- Drabble -
El trabajo era cansado.
Era un dia más de peleas lucha, discusiones y sangre para Vladimir.
Cada vez eran más exigentes y aunque eso significa buena paga también lleva a ser más "Tolerante" con los clientes, las fechas de los muertos se acercaban y eso dejaba paso a toda clase de seres sobrenaturales y extraños.
- Un trago más -
- Te lo daré hasta que vea el dinero -
- Tsk, como molestas -
Saco de su mochila una tarjeta de crédito mostrándose al bar tender.
- ¿Aceptas tarjeta? -
Sin más el sujeto le sirvió un trago más mientras cobraba.
Vladimir nuevamente inundaba sus pensamientos y cansancio en la mejor bebida según él, el alcohol. A este punto de su vida ni los tragos más fuertes le hacían efecto a este hombre, ya había resistido golpes tanto de monstruos como señoras religiosas, ni los golpes de la bebida le hacían efecto.
Mientras disfrutaba del sabor amargo y su soledad volteo a la ventana mirando algo que a parte de acompañar su mal sabor de boca le dio amargos recuerdos.
Desde la Ventana podía ver como al otro lado de la calle se encontraba una mujer abrigando a una niña para después irse de la mano.
Imagino por un momento caminar por las nevadas calles alado se Galya y viendo como su pequeña jugaba con los copos de nieve que caían del cielo.
Imagino por un momento sentir la calidez de la mano de su esposa y la risa alegre de su hija mientras corría a él y le daba un abrazo.
Si que era patético.
Imaginarse una vida que jamás pudo ser posible. Pero aun así deseaba haberla tenido.
Extraña a Galya
Extraña a su pequeña niña
No había noche en la que no las recordará, noche que no recuerde ese horrible día, como esos Valaquia le quitaron lo que más amaba todo por sus acciones.
- (esto es una molestia) -
Vivió con la idea de haberlo perdido todo, hasta que un día descubre que la heredera de la familia es su tan preciada hija convertida en uno de esos lobos bastardos y enfermos de poder e ideales.
¿Y que hizo? Le disparo y le dijo dejaste de ser mi hija en el momento en que esos lobos te tomaron.
Si que era un asco de padre.
Galya lo golpearia por tratar de haber lastimado a su niña, el mejor regalo que pudo haber tenido en al vida, ese pequeño y corto momento en que podría creer que podía ser más que un cazador o un asesino.
Cuando la sostuvo en brazos y veía ese color gris en sus pequeños ojos parecidos a él.
- (Debo olvidar eso) -
Era un mentiroso, jamás podría olvidar esos momentos al igual que la mirada de decepción que le dio Su hija al apuntarle y dispararle con una bala de plata.
Como estaba a punto de matar a esa parte de Galya, si no fuera por ese lobo que apareció lo hubiera hecho.
- ....... Ser padre es un asco -
________________________________________________________________________________________________________________________________________
Debo dejar de escribir en la noche, pero a esa hora llegan las mejores ideas.
Como ven Hild no tiene suerte en las relaciones paternas o maternas, la niña siempre cargará con esos problemas.
Sin más nos vemos mis leyendas ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top