7: Sentimientos admitidos
Keyla
Si habría un libro sobre mí, algunos dirían "oh mierda, la protagonista de esta novela es tan débil y estúpida por dejarse secuestrar". Pues no, yo no soy de esas, yo me dejo atrapar, pero por una simple razón, soy inteligente.
Y sé cómo manipular a los hombres.
Los tontos dirán "¿Cómo es que lo hace? Solo es la hija de un empresario". Sí, es cierto, fui una niña mimada, pero también soy calculadora y metódica, nada se me escapa, no necesito un entrenamiento para saber cómo se comportan las personas.
Nunca más seré pisoteada por nadie, jamás lo permitiré ¿Llorar? Ni hablar, se acabaron lo jueguitos de niña pequeña, yo solo quiero vengarme, y para eso no debo ser débil, debo permitir que mi rencor fluya y olvidar mi moral.
Es la única forma, porque es la que quiero.
Solo llevo odio en mi alma.
Camino en círculos por la sala en la que me dejó Nolan y cuando lo veo volver, voy a sentarme hasta el sillón con pura confianza, con mi aire de superioridad.
―No te ves asustada ―opina el rubio ―. Ni siquiera cuando te apunte con mi arma.
Sonrío de lado.
―Tenerle miedo a la muerte me haría débil ―Me cruzo de piernas ―. Y la verdad, no planeo serlo.
―Señorita Keyla ―Se aproxima a la mesa y se sirve un trago, para luego sentarse en una silla cercana al sillón ―¿Por qué está con Vinicio? Tengo fuentes que me informaron que lo buscaste ―Toma un poco de su Vodka.
―Sí, es cierto, y yo tengo entendido que eres un Superior y que le sacaste el puesto a Vinicio ―Revoloteo las pestañas ―. Qué inteligente.
―Estás muy bien informada, me halagas ―Sonríe.
Me levanto y Nolan hace lo mismo, dejando su vaso en la mesa. Camino hasta él, en eso me toca el cabello, así que pongo mi mano sobre la suya, entonces me decido a contestarle.
―Soy la información en persona ¿De verdad crees que Vinicio solo me llevó a su casa para que le abra las piernas? Soy su mejor negocio.
―Ya veo, casi como un administrador.
Entrecierro los ojos. El Administrador es la autoridad máxima de Cenizas Ocultas, definitivamente debo llegar a esa persona. Puede tener la información que más necesito. Encontrar a quién me enterró viva. Nolan debe saber algo, después de todo es un Superior, así que vuelvo a sonreír.
―Supongo que es un cumplido ―afirmo y aprovecho para apartarme de él.
―Por supuesto, esa persona sabe todo de todos.
Me interesa.
―Seguro que ni lo conoces ―me burlo.
Se carcajea.
―Pocos lo conocen, pero volvamos al tema principal.
Revoloteo las pestañas.
―Vinicio ―afirmo y luego me pongo seria ―. Me secuestraste para asustarlo ―indago ―¿Vas a matarme o planeas torturarme para que se sienta mal?
―¿Tan importante eres?
―No lo sé ―Miro mis uñas ―. No conozco sus sentimientos hacia mí ―miento y bajo mi mano, para observarlo mejor.
Vinicio está perdido por mí, pero mejor no afirmárselo a su enemigo. No soy estúpida, eso sería declarar mi sentencia de muerte. Mejor que piense que tan solo soy buena mercancía.
―Vamos a suponer que te creo ―Es inteligente.
―¿Y entonces?
Sonríe con confianza.
―Hay una lista que podría servirte, si quieres llegar al administrador.
―¿Por qué supones eso?
―Lo deduje ¿Pero estoy equivocado? ―Ríe.
Me pongo seria.
―¿Qué quieres que haga?
―Me encanta tu determinación ―Me hace un cumplido.
―Siempre obtengo lo que quiero, pero la verdadera cuestión es ¿Qué quieres tú de mí? Estoy intrigada ―Me muerdo el labio inferior.
―La verdad sí quería asustar a Vinicio para que dejara de buscarme, pero creo que encontré algo mejor ―Me mira de arriba abajo y me río.
―¿Está interesado?
―En realidad me gustan las morenas, pero me encanta que puedas ofrecer más que una noche acalorada, eso demuestra que eres valiosa, sin embargo te dejaré ir por ahora. Claro está, que quiero mantener el contacto, me gustaría saber qué tan leal eres a Vinicio.
―Yo soy leal solo a mí misma ―expreso fríamente.
―Interesante.
Vinicio
Estoy nervioso.
Mierda, voy a tener que admitirlo. Estoy interesado en esa mujer, necesito encontrar a Keyla y saber que Nolan no planea nada raro con ella. Mi preocupación ha crecido de manera descomunal. Debo recuperar la cordura.
Al llegar a la dirección, que localizamos gracias a la evidente matricula en las cámaras de seguridad, desconcertado, veo a Keyla salir por una puerta vieja, me acerco con Tyner hasta ella.
―Te liberaron ―afirmo sorprendido.
Una parte de mí está aliviado y otra, la más sensata, sabe que hay algo sospechoso en todo esto. No debo confiar en esta mujer, pero mis sentimientos me nublan totalmente.
―Bueno, no hubo tiroteo, eso es bueno ―Se ríe Tyner.
Frunzo el ceño.
―Necesito saber qué planea ese malnacido ―Abro la puerta pero me detengo, me giro visualizando a Keyla y a Tyner minándose fijamente.
―Viniste ―susurra ella sorprendida.
Y esa emoción no es para mí, aquí hay algo.
Agarro el brazo de ella y la hago acompañarme.
―Ven, vamos a ver qué oculta ese desgraciado ―refiriéndome a Nolan, pero sin poder evitar mis celos sobre la situación que acabo de notar.
Tyner no dice nada, solo se limita a seguirme.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top