Make It Bun Dem
Narra Uraraka
Ahora tocaba Deku contra Bakugo, una pelea que seguramente tendrá algo más que ver que solo ganar, Deku me contaba en ocasiones como el llegó a ser "amigo" de Bakugo, su rivalidad, el hecho de que siempre lo molesta y lo trata como basura. Me dió mucha rabia ver cómo Deku no hacía nada, pero ahora ya no son amigos después de que me ganara.
Tenía miedo de que podía pasar con Deku en ese combate, tal vez lleguen al extremo de combatir hasta la muerte, no quiero que Deku llegue a esos extremos, aunque a pesar de que nos conozcamos dos meses, se cómo actúa con la gente y si pelea será de manera profesional. Deku es tan leal, amable y fuerte, es muy... admirable.
— ¡Oye Deku!, ¡Ahora sí te voy a partir el culo!- Dijo Bakugo.
— ¡Ya quisieras!- Respondió Deku. Esto no va a terminar bien.
— Te esperaré en el cuadrilátero, claro si es que apareces, bastardo- Dijo Bakugo dándole un empujón.
No creí que Deku lo empujara de vuelta, estaba claro que esta pelea la estaba esperando, luego Bakugo lo agarró de la camiseta, lo iba a amenazar, siendo interrumpido por otro empujón de Deku. Por suerte Kirishima, Shigaraki, Tokoyami, Sero y Todoroki lograron separarlos.
Deku bajó las escaleras hasta los vestidores, nunca lo vi tan molesto, aunque Yaoyorozu me contó que llegó a quemar las barandillas después de mi pelea con Bakugo.
— Oye Uraraka, Hagakure y yo tuvimos una idea- Dijo Jirou.
— ¿Ah sí?- Dije.
— Si, ya que Midoriya y Bakugo van a pelear, ¿Por qué no poner una canción de fondo?- Dijo Hagakure.
— Déjenme adivinar, una de Linkin Park- Dije pensando en todos esos AMV's
— Nop, está vez no- Dijo Jirou feliz.
— Oh, ¿Y que canción es?- Dije.
— Lo sabrás cuando lo oigas, vamos, rápido.
Nos levantamos y seguí a Hagakure, lo cual es irónico porque era invisible, ¿Cómo vamos a seguirle el paso a alguien invisible?. Entonces Yaoyorozu nos gritó.
— Oigan, ¿Adónde van?- Dijo.
— Ahhhh- Dijimos las tres.
— No van a hacer nada tonto, ¿No?- Dijo Yaoyorozu.
— No- Dijimos las tres con una sonrisa, o creo que Hagakure estaba sonriendo.
— ¿Seguras?- Dijo Yaoyorozu, realmente era una chica muy disciplinada, como Iida, pero en menor nivel.
— Bueno... ¡Íbamos al palco de sonido para poner música de fondo para la pelea de Deku y Bakugo!- Dije sin poder contener la mentira, nunca aprendí a mentir.
— Ah chicas, ¿Por qué tienen que intentar meterse en problemas?, Bueno, menos mal que las detuve- Dijo Yaoyorozu. Pero llegó nuestra salvación, en forma de chico guapo inexpresivo de pelo bicolor.
— Oye Yaoyorozu, ¿No tienes más agua?- Dijo Todoroki.
— Claro- Dijo Yaoyorozu, denotando brillo en sus pupilas.
— Me das un par de botellas, por favor- Dijo Todoroki.
— Si, si, aquí tienes- Dijo Yaoyorozu, entonces fué cuando aprovechamos de escabullirnos hacia el cuarto de sonido, sin alertar ni a Yaoyorozu ni a los guardias del cuarto de sonido.
Entonces Hagakure se sacó su buzo deportivo, ella decía que no tenía el traje puesto, pero no le molestaba ir desnuda porque aseguraba que nadie la veía. No sé si es exhibicionismo o una buena forma de camuflaje improvisado, pero lo que sí era que nos iba a ser de utilidad, entró a la sala de sonido. Jirou y yo vigilabamos la entrada escondidas entre el mini pasillo de la escalera para incendios.
— Listo- Dijo Hagakure.
— Esto va a ser genial- Dijo Jirou.
Volvimos a las gradas con las chicas y los chicos, vigilamos que Hagakure se pusiera su buzo deportivo, pero después pasó algo impensado y gracioso. Ojiro estaba detrás comiendo un burrito, sin querer vió a Hagakure desnuda, su cara no tenía precio estaba tan sorprendido como sonrojado, Toru estaba también sorprendida, lo demostraba su lenguaje corporal.
La situación no quedó en nada más que un encuentro extraño e incomodo, lo poco que pude ver era que Mineta le estaba pegando, de seguro porque lo humilló sin querer en su pelea o porque Ojiro vió el cuerpo de una chica desnuda antes que él.
— Entonces, ¿Que pasa ahora?- Dije sentándome
— Ahora viene lo mejor- Dijo presionando el botón de reproducir de su celular.
Mientras tanto
Que raro, Uraraka no había venido a desearme suerte como en las últimas tres peleas, tal vez si estaba enojada conmigo pero intentaba ser sutil, perfecto Izuku, tenías que arruinarlo todo, luego me pregunto porque todas las chicas me huyen.
Pero no era momento de pensar en ello, ahora es cuando tengo la oportunidad de sacarme de encima 12 años de insultos y llantos, años de tener ese apodo que gracias a Uraraka llegó a cambiar, años de tanta infravaloriación, era hora de ponerle fin a mi rivalidad con Bakugo.
Mi cabeza se llenaba de esos recuerdos, algo que me daba motivos para seguir peleando, pero entonces apareció la imagen de Uraraka, la miraba sentada, sonriéndome tiernamente, se veía tan... hermosa. ¡Ah, concéntrate Izuku!.
Llegué al cuadrilátero al mismo tiempo que Bakugo.
— Después de tantos años, al fin voy a pelear contra ti y vencerte como se debe- Dijo Bakugo.
— Basta de hablar, a pelear- Dije poniéndome en posición de pelea.
— Tu lo dijiste- Dijo y de repente empezó a sonar una canción.
Era una canción que conocía, porque me ayudaba mucho en los entrenamientos domingueros, aunque en ocasiones me daban ganas de quemar campos de marihuana, ahora es cuando empieza el ambiente perfecto para una lucha entre dos chicos locos con particularidades igual de poderosas.
Cuando terminó la intro de la canción, empezamos fuerte con un golpe que lanzamos al mismo tiempo, ambos teníamos una mirada agresiva y furiosa, le dí un cabezazo en la cara para alejarlo, nos quedamos en la misma posición que antes.
Primero Bakugo lanzó un puñetazo seguido de otro con explosiones, para lo que respondí con otro golpe que nos alejó nuevamente, pero cuando llegó el drop de la canción, llevé el fuego a todo mi cuerpo y fuí con todo contra él, yo golpeaba pero el era muy bueno bloqueando con las explosiones, tenía que pensar en algo rápido.
Fue cuando empecé a impulsarse con las explosiones hacia atrás e hice una carrera, la cual terminó con una gran serie de golpes mientras las vocales sonaban de fondo, terminé con un gancho derecho que seguramente lo hubieran dejado noqueado, pero apenas le logré sacar sangre de su nariz.
Volvió con una serie de explosiones por todos lados hacia mi, justo cuando el segundo drop de la canción había comenzado, tenía que moverme rápido, ya mi ropa deportiva estaba rompiéndose. Entonces empecé a ver otro patrón, siempre atacaba en dirección al Norte primero y Sur al último, entonces aproveché el último ataque de Bakugo y con un golpe certero a su fea cara. Lo logré lanzar lejos de mi.
Apenas llevábamos un minuto y la cosa se ponía intensa, momento perfecto para que el break de vocales de la canción comenzara, entonces Bakugo se preparó como un toro y fue con todo hacia mí y comenzó a lanzar explosiones hacia arriba. Para cuando llegó el segundo drop, fue el momento perfecto para una serie de ataques en el cielo, los cuales eran una serie de luces naranja y rojo parte de las explosiones y el fuego.
Poco después los dos nos dimos un golpe de gracia que nos lanzó al suelo, justo cuando las vocales estaban sonando sobrepuestas y la canción se terminó con su frase final. Escuchaba bastante apenas porque las explosiones fueron demasiado cerca de mi cara, me levanté apenas, moví mi mandíbula para sacar ese pitido molesto de mis oídos y entonces aún seguía escuchando ese silencio sorpresivo de las gradas.
Bakugo también se levantó, lo único que podía escuchar ahora era mi respiración, cada vez estaba más pesada, estaba exhausto, mi cabeza estaba sangrando, junto a mi nariz y boca. Bakugo no estaba muy diferente, pero no me iba a dar por vencido así como así.
— ¿Era esto?- Dijo Bakugo.
— ¿De qué estás hablando?- Dije.
— ¿¡ERA ESTO DE LO QUE ME ESTABA PERDIENDO TODO ESTE TIEMPO!?, HACE AÑOS QUE NO ME DIVERTÍA ASÍ, ¿¡ESTO ERA LO QUE ME OCULTABAS!?- Gritó Bakugo con una sonrisa emocionada que parecía psicótica.
— Yo... yo no pretendía pelear contigo durante años- Dije aún con mis respiraciones agitadas.
— Bueno... Ahora estamos aquí, ¡Y PRONTI APRENDERÁS A DEJAR DE SUBESTIMARME!... ¡MUERE!- Dijo Bakugo para llegar de imprevisto con una explosión pero alcancé a soplar mis manos, cubrí mis antebrazos con fuego para contrarrestar la explosión.
Le dí un golpe en la cara con todo el fuego que me permitía mi mano izquierda, lo cual hizo que Bakugo me diera una explosión leve pero que me alejó de él. El aprovechó ese momento para hacer el mismo movimiento de atacar por todos lados, solo que cambió a una dirección más aleatoria e impredecible.
Solo me quedaba escupir fuego hasta que el fuego lo alejara, puse mis manos entre mi fuego que sacaba de mi boca, lo usé como poder extra para poder envolverme en llamas. Ultimamente estaba pensando en un nombre para esto, hasta que lo pensé "Fuego Total".
— ¡Esto es por los insultos que llevas diciéndome desde los cuatro años!- Dije dándole un potente golpe en la cara.
— ¡Esto es por hacerme sentir que no soy nada!- Dije dándole un golpe seguido.
— y esto es... ¡POR URARAKA!- Dije para pasar a otra serie de golpes cada uno más potente que el otro.
Ya estaba harto, doce años de siempre escuchar lo mismo venir de el, desmerecer mis logros, insultarme, el apodo de Deku que ahora veo con una connotación positiva, se acabó el Izuku Midoriya pacífico y torpe, ahora soy otro Izuku Midoriya, más agresivo y seguro.
Entonces fué cuando él me intentó hacer volar con una de sus explosiones más potentes, pero detuve su mano y lo agarré del cuello, lo tiré al suelo de una manera horriblemente potente.
— Tanto dices que me muera, porque no lo experimentas con tus ojos... ¡MUERE!- Dije mientras seguía ahorcándolo.
— De...ku- Decía implorando piedad, pero yo no podía parar, estaba temblando de toda la adrenalina que suponía el momento. Después de tantos años con una rivalidad idiota, al fin lograba darle a Bakugo una lección de respeto y humildad.
Llevaba alrededor de veinte segundos, Bakugo estaba tornándose rojo, entonces una gran barra de cemento me empujó lejos de Bakugo, quedé mirando al cielo y lo último que ví fue a Cementoss haciendo un gesto con sus brazos, cruzandolos.
Entonces entendí a qué se refería.
Luego de una intensa batalla llena de fuego, explosiones, música y mucha intensidad, el final de esta se ha decidido por medio de una sanción, Aizawa con los detalles.
Según la regla número 21 del párrafo 1 del reglamento del festival deportivo activo desde el año 2003, el intentar matar a tu oponente ya sea abusando de tu particularidad o por medio de métodos poco ortodoxos, se castiga con la descalificación inmediata de la competencia, por lo tanto, Izuku Midoriya queda descalificado.
Ganador ¡Katsuki Bakugo por default!
Era evidente lo que hacía, pero aún así no me detuve, dejé que la ira y mi resentimiento me llevaran a los peores extremos posibles, nunca me creí capaz de matar a alguien, mucho menos Bakugo, de seguro toda la clase me odia y en especial Uraraka. Ella de seguro debe estar decepcionada de mí.
De todo una ola de voces ahora era un silencio pesado, yo lo único que podía hacer era llorar, llorar desconsoladamente por saber que lo arruine, la cagué por completo. Solo me limité a levantarme e irme corriendo a los camarines, tapándome la cara para que no me vieran llorar, decidí perderme en el túnel hasta llegar a la puerta, entrar y encerrarme.
Narra Uraraka
Todos nos quedamos callados, sorprendidos y boquiabiertos, no sabía que Deku iba a ser capaz de ser tan poderoso, el sí que se pasó, pero conociéndolo debió tener una razón, el no quiso matar a Fukidashi, ni a Pony, ni a Todoroki, con Bakugo era diferente porque ya tenían historia esos dos.
Pasó un rato para que todos bajaramos por curiosidad a ver cómo estaba Deku, todos estaban en un radio de un metro lejos de la puerta, excepto por Jirou quien con su auricular escuchaba a través de la pared.
— ¿Que se oye ahí dentro?- Dijo Shigaraki.
— Está lanzado epítetos despectivos hacia el mismo... Ah, ahora está lanzando cosas... Y ahora... está... llorando- Dijo Jirou seriamente.
No podía dejar esto así, Deku no es malo, solo está arrepentido y solo en estos momentos, y es ahora cuando necesita a su amiga para que pueda hacerlo sentir mejor, y esa amiga soy yo. Voluntariamente toqué la puerta.
— ¡LARGATE!- Gritó Deku, definitivamente no estaba en sus cabales. Lo bueno es que solo se podía escuchar la voz, pero no los golpes ni nada por el estilo, era una estructura muy extraña.
— Soy yo- Dije. Hubo diez segundos de silencio.
— Pasa- Dijo de nueva cuenta, los miré a todos, agradecía que pudieran estar preparados para cuando Deku saliera y se pusiera furioso de nuevo.
Entré y cerré la puerta, Deku estaba en una esquina en posición fetal con fuego en sus manos y pequeñas llamas en su ropa, sus ojos estaban rojos y su expresión estaba afligida y angustiada, sabía que se sentiría mal por esto, Deku no es un loco, el es un buen chico.
— Deku...- Dije.
— U-Uraraka... Y-yo... Lo... Lo siento- Dijo Deku ocultando su cabeza en sus rodillas.
— Oye... Sé que no estás bien ahora, pero... estoy contigo... cálmate Deku- Dije.
— Soy un Izuku malo... Soy un Izuku malo- Se repetía sin quitar su cabeza de sus rodillas.
— No eres malo, solo estás enojado- Dije, pero parece que no me escuchó.
— Todos hacemos o decimos tonterías cuando estamos enojados, tu... tú estabas molesto por todo lo que Bakugo te hizo durante años... No tenías que agarrarle el cuello pero... Se de buena mano que no harías algo así- Dije para calmarlo, poco a poco subía la mirada
— Deku... sé que eres un chico confiable, tierno y bueno, no le harías daño a nadie que no sea un villano, estos dos meses que llevamos siendo amigos fueron increíbles y realmente me alegra haber conseguido a alguien como tú, el hecho de que te enojaras es normal, solo tienes que esforzarte en no repetir ese error- Dije con esas palabras salidas desde mi alma.
Deku subió la mirada, aún tenía lágrimas, un poco de mocos, sangre y sudor, tomé unas toallitas húmedas que Yaoyorozu me dió y le limpié la cara hasta dar con esa bonita cara de angel que tiene, con esas pecas y esos ojos verdes.
— Gra-gracias Uraraka... De verdad que no puedo dejar de agradecer el encontrar a alguien como tú en mi vida- Dijo aún con la voz quebrada.
— Ay no digas eso... yo soy la que no te merece- Dije agarrando su mano.
La situación de hace una hora se repite, estábamos solos nuevamente, el ambiente perfecto y preciso, éramos Deku y yo, nadie más. En ese momento me dí cuenta de lo cerca que estaba de Deku, otra vez me empezaba a acercar a él, me dirigía a sus labios con una intención más que clara. Cada vez estábamos más cerca, sentía su aliento soplar, era cálido por obvias razones.
— Uraraka...- Dijo Deku en un susurro.
— Deku...- Dije yo de la misma manera.
Cerré los ojos, sentí que el también hizo lo mismo y dejamos que nuestros sentimientos nos dirigieran está vez, logré sentir un muy ligero roce con sus labios antes de que nos volvieran a interrumpir justo antes de que pasara de nuevo.
Estaban llamando por teléfono a Deku.
— Es mamá... Debo contestar- Dijo Deku sonrojado
— En-entiendo, y-yo te espero en las gradas- Dije mientras estaba sonrojada.
— Nos vemos, y Uraraka... Gracias- Me dijo en agradecimiento y me fuí.
Narra Izuku
— ¿Ho-hola?- Dije por mi teléfono.
— ¡Izuku!- Dijo mamá con un tono preocupado.
— Mamá...- Dije.
— ¿Cómo te sientes?, ¿Te calmaste?, ¿Estás solo ahora?, ¿Quieres que te vaya a buscar?- Preguntaba mamá.
— No mamá, estoy bien... pero me descalificaron- Dije.
— No importa Izuku, yo te vi, estuviste fascinante en todas y cada una de tus peleas, pero cuando llegues a casa tendremos una sería conversación- Dijo Mamá con un tono autoritario. Reí un poco.
— Mamá...- Dije.
— ¿Que pasa brócoli?- Dijo mamá con su apodo de cariño.
— Te quiero... Te quiero mucho mamá...- Dije como si fuera un niño de cuatro años, pero en algún momento de mi vida necesitaré a mi madre, y estaba feliz de tenerla junto a Uraraka.
— Ay Izuku... Yo también te quiero mucho mi vida- Dijo Mamá.
— Nos vemos después en la casa- Dije.
— Ok, adiós hijo- Dijo mamá.
Colgué la llamada, pero no evité tener una sonrisa, no solo porque me sentía mejor sino que estuve a centímetros de besar a Uraraka, sentí por cortos períodos de tiempo sus labios, de no ser porque mamá me llamó. Me salvó de hacer algo que quizás pueda costar mi amistad con ella, pero se sintió tan mágico, tan genial, y sentía una frustración interna por no haberla besado.
¿Por qué carajos pienso que debería besarla?, Se formó nuevamente ese evento que pasó hace horas cuando Uraraka peleó contra Bakugo y perdió, casi nos besamos dos veces, pero esta vez... Esta vez casi lo logramos, me quedé con las ganas de probar esos hermosos labios.
Creo que ya no lo podría ocultar más, tal vez Kirishima estaba en lo correcto, pero aún debía asegurarme y no gritarlo a los cuatro vientos, aunque yo tengo mis sentimientos cada vez más saliendo de su cueva.
Tal vez... Tal vez si me guste Uraraka.
¿Tal vez?
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top