Capítulo siete

  —  Hola frutita. —  Había caído... con Hisoka. El mago se levantó del suelo y se me acercó, extendió su mano y me dio un brazalete. — Debemos ser dos personas para abrir la puerta.— El televisor  se encendió y apareció el examinador de esta prueba. 

  —  Solo trabajaran en equipo esta vez, deberán abrir la puerta presionando el botón al mismo tiempo. En las demás pruebas deberán hacer lo contrario que el otro. Por ejemplo; si uno caminar sobre el agua, el otro debe caminar sobre el fuego. Hasta aquí mi explicación , los estare vigilando. — El televisor se apagó, mire a Hisoka, Este se alzó de hombros. Los dos presionamos el botón y nos encaminamos al laberinto que nos esperaba. La pruebas no eran realmente difíciles, logramos avanzar demasiado en cuestión de pocas horas. Ningún problema se presentó, incluso pude charlar con el mayor a lo largo del camino. El único problema fue de un competidor que intentó asesinar al arlequín pero fue asesinado, llegamos a final de la torre en tiempo record; si no fuera por Hisoka habría tardado dos días en bajar.

—  Debemos esperar muuuucho. —  Bufé, invoque mi bolsa y comencé a rebuscar, al no encontrarlo decidí meterme dentro de esta para buscar mejor. Flotando mire lo que buscaba, lo lance fuera y después salí del bolso, Hisoka estaba curioso. Le ofrecí unos pastelitos para comer, solo lo abrió y lo metió a su boca. 

  —  Explicame como funciona tu habilidad. —  Sabía que preguntaría eso, le di una mordida a mi pastelito y lo trague, aclaré mi garganta.  

  —  Es sencillo... o al menos eso  creo... Into The Unknown, comenzamos con materialización, para poder invocar esto...  Se genera una habitación en la bolsa, la cual no tiene gravedad y hace flotar las cosas. Si quiero entro y si no pues trato de alcanzarlas. Después si quiero, uso emisión para tomar cosas de donde quiera en un rango de dos kilómetros. — Lance un pastel al otro lado de la habitación, metí mi mano al bolso y un agujero negro apareció bajo el pastelito, mi mano lo tomo. Al sacar mi mano de la bolsa tenía el pastelito. — Es como ¿Teletransportación de objetos?, no puede transportar nada vivo, solo objetos, pero yo puedo esconderme en la habitación que creé; mas no puedo transportarme. — Seguido de esto metí mi mano a la mochila, un agujero apareció sobre una lagartija que rondaba por ahí, la tomé y al sacarla esta estaba hecha polvo, lo sople. — también, los objetos solo pueden durar un mes dentro, o si permanecen ahí sin sacarlos. volverán al mismo lugar de donde los tome, si están afuera no existe esta ley ya que al volver a meterla se reinicia el tiempo de permanencia. Es todo.

— Sencillo pero complejo... Pero la habilidad de sanar... ¿Cómo funciona? — Preguntó el pelirrojo, me tense.

— ¿Milagro? — Reí nerviosa, Era toda la verdad, Wunder es un milagro; y ella los cumple para mi, tal vez pierda la habilidad cuando nazca. — ¡Juguemos a algo! — Propuse para evadir el tema, Hisoka sacó sus cartas no tan seguro y las repartió, de seguro lo investigaría.

Los competidores continuaron llegando, al poco tiempo Illumi se nos unió al juego de cartas; debes en cuando le lanzaba miradas de sospecha.

— Deja de mirarme. — Sacó una carta y la echo al montón.

— ¿Te incomoda?

— No, pero a este paso terminaré asesinandote.

— No puedes, soy inmortal. — Bromeé... Espero serlo.

— ¿Enserio?

— No. — Me concentre nuevamente en el juego, podía sentir como se enojaba.

— Ya son amigos. — Se burló Hisoka.

— Un asesino no necesita amigos.

— ¿Amiga de él?, Que buen chiste, cuentame otro. — Mencione sarcásticamente y tire dos cartas al montón para continuar jugando. El tiempo se fue así entre jugar y casi matarnos varias veces entre Illumi y yo. Sip, somos grandes "amigos". El tiempo estaba por acabar y apenas si los chicos entraron por una de las puertas sonrientes y con suciedad en el rostro, la tercera prueba había terminado. El examinador nos felicitó y subimos al barco... Aquí viene lo feo. Fuí la segunda en sacar la placa de mi objetivo, no recordaba de quién era esta placa. Voltee a ver a mi alrededor y lo identifique, era un extra sin importancia, sería fácil. Al ser de las primeras en llegar abajo en la torre podría emboscar a mi objetivo y me escondería el tiempo que me quedara, regresé a mi lugar mientras planeaba cómo seguirlo, estaba absorta en mis pensamientos mientras comenzaba a murmurar mis planes solo audibles para mi.

  —  Si haces desapareces tu aura de la nada levantaras sospechas. —  Escuche a mi lado, volví a la realidad y gire la cabeza hacia la derecha, era Illumi en su forma de Gittarakur, ¿Y este que o que?, Señalaba a los examinadores los cuales me miraban. 

  — ¿Te dio por hablar? —  El me miro de reojo y después al frente.

— Me gusta hablar, pero desperdiciar mi voz con gente idiota no.  — Comencé a reír, me imagine a Hisoka hablando y a Illumi en silencio mirando a la nada. 

—  No te conte un chiste, ¿Por que te ríes? — Su voz era tan monótona y curiosa con las agujas en su cuerpo. 

  —  Tu tambien deberias reirte de vez en cuando. — Me miró, abrió la boca y como si fuera el traductor de google comenzó a pronunciar "Ja, Ja y Ja". 

  —  Ahí está, jamás lo haré de nuevo. Considérate la persona más afortunada en la tierra. —   Vaya que tenía un ego enorme, el se fue caminando para quedar solo, yo no pude evitar mirar su trasero. En el anime era perfecto y aquí es majestuoso. quiera desnudarlo y...

  —  El participante número uno puede salir. —  No sé en qué momento pero Hisoka bajo del barco para adentrarse en la isla, a los pocos minutos me llamaron a mi, puse un pie dentro del bosque y salte para ocultarme entre los árboles. Esperaría a mi víctima pacientemente...

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