Tanto Jiang Cheng como Lan WangJi estaban en los Pies de Buda, esperando cualquier noticia, así que quién sabe cuánto tardarían en darse cuenta de que algo iba mal y venir hasta aquí. Para extinguir el fuego, se necesitaba agua. Por lo tanto, si las armas mágicas no funcionaban, ¿qué tal la hechicería oscura?

"Va a utilizar el cultivo demoníaco", exclamó el Líder de la Secta Yao.

"¿Qué estás tratando de decir? ¿Que va a dañar a los juniors? ¿No ves que les está ayudando?" preguntó Jiang Cheng enfadado.

"¿Y si realmente va a hacerles daño?" preguntó Meng Yao.

"Si no tienen nada bueno que decir, será mejor que cierren esa jodida boca antes de que lo haga yo mismo", dijo Jiang Cheng furioso.

"Wanyin, por favor, cálmate" dijo Lan Xichen cogiéndole de la mano para retenerle cuando decidiera atacarles.

Wei WuXian desenvainó la espada en la cintura de Lan SiZhui y cortó un trozo de un delgado bambú, convirtiéndolo rápidamente en una flauta. La levantó frente a sus labios e inspiró profundamente. El agudo timbre de la flauta era como una flecha que atravesaba el cielo nocturno y se clavaba en las nubes.

"¿Sé tocar la flauta?", preguntó Wei Wuxian.
"Mn", dijo Sizhui.

"Suena espeluznante", dijo Nie Huaisang.

"Eso fue rápido para hacer una flauta", comentó un azar.

Esto debería haber sido un último recurso para él, pero sin embargo, con la situación ya así, no importaba lo que invocara. Estaría bien mientras la energía oscura fuera lo suficientemente fuerte y la intención asesina lo suficientemente aguda, ¡para que pudiera despedazar a la diosa consumidora de almas!

"Se está poniendo emocionante", exclamó Jingyi.

"Así que su intención es sólo ayudar", dijo Song Lan.

"No es como si tuviera el corazón para dañar a los juniors" dijo Xiao Xingchen.

Lan SiZhui estaba conmocionado hasta el punto de que ni siquiera podía moverse, mientras que Lan JingYi se tapaba los oídos, "Mira en qué situación estamos, ¿y todavía estás tocando la flauta? Suena horrible!"

"Y mira en qué situación estás, y todavía tienes tiempo para insultarme" dijo Wei Wuxian haciendo que Jingyi se escondiera detrás de su padre.

"Realmente eres el hijo de Jiang Cheng, no perdiste la oportunidad de insultarme" dijo sonriendo a su hermano.

"Tampoco perdiste la oportunidad de burlarte de mí" dijo Jiang Cheng.

"Aiya ChengCheng." dijo Wei Wuxian riéndose de la reacción de su hermano.

"No me llames así" exclamó el hombre que hizo reír a carcajadas a Wei Wuxian.

En la batalla, tres o cuatro de los cultivadores que luchaban con la diosa consumidora de almas habían perdido sus almas. Jin Ling sacó su espada. Ya estaba a menos de dos zhang de la diosa consumidora de almas. Su corazón latía como loco y toda la sangre de su cuerpo se dirigió hacia su cabeza, si no puedo cortarle la cabeza con este golpe, moriré aquí, ¡muerte será, entonces!

"¿Por qué piensas así?" preguntó Jiang Cheng, mirando a su sobrino.

"No es divertido morir a una edad tan temprana, a-Ling", dijo Jin Zixuan.

"Por favor, no seas así", dijo Jiang Yanli, agarrando con fuerza la mano de su hijo.

"Lo siento A-die, a-niang". Jin Ling sólo puede pedirles disculpas.

Al mismo tiempo, desde el interior de los bosques de la Montaña Dafan, apareció un sonido tintineante. Tinkle tinkle, tinkle tinkle. A veces era más rápido, a veces más lento; a veces hacía una pausa, a veces continuaba. Resonaba en el bosque silencioso, como el sonido de cadenas de hierro que chocan y se arrastran por el suelo. Se acercaba y sonaba cada vez más fuerte.

Por alguna razón, el sonido provocó en la gente una inquietante sensación de amenaza. Incluso la diosa devoradora de almas dejó de bailar. Levantó los brazos, con la mirada perdida en la oscuridad de la que provenía el sonido.

"Me pregunto qué habrá invocado para que todos se detuvieran", dijo Nie Huaisang.

"Algo que nunca esperarás", dijo Zizhen.

Wei WuXian guardó su flauta y miró cuidadosamente en la dirección.

El sentimiento ominoso que sentía se hizo más y más fuerte, pero ya que estaba dispuesto a venir debido a la invocación, por lo menos sería algo que le escuchaba.

Entonces, de repente, el ruido cesó. Una figura surgió de la oscuridad.

"¿Quién es?", preguntaron muchos de los cultivadores.

"Sólo observa", dijo Wen Rouhan, que observaba atentamente.

Después de tener una visión clara de la figura y la cara, las expresiones de los cultivadores se torcieron.

Incluso cuando se enfrentaban a la estatua de la diosa que podría succionar sus almas en cualquier momento, el grupo no se acobardaba ni mostraba ningún miedo, pero sin embargo, sus voces gritando en este momento estaban llenas de terror que no podían ocultar.

"No siento nada bueno por esto" dijo MianMian.

"Como si algo malo fuera a ocurrir", dijo Jin Zixuan
.
"... El 'General Fantasma', es el 'General Fantasma', ¡es Wen Ning!"

"¡No! No puede ser" exclamó Wen Qing.

"¿Wen Ning? ¿Mi sobrino?" preguntó Wen Rouhan.

El título de "General Fantasma" era tan infame como el del Patriarca YiLing. La mayoría de las veces, los dos aparecían juntos.

La palabra sólo se refería a una persona: la mano derecha del Patriarca YiLing, Wei Ying, que había ayudado con los crímenes del tirano, agitado el viento y las olas, hecho de chacal al tigre, volcado el mundo con él y, sobre todo, era un cadáver feroz que debería haber sido convertido en cenizas hace mucho tiempo: ¡Wen Ning!

"¿Qué significa esto?", preguntó Wen Rouhan con rabia.

"¿Cómo se convirtió mi hermano en un cadáver feroz?" preguntó Wen Qing abrazando fuertemente a su hermano.

Wen Ning tenía la cabeza ligeramente agachada y los brazos colgando, como si fuera una marioneta esperando las órdenes de su amo.

Su rostro era pálido y delicado, y podía considerarse apuesto de un modo melancólico. Sin embargo, en sus ojos no había pupilas, sino sólo una nube plana de color blanco, junto con una serie de líneas negras y quebradizas que ascendían por su rostro desde el cuello, por lo que la melancolía se convirtió en una espantosa penumbra. El dobladillo inferior y las mangas de su túnica estaban andrajosos y rasgados, mostrando un par de muñecas del mismo tono ceniciento que su rostro, con puños y cadenas negras tanto en las muñecas como en los tobillos. El tintineo se producía cuando arrastraba las cadenas de hierro por el suelo. Si dejaba de moverse, todo volvía a quedar en silencio.

"¿Qué está pasando? ¿Por qué está así mi primo?" preguntó Wen Xu.

"¿Quién se atreve a hacerle daño?", preguntó Wen Rouhan liberando algo de energía resentida.

No era difícil adivinar por qué todos los cultivadores estaban muertos de miedo. Wei WuXian tampoco estaba más tranquilo que ninguno de ellos. De hecho, la tormenta en su pecho ya se había desatado sobre su cabeza.

"No me digas que es cosa mía", dijo Wei Wuxian poniéndose ansioso.

"Cálmate, estoy aquí", dijo Sizhui, dispuesto a defenderle pasara lo que pasara.

No era que Wen Ning no debería estar aquí, sino que Wen Ning no debería estar en este mundo en absoluto. Fue convertido en cenizas incluso antes del asedio a la Colina Luanzang.

Wen Qing estaba ahora llorando fuertemente en el brazo de su hermano.

"Jiejie." Wen Ning sólo dijo, tratando de calmar a su hermana mayor.

Al escuchar a los demás pronunciar el nombre de Wen Ning, la espada de Jin Ling, que originalmente apuntaba en dirección a la diosa consumidora de almas, no pudo evitar girar hacia otra dirección. Al ver que estaba distraído, la diosa consumidora de almas extendió alegremente su brazo y lo levantó.

"¡A-ling!", gritó Jiang Yanli, temiendo por la vida de su hijo.

"A-niang, estoy aquí". le aseguró Jin Ling.

Cuando Wei WuXian vio su boca abierta acercándose a Jin Ling, no tuvo tiempo de sorprenderse. Levantó de nuevo la flauta de madera, con las manos ligeramente temblorosas, y por lo tanto, las notas que tocaba también temblaban. Aparte de esto, la flauta estaba toscamente trabajada, por lo que el sonido producido podía describirse como áspero y desagradable al oído. Con dos notas, Wen Ning empezó a moverse.

"Él puede controlarlo" gritó Wen Chao.

"Él es quien lo controla" exclamó Wen Xu enfadado.

"¿Cómo podría?" preguntó Wei Wuxian preocupándose por su vida.

En un abrir y cerrar de ojos, ya se había desplazado frente a la diosa consumidora de almas. Wen Ning usó el lado de su palma y le dio un golpe. El cuello de la diosa consumidora de almas se quebró, y aunque su cuerpo no se movió, su cabeza se torció debido a la fuerza. Miró en la dirección a la que originalmente miraba su espalda, pero siguió sonriendo. Wen Ning dio otro golpe con su mano, y la mano derecha de la diosa consumidora de almas, que sujetaba a Jin Ling, fue cortada limpiamente.

"¡Oh Dios mío! Es malvado!" gritó la Líder de Secta Yao.

Todos miraron a Wen Ning que estaba dentro de los brazos protectores de Wen Qing.

"¿Estás loco? ¿No ves que nos está ayudando?", preguntó Jingyi con incredulidad.

Inclinó la cabeza para mirar la muñeca que se rompió bruscamente. En lugar de girar la cabeza hacia la dirección correcta, todo su cuerpo se dio la vuelta, de modo que estaba mirando a Wen Ning de frente y de espaldas. Wei WuXian no se atrevió a relajarse. Respiró hondo y ordenó a Wen Ning que luchara. Sin embargo, no había pasado mucho tiempo y se quedó aún más sorprendido.

"¿Y ahora qué?", preguntó Wei Wuxian poniéndose ansioso.

Los cadáveres de bajo nivel eran incapaces de pensar por sí mismos y necesitaban sus órdenes para guiarlos. Por otro lado, los cadáveres poderosos y feroces solían delirar o estar inconscientes. Sin embargo, el caso de Wen Ning era diferente: él había sido creado por Wei WuXian, lo que significaba que se le podía considerar fácilmente el cadáver feroz más fuerte del mundo actual. Era el único capaz de pensar. Aparte de no temer las heridas, el fuego, el frío, el veneno y todo lo que temían los humanos vivos, era igual que uno.

"¡Él lo creó!", exclamó Wen Xu.

Wen Rouhan se levantó y dejó escapar una gran cantidad de energía resentida.

"Pagarás por eso" dijo y todos los discípulos de Wen se levantaron y desenvainaron sus espadas.

"Yo-" Wei Wuxian no sabe que decir e inconscientemente se puso de pie.

"Wei Ying." dijo Lan Wangji sorprendido y lo agarro apresuradamente.

"Llévenselo" ordenó Wen Rouhan a sus discípulos.

"Si pueden" dijo Jiang Cheng y se puso delante de su hermano con su espada.

Lan Wangji desenvainó su espada y sostuvo a Wei Wuxian en sus brazos.

Los juniors también se pusieron delante de Wei Wuxian, protegiéndole.

"Así que estan dispuestos a luchar por ese hombre" dijo Wen Rouhan y sus discípulos caminaron lentamente hacia ellos.

"Wanyin." Dijo Lan Xichen y se puso al lado del hombre.

Viendo que sus jóvenes maestros estaban dispuestos a luchar, todos los discípulos de la Secta Lans y Jiangs se levantaron protegiéndoles incluso sin la orden de su Líder de Secta y sus mayores.

"A por él." dijo Wen Rouhan con voz fría y los Wens empezaron a atacar.

"Alto", dijo una voz fría y todos se detuvieron y miraron en la dirección de donde provenía la voz.

"¿Por qué no averiguar toda la verdad antes de llegar a alguna conclusión?" dijo mientras caminaba hacia el centro.

"Qingheng-jun", dijo Wen Rouhan.

"Wen Rouhan." respondió él.

"Fuqin." dijeron los jades gemelos.

"Mn. Xichen, Wangji." dijo y miró a su hijo.

"Xiongzhang." dijo Lan Qiren saliendo de su shock.

"Qiren." dijo su hermano.

"Bien, esperaré toda la verdad pero si realmente hizo daño a mi sobrino, no me lo pensaré dos veces para matarlo" dijo Wen Rouhan y ordenó a sus discípulos que volvieran.

Los discípulos finalmente se calmaron y tomaron asiento mientras los jades gemelos saludaban a su padre.

Sizhui está consolando a Wei Wuxian que está sumido en sus pensamientos mientras Jin Ling y Zizhen se sientan.

"¡Zu-fu!" gritó Jingyi y corrió a abrazarlo.

"Mi nieto." dijo Qingheng-jun devolviéndole el abrazo lo que sorprendió a Lan Qiren porque el hombre odiaba el contacto físico.

Los Lan continuaron su reunión y Jiang Cheng se dirigió a su asiento.

"Mi yerno, ven a saludar a tu suegro" dijo Qingheng-jun deteniendo a Jiang Cheng en sus pasos.

"Umm." murmuró Jiang Cheng lo que hizo que Wei Wuxian soltara una risita al escucharle.

"No seas tímido", dijo Qingheng-jun y se acercó a él para darle un abrazo.

"Eres grande para ser mi hijo mayor" dijo lo que hizo que el hombre se sonrojara.

"Saludos, Qingheng-jun" dijo Jiang Cheng.

"¿Por qué tan formal? Puedes llamarme fuqin", dijo Qingheng-jun.

Jiang Cheng sólo pudo asentir con la cabeza y finalmente fue liberado y tomó asiento.

Qingheng-jun se sentó junto a su hermano y los ancianos Lan.

Sin embargo, en ese momento, ¡Wen Ning claramente no estaba consciente!

Estaba a la vez conmocionado y dubitativo mientras unos cuantos gritos de alarma salían de la multitud. Usando tanto sus brazos como sus piernas, Wen Ning había asegurado a la diosa consumidora de almas en el suelo. Cogió una roca que yacía a un lado, más alta que la altura de los humanos, y la levantó por encima de la diosa consumidora de almas. Empezó a golpearla con gran fuerza. Cada golpe sonó tan fuerte como un trueno, hasta que el cuerpo de piedra de la diosa consumidora de almas quedó hecho pedazos.

"¡Dios! Eso es tan poderoso" dijo una discípula.

"Aunque se ve aterrador" dijo Nie Huaisang.

En medio del blanco montón de rocas esparcidas por el suelo, una esfera del tamaño de una canica salió rodando, irradiando un círculo de luz del color de la nieve. Era el núcleo que se condensó en la diosa consumidora de almas después de devorar las almas de diez o más personas vivas. Si se traía de vuelta y se manipulaba con cuidado, algunas personas, a las que se les había devorado el alma recientemente, podrían volver a la vida. Sin embargo, por el momento, nadie hizo ningún esfuerzo por recoger la esfera. Todas las espadas que apuntaban a la diosa devoradora de almas se dieron la vuelta.

"¡Hey! La vida era más preciada que nada" dijo MianMian.

"¿Son tontos o estúpidos?" Nie Huaisang preguntó con incredulidad.

Un cultivador gritó a todo pulmón: "¡Acérquense a él!"
.
Algunas personas respondieron vacilantes, pero más personas estaban indecisas, caminando hacia atrás lentamente. El cultivador gritó de nuevo: "Compañeros cultivadores, tenemos que bloquearle para que no escape. Este es Wen Ning al que nos enfrentamos".

"Acaba de ayudarles hace un momento", dijo Wen Qing, preocupado por su hermano.

"Está claro que son tontos" dijo MianMian.

Estas palabras convencieron a la multitud. ¿Qué era un simple monstruo devorador de almas comparado con el General Fantasma? Aunque se desconocía la razón de su aparición, era obvio que matar a mil espíritus consumidores de almas no podía compararse siquiera con capturar a un solo Wen Ning. Después de todo, éste era el perro rabioso más obediente bajo el Patriarca YiLing, que mordía a la gente sin hacer ningún ruido. Si lo capturaban, ¡seguramente se harían famosos en el mundo del cultivo y ascenderían rápidamente al éxito! Su objetivo original al asistir a la cacería nocturna de la Montaña Dafan era luchar por hadas, bestias y espíritus malignos para aumentar sus experiencias. Con los gritos, era seguro que algunas personas estaban interesadas. Sin embargo, los cultivadores de más edad que vieron con sus propios ojos lo salvaje que era Wen Ning cuando irrumpió, seguían siendo cautelosos a la hora de hacer un movimiento. Por lo tanto, la persona gritó una vez más: "¿De qué tienes miedo? No es como si el Patriarca YiLing estuviera aquí ahora mismo".

"Seguramente, no son nada para él", dijo un discípulo al azar.

"Ajá el Patriarca Yiling están justo delante de ustedes" dijo Zizhen.

"¿Es importante ser famoso que salvar la vida de otras personas?" preguntó Nie Mingjue con incredulidad.

Después de otro pensamiento, las palabras tenían sentido para ellos. ¿Qué había que temer? ¡Su maestro ya estaba en pedazos!

"¿En pedazos? Así es como morí", preguntó Wei Wuxian.

Sizhui sólo le apretó las manos para consolarlo.

Con estos comentarios, el anillo de espadas que rodeaba a Wen Ning había disminuido repentinamente de tamaño. Wen Ning agitó el brazo, y las cadenas de hierro negro pasaron pesadamente, golpeando las espadas de modo que las direcciones de sus hojas se inclinaron hacia un lado. Justo después, dio una zancada hacia delante y agarró el cuello de la persona que tenía más cerca. Con un ligero tirón, se levantó del suelo. Viendo la situación, Wei WuXian supo que las notas de la flauta eran demasiado apresuradas y bruscas, lo que le hizo desarrollar una intención asesina. Para sofocarlo, Wei WuXian calmó sus sentimientos y con seguridad tocó otra melodía.

"¡Wangxian!", exclamó Sizhui al escuchar el tono.

"¿Qué es eso?" preguntó Wei Wuxian.

Nie Huaisang se cubrió la cara con su abanico al entender la palabra. Él sonrió con satisfacción en la dirección de Lan Wangji y Wei Wuxian que están sentados uno al lado del otro.

La melodía había vagado por su mente con naturalidad. Era relajada y tranquila, en contraste con la extraña y punzante de antes. Al oír el sonido, Wen Ning se congeló y se giró lentamente hacia la dirección de la que provenía la melodía. Wei WuXian estaba en el mismo sitio, mirándole fijamente a los ojos sin pupilas.

Después de un momento, Wen Ning soltó su mano, tirando al cultivador al suelo. Bajó los brazos y caminó hacia Wei WuXian a paso lento.

"Sólo le hace caso a él", dijo MianMian.

"Es porque él es el creador" dijo Su She ganándose una mirada de los juniors y los Jiangs.

Bajó la cabeza y arrastró una gran cantidad de cadenas de hierro, pareciendo incluso que parecía abatido. Wei WuXian se retiró mientras tocaba la flauta, guiándole para que le siguiera. Caminando así durante una corta distancia, se adentraron en el bosque, cuando de repente, Wei WuXian captó el frío aroma del sándalo.

"Sándalo", dijo Lan Xichen y miró a su hermano con una sonrisa.

Inmediatamente después, su espalda chocó con alguien. Con un dolor abrupto en su muñeca, la melodía de la flauta se había detenido. Wei WuXian pensó, oh no, y se dio la vuelta para mirar. Su vista chocó con los ojos de Lan WangJi. Eran de color claro hasta el punto de parecer físicamente fríos.

"Lan Zhan eres tú" exclamó Wei Wuxian.

"Mn." dijo Lan Wangji y cogió las manos de Wei Wuxian.

La situación parecía poco prometedora. Lan WangJi le había visto usar la flauta para controlar cadáveres con sus propios ojos.

Lan WangJi utilizó una mano para sujetar firmemente a Wei WuXian. Wen Ning se quedó quieto a unos dos zhang de ellos, mirando lentamente a su alrededor como si buscara la melodía de flauta que había desaparecido de repente. Desde muy adentro del bosque, se extendía la luz de las llamas y el sonido de voces humanas. Wei WuXian pensó rápidamente y tomó su decisión de inmediato: ¿y qué si Lan WangJi le había visto hacer esto antes? Había decenas de miles de personas que sabían tocar la flauta, y el número de personas que imitaban el método del Patriarca YiLing de usarla para controlar cadáveres podría formar una secta por sí sola. ¡No confesaría pasara lo que pasara!

"No creo que alguien pueda controlar a Wen Ning aparte de ti" dijo Meng Yao.

"Yo también lo creo", coincidió Jiang Cheng.

"Por supuesto que no confesarías, ese es el hombre más justo que te agarra" dijo Nie Huaisang.

Con decisión ignoró la mano que le agarraba y levantó el brazo para seguir tocando. Esta vez, el tempo era más rápido, como si estuviera instando o regañando. Su sonido no era firme y cada nota crujía al final, sonando estridente y áspera. De repente, la mano de Lan WangJi se tensó, casi haciendo que su muñeca se rompiera. Los dedos de Wei WuXian se aflojaron por el dolor y la flauta de madera cayó al suelo.

"Creo que eso ha dolido mucho", dijo Wei Wuxian.

"Mn. Lo siento." dijo Lan Wangji.

"Eso ha sonado jodidamente horrible" dijo Jiang Cheng que se tapó los oídos.

Afortunadamente, sus órdenes eran lo suficientemente claras. Wen Ning se retiró rápidamente, desapareciendo en el oscuro y tenebroso bosque sin hacer ruido. Wei WuXian temía que Lan WangJi persiguiera a Wen Ning, así que lo agarró por la espalda. Pero, sorprendentemente, Lan WangJi ni siquiera miró a Wen Ning una sola vez, sino que se quedó mirando a Wei WuXian todo el tiempo. Los dos estaban frente a frente, agarrados por los brazos, y se miraban fijamente.

"¿Soy el único que puede sentir la tensión entre ellos?" preguntó Nie Huaisang.

"No sólo tú, yo también puedo sentirla", dijo MianMian y los demás le dieron la razón.

Al mismo tiempo, Jiang Cheng llegó.

"Y aquí viene mi hermanito gruñón" dijo Wei Wuxian riendo.

"¡Wei Wuxian!" Gritó Jiang Cheng haciendo reír más a su hermano y a Nie Huaisang.

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Decidí añadir al padre de Lan Wangji y Lan Xichen porque quiero que esté ahí para apoyar a sus hijos en cualquier situación. Me gusta un poco que los jades gemelos tengan a su padre y este con ellos durante toda la historia.

Además, los gemelos orgullo deben conocer a su suegro.