Sus manos en mi cintura se apretaba apegándome a su pecho con nuestras anatomías muy juntas,los besos no paraban y de apoco subían de tono tornándose más bruscos y deseosos. Solo significaba una cosa.

Sexo.

Lo necesitaba tanto,estaba tan excitado y no quería parar. Ni siquiera la parte racional de mi cerebro lo haría. Tampoco la parte de ser aún virgen. Dolería como el demonio pero lo vale por tenerlo a él en mi por primera vez.

-¿Estás seguro Jimin?.-me susurró con voz ronca Yoongi extasiado apretando aún más mi cintura llegando a doler pero del placer.

-No puedo esperar.-pongo entre mis diente sus labio inferior.-hazme tuyo.-le digo relamiéndome los labios totalmente excitado.

No lo pensamos más y nos besamos necesitados el uno del otro. Sus manos van a mis muslos para yo después dar un saltito y enrollar mis piernas en sus caderas y dirigirnos a mi cama. Los chasquidos y jadeos aumentaban de volumen llegando a sonar por toda la casa solitaria. Reprimo un gemido gustoso por el apretón que me da en el trasero Yoongi.

Con brusquedad me deja sobre la cama para después comerme el cuello. No puedo dejar de moverme por todas las sensaciones que estoy percibiendo,moviendo de arriba hacia abajo mi pelvis. Toco su cabello revolviéndolo desesperado acercándolo más a mi tirando mi cabeza hacia atrás. Siento mordidas que seguro tornarán moradas y gimo cuando empieza a simular embestiadas placenteras.

-Oh Dios si mmh.-gimo bastante fuerte mordiéndome el labio probando el sabor metálico de la sangre.

La ropa empieza a molestar por el sudor que sale de nuestros cuerpos y nos miramos por última vez para después quitarnos de apoco nuestras ropas sin despegar menos de segundos nuestros labios. Solo nos faltaba una prenda que sacar y el de un movimiento me toma las caderas para ponerme en su regazo. Mi trasero Justo en su entrepierna. Lo empiezo a mover en círculos provocándolo sacándole un gemido ronco.

-No sabes en cuantas formas te voy a romper ese culo Jiminie.-sus dos manos bajan de mi cintura para tocarme y manosearme el trasero.

Seguimos besándonos moviendo nuestras caderas al mismo ritmo y cuando ya no podemos ignorar la electricidad en nuestras anatomías nos sacamos el último estorbo y me preparo para lo que viene.

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La segunda parte la escribo en la tarde ya que ahora estoy bien dormida
Son las 4 de la mañana y yo aquí escribiendo parte de 🍋🍋🍋🍋