Dicen que todo es consecuencia de lo que cultivas, que tus logros son el fruto de tu esfuerzo; yo disto un poco de esa afirmación, es algo parcial, en donde diferentes contextos definen si son ciertas o no; por ahora, es una manera de aclarar el cómo llegó la guerra.

Fue un resultado de la incomprensión entre Autobots y Decepticons; que ironía, comparten un mismo propósito pero aún así labraron nuestro camino a una segura masacre. Es curioso que estén traicionando lo que alguna vez prometieron.
Algo que para nada disfrutaron los neutrales, que se movilizaron, no para detener la guerra, ni tampoco para salvar vidas; sólo para salvar viejas d-pads que para ellos eran más importante.
Horrible, ¿quién dictó que una vida era menos que un conocimiento?

Insinúan que hacen lo correcto, criticaron los actos de los Decepticons y los Autobots cuando ellos no han hecho nada por detenerlos.

Lo mismo ocurre con Autobots y Decepticons; qué diferencia hay entre dos facciones que sirven a una causa como si de un amo se tratase, se aferraron a la idea de que eran diferentes, de lo anteriores gobiernos, de los otros bandos; nada más han mostrado lo peor de ellos, mataron y destruyeron en nombre de su facción y la causa que ahora ignoran.
Es lamentable; por ese afán de imponer, justificando una masacre.

Aunque muchos ven necesario luchar por un objetivo en común en vez de actuar por egoísmo y miedo como lo hacen otros, eso es lo que piensa mi gente, los mermechs; yo no pienso así, la gente debe luchar por la misma gente no por una idea que está lejana a cumplirse.

Me gritaron que era un traidor; puede que tuvieran razón, el mar de ácido nunca fue mi hogar, por eso me fui a la superficie. Llegue a entender más al sólido y desgastado pero sabio metal; que al turbio y cruel ácido que disolvía.

Lamentablemente la muerte de ambos ya está predestinada, Cybertron estaba muriendo, la superficie fue cubierta de óxido y energon viejo como nuevo; mientras que el mar pasará como una arma, y quienes lo permitan serán los mermechs, por su rencor a hacia los habitantes de la superficie, a los traficantes en específico; permitirán la destrucción de su hábitat impulsados por un sentimiento de recentimiento; así que no soy el único traidor.

¿Merecemos esto? Claro que sí, puede que este sea nuestro castigo por cerrar nuestros ópticos, por quedarnos de brazos cruzados aun cuando el problema estaba al frente nuestro, de todos nosotros, sin embargo, ya es tarde para detener este enfrentamiento. Pero es posible que no todo esté perdido, que haya algo bueno de esto, posiblemente la guerra podría por fin unirlos a todos, sin importar sus ideologías o la raza a la que pertenecieran.
Que tal, el horror de la guerra nos permita a ver a los demás no como enemigos si no, como los cybertronianos que somos, que podemos sufrir las mismas heridas, que también podemos llorar por un contrincante como lo haríamos con un compañero; ver a través de otros ópticos.

Dicen que del esfuerzo se dan frutos, que el lograr algo es solamente el inicio; puede que tarden en comprender, puede que nunca lo hagan, o que sea muy tarde para cuando lo hayan hecho.

Pero ahí estaré, cuidaré de quien lo necesite, para que después de la guerra puedan transmitir su experiencia a generaciones futuras, para evitar el error que cometieron; podrían transmitir el horror que sufrieron y los sentimientos tocan más a la spark que los hechos, así podrían aprender que todos eran cybertronianos libres y nadie debe imponer su ideología.

Porque, si hay algo no puedo permitir es que la guerra no enseñe nada, que se lleve la vida de muchos sin ninguna consecuencia, que sus esfuerzos fueran en vano, que lo que desearon y por lo que trabajaron fuera destruido, no voy a permitir que ni un Decepticon, Autobot o neutral que este bajó mi custodia sufra al pensar que su lucha no valió la pena, porque nadie sin importar la causa que defienda se lo merece, merecen vivir para saber de su error, para corregirlo y enseñar de él, para que su esfuerzo traiga logros.

Dicen que todo es consecuencia de lo que cultivas, que tus logros son el fruto de tu esfuerzo; esperemos que esta vez sean ciertas esas palabras.