-No puedo creer que me hayas botado,me siento ofendido.-me besa la mejilla apretando aún más mi cuerpo en sus brazos-en mi propia casa.

Estábamos acostados en posición de cucharita,él siendo la cuchara grande.

-Déjame mmm...-Estamos en una posición muy comprometedora pero me tomó por desprevenido.

Después de la interrupción de su hermana de 7 años,Yoongi no ha dejado de echarme en cara su caída,que se ha roto el brazo y que no sanaba si no le daba un abrazo. Si,es un canalla pero me apiade de su cara de gatito herido y le di uno,pero después me arrastro a la cama y ahora estamos así. Lo más normal de la vida.

-Yoongi no me bajes los pantalones-murmuro muy bajito tapándome la cara con mis manos.-hay que dormir-me doy la vuelta para mirarlo a los ojos.

-Deberíamos seguir con lo que dejamos pendiente antes no crees-pasa sus manos por mi cintura acercándome a él,acariciandome con sus dedos mi cadera.

-Yoongi-me sonrojo y escondo mi rostro en su pecho.

Me levanta el mentón y nos miramos sin decir alguna palabra,el silencio reina la habitación de cuatro paredes y me siento desvanecer. El se acerca de apoco a mi rostro y cierro los ojos para después sentir sus labios contra los míos. El vaivén de nuestros labios es lento,mi cero experiencia en besar se nota ya que es un beso torpe y tímido.
Se separa con una sonrisa y me mira.

-Deberíamos dormir-lo miro por última vez antes de asentir y quedarme en un profundo sueño.