Hermosa Vista Para Una Hermosa Mujer

Narra Ochako

Ya que teníamos consola, era obvio que Deku y los demás nos pusieramos a jugar, esta vez era turno de mi novio que estaba atento a una partida de Mortal Kombat, el era Skorpion y el oponente era la computadora con la skin de Shao Khan, yo lo veía de cerca, de hecho, estaba abrazada a el y con la cabeza apoyada en su pecho. El concentrado en su juego y yo relajada en la comodidad de su torso, estaba viviendo el sueño. Deku de pronto levantó el brazo y vi la pantalla que tenía incrustado la palabra "Fatality", mi novio ganó la pelea, y levantó el puño al aire.

Le dí un beso como felicitación, eran nuestros 15 minutos de libertad antes de ir a clases, estabamos casi todos preparados para la clase de hoy, estabamos veinte de los veintiuno que eramos en la clase, solo faltaba uno. Desde ayer que no vimos a Shigaraki, lógicamente fue a su cita con Melissa, e incluso lo preparamos para eso, pero es raro que no haya regresado anoche, a lo mejor se quedó a dormir con su abuelita, lo mas probable es que aparezca hoy y nos explique que sucedió, porque yo si quiero saber.

Todos juntos fuimos directos a U.A, tomada de la mano con mi novio, era el momento que mas me gustaba de la mañana, caminar de la mano con mi pareja, era tan bonito pese a lo asperas de sus quemaduras, lo amo. Estabamos a punto de llegar a U.A, cuando a lo lejos vimos a Shigaraki, caminando tranquilamente frente a nosotros, estaba a lo lejos, asi que lo pudimos ver con una cara relajada. En el momento que nos vió, solo miró a la entrada de U.A y se dirigió a la sala.

Sonreí con malicia, porque sabía que la cita había sido todo un éxito, y no nos iba a ocultar los detalles, mira a Hagakure y Ashido y asentimos a la vez, añadiendo un guiño para que se sepa que vamos a llenarlo de preguntas acerca de la cita que tuvo con Melissa. Asi que lo seguimos todos al salón de clases, donde el estaba sentado tranquilamente. No fue hasta la hora del almuerzo, cuando pudimos encararlo.

Shigaraki nos miraba extrañado mientras comia de su arroz con carne, se notaba algo incomodo pero estoy segura que sabe por qué lo estabamos mirando con tanta emoción.

— Emmm... ¿Que quieren, chicas? — Respondió el peliazul, me equivoqué, no sabe de que estamos hablando.

— La cita — Dijimos al mismo tiempo.

— Ahhh si... no salió bien — Dijo Shigaraki triste.

— ¿Que? — Dije con una voz a la que se le acaba de ir el ánimo.

— Si... me dijo que era un idiota y que no quería volver a verme jamás — Dijo Shigaraki pero al final pudimos ver que se estaba aguantando la risa.

Eso no nos gustó para nada, Shigaraki sabe que no se juega con los sentimientos de las mujeres, por lo que las consecuencias serían inmediatas, asi que Yaoyorozu generó una porra de goma y le pegó al peliazul en la cabeza, un golpe muy bien merecido, a lo que Shigaraki se siguió riendo mientras se sobaba la cabeza.

— No es gracioso Shigaraki — Dijo Ashido echando humo.

— Jajaja tranquilas, la cita salió bien, todo salió sumamente bien — Dijo Shigaraki confiado y alegre.

— Entonces, cuentanos los detalles — Dije emocionada de saber todo lo relacionado a Shigaraki y Melissa.

— Bueno, bueno, va, comienzo con la Shiga-historia — Dijo haciendo un juego de palabras.

Narra Shigaraki
Anoche

Ya eran un par de días desde que confirmé la cita con Melissa, las chicas estaban entusiasmadas me daban consejos y me ayudaban a elegir que ropa ponerme, al final elegí una camisa azabache con jeans casuales y zapatos grises, peinado con el peinado que mas le gustaba a Melissa, el cual le recordaría a nuestra infancia, estaba frente a la puerta principal, listo para lo que sea que el destino quiera.

— Muy bien Shigaraki, ¿Que le vas a decir a Melissa cuando llegues a la cita?— Dijo Uraraka, esta llevando una gorra y un silbato, probablemente prestados de Midoriya.

— La saludo y le digo que se ve muy bonita — Dije con seguridad.

— ¿A donde la llevarás? — Dijo Uraraka.

— A lugares que a ella le gusten — Dije con determinación.

— Y si cenan, ¿Quien pagará la cuenta?— Preguntó finalmente.

— TOMURA, CLARO — Grité levantandome y dando un grito de guerra.

— ¡Ahora ve por ella y dale la mejor noche de su vida! — Señaló a la puerte.

— AHHHHHH — Terminé por gritar y salí a lo que debía hacer.

Antes de cerrar la puerta, les agradecí a las chicas por ayudarme y por preocuparse y fuí directamente hasta el punto de encuentro de la cita, era una tarde bonita, el cielo teñido de un color anaranjado y las luces de Tokio prendiendose poco a poco, era de las cosas que mas me gustaba de vivir aquí, pasear por estas calles que tenían maravillas por descubrir, y esta vez lo iba a compartir con Melissa, algo emocionante sin ningún tipo de duda.

Varios minutos de caminata por la ciudad, logré encontrar a Melissa esperandome en la entrada del hotel, estaba con su dorado cabello suelto, una blusa blanca, unos jeans, zapatos de taco alto y un bolso de cuero marrón, se veía como una total supermodelo, a tal grado de que hasta yo podría estar por debajo de su nivel de belleza, con razón se robaba las miradas en Isla-I, instintivamente fuí a su dirección, saludandola con energías.

— Melissa, hola — Dije llegando a su posición actual.

— Tomura, me alegra verte— Dijo ella con su sonrisa tan hermosa.

— Te ves preciosa — Dije rascandome la nuca.

— Gracias Tomura — Dijo ella arreglandose un mechón de cabello timidamente.

— ¿Vamos? — Le dije.

— S-si — Respondió en duda.

Ambos fuimos juntos calle arriba, aun había bastante gente en las calles, sin señales de villanos, delincuentes o algo que pudiera repercutir negativamente en nuestra cita, quise empezar por algun lugar natural, así que fuimos a un parque con vista al río, fue cuando empezamos a conversar de nuestro día a día.

— ¿Que tal te está pareciendo Japón? — Pregunté con confianza.

— Es muy bonito, todo es tan diferente y tan tradicional — Dijo Melissa sorprendida.

— ¿No has tenido problemas con los palillos a la hora de comer? — Pregunté medio en broma.

— No, aunque si estoy acostumbrada al tenedor — Respondió Melissa.

— Si... ¿Y que tal está el señor Shield? — Pregunté cordialmente.

— Papá está bien, le gusta la tecnología de Japón y cada vez va experimentando mas con ella — Explicó Melissa animada.

— Es impresionante, me alegra que siga haciendo lo suyo despues de lo de Isla-I — Respondí mientras caminaba a su ritmo.

— Hablando de eso, ahora la seguridad de la isla está mucho mas estricta — Dijo Melissa.

— Razón les sobra — Respondí.

— Oh, mira — Señaló a un local de comida tradicional.

— ¿Quieres a comer ahí? — Le pregunté a Melissa.

— Si, me gustaría comerte — Dijo Melissa sonriendome con lujuria.

— Ah, no a mi, me refería al restaurante — Dije tratando de mantener la compostura y dejando salir un leve sonrojo

— Ah, ah si si si, es que tengo hambre — Dijo acercandose a mi con ternura, como la primera vez que nos vimos en Isla-I.

Ambos nos dirigimos al restaurante de comida tradicional japonesa, no estaba vacío asi que nos costaría encontrar mesa, para nuestra suerte, el camarero nos encontró una mesa, cerca de la ventana, un lugar perfecto ya que asi tendriamos una buena vista de afuera, aunque yo solo la quería ver a ella. Poco despues llegó nuestra comida, yo pedí unos fideos simples y ella un plato de yakisoba, y nos pusimos a comer.

— ¿Está delicioso? — Dije mientras me llevaba los palillos con fideos a la boca.

Melissa respondió haciendo el gesto "ok" con las manos, despues procedió a tragar su comida.

— Ay, adoro la comida japonesa — Dijo Melissa en una tranquilizante voz animada.

— Prefiero la comida de Tia Nana, pero esta comida está buena igual — Respondí y volví a dar un bocado.

— ¿Por qué le dices así a tu abuelita? — Preguntó Melissa.

— No le gusta que le diga así, la hace sentir anciana a pesar de que no aparenta tener sesenta y un años — Dije bebiendo de la gaseosa en mi vaso.

— ¿Sesenta y uno?, estas mintiendo — Dijo Melissa.

— No, es verdad, Tía Nana se mantiene fresca aun a su edad... deberías conocerla, te va a encantar — Le dije con una sonrisa.

— Por supuesto, me encantaría conocerla — Dijo Melissa.

Estoy seguro que ellas dos si se llevarían bien, no se que tipo de cosas tienen en común Melissa y Nana, pero al menos se que ellas dos son las mujeres mas importantes de mi vida, no se a que punto estamos de nuestra relación, ¿Somos amigos?, ¿Con ventajas?, tuve la osadía de besarla ese día en el aeropuerto, y me sorprende que lo aceptara, aunque gracias a las chicas supe deducir que ella tenía un crush conmigo.

Melissa y yo terminamos nuestros platillos, los cuales sabían bastante bien, pagué la cuenta, aunque ella insistía en pagar ya que tenía mucho dinero, pero preferí ser un caballero y pagar por nuestra comida, salimos del local y nos dimos cuenta de que ya era de noche, no se como estarían los demás ahora, pero las chicas probablemente estarían echando chisme sobre lo que esté pasando en la cita.

Melissa y yo vimos el cielo, estaba de noche, pero las estrellas apenas se veian, quería darle mas emoción a la cita, asi que tuve un plan infalible.

— Oye Melissa, ¿Quieres dar un paseo? — Pregunté.

— Pensé que ya estabamos dando un paseo — Dijo Melissa confundida.

— Si, pero... uno mas movidito, quiero mostrarte algo — Dije de una manera mas provocativa.

— Ah, entonces... si — Respondió timidamente.

— Sostente de mi — Dije.

Melissa rodeó mi cuello con sus brazos y la cargué como si la estuviera rescatando, activé el One For All en mis piernas y dí un salto que me dejó en la azotea del edificio en donde estaba el restaurante, comencé a hacer parkour sin soltar a Melissa, ella se sostenía firmemente mientras ponía una cara de preocupación, ella sabe que no la voy a soltar, sinó que voy a regalarle el mundo a sus hermosos ojos azules.

Llegamos hasta el ultimo edificio de la cuadra, donde la vista era bastante bonita.

— Wow, es... genial — Dijo Melissa impresionada por la vista.

— Lo sé, pero puede ser mejor — La volví a cargar.

Activé el One For All en mis piernas nuevamente, y la llevé hasta el edificio mas alto que pude divisar, uno de oficinas y llegamos hasta la azotea, donde se pudo ver la vista de la ciudad de manera completa.

— Increible... — Respondió Melissa ante la maravillosa vista.

— Mira, ahí está U.A — Señalé al edificio de la academia, el cual tenía sus luces apagadas.

— La legendaria academia de heroes — Decía Melissa en un suspiro.

— Si, y ahí están todos mis amigos y compañeros — Dije apoyandome en el barandal..

— Eres tan genial por querer ser un heroe — Dijo Melissa.

— Hey, tu eres la chica prodigio y superdotada de Isla-I, la que es genial aquí, eres tú — Dije halagando sus esfuerzos.

— Ay, Tomura, yo... no se que decir — Dijo Melissa sonriendo y desviando la mirada un poco.

— Shh, no digas nada — Susurré poniendo mi dedo en su boca para silenciarla.

Ella cerró los ojos un momento, y se acercó lentamente hacia mi, tenía la tentación de besarla, de que fuera mía, pero esta vez quería que fuera especial para ella, no iba a darle un beso en un edificio cualquiera, no, iba a darle un beso en un lugar digno de ella, así que la detuve en un momento en el que nuestros labios estaban casi tocandose.

— Espera... — Dije en un susurro.

— ¿Que pasa Tomi?, ¿Hice algo mal? — Dijo ella estando a un metro de mi cara.

— No, es que... creo que puede ser mejor — Dije acariciando sus labios.

Voltee a ver mi proximo objetivo, el Skytree, el punto mas alto de toda la ciudad, desde ahí se vería un gran espectaculo de luces y estructuras reflejando la noche, tomé a Melissa de las caderas, la cargué, ella se sostuvo de mi y activé el One For All en mis piernas por ultima vez, y salté edificio por edificio hasta llegar hasta la mitad del Skytree, luego de eso, corrí de manera vertical, usando los látigos negros para impulsarme entre la estructura.

Melissa se aferraba a mi, seguro estaba un poco asustada, pero todo habrá valido la pena cuando vea que le tengo preparado, entonces llegamos al punto de planicie mas alto del Skytree, y nunca voy a olvidar la cara maravillada de Melissa cuando vió todo Tokio desde donde estaba, se veía tan hermosa, esos ojos azules, sus labios brillantes y su pelo dorado que ondulaba como una bandera.

— Tomura... ¿Por qué? — Preguntaba Melissa en referencia a donde estaba parada.

— Solo quería regalarte el mundo por esta noche... tu te lo mereces, Melissa — Dije acercandome mas a ella.

— Tomi... yo solo te quiero a ti — Dijo Melissa rodeando mi cuello con sus brazos.

— ¿En serio? — Pregunté en voz baja.

— Por supuesto — Respondió.

Finalmente, llegó el momento que esperabamos, nuestro primer beso juntos, era una sensación especial, podía sentir el sabor de sus labios, el como sus caderas se sentían tan suaves, su aroma tan lindo, lo mejor de todo es que nosotros estabamos en la cima del mundo, mostrando nuestro amor, no hay nada mas hermoso y épico que besar a tu novia estando en un lugar inalcanzable. Nos separamos para respirar, al vernos reímos un poco y nos volvimos a besar unos segundos.

Esta vez tenía el plan b, y era algo que no pensaba llevar tan lejos, y si, era algo muy sensual.

— Oye Meli... ¿Quieres venir a mi casa esta noche? — Dije en su oído.

— Con gusto, mi amor — Respondió en un susurro.

— Sujetate — Dije y preparé el One For All en mis piernas.

Esta vez fue caida libre, diez segundos antes de usar los latigos negros como poleas hasta llegar al edificio mas cercano, entonces hice parkour con mi novia en brazos, ella estaba divirtiendose ahora y sonriendo ante el adrenalinico paseo que estaba dando conmigo, y ahora estabamos cerca de la casa de Tía Nana. Las ventajas de ser un niño inquieto es que te podías saber de memoria las entradas secretas, y por suerte yo sabía como entrar sin que ella me viera, aunque de todas formas me pillaba.

Llegué hasta la ventana de mi cuarto, y entramos sin que nos viera nadie, mi cuarto estaba ordenado y tal como lo dejé hace un tiempo, con mis posters de Resident Evil, el escritorio con cuadernos y en mi closet había un recambio del uniforme de U.A, Melissa contempló mi habitación por un momento, era la primera vez que ella estaba aquí, asi que me aseguraré de que pase un buen rato.

— Tu cuarto es lindo — Dijo Melissa.

— Gracias, hecho a mi manera y... ahora estamos los dos aquí — Dije tomandola de la cadera y dandole un beso.

Empezamos a besarnos lentamente, y se sentía tan bien como en el Skytree, ahora sin el viento en mis oídos ni riesgo a una caida libre, a donde si nos aventamos es a la cama, el beso comenzó a agarrar intensidad cuando ella estaba encima de mi, metí mis manos bajo su camisa y acaricié su delicado cuerpo, era como una muñeca de porcelana, algo valioso que no debía tocar, pero aun así lo hacía.

Se separó de mi y me empezó a desabotonar la camisa con velocidad, para despues volver a besarme, tal parece que la noche será mucho mas movida de lo habitual, y se podría decir que la cita fue un éxito.

Narra Ochako
Hoy

— Y eso fue, en resumen, lo que pasó — Dijo Shigaraki entrando a las residencias, estuvo contandonos todo el día.

Shigaraki no decepcionó, llevó a su cita a comer y luego le dió un paseo por la ciudad, sería genial hacer eso con Deku aprovechando mi particularidad, pero no se si el quiera mas salidas a las alturas despues de casi morir en la cima de un edificio. Seguimos interrogando a Shigaraki.

— Ammm, si durmieron juntos, ¿no? — Pregunté aun en duda.

— Hicimos mas que eso — Dijo sonriendo dejando su mochila en el sofá.

— Me sorprende que tuvieras un recambio en tu casa — Comentó Yaoyorozu.

— Siempre voy dos pasos adelante — Dijo Shigaraki con arrogancia cómica.

— Sabía que eras un casanova en potencia — Dijo Ashido dandole palmadas en la espalda.

— Jeje, gracias, supongo que sus consejos me sirvieron — Dijo el peliazul de forma amable.

Me alegraba ver a Shigaraki unido con alguien que si lo quería, y tal parece que ambos llevaban esperando esto durante mucho tiempo, y no hacía falta aclarar que fueron 10 años los que pasaron antes de verse, no podían desperdiciar ni un segundo de su relación, y para mi ellos van a durar muchísimo, tanto como Deku y yo.

De todos modos, Shigaraki también merece un poco de amor.

Hola

Wow, 4 meses sin actualizar... en serio lo siento, pero sencillamente no me nacía escribir, y me gusta hacerlo a mi ritmo, pero creo que me pase un poco, nuevamente lo siento mucho y trataré de tener listo el próximo capítulo mas pronto que tarde.

Espero que les haya gustado, no olviden dejar su comentario y apoyar esta historia compartiendo y dejando su estrellita, gracias por leer y nos vemos en el siguiente capítulo <3

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