo Vee, su cabello rubio limón estaba desparramado en las sábanas, su piel bronceada estaba cubierta de sudor y marcas de labial, sin embargo, su ropa estaba tirada en el suelo.

Mordiéndose sus labios tuvo que jalarse el cabello para recuperar al menos algo de su hilo de pensamientos, algo que quedo fuera de su mente al sentir unos dedos entrando en su vagina.

Los basiliscos son, por naturaleza sensibles. No eran como los Grimwalkers, quienes cambiaban de forma a una en especifico y se quedaban en ella hasta que llegara el momento de cambiar de nuevo, todo lo contrario.

Eran cambia-formas por naturaleza, ya sea la situación o para camuflarse, ellos cambiaban de forma en todo momento, lo que los hizo sensibles en algunas áreas de su cuerpo.

Eso incluía las áreas erógenas que ahora mismo, estaban siendo tan bien estimuladas.

-¡Mami!- Corriéndose, sintió como se arqueaba su espalda mientras se aferraba a las sábanas.

Camila por otro lado, estaba con una mirada llena de lujuria al ver el orgasmo de quien era su hija adoptiva. Llevaban un rato así, Luz estaba con las brujas, por lo que Vee y ella estarían juntas hasta que llegara.

Lamiendo sus dedos vio con orgullo como la más joven estaba reducida a un cuerpo tembloroso y húmedo, queriendo ver más expresiones la mayor se coloco sobre ella y juntando sus piernas con las de Vee, comenzó a rosar su vulva con la del basilisco.

-Ooohh! ¡Mami!-

Por el momento podría divertirse con una de sus hijas hasta que Luz volviera, por supuesto ella y Luz tenían una charla pendiente, pero hasta entonces.

-Aaaaaahhh!- Podría divertirse con Vee.

[.]

Y esto se alarga un cap mas!